1. Alumna:
Pérez Yusmari CI: 17.034.944
Materia: Estético Lúdico
Prof. Robert Estanga
Sección 4410
Barquisimeto; Mayo 2014
CUENTO INFANTIL:
El granjero y sus mascostas
2. El granjero y sus mascotas
Cuento infantil con ilustraciones para colorear
3. Había una vez un granjero que vivía en un bosque muy lejano a la cuidad. Este
hombre llamado Matías era un señor muy trabajador, que le gustaba la siembra,
la caza y la cría de animales domésticos. Matías vivía junto a su esposa Marieta
una hermosa mujer que lo acompañaba en las labores cotidianas, ambos tenían
sus animales de cariño. Matías tenía un hermoso conejo blanco llamado Cucú y
Marieta un perro llamado Coco que era su compañero, aunque un poco perezoso
y dormilón pero era su amigo y le tenía mucho amor.
A Cucú le gustaba saltar de pradera en pradera, cavar, cavar y cavar y de esta
manera esconder su alimento favorito…. Las Zanahorias…, este hermoso conejo
blanco, luego de distraerse y salir a jugar en el hermoso ambiente que lo rodeaba, se
iba cansado a su hogar, a su hermoso y acogedor hogar, donde era recibido por
Matías con una grande, deliciosa y saludable Zanahoria…
En cambio Coco, el perro de Marieta pasaba todo el día dormido y echado en el
corredor de la casa de bosque, observando todo lo que hacían sus amos y esperando su
comida favorita… El hueso…
4. Un día, Matías y Marieta quisieron hacer una competencia entre sus
mascotas que consistía en hacer un hoyo en las praderas de los bosques,
escondiendo un Hueso y una Zanahoria, que eran los alimentos favoritos
de sus mascotas. Esto con la finalidad de ver quien lo encontraba primero,
ambas mascotas fueron preparadas y entrenadas por sus dueños ante del
concurso, todos muy contentos y alegres al acontecimiento esperaban el
día… Llegó ese gran día… y los competidores preparados… Listos…
Comienza la jugada…
5. El perro sin embargo, era muy aburrido, pesimista, melancólico y trasteaba sin ánimo y
después de rastrear un poco, se cansó y decidió dejar la competencia y se tiró al
suelo…comenzando a lamentarse de lo difícil que era encontrar el hueso en un campo tan
grande. Su dueña lo miraba con tristeza y desánimo y por más que lo animaba, su mascota
se rindió y no quiso levantarse más.
El conejo, muy alegre y optimista, se lanzó a buscar, saltar y cavar de
pradera en pradera buscando su Zanahoria, esté cavando de aquí y allí
completamente convencido de hallarla. Su amo alegre y entusiasmado
viendo lo alegre que era su mascota.
6. Durante horas el conejo cavó y hacia diferentes hoyos por todo el lugar, el perro se lamentaba aún más de lo
difícil que era aquello hasta para el conejo, mientras el conejo pensaba que ya le quedaba un agujero menos
para encontrarla. Y resultó que cuando no quedaba sitio donde cavar, el conejo hizo un túnel hasta llegar
bajo el perro, lugar donde encontró la Zanahoria y el Hueso, escondidos por los dueños.
Matías, su amo, entusiasmado y orgulloso abrazaba al conejo por ser tan optimista, como recompensa
obtuvo muchas Zanahorias.
«Siempre debemos perseverar
para encontrar las cosas que
queremos, como lo hizo el
conejo y no desistir por muy
difícil que parezca como lo
pensó el perro.»