Sobre el movimiento generado por la desaparicion de
1. En su libro Manuel Castell analiza el papel de la Internet y las nuevas tecnologías en la
formación, dinámica y perspectivas de cambio social de los movimientos.
…” fueron las redes sociales del internet inalámbrico las que hicieron que estos sentimientos de
ira, indignación y esperanza se extendieran por el mundo como una forma de contagio”…
…” Las revueltas surgen por las contradicciones y conflictos de diferentes tipo que existen en
cada una de las sociedades pero es a través de la redes interactivas de comunicación como la
gente logra conectarse entre sí y compartir su indignación. En este sentido, la Internet es un
soporte material, un instrumento de acción de estos movimientos, en la medida en que les
permite “movilizar, organizar, deliberar, coordinar y decidir”…
…”es a través de la redes interactivas de comunicación como la gente logra conectarse entre sí y
compartir su indignación”…
Castells asegura que existe un círculo virtuoso entre las nuevas tecnologías y la autonomía,
pues a través de la conexión en red actores individuales construyen su autonomía con personas
de similares ideas a través de las redes que prefieran. Esta idea de la autonomía está
relacionada también con su noción de la ‘autocomunicación de masas’, basada en redes
horizontales, en las que se procesan mensajes de muchos para muchos y sobresalen rasgos como
la autoconvocatoria, la cooperación, la instantaneidad o el dinamismo.
Castells, Manuel. Redes de indignación y
esperanza : los movimientos sociales en la era de
Internet1. Madrid: Alianza Editorial, 2012. 296
pp.
3. 43 estudiantes de pedagogía de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, con
sede en Ayotzinapa, en el estado de Guerrero (en la costa oeste del país)
desaparecieron el 26 de septiembre de 2014, luego de que su autobús fuese baleado
por policías y miembros del crimen organizado.
Iñaky Blanco, procurador general de Justicia del estado de Guerrero, aseguró que
“varios de los elementos policiales tenían vínculos con la delincuencia organizada,
siendo, en algunos casos, gatilleros activos del narcotráfico”.
Una de las hipótesis es que los señores del narco en colaboración con las autoridades
locales, policías y un presidente municipal –que milita en las filas del Partido de la
Revolución Democrática– hoy en fuga y vinculado a los Guerreros Unidos, no están
dispuestos a tolerar otro grupo armado en la región, es decir el ERPI (Ejército
Revolucionario del Pueblo Insurgente), una guerrilla que dicen, recluta sus cuadros
en las Normales. Así, dice la hipótesis, el ataque, asesinato y desaparición de los
normalistas es un “mensaje” del narco-estado a la guerrilla.
4. A un año de las desapariciones de los 43 normalistas se podría reconstruir de
muchas formas, una de ellas es a través de hashtags dado la gran importancia que
han jugado las redes sociales en un tema que creció exponencialmente hasta llegar
a adquirir trascendencia internacional.
Durante octubre de 2014 miles de personas se reunieron en la Ciudad de México
para marchar y compartir el reclamos social que se resumieron en frases como
“Fue el Estado” y “Vivos se los llevaron, vivos los queremos”.
Las redes sociales sirvieron como herramienta para convocar y ordenar a los
distintos contingentes en embajadas y consulados mexicanos alrededor del mundo.
¿Qué originó?
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7. En una conferencia del 7 de noviembre de 2014, el entonces procurador Jesús Murilllo
Karam anunció “que los 43 estudiantes desaparecidos habían sido asesinados.
En un momento pronunció la frase “ya me cansé”. Hasta ahora, #YaMeCansé es uno de
los hashtags más repetidos y representativos del caso, estuvo en primer lugar de los
Trending Topics de México por 26 días. Cuando desapareció, los tuiteros pretendieron
recuperarlo con una secuencia numérica para mantenerlo en los principales trending
topics.
En la marcha del 20 de noviembre del 2014, tras acciones violentas se detuvo a 11
personas que supuestamente se llamaban entre sí “compas”, por eso el hashtag surgió
como apoyo a ellos.
8. El 26 de enero se convocó a la primera marcha del año con motivo de los cuatro meses
desde la desaparición de los estudiantes.
Facebook y Twitter documentaron la manifestación desde el inicio hasta la llegada al
Zócalo donde los padres de los desaparecidos dieron un mensaje exigiendo justicia. Los
estudiantes de las universidades públicas y privadas del país se unieron. También lo
hicieron grupos religiosos. Desde ciudades como Madrid, Nueva York, Londres, Bruselas
y otras, la gente respaldó la causa a través de Twitter.
El 26 de septiembre, cuando se cumplió un año del ataque a los 43 estudiantes en
Iguala, se organizó en redes sociales distintos eventos. El primero ha sido el ayuno de
los padres por 43 horas en el Zócalo de la Ciudad de México. Empezó el 23 de
septiembre a las 19.00 y terminó el 25 a las 14.00 horas.
El sábado 26 una marcha partió de Los Pinos, la residencia del presidente, hasta el
Zócalo. Twitter y Facebook volvieron a ser protagonistas para la exigencia de justicia y
para documentar el paso de las marchas por el aniversario de la noche más oscura de
México.
9. En el caso de Ayotzinapa “las redes sociales han ayudado enormemente a difundir y
generalizar su mensaje y sus causas, así como para tener la enorme solidaridad
internacional.
Las redes sociales se han convertido en altavoz y plataforma de denuncia social para
reivindicar el regreso y la condena de los responsables.
El diario 20 Minutos destaca este caso como “hito en la protesta social en Internet”. Las
redes sociales han multiplicado la historia de violencia de Iguala. Se cree que hay unos
60 millones de personas vinculadas con mensajes sobre Ayotzinapa. En Twitter, se han
detectado aproximadamente 15 'trending topics' sobre el caso.
Este ha sido lo más importante que ha sucedido en volumen de comentarios y de
mensajes relacionados. Se han generado más de un millón de mensajes a manos de
350,000 personas, vistos por 60 millones.
El politólogo John Ackerman explica que si bien la movilización actual por el caso de
Ayotzinapa nace del activismo de base dirigido por estudiantes y padres de los
desaparecidos, “las redes sociales han ayudado enormemente a difundir y generalizar su
mensaje y sus causas, así como para tener la enorme solidaridad internacional.
Conclusión