El documento enfatiza que la iglesia ya cuenta con todos los recursos espirituales que necesita de parte de Dios, como la fe, el amor y la esperanza, para desarrollar exitosamente su misión. La iglesia debe dejar que estos dones de Dios cumplan libremente su función de bendecir a otros, en lugar de depender de factores externos o de sus propias capacidades.
2. • Al intentar ser bendición para otros,
empiezan a considerar sus fuerzas y
en muchas ocasiones, se llegan a
sentir desilusionados
1. Si tuviéramos un templo más grande
2. Si aquel pastor fuese el que
predicará aquí
3. Si los hermanos fueran más
entregados, etc.
3. Dios ya puso todo lo necesario
para que esta iglesia pueda
desarrollar exitosamente la
misión que Dios había preparado
para ella
4. Los recursos de Dios
Fe Amor Esperanza
3 acordándonos sin cesar delante del Dios
y Padre nuestro de la obra de vuestra fe,
del trabajo de vuestro amor y de vuestra
constancia en la esperanza en nuestro
Señor Jesucristo.
5. • Se trata de hombres y
mujeres creyentes en
Jesucristo.
Fe
• Porque el amor de Dios ha
sido derramado en nuestros
corazones… Romanos 5:5
Amor
• fuisteis también llamados en
una misma esperanza de
vuestra vocación
Esperanza
6. Todos
• Como miembros de una iglesia
local formamos el equipo de
Dios para bendecir a esta ciudad.
• ¿Qué es lo que hemos de hacer
entonces?
• Dejar que libremente estos
elementos cumplan la función
por las que Dios los puso en su
Iglesia
7. 1. Un amor que trabaja a
favor de otros.
2. Una fe que actúa. Con la
seguridad de que Dios está
allí para fortalecer y
proveer
3. Una esperanza que sirve
de guía para el curso de
todas nuestras acciones
8. Gracia y Paz
• La gracia de Dios, es el modo
de como llego la salvación, a
nuestra vida.
• Nuestro crecimiento es
también por la gracia de Dios
• El ministerio es compartir de
la gracia que el nos dio
Gracia es el modo de hacer
Paz es el resultado
9. Dios nos eligió
• El Evangelio es una
buena noticia, porque
se trata de lo que Dios
hizo en nosotros, no de
lo que nosotros somos
capaces de hacer.
• La buena noticia para
nosotros, es que Dios
nos eligió.
10. El Evangelio
• No tienes tú que hacerlo.
• No tienes que esforzarte,
no es algo que tengas
que lograr.
• Dios, ya lo hizo por ti, y
te lo ha regalado
Nos dio las herramientas
para ministrar a otros y
ser bendición
11. Imitadores de Cristo
• La vida cristiana, no consiste en
hacer algo, sino en ser como
alguien.
• Consiste en ser como Cristo
• Y vosotros vinisteis a ser imitadores
de nosotros y del Señor
Nuestras palabras y
acciones son las de Cristo
12. • Dios, ya decidió estar con este
pueblo.
• Él ya nos eligió, y nos dio los dones
y la presencia de su Espíritu, para
conducirnos.
• Todo eso tiene un solo objetivo,
que esta iglesia sea bendición para
otros.
13. Una iglesia de bendición
• Inicia con un cambio de óptica
• No. Lo que puedo hacer
• Si. Lo que Dios puede hacer en mí
Una conversión
profunda, y no un
cambio de asociación
religiosa
14. La conversión y
arrepentimiento
• Ser instrumentos de bendición,
no es algo que hacemos, es lo
que Dios hace
• No se trata de una versión
mejorada de nosotros mismos.
• ¿Cómo esta nuestra relación
con Dios? ¿Lo estamos
intentando o es Dios quien lo
está haciendo en nosotros?
15. Cuando Dios lo hace
• 7 de tal manera que habéis sido
ejemplo a todos los de
Macedonia y de Acaya que han
creído. 8 Porque partiendo de
vosotros ha sido divulgada la
palabra del Señor, no sólo en
Macedonia y Acaya, sino que
también en todo lugar vuestra fe
en Dios se ha extendido, de
modo que nosotros no tenemos
necesidad de hablar nada;
16. • Es simplemente ser un canal
de bendición, para que Dios lo
haga.
• Todo lo necesario, para
hacerlo. Dios ya lo ha
provisto.
No con ejército, ni con
fuerza, sino con mi
Espíritu Zacarías 4:6
Notas del editor
En el fondo de las intenciones de muchas iglesias, se halla la idea de ser bendición para mucha gente. Cuando eso ocurre, los miembros de las iglesias empiezan a considerar las formas en cómo pudieran ser llegar a ser bendición para muchas personas.
Con planteamientos como estos en algunos momentos tratarán de desarrollar lo que no tienen. En ocasiones harán fuertes inversiones en sus instalaciones, un mejor equipo de sonido, luces, incluso, porque no un grupo de alabanza como aquel que vimos en ese espectáculo cristiano. Etc. El asunto es que buscamos ser bendición considerando lo que externamente vemos en nuestro derredor, en lugar de ver hacia el interior y descubrir lo que ya Dios puso en la iglesia local.
De esta forma en lugar de ver en otros sitios y tratar de hacer lo que ellos están haciendo bien, para que nuestra iglesia sea exitosa (no debemos de pasar por alto que aquellas iglesias con los ministerios que están desarrollando están haciendo solamente aquello para lo cual Dios las diseño, usando los recursos que Dios mismo puso en ellas, para que desempeñaran la misión que Él les había dado).
Cada iglesia puede desarrollar la misión que Dios le ha encomendado, si utiliza los recursos que ya Dios puso en ella. Para esto vamos a acercarnos a una de las iglesias de mayor bendición descritas en el Nuevo Testamento y de allí obtener pautas para la práctica de la iglesia contemporánea.
A
l considerar las iglesias más exitosas, en el Nuevo Testamento, posiblemente venga a nuestra mente la Iglesia de Roma, en la capital del imperio, o quizá la de Antioquía, con su esquema misionero, o incluso la iglesia de Jerusalén por ser la Iglesia Madre. Cada una de ellas sin duda tuvo un papel importante y cumplió con el propósito que Dios tenía para cada una de ellas. Sin embargo hoy habremos de referirnos a una iglesia más bien pequeña, en una ciudad no tan importante ni en el entorno geopolítico como Roma, o tan relevante por sus escuelas teológicas, como lo llego a ser Antioquía. Ni siquiera era de una de las iglesias fundadoras. Se trata de una iglesia, más bien ubicada en la periferia, tampoco destaca en esa época por sus grandes maestros o predicadores. Quizá más bien parece una iglesia común. Y quizá en ese sentido, algunos pensarán porque identificarnos con esa iglesia. La razón de hacerlo es justamente, porque en ella hay elementos comunes que Dios puso en cada iglesia, para que cada una pudiera de ellas pudiera cumplir con el la misión que Dios les encomendó.
Que han recibido la fe y a través de ella se relacionan con Dios, que han sido redimidos por Cristo y que buscan adorar y servirle.
Es por este amor, que fuimos reconciliados, pero es también el que nos mantiene unidos al cuerpo de Cristo que es su iglesia, de este modo, encontramos a nuestro lado no solo a un hermano, sino también a otro colaborador en Cristo, pues todos estamos unidos en esto por el Espíritu de Cristo.
Esto es característico de los cristianos. El tener esperanza. De ello se deriva la misión y destino de cada uno de nosotros. Al estar integrados a la iglesia, somos ahora como el apóstol pablo dijo: un cuerpo, y un Espíritu
Cuando llegamos aquí, algunos pudieran pensar: ha, entonces se trata de esforzarnos más. Pero yo no dije hay que esforzarse más. Porque el esfuerzo, tiene que ver con la Ley y el producir con nuestro esfuerzo personal. Y todo eso no es más que religión. Y la iglesia de Dios, no ha sido llamada hacer las cosas, ni por esfuerzo personal ni como producto de otra religiosidad. Aquí, es donde hemos de encontrar la lógica del evangelio, acerca de cómo ministrar y servir para ser bendición. Así que si no es mediante nuestro esfuerzo personal, debe haber otra lógica y motivación diferente.
Entonces la gracia-gratuidad es la motivación de los ministerios cristianos. Es decir, servimos por gracia, y de este modo también nos constituimos en administradores de la gracia de Dios, que es lo que finalmente puede bendecir a la gente que está en nuestro derredor. …de gracia recibisteis, dad de gracia. Mateo 10:8
Así que el modo natural de ser cristiano, es el que manifiesta de una fe que actúa, un amor que trabaja y una esperanza que permanece. De modo natural lo produce porque fue diseñado para eso. Un buen árbol, da buenos frutos, porque por nuestros frutos seremos conocidos.
Lamentablemente aún en los círculos evangélicos, encontramos quienes predican el evangelio usando criterios religiosos. Por ejemplo dicen: usted pude decidir, estar en la presencia de Dios o ir al infierno. O quizá la frase sea: declara con tu boca, esto o aquello, y se supone que eso habrá de acontecer. Este tipo de expresiones no son más que formas distintas de una religión donde nosotros nos salvamos. Piense solo un momento. Si nosotros tuviéramos poder, como para decidir sobre la eternidad, entonces también tendríamos poder, sobre cosas más intrascendentes. Por ejemplo, me gustaría decidir, ser 30 cms. más alto.
Yo lo puedo decidir, pero yo no tengo el poder, para hacerlo. Eso le corresponde a Dios. De igual modo Puedo declarar, ya no soy pobre. A ver revise si su cartera trae más dinero ahora. No, nosotros no tenemos el poder. Eso solo es potestad de Dios y no mía, Así que si no tengo poder sobre cosas de este mundo, tampoco tengo poder sobre la eternidad.
Dios te eligió, no solo para ser su hijo y pases a la eternidad. Te eligió, para que su propósito se cumpla en ti. Te eligió, no solo para un nuevo destino con el Señor, Te eligió para darte una nueva naturaleza y para desarrollar una misión.
No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé. Juan 15:16
Actuar como Cristo es el ideal. Sé que para algunos eso puede parecer imposible. En parte pueden tener razón, si se trata de nuestro esfuerzo, seguramente no vamos nunca a ser como Cristo, pero en realidad no se trata de lo que podemos lograr, sino de lo que Dios es capaz de hacer en nosotros.
Haremos bien en este caso recordar una de las más grandes declaraciones de fe. …porque nada hay imposible para Dios. Lucas 1:37. Así que; Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros? Romanos 8:31.
9 porque ellos mismos cuentan de nosotros la manera en que nos recibisteis, y cómo os convertisteis de los ídolos a Dios, para servir al Dios vivo y verdadero,
Esto es nacer de nuevo
Si aún estas intentando, eso se llama religión, y la religión nos permitirá algunos puntos para calmar nuestra consciencia, pero no nos lleva a una vida fructífera en el Espíritu.
Quizá ahora, se necesaria una pausa, reconsiderar como vamos y hacer una oración, al Señor, para decirle:
Dios, ya me canse de intentar, quiero ser un instrumento de bendición para otros, pero, reconozco que no puedo hacerlo yo. Señor, hazlo en mí, te entrego mi vida, para que tú lo hagas, reconozco que solo Tú eres el Señor. Y pongo mi vida en tus manos, para que tú le des la forma que Tú quieras que tenga. En el Nombre de Cristo Amén.
Dicho de forma breve es: Dios usa a una Iglesia, para ser bendición. Contextualicemos este mismo pasaje. El plan de Dios, para la iglesia local, no es solo bendecir a los que están aquí reunidos. Sino que partiendo de aquí, Sea alcanzado, todo el municipio, y no solo el municipio, sino toda la entidad. De modo que en todo lugar la fe en Dios, de esta iglesia sea conocida y se traduzca en multiplicar las bendiciones que Dios derrama desde esta iglesia, para alcanzar a todos.
Un pastorcito salió a enfrentarse con el más formidable guerrero que desafiaba a su pueblo. No lo hizo con sus fuerzas, como tampoco nosotros, podremos hacerlo. Sus palabras fueron: …mas yo vengo a ti en el nombre de Jehová de los ejércitos… 1 Samuel 17:45
La vida de un solo hombre, fue de bendición, no por lo que hizo, sino por en quien confió. Del mismo modo Dios usará a su iglesia. Cuando salgamos para ser bendición, confiando en lo que Dios hará a través de cada uno de nosotros.