3. TEXTO CLAVE
“Porque el Hijo del Hombre
vino a buscar y a salvar lo que
se había perdido”
(Lucas 19:10)
4. VERDAD CENTRAL
La misión de Jesús, su
búsqueda y salvación de los
perdidos, son el resultado del
amor y la gracia divinas.
5. OBJETIVOS
1. Comprender qué significa
buscar y salvar.
2. Percibir cómo esta actitud
divina de buscar y salvar nos
afectan personalmente.
3. Representar el papel que
Dios nos ha asignado en el
proceso de búsqueda y
salvación.
8. La oveja y la moneda perdidas
LA MISIÓN
DE JESÚS
Seguridad: El que Dios nos encuentre no
depende de nuestros méritos, sino del
poder de Dios para salvar.
Gratitud: Un Dios Creador, en su
perfección, no necesitaría preocuparse
con los “perdidos”, pero aún así nos ama y
nos busca.
¿De qué modo reacciona nuestro corazón
ante el hecho de que Dios procura
buscarnos?
9. «¿Qué hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si
pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve en el
desierto, y va tras la que se perdió, hasta encontrarla?»
(Lucas 15:4)
Aunque la oveja es consciente de que se
ha perdido, es incapaz de salvarse a sí
misma.
¿A quién representa esta oveja?
La oveja representa a aquellos que
comprenden que están separados de
Dios, pero que no saben cómo
encontrarlo.
Necesitan que el Pastor vaya en su
búsqueda y le enseñe el camino de la
Salvación.
Nosotros somos los instrumentos en las
manos de Dios para hallar a estas
personas y llevarlas a los brazos de Jesús.
10. «¿O qué mujer que tiene diez dracmas, si pierde una
dracma, no enciende la lámpara, y barre la casa, y
busca con diligencia hasta encontrarla?» (Lucas 15:8)
La mujer sabe que ha perdido una
moneda, pero la moneda no sabe que se
ha perdido.
¿A quién representa esta moneda?
Representa a aquellos que están
perdidos en sus pecados, pero no
comprenden su condición. Están
apartados de Dios, pero no lo saben.
Jesús se preocupa aún por los que son
indiferentes a su amor.
Él quiere que estas personas sean
buscadas diligentemente, que se les
enseñe su condición, y que puedan
comprenderla y buscar la Salvación.
11. La parábola del hijo perdido:
1ª parte
Uno de los hijos prefirió una vida
desordenada en una tierra distante, lejos
del amor de su padre.
El otro hijo prefirió quedarse en casa, pero
sin conocer plenamente el amor del padre,
o el significado de tener un hermano.
El padre evidencia una actitud dirigida
hacia la salvación de los dos hijos.
Esta parábola puede ser llamada “Parábola
del padre amante y sus dos hijos
perdidos”. ¿Qué indicios nos presenta el
texto bíblico al respecto?
LA MISIÓN
DE JESÚS
12. La parábola del hijo perdido:
2ª parte
Reconocimiento del Padre como “mi
Padre” (versículo 18).
Confesión y contrición (versículos 18,
19).
Petición (versículo 19).
El regreso a casa del hijo está
marcado por el reconocimiento del
error, y también por una esperanza de
aceptación. ¿De qué modo esta
ilustración puede mostrarnos los
pasos para un arrepentimiento
genuino?
LA MISIÓN
DE JESÚS
13. LA HUIDA (v. 11-12)
Sin percibir la
protección
amorosa que
la Ley de Dios
nos otorga
(con sus
límites y
restricciones),
quiso vivir una
vida de
«libertad», sin
restricciones,
lejos del amor
de Dios.
EL CHASCO (v. 13-16)
Entregado al
libertinaje, vivió
la ilusión de los
placeres del
pecado… hasta
que recogió su
amarga
cosecha.
LA REFLEXIÓN (v. 17)
Viviendo con Dios lo tenía
todo; ahora no tenía nada.
El Espíritu Santo no
aprovecha nuestra
perplejidad para echarnos
en cara nuestros errores,
sino para hacernos
reflexionar sobre nuestras
decisiones e invitarnos a
volver a los brazos de un
Dios amante.
EL REGRESO
(v. 18-20pp)
Confía en el amor y el
perdón de «mi» padre.
Confiesa su pecado.
Reconoce su indignidad de
ser perdonado
(arrepentimiento sincero).
Manifiesta su deseo de
volver a vivir con Dios y lo
hace efectivo.
La parábola del hijo «pródigo» de Lucas 15:11-32 nos cuenta la
historia de un padre [Dios] y de sus hijos perdidos. Uno de
ellos huyó del padre; el otro, no lo conocía aunque vivía con él.
EL HIJO MENOR EL PADRE EL HIJO MAYOR
14. LA ESPERA (v. 20-21)
La espera comenzó cuando
el hijo salió de casa. Ninguna
imagen capta mejor el
carácter de Dios que la del
padre que espera el regreso
de su hijo.
EL REGOCIJO (v. 22-24)
Cada alma que regresa es
una fiesta para Dios y sus
ángeles. Cada
arrepentimiento llena el
Cielo de gozo.
ESTAR PERDIDO Y NO SABERLO (v. 25-32)
¿Puedes vivir con Dios, pero tenerlo alejado de tu corazón?
¿Puedes confiar tanto en tu propia justicia que no reconozcas el
amor y la justicia de Dios hacia ti y hacia los demás?
¿Puedes odiar tanto al pecador que no desees que Dios le perdone?
¿Puedes entrar en la casa de Dios y, humildemente, unirte a la fiesta
de regocijo por el pecador que vuelve? Ven, te estamos esperando.
EL HIJO MENOR EL PADRE EL HIJO MAYOR
EL HIJO MENOR EL PADRE EL HIJO MAYOR
15. Oportunidades perdidas
Importancia del hoy: Una vida de
postergación es demasiado arriesgada en
lo que respecta a la salvación.
Prioridades correctamente enfocadas: El
dinero o las cosas materiales adquiridas
en la tierra no marcarán ninguna
diferencia para la eternidad. La respuesta
a la salvación, sí.
Certeza de la oportunidad: Todos
recibimos la oportunidad para vivir, y con
ella, la posibilidad de elegir.
El único momento disponible para aceptar la
salvación es mientras vivimos en esta tierra.
¿De qué modo esta verdad debe guiar
nuestras decisiones y actitudes?
LA MISIÓN
DE JESÚS
16. Recibió bienes
Se olvidó de Dios
Fue sepultado
Selló su destino para condenación
Recibió males
Confió en Dios
«Sus obras con ellos siguen» (Ap. 14:13)
Selló su destino para salvación
17. «En la parábola del hombre rico y
Lázaro, Cristo muestra que los
hombres deciden su destino eterno en
esta vida. La gracia de Dios se ofrece a
cada alma durante este tiempo de
prueba. Pero si los hombres malgastan
sus oportunidades en la complacencia
propia, pierden la vida eterna. No se
les concederá ningún tiempo de gracia
complementario. Por su propia
elección han constituido una gran
sima entre ellos y su Dios»
E.G.W. (Palabras de vida del gran Maestro, pg. 204)
18. Era ciego y ahora veo
Todos necesitamos de la gracia.
Lo exterior no es un parámetro que Cristo
tendrá en cuenta en el juicio.
Bartimeo y Zaqueo era, a primera vista,
muy diferentes, pero fueron tratados
por Jesús como necesitados de la misma
gracia. ¿Qué nos dice esto acerca de la
salvación?
LA MISIÓN
DE JESÚS
19. A las puertas de Jericó, un mendigo
ciego pedía limosna para su sostén
físico. Pero su alma anhelaba el sostén
espiritual que solamente el Mesías, el
Hijo de David, podría darle.
Cuando supo que Jesús pasaba cerca de
él, no permitió que nadie acallase su
voz. Solicitó vehemente una audiencia
personal con su Salvador.
«Todos los que sienten su
necesidad de Cristo, como el
ciego Bartimeo, y quieren
manifestar el fervor y la
determinación suyas, recibirán
como él la bendición que
anhelan»
E.G.W. (Hijos e hijas de Dios, 29 de abril)
«Entonces dio voces, diciendo: ¡Jesús, Hijo
de David, ten misericordia de mí!» (Lucas 18:38)
20. «Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor:
He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los
pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se
lo devuelvo cuadruplicado» (Lucas 19:8)
Al igual que el caso de Bartimeo, el caso de
Zaqueo ilustra la forma en que Jesús «vino a
buscar y salvar lo que se había perdido».
«Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación
a esta casa; por cuanto él también es hijo
de Abraham» (Lucas 19:9)
21. «¿Sois en verdad maestros que enseñan los caminos
de Dios? Si sois maestros convertidos podréis conquistar,
no arrear; atraer, no ahuyentar a las almas por las cuales
Cristo murió. Cuidaréis y velaréis por las ovejas y los
corderitos del redil de Cristo. Si se extravían, no los
dejaréis perecer, sino que saldréis a buscar y salvar lo que
se ha perdido. Todo el cielo estará pronto para ayudaros en
esta buena obra. Los ángeles os secundarán en vuestro
esfuerzo de hallar la llave del corazón del más incorregible
y desobediente. Recibiréis gracia especial, y fuerza por
medio de Cristo, el cual puede proveeros de su plenitud
inconmensurable. Se os hará aptos para ser colaboradores
de Dios, uno con Cristo en vuestro esfuerzo para salvar a los
perdidos, y el resultado de vuestro trabajo de amor será
visto no sólo en el tiempo presente, sino durante la
eternidad»
E.G.W. (Consejos sobre la obra de la escuela sabática, pg. 196)
22. CONCLUSIONES
1. La misión prioritaria de Jesús fue el
rescate del ser humano.
2. Dios siempre toma la iniciativa para
nuestra salvación.
3. Podemos ser diferentes entre nosotros,
pero todos carecemos de la misma gracia.
4. Te invito a aceptar, hoy mismo. la gracia
salvadora de Cristo.
23. EL EVANGELIO DE LUCAS
Te invito a bajar y estudiar cada una de las 13
lecciones que tratan sobre el tema:
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