2. ¿Cómo educar a los menores del buen uso de internet?
Educar a los menores sobre el uso correcto de Internet no es una tarea
sencilla para padres y educadores. Sin embargo, es necesario trasmitirles
asesoramiento sobre aquello que es o no conveniente contar a través de
este medio, así como inculcarles unos valores que deben tener en cuenta en
el mundo virtual, protegiendo su privacidad y la de terceros. En este
artículo de unComo, os explicamos cómo educar a los menores sobre el buen
uso de Internet.
3. ¿Que debemos hacerles entender?
Para que un menor entienda la importancia de valorar la
privacidad en Internet, por ejemplo en redes sociales, es
necesario informarle sobre la repercusión que puede tener la
publicación de determinados contenidos negativos bien propios o
bien haciendo alusión a terceros. También es importante hacerle
comprender que esta clase de prácticas no son un juego virtual y
que pueden generar repercusiones en el mundo real, dando lugar
al ciberbullying (acoso a menores por sus iguales), grooming
(acoso sexual a un menor por parte de un adulto), sexting
(difusión de contenidos de tipo sexual producidos por menores)
o incluso la extorsión.
La Oficina de Seguridad del Internauta cuenta con una sección
dedicada a los menores que facilita esta ardua tarea a padres y
educadores, aportando información y conceptos de manera
sencilla para que permiten formarse acerca de buenas prácticas
en Internet.
4. ¿Que deben aprender?
Es importante que aprenda a valorar los
contenidos, así como a identificar los peligros
pero también es importante reflejar el apoyo
que el adulto está dispuesto a ofrecerle ante
este tipo de situaciones. Uno de los problemas
más frecuentes es que el menor que es víctima
de alguno de estos casos no sabe en quién
confiar para revelar lo que le sucede o a dónde
acudir. Por eso la importancia de que ellos
confíen en los padres y no lo vean como una
amenaza que le prohíbe interactuar por
Internet.
5. ¿Como deben actuar los adultos?
La postura correcta que padres y educadores deben tomar es la de asesorar, informar,
supervisar en qué páginas navega y con quién habla por Internet el menor, etc. pero siempre
evitando prohibir o ante cualquier tipo de problema ellos no confiarán en ese adulto para
revelarle sus problemas. Por lo tanto se conseguirá un efecto no deseado, no poder ayudar a
nuestro hijo, alumno, etc. en el momento del problema.
Hay que ser consciente de que los más pequeños por su reducido número de experiencias en la
vida contemplan la privacidad fuera de la realidad, no entienden que el dar a conocer sus
experiencias puede llegar a ser peligroso, no contemplan como un riesgo que haya personas que
hoy en día son sus amigos y que mañana pueden no serlo, las repercusiones que puede tener el día
de mañana en procesos de selección para un puesto de trabajo e incluso en la posibilidad de que
ocurran problemas más graves como puede ser el grooming o el sexting.
6. ¿Que es el pensamiento consecuencial?
Es interesante, en primer lugar que los
menores
aprendan
a
analizar
la
importancia/interés de la información y
después, a través del pensamiento
consecuencial, a analizar qué implicación
puede
tener
la
publicación
de
determinada información.
Para ayudarles a entenderlo una práctica
sencilla puede ser la de mostrarles casos
reales que hayan sido publicados en
medios de comunicación y que informen
sobre alguno de estos tipos de
repercusiones legales.