Este documento describe tres cuevas prehistóricas europeas que contenían pinturas rupestres de animales: la cueva de Lascaux en Francia con pinturas de toros, ciervos y caballos; la cueva de Altamira en España con pinturas adicionales de búfalos, cerdos y aves; y la cueva de Nerja en España que también incluía pinturas de focas, osos y personas montando animales. El objetivo de estas pinturas era capturar el espíritu de la caza. El documento también brinda detalles sobre las viviendas de