1. LAS PARABOLAS
DEL REINO
(Parte 1)
“LA GRANDEZA DEL REINO
Y EL PODER DE SUS EFECTOS”
Mateo 13:31-33
2. Muchos esperan encontrar el Reino en grandes catedrales o en iglesias
enormes – en grandes coros o importantes músicos – En ministerios costosos
y llamativos- pero, estas parábolas sugieren que el verdadero poder del reino
se encuentra en los lugares más humildes, entre las personas e iglesias que
parecieran más insignificantes.
Las Parábolas del grano de mostaza y levadura contrastan principios
pequeños con los grandes efectos que llegan a tener, y enfatizan el poder de
la acción de Dios. Se dirigen a las muchedumbres. Ambas la Parábola
del grano de mostaza y la Parábola de la levadura contrastan lo pequeño del
reino con la grandeza de sus efectos.
– un vaso de agua fría para un sediento – un taco para un hambriento –
gente de la iglesia visitando a un enfermo- Hermanos llevando el evangelio
a alguien a quien le es imposible asistir a los cultos – pequeñas reuniones en
hogares para estudiar la Biblia. Estos ejemplos no parecen mucho, pero
Jesús promete que en todos ellos existe un poder escondido.
3. EL CONCEPTO DE GRANDEZA.
El arbusto de mostaza típicamente
crece a unos 8 a 10 o hasta 12 pies
– esto apenas se puede comparar
con los grandes robles del
Líbano, con los que Israel prefiere
identificarse. ¿Por qué no ha de
comparar Jesús el reino de los
cielos a un gran árbol en vez de un
arbusto? Si está comparando un
pequeño grano, ¿por qué no
escoger un árbol verdaderamente
magnífico?
4. EL CONCEPTO DE GRANDEZA.
Quizá la mejor respuesta se
encuentra en la iglesia que se ha
desarrollado a través de los
siglos. La iglesia es, muy
diferente a la de sus comienzos.
Extendiéndose hasta cada nación
en la superficie del planeta. Tiene
grandes catedrales y a veces
ejerce gran poder pero, en su
mayor parte, la iglesia se
manifiesta en maneras más
modestas – más como un arbusto
de mostaza que como un cedro
encumbrado.
5. EL CONCEPTO DE GRANDEZA.
Una lección probable es que los
cristianos debemos siempre
esperar, sabiendo que Dios crea
grandezas de pequeños comienzos
– que no esperemos que el Reino
sea grande como el mundo piensa
de grandeza. “Un rey que opera
con docilidad (11:25-30) y monta
un burro en vez de un caballo de
guerra (21:1-9) puede ser
representado por un reino
simbolizado por un jardín de
especies en vez de un árbol
gigante”. Esta parábola “discute
nuestro concepto de grandeza”
6. LOS PODEROSOS EFECTOS DEL REINO.
Como la semilla de mostaza, la
levadura es pequeña en relación a
la harina que leuda. Como la
semilla de mostaza, la levadura
contiene gran potencial en sus
pequeñas proporciones. La NVI
usa la palabra “levadura,” pero la
gente de esa época y lugar, raras
veces tenían el privilegio de tener
levadura pura. En vez, guardaban
una bola de masa leudada de la
última tanda para leudar la
próxima tanda.
7. LOS PODEROSOS EFECTOS DEL REINO.
Tres medidas de harina son
suficientes para hornear pan para
100 a 150 personas. Hasta una
cantidad pequeñísima de levadura
tiene el poder de afectar una gran
cantidad de harina. Así es también
con el reino de los cielos. Nosotros
que vivimos bajo el mandato de Dios
parecemos poco importantes – pero
¡cuidado! ¡Con el poder de Cristo
hacemos una gran diferencia!
8. LOS PODEROSOS EFECTOS DEL REINO.
Esta parábola nos alienta, no a
recluirnos, sino a trabajar en el
mundo. Levadura solo funciona
cuando se mezcla con grandes
cantidades de masa cruda. De otra
manera, no sirve para nada. La
parábola es una clara alusión a “La
acción
oculta, silenciosa, misteriosa, pero
total y transformadora de la levadura
(El evangelio) en la harina (el
mundo)”.
9. LOS PODEROSOS EFECTOS DEL REINO.
Así como no se puede ver el efecto, o
trabajo de la levadura en la harina, de
igual manera al esparcirse la
influencia del reino, a menudo es
ignorada pero aun así... La parábola
dice: “…hasta que todo fue leudado”.
Esto indica que el evangelio
sembrado, en el mundo tendrá que
germinar y llegar a su plenitud. Es allí
donde nosotros jugamos un
importante papel.
10. APLICACIOES FINALES.
Hoy muchas veces se mide el
crecimiento o progreso del reino
solamente en lo exterior. El
crecimiento del reino de acuerdo a
las normas de Dios, se está llevando
acabo donde quiera que la palabra
de Dios esté siendo sembrada y el
fruto se dará cuando caiga en
corazones rectos y buenos.
Recordemos que lo que comenzó
con la semilla de mostaza, vino a
ser un gran árbol. De igual manera,
un poco de levadura tiene el poder
para leudar toda la masa.
11. APLICACIOES FINALES.
Debemos permitir que la levadura
del reino crezca primero en nuestro
corazón, para ello es necesario
tomar la palabra de Dios y
guardarla en nuestro corazón,
estudiarla y meditar en ella.
Después compartirla en nuestra
vida cotidiana. Es necesario
permitir que la palabra de Dios
produzca fruto en nuestras vidas, y
así podemos ser influyentes como
la levadura para el reino de Dios.
12. La expansión del reino de Dios a llegado a
todas partes del mundo, recordemos que
inició con Jesús y sus discípulos. Hasta hoy
este reino sigue expandiéndose y seguirá
hasta que llegue a su plenitud. Para que
este reino siga en progreso es necesario
que cada cristiano ponga su levadura a la
harina. Dios será quien lo haga crecer.