Los animales envejecen a diferentes ritmos: los ratones en 2 años, los murciélagos en 40 años, los loros en 90 años y las tortugas en 200 años. El envejecimiento es un proceso multifactorial determinado genéticamente y por factores ambientales como la radiación y el tabaco, los cuales generan radicales libres que degradan el colágeno de la piel. El envejecimiento se evidencia a través de arrugas, manchas y pérdida de elasticidad en la piel.