Conferencia 7, Causa y efecto De todos los principios universales, la ley de causa y efecto es probablemente la más perceptible a nuestros sentidos y, por ende, más comprensible para la mente. La segunda ley de Newton, emitida para explicar un fenómeno físico, nos ofrece una clara descripción de su operar y nos permite observar cómo se manifiesta en todos los ámbitos de la vida —tal como sucede con todas las leyes de la física, que a su vez constituyen los principios universales—. Es relevante destacar que, varios milenios antes, Hermes Trismegisto ya la había suscrito —con un tinte muy universal, sin particularizar en la física— de manera magistral. Toda causa tiene un efecto; todo efecto tiene una causa; todo sucede conforme a la ley; la suerte no es más que el nombre que recibe la ley no reconocida; hay varios planos de causalidad, pero nada escapa a la ley. Hermes Trismegisto, Corpus Herméticum