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GIOVANNI REALE y DARIO ANTISERI
HISTORIA DEL PENSAMIENTO
FILOSOFICO Y CIENTIFICO<
Tomp TERCERO
DEL ROMANTICISMO HASTA HOY
BARCELONA
EDITORIAL HERDER
1988
Versión castellana de JUAN Anonés lctssms. de ia obra de
Giovanni Ria/mz y Dmuo Amisem. Il pensíero occidemalc dallc arigíni ad oggi.
torno lll. Bditricc La Scuola. Brescia "l984
Ilustraciones: Arborio Mella, Ballarin Bild, Costa Farabola Garzant' L R' L
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Prólogo
ÍNDICE
O o Q ~ I I U o r O I I 0 0 0 U 0 o O c o 0 I U I r . D I I I I U o O 0 0 O O 0 0 ¢ 0 0  Q w v I o U 0 0 O 0 I 0 U Q O Q 0 U Q Q u o n Q a c Q J 0 O O 0 I 0 0 0 l O ¡ U I I I U0
PARTE PRIMERA
EL MOVIMIENTO ROMANTICO Y LA FORMACIÓN DEL
IDEALISMO
I El romanticismo y la superación de la ilustración............................. ..
El movimiento romántico ysus representantes.............................
1.1. Un antecedente del fenómeno romántico: el Srurm und Drang.
1.2. El papel desempeñado por el clasicismo con respecto al Sturm
und Drang y el romanticismo. 1.3. La complejidad del fenómeno
romántico y sus rasgos esenciales.
Los fundadores de la escuela romántica: los Schlegel, Novalis y
Schleiermacher. El poeta Höldcrlin ........................................._
2.1. La constitución del circulo de los románticos, la revista «Athe-
naeum» y la difusión del romanticismo. 2.2. Friedrich Sehlegel, el
concepto de «ironia›› y la interpretación del arte como forma supre-
ma del espiritu. 2.3. Novalis: desde el idealismo mágico al cristianis-
mo como religión universal. 2.4. Schleiermaclier: la interpretación
romántica de la religión, el resurgir de Platón y la hermenéutica. 2.5.
Höldcrlin y la divinizaeión de la naturaleza.
La posición de Schiller y de Goethe .......................................... .
3.1. Schiller: la concepción del «alma bella» y de la educación
estética. 3.2. Goethe y sus relaciones con el romanticismo.
Otros pensadores que contribuyeron a la superación y a la desapa-
rición de la ilustración ...........................................................
4.1. I-Iamann: la rebelión religiosa contra la razón ilustrada. 4.2.
Jacobi: la polémica contra Spinoza y la revalorización de la fe.
4.3. I-Ierder: la concepción antiilustrada del lenguaje y de la histo-
ria. 4.4. Humboldt, el ideal de humanidad y la lingüística.
Los debates acerca de las aporías del kantismo y los precursores
del idealismo (Reinhold, Schulze, Maimon y Beck) .................... ..
Lafundación del idealismo: Fiehtey Scheiling..................................
1 Fiehte y el idealismo ético ................... .......................... ..
1.1. Su vida y sus obras. 1.2. El idealismo de Fiehte como explicita-
Índice
n
2.
ción del fundamento del eriticismo kantiano. 1.3. La doctrina de la
ciencia y la estructura del idealismo en Fiehte. 1.3.1. El primer prin-
cipio del idealismo fichteano: el «yo» se pone a si mismo. 1.3.2. El
segundo principio del idealismo fichteano: el «yo» opone a si mismo
un «no yo». 1.3.3. El tercer principio del idealismo fiehteano: la
limitación recíproca y la oposición en el «yo›› entre el «yo›› limitado y
el «no yo» limitado. 1.3.4. La explicación idealista de la actividad
cognoseitiva. 1.3.5. La explicación idealista de la actividad moral.
1.4. La moral, el derecho y el Estado. 1.5. La segunda fase del
pensamiento de Fiehte (1800-1814). 1.6. Conclusiones: Fiehte y los
románticos.
Schelling y las tribulaciones románticas del idealismo ....................
2.1. La vida, el desarrollo del pensamiento y las obras de Schel-
ling. 2.2. Los comienzos fichteanos del pensamiento de Schelling y
los nuevos fermentos (1795-1796). 213. La filosofía de la naturaleza
de Schelling (1797-1799). 2.4. idealismo trascendental e idealismo
estético (1800). 2.5. La filosofia de la identidad (1801-1804). 2.6. La
fase teosófica y la filosofía de la libertad (1804-1811). 2.7. La filoso-
fía positiva, o la filosofía de la mitologia y de la revelación (a partir
de 1815). 2.8. Conclusiones acerca del pensamiento de Schelling.
mare scouuoa
EL IDEALISMO ABSOLUTO DE HEGEL
Hegely el idealismo absoluto .......................................................
1.
2.
3.
4.
5.
La vida, las obras y la génesisidel pensamiento de Hegel ................
1.1. La biografia de Hegel. 1.2. Los escritos hegelianos. 1.3. Los
escritos teológieos de juventud y la génesis del pensamiento he-
geliano.
Las lineas maestras del sistema hegeliano ...................................
2.1. La necesidad de determinar de modo preliminar las líneas maes-
tras del pensamiento de Hegel. 2.2. La realidad como espiritu: de-
tenninación previa de la noción hegeliana de «espfritu››. 2.3. La
dialéctica como ley suprema de lo real y como procedimiento del
pensamiento filosófico. 2.4. La dimensión de lo especulativo,- el sig-
nificado del auƒheben y la proposición especulativa.
La fenomcnología del espíritu..................................................
3.1. Significado y finalidad de la fenomenología del espíritu. 3.2. La
trama y las figuras dela Fenomenologia. 3.2.1. Lasetapas del itine-
rario fenomcnológico. 3.2.2. La conciencia (certeza sensible, per-
cepción e-intelecto). 3.2.3. La autoconciencia (dialéctica del amo y
del siervo, estoicismo-escepticismo, y conciencia infeliz). 3.2.4. La
razón. 3.2.5. El espiritu. 3.2.6. La religión y el saber absoluto. 3.3.
La naturaleza polivalente y la ambigüedad dela Fenomenología del
espiritu. '
La lógica.............................................................................
4.1. La nueva concepción de laglógica. 4.2. La lógica del ser. 4.3. La
lógica de la esencia. 4.4. La lógica del concepto.
La filosofía de la naturaleza.....................................................
5.1. La posición de la naturaleza y su significado en el sistema de
Hegel. 5.2. La superación de la visión renacentista y romántica de la
naturaleza. 5.3. Los planos y los momentos dialécticos de la filosofia
de la naturaleza. 'f
Índice
6. La filosofía del espíritu........................................................... 142
6.1. El espiritu y sus tres momentos. 6.2. El espíritu subjetivo. 6.3.
El espíritu objetivo. 6.3.1. La concepción hegelianaidel espiritu
objetivo. 6.3.2. Los tres momentos del espíritu objetivo y el signifi-
cado dela historia. 6.3.3. La naturaleza del Estado y de la historia, y
la filosofía de la historia. 6.4_. El espíritu absoluto: arte, religión y
filosofia.
7. Algunas reflexiones finales...................................................... 152
PARTE 'rERcERA
DEL I-IEGELIANISMO AL MARXISMO-
ot:-:REc1¬x›. E izouu:-:¡to›. Hsgsuauas. Nttcmtenro Y DssArutou.o DELManxtsmo
Derecha e izquierda hegeliana: Ludwig Feuerbach; el socialismo utópi-
co; Karl Marxy Friedrich Engels .................................................. 157
1. La derecha hegeliana ............................................................. 157
2. La izquierda hegeliana ........................................'.................. . 158
2.1. David Friedrich Strauss: la humanidad como unión entre lo
finito y lo infinito. 2.2. Bruno Bauer: la religión como «desventura
del mundo». 2.3. Max Stimer: «he puesto mi causa en la nada.›› 2.4.
Arnold Ruge: «la verdad somete en masa a todo el mundo.››
3. Ludwig Feuerbach y la reducción de la teología a la antropologia 163
3.1. De Dios al hombre. 3.2. La teología es antropología.
4. El socialismo utópico ....... .... .................................._. 167
4.1. Saint-Simon; la ciencia y la técnica como base de la nüeva socie-
dad. 4.2. Charles Fourier y el «nuevo mundo societario». 4.3. Pie-
rre-Joseph Proudhon: la autogestión 'obrera de la producción.
5. Karl Marx ........................................................................... 175
5.1. Su vida y sus obras.- 5.2. Marx, crítico de Hegel. 5.3. Marx,
crítico de la izquierda hegeliana. 5.4. Marx, crítico de los eeonomis--
tas clásicos. 5.5. Marx, critico del socialismo utópico. 5.6. Marx,
crítico de Proudhon. 5.7. Marx y la crítica de la religión. 5.8. La
alienación del trabajo. 5.9. El materialismo histórico. 5.10. El mate-
rialismo dialéctico. 5.11. La lucha de clases. 5.12. El Capital. 5.13.
El advenimiento del comunismo.
6. Friedrich Engels y la fundación del ediamat» ........... ................. 192
7. Problemas pendientes ............................................................ 194
PARTE CUARTA
Los GRANDES IMPUGNADDRES DEL s1s'riaMA
HEGELIANO _
HERBART, TRENDELENBURG, SCHOPEN_HAUER, KIERKEGAARQ
Los grandes impugnadores del sistema hegeliano .............................. 199
1. El realismo de Johann Friedrich I-Ierbart .................................... 199
1.1. La tarea de la filosofia. 1.2. El ser es uno; los conocimientos
acerca del ser són múltiples. 1.3. El-alma y Dios. 1f.4. Estética Y
pedagogía.
2. Las reacciones psicologistas ante el idealismo: Jakob F. Fries y
Friedrich Beneke .................................................................. 203
7
Índice
AdolfTrendelenburg, crítico dela «dialéctica hegelíana›› ............. ..
Artlgur Schopcnhaucr y el mundo como voluntad represen-
taci n.................................................................................
4.1. En contra de Hegel, «sicario dela verdad». 4.2. Una defensa de
la «verdad no remunerada». 4.3. «EI mundo es una representación
mia.›› 4.4. La categoria dela causalidad. 4.5. El mundo como volun-
tad. 4.6. La vida oscila entre el dolor y el tedio. 4.7. La liberación a
través del arte. 4.8. Asccsis y redención.
Sören Kierkegaard: el individuo y la causa del cristianismo .............
5.1. Una vida que no jugó al cristianismo. 5.2. Kierkegaard: el «poe-
ta cristiano». 5.3. El «fundamento ridículo» del sistema hegeliano.
5.4. El individuo ante Dios. 5.5. El principio del cristianismo. 5.6.
Posibilidad, angustia y desesperación. 5.7. Kierkegaard: la ciencia y
el cientificismo. 5.8. Kierkegaard y la teología científica.
PARTE QUINTA
LA FILOSOFÍA EN FRANCIA DURANTE LA RESTAURACIÓN Y
LA I-¬n.osoFíA ITALIANA EN LA EPDCA DEL
«R1soRG1MENTo»
VI. Lafilosoƒfa en Francia durante la restauración................................ ..
1. Los ideólogos: Destutt dc Tracy y Cabanis................................ _ .
-2. El espiritualismo de Maine de Biran ..........................................
3. Los tradicionalistas: dc Bonald, de Maistre y Lamennais.............. ._
4. Victor Cousin y el espiritualìsmo ecléctico ..................................
VII. Lafilosofia italiana en la época del trrisorgimento» .......................... _.
8
Las lineas maestras.............................................................. _.
La «filosofía civil» de Gian Domenico Romagnosi ......................_.
La filosofía como ciencia de las «mentes asociadas» y la politica-
federalista de Carlo Cattanco ..................................................
3.1. Carlo Cattaneo: «la filosofia es una milicia.›› 3.2. La filosofía
como «ciencia›› de las «mentes asociadas». 3.3. La teoria política del
federalismo.
Giuseppe Ferrari y la filosofía de la revolución........................... ..
Pasquale Galluppi y la filosofía de la experiencia ........................ ..
5.1. La realidad del «yo›› y la existencia del mundo externo. 5.2. El
principio de causalidad y la demostración de la existencia de Dios.
Antonio Rosmini y la filosofia del «ser ideal» ............................._
6.1. Su vida y sus obras. 6.2. Crítica del scnsismo empirista y del
apriorismo kantiano. 6.3. La idea del ser. 6;4. El sentimiento funda-
mental corpóreo y la realidad del mundo externo. 6.5. Persona,
libertad y propiedad. 6.6. Estado, Iglesia y el principio de la mo-
ralidad.
Vincenzo Gioberti y la filosofia del «ser real» ..............................
7.1. Su vida y sus obras. 7.2. Contra el psicologismo de la filosofía
moderna. 7.3. La «fórmula ideal». 7.4. El prirnado moral y civil de
los italianos.
VIII Elpositivismo ........................................................................ .
2
3
Prurnz staxm
EL POSITIVISMO
. Las lineas maestras del positivismo ...........................................
. Auguste Comte y el positivismo en Francia .................................
2.1. La ley de los tres estadios. 2.2. La doctrina de la' ciencia. 2.3. La
sociología como fisica social. 2.4. La clasificación de las ciencias. 2.5.
La religión -de la humanidad. 2.6. _Las razones de Comte. 2.7. La
difusión del positivismo en Francia. 2.8. Claude Bernard y el naci-
miento de la medicina experimental.
John Stuart Mill y el positivismo utilitarista inglés........................ .
3.1. Los problemas de Malthus. 3.2. La economía clásica: Adam
Smith y David Ricardo. 3.3. Robert Owen: desde el utilitarismo al
socialismo utópico. 3.4. El utilitarismo de Jeremiah Bentham. 3.5.
El utìlitarismo de James Mill. 3.6. John Stuart Mill: la crisis de los
veinte años. 3.7. Critica a la teoria del silogismo. 3.8. El principio de
inducción: la uniformidad de la naturaleza. 3.9. Las ciencias mora-
les, la economía y la politica. 3.10. La defensa dc la libertad del
individuo.
El positivismo cvolucionista de Herbert Spencer ..........................
4.1. La religión y la ciencia son correlativas. 4.2. La evolución del
universo: de lo homogéneo a lo heterogéneo. 4.3. Biología, ética y
sociedad.
El positivismo' materialista en Alemania.....................................
5.1. Principios generales. 5.2. Jakob Moleschott y la sacralización de
la materia y de la vida. 5.3. Carl Vogt, opuesto a Rudolf Wagner con
respecto a la existencia del alma. 5.4. Ludwig Büchner y la etemidad
de la materia. 5.5. Emil Du Bois-Reymond y «los siete enigmas del
mundo». 5.6. Ernst Haeckel y el mundo sin enigmas. 5.7. El positi-
vismo social de Ernst Laas y Friedrich Jodl. 5.8. Eugen Dühñng y el
socialismo personalista.
El positivismo en Italia ........................................................._.
6.1. Principios generales. 6.2. Cesare Lombroso y la sociología del
crimen. 6.3. Un médico positivista: Salvatore Tommasi. 6.4. Augus-
to Murri: método científico y lógica del diagnóstico. 6.5. Pasquale
Villari y la historiografía posìtivista. 6.6. Aristide Gabelli y la reno-
vación de la pedagogia. 6.7. Roberto Ardigò: de la saeralidad de la
religión a la saeralidad del «hecl1o››. 6.8. Lo ignorado no es in-
cognoscible. La evolución avanza desde lo indistinto a lo distinto.
6.9. Moral y sociedad.
Paura sérfnw.
EL DESARROLLO DE LAS CIENCIAS EN EL SIGLO XIX,
EL EMPIRIOCRITICISMO Y EL CONVENCIONALISMO
El desarrollo de las ciencias en elsiglo XIX......................................
. 3211. Cuestiones generales ............................................................
1.1. La ,ciencia adquiere significado filosólìco. 1.2. Ciencia y socie
dad en el siglo xlx.
Índice
. -271
271
273
283
298
303
308
321
_ Una mmemåtìga más «1-ígurosa» ..............................................- 324
_ Las gggmglfiag 110 cuclldranas................................................ -- 327
9
Índice
3.1. La geometria euclidiana y la cuestión del quinto postulado. 3.2.
_El nacimiento de las geometrías no euclidianas. 3.3. El significado
ñlosófico de la geometría no euclidiana.
4. El.desarrollo de la teoría de la evolución biológica ........................
4.1. El debate sobre la «evolución» en Francia: J.B. Lamarck, G.
Cuvier y Geoffrey Saint-Hilaire. 4.2. Charles Darwin y El origen de
las especies. 4.3. El origen del hombre. 4.4. El debate sobre El
origen de las especies y la cuestión dãl darwinismo social. 4.5. Tho-
mas I-I. Huxley y el darwìnismo en Inglaterra.
. La fisica del siglo xxx............................l.................................
5.1. La física a comienzos de siglo. 5.2. El mecanicismo determinista
XII.
como programa de investigación. 5.2-)._ïlI_)e la electrostática a la elec-
trodinámica. 5.4. El electromagnetisino y la nueva sintesis teórica.
5.5. El enfrentamiento con la mecánica de Newton.
6. La_ lingüística: W. von Humboldt; F..Bopp; la «ley de Grimm» y
los neogramátieos ._........................................... .'....................
7. El nacimiento de la psicologia experimental ................................
7.1. La ley psicofísica fundamental de Weber-Fechner. 7.2.
W. Wundt y el laboratorio de psicologia experimental de Leipzig.
J. 8. Los orígenes de la sociología cientifica .......................................
8.1. Emile Durkheim y Las reglas del rnétodo sociológico. 8.2. El
suicidio y la anemia. *
Elempiríocriticismo de RichardAvenaríusy Ernst Mach ....................
1. Richard Avenaríus y la critica de la experiencia pura .....................
1.1. ¿Qué es la experiencia pura? 1.2. El regreso al «concepto natu-
ral del mundo». 1.3. Más allá de la distinción 'entre lo físico y lo
psíquico. 1.4. Los perjuicios de la «introyección››.
2. Ernst Mach: bases, estructura y desarrollo de la ciencia .................
2.-1. El análisis de las sensaciones. 2.2. El conocimiento científico
como acontecimiento biológico. 2.3. Problemas, hipótesis y selec-
ción de las hipótesis. 2.4. La ciencia como economia del pensamien-
to. 2.5. Criticas a-la mecánica newtoniana.
El convencionalismo de Henri Poincaré y Pierre Duhem ......... ._......... . .
1. El convencionalismo moderado de Henri Poincaré .......................
1.1. Poincaré: la convención no es un capricho. 1.2. La teoria institu-
ye el hecho: «la experiencia es la única fuente de verdad.›› 1.3. Los
axiomas de la geometria, como definiciones disfrazadas.
2. Pierre Duhem y la naturaleza de' la teoria fisica ............................
2.1. Duhem: qué es una teoría fisica. 2.2. Controles holísticos y
negación del experimentum crucir.
3. Una evaluación del convencionalismo......................... ...........,
*ratrre octava
LA FILOSOFÍA DESDE EL SIGLO XIX AL SIGLO XX
Nietzsche. Fidelidad ala tierra y transmutación de todos los valores ..... ..
_ 1. Nietzsche, intérprete de su propio destino ......................'...........
2. El destino de Nietzsche como «profeta del nazismo››..-................_.
334 '
343
349
352
355
359 a
359
364
371
371
374
376
379
379
380
XIII.
XI
XV.
V.
Índice
3. Su vida y sus obras .................-..................................... ...... 381
4. Lo «dionisiaco››, lo «apolíneo›› y el «problema de Sócrates»...... .. ..= 382
S. Los hechos son estúpidos y la saturación de historia es un peligro.... 384
6. El distanciamiento de Schopenhauer y'de Wagner........ ............ I-3,85
7. El anuncio de la «muerte de Dios»........................................... 3:86
8. El Anticristo, o el cristianismo como vicio ................................. 387
9. La genealogía de la moral....... ............. ........................... .. 389
10. Nihilismo, eterno retorno y amorƒati ................................. 390
11. El superhombre es el sentido de la tierra ...................... ..... 391
El neocriticismo. La escuela de Marburgoy la escuela de Baden -........... 393
1. Tendencias generales............................................................. 393
2. La escuela de Marburgo .............................................-..Ã......... 395
` 2.1. Hermann Cohen: la crítica,como metodologia de la ciencia. 2.2.
Paul Natorp: «el proceso, el método lo es todo.››
3. Ernst Cassirer y la filosofía de las formas simbólicas ............ 397
3.1. Substancia y función. 3.2. Las formas simbólicas. 3.3. El hom-
bre: anirnal symbolicum.
4. Laescuela de Baden .............................................................. 400
4.1. Wilhelm Windelband y la filosofia como teoria de los valores.
4.2. Heinrich Rickert: conocer es juzgar con base en el valor de
verdad.
Elhtlstoricismo alemán ..................................................... . _ ....... . 404
1. Directrices generales ............................................................. 404
2. Wilhelm Dilthey y la critica de la razón histórica ..........=................ 406
2.1. Hacia una crítica de la razón histórica. 2.2.' La fundamentación
de las ciencias del espíritu. 2.3. La constitutiva historicídad del mun-
do humano. É
3. W. Windelband y la distinción entre ciencias nomotéticas y cien-
cias idiogråficas ......................................... ......... 410
4. H. Rickert: la relación con los valores y la autonomiagdel conoci-
miento histórico ......................... .. . .-. ................. ............. . . 412
5. G1 Simmel: los valores del historiador-y el relativismo de los
hechos.......................... ..... 413
6. Oswald Spengler y el «ocaso de Occidente»....... ........................ 414
7. Emst Troeltsch y el carácter absoluto delos valores religiosos ....... .. 415
8. F. Meinecke y la búsqueda de lo eterno en el instante ............... 415
Max-` Weber. La metodologia de las ciencias histórico-socitiles y el des-
encantamiento delmundo................................,...........f.._.............. 417
1. La obra de Weber: principios generales.....¡.............. ................ 417
2. La «doctrina 'de la ciencia››:; finalidad y objeto de las ciencias histó-
rico-sociales.........................................................-.............. .. 420
3. La cuestión de la referencia alos valores ...................,................ 421
4. La teoría del «tipo ideal» ............... ................... .............._. 422
s. La posibilidad objetiva y el peso diferencial de las distintas causas-
de un acontecimiento histórico................................................. 423
6. El debate acerca de la objetividad.......... ............ ................_ 424
7. Laética protestante y el espíritu del capitalismo ......................... 426
8. WeberyMarx ............................................... ................ 428
9. El desencantamiento del mundo y la fe como sacrificio del
intelecto .............................................................._.,.... 430
11
.tnulce
J XVI
XVII
XVIII
1 xa.
12
Elpragmatismo ........................................................................ I 433
1. Principios generales............................................................._.
2. El pragmatismo lógico de Charles S. Peirce.................................
2.1. Los procedimientos para establecer las creencias. 2.2. Deduc-
ción, inducción y abduccìón. 2:3. Cómo aclarar nuestras ideas: la
regla pragmática. 2.4. La semiótica, 2.5. La faneroscopia. 2.6. La
cosmología: tiquismo, sinequismo y agapismo.
433
434
3. El empirismo radical de William James .............. ..................._. 439
3.1. El pragmatismo es sólo un método. 3.2. La verdad de una idea
se reduce a su capacidad de actuar. 3.3. Los principios de la psicolo-
gía y la mente como instrumento de adaptación. 3.4. La cuestión
moral: ¿cómo se jerarquizan y se escogen ideales contradictorios?
3.5. La variedad de la experiencia religiosa y el universo pluralista.
4. El desarrollo del pragmatismo ............................................... _. 445
5. El pragmatismo italiano ....................................................... .. 446
El instrumentalismo deJohn Dewey............................................. .. 449
1. La experiencia no se reduce a la conciencia o al conocimiento .........
2. Precariedad y riesgo en la existencia ........................................._
3. La teoría de la investigación ....................................................
4. Sentido común e investigación científica: las ideas como instru-
mentos ............................................................................. ._
5. La teoria de los valores...........................................................
6. La teoría de la democracia ......................................................
449
451
453
454
455
457
EI ncoidealismo italiano: Croce y Gentile. El idealismo angIo-norte-
americano ............................................................................. ._ 459
1. El idealismo en Italia antes de Croce y Gentile.............................
2. Benedetto Croce y el ncoidealismo como historicismo absoluto ....._.
2.1. Su vida y sus obras; 2.2. Lo que está vivo y lo que está muerto en
la filosoƒia de Hegel, o el manifiesto del nuevo espiritualismo de
Croce. 2.3. La estética de Croee y el concepto de arte. 2.4; La lógica
de Croce: los conceptos y los pseudoconceptos. 2.51 La actividad
práctica, económica y ética. 2.6. La historia como pensamiento y
como acción. 2.7. Reflexioncs finales.
459
461
3. Giovanni Gentile y el ncoidealismo actualista .............................. 476
3.l.'Su vida y sus obras. 3.2. La reforma de Gentile de la dialéctica
hegeliana. 3.3. Los criterios básicos del actualismo. 3.4. La naturale-
za del actualismo de Gentile. 3.5. Reflexioncs finales.
4. El ncoidealismo en Norteamérica y en Inglaterra ......................... 483
4.1. Los precedentes: Carlyle y Emerson; Ferrier y Grotc. 4.2. F.H.
Bradley y el ncoidealismo inglés. 4.3. J. Royce y el ncoidealismo en
los Estados Unidos.
5. La reacción neorrealista en los Estados Unidos ............................ 488
PARTE Novena
FENoMENoLooíA, Ex1s'rENcrAL1sMo, HERMENÉUTICA
Edmund Hnsscrl y el :novimienioƒenomenológico .........................._. 493
1. Principios generales............................................................. .. 493
2. Los orígenes dela icnomenología ............................................. 496
XX
XXI
XXII.
índice
3. Edmund Husserl................................................................. ..
3.1. La polémica contra el psicologismo. 3.2. La intuición eidética.
3.3. Ontologías regionales y ontología formal. 3.4. La intencionali-
dad de la conciencia. 3.5. La epoche o reducción fenomenológica.
3.6. La crisis de las ciencias europeas y el «mundo de la vida».
497
4. Max Scheler .................................... .................................. 505
4.1. En contra del formalismo kantiano. 4.2. Los valores materiales
y su jerarquía. 4.3. La persona. 4.4. La sociología del saber.
5. Nicolai I-lartmann ................................................................. 510
5.1. Del neocriticismo a la fenomenologia. 5.2. La fundamentación
de la ontología.
6. La fenomenología de la religión ............................................. .. 513
6.1. Rudolf Otto y la experiencia de lo «totalmente otro». 6.2. Ge-
rardus van der Leeuw y el sentido último de la vida.
Martin Heidegger: de Iafenomenologla al existencialismo ................. .. 517
. De la fenomenología al existencialismo ......................................
. El «estar ahi» y la analítica existencial ........................................
. El «estar en el mundo» y el «estar con los otros» ......................... ..
I 517
2 518
3
4. El «ser para la muerte», existencia inauténtica y auténtica ..... .......
5
6
7
519
521
. La valentía ante la angustia ..................................................... 522
. El tiempo ................................... ..................................... .. 523
. La metafísica occidental como olvido del ser y el lenguaje de la
poesía como lenguaje del ser ................................................. .. 524
8. La técnica y el mundo occidental ...................... ...................... 525
El existencialismo .................................... ............... .... 527
1. Principios generales .............................................................
2. Karl Jaspers y el naufragio de la existencia.................................
2.1. Ciencia y filosofía. 2.2. La orientación en el mundo y lo «om-
niabarcador». 2.3. La inobjetividad de la existencia. 2.4. El naufra-
gio dela existencia y las cifras de la trascendencia. 2.5. Existencia y
comunicación.
527
529
3. Jean-Paul Sartre: desde la libertad absoluta e inútil hasta la liber-
tad histórica....................................................................... ..
3.1. Escribir para entenderse. 3.2. La nãusea ante la gratuidad de las
cosas. 3.3. El «en sí» y el «para sí››; el ser y la nada. 3.4. El «ser para
otro». 3.5. El existencialismo es un humanismo. 3.6. La crítica de la
razón dialéctica.
537
4. Maurice Merleau-Ponty: entre el existencialismo y la fenome-
nologia ......................................;...........................'............. 544
4.1. La relación entre la conciencia y el cuerpo, y entre el hombre y
el mundo. 4.2. La libertad condicionada.
5. Gabriel Marcel y el neosocratismo cristiano ................................ 547
5.1. La defensa de lo concreto. 5.2. La asimetría que se da entre
creer y verificar. 5.3. Problema y metaproblema. 5.4. Tener y ser.
5.5. Contra el culto a lo moralmente absurdo.
6. El influjo del existencialismosobre las «ciencias humanas» ............. 553
Hans-Georg Gadamery la teoria dela hermenéutica .......................... 555
1. El «círculo hermenéutico›› .................................................... .. 555
2. Precomprensión, prejuicios y alteridad del texto .......................... 558
13
Índice
3. Interpretacióne historia delos efectos .......................................
4. Prejuicio, razón y tradición: Bacon, los ilustrados y los ro-
mánticos ...... ....... .........................................................
5. Lateoría dela experiencia ...... .............................................
6. Gadamer yla «experiencia dialéctica» de Hegel ..... ....................
nutre Décima
-BERTRAND RUSSELL,_LUDWIG WITTGENSTEIN Y LA FILOSO-
FIA DEL LENGUAJE
XXIII. Bertrand Russell: del rechazo del idealismo a la crítica de la filosofia
analítica.................................................................................;
1. Bertrand Russell: el rechazo del idealismo ................................_.
2. El atomismo lógico y el encuentro entre Russell y Peano ................
3. La teoría de las descripciones................................................. _.
4. Russell, en contra del «segundo›› Wittgenstein y la filosofía ana-
lítica ..................................................................................
5. Russell: la moral y el cristianismo .............................................
6. A.N. Whitehead: proceso y realidad ....................................... ..
XXIV. Ludwig Wittgenstein,- desde el «Tractatus logico-philosophicus» hasta las
«Investigacionesfilosóficas» .................. .: ............' ...................... . .
1. Su vida ...............................................................................
2. El Tractatus logico-philosophicus..............................................
3. La antimetatísica de Wittgenstein ............................................_
4. La interpretación no neopositivista del Tractatus ..........................
5. El retorno a la filosofía...........................................................
6. Las Investigaciones filosóficas y la teoría de los juegos lingüís-
ticos................................................................................. _.
7. Contra el esencialismo ...........................................................
8. El principio del uso y la filosofía como terapia lingüística.............. ..
9. Wittgenstein, maestro de enseñanza primaria ..............................
XXV. -Lafilosofia del lenguaje ..............................................................
1. El movimiento analítico de Cambridge y Oxford ..........................
1.1. La filosofía analítica en Cambridge. 1.2. La filosofía analítica
en Oxford.
2. Filosofia analítica y lenguaje ordinario.......................................
3. Filosofía analítica y metafísica................................................. .
-4. Filosofia analítica y lenguaje ético............................................_
5. Filosofía analítica y lenguaje político .........................................
6. Filosofía analítica e historiografía .............................................
7. Filosofía analítica y lenguaje religioso ........................................
entre tmoéctmx
ESPIRITUALISMO, PERSONALISMO, NUEVAS TEOLOGÍAS
Y NEOESCOLASTICA
`XXVI. El espiritualismo como fenómeno europeo; el modernismo; Bergson y
la evolución creadora .... ........................................................ .. 611
1. El espiritualismo. Principios generales ....................................._.
2. El espiritualismo en Inglaterra ................................................_
3. El espiritualismo en Alemania .................................................
14
XXVII.
XXVIII
XXIX.
" Índice
4. El espiritualismo en Italia: Martinetti, Varisco y Carabellese ....
5. El espiritualismo en Francia: Lequier, Ravaisson y Boutroux ........ ..
6. Maurice Blonde! y la filosofía de la acción.......................t...........
6.1. Los precedentes de la tìlosofíade la acción. 6.2. La dialéctica de
la voluntad. 6.3. El método de la inmanencia.
7. El modernismo y sus problemas .............................. ........
8. Henri Bergson y la evolución creadora ...................... ........
8.1. La originalidad del espiritualismo de Bergson. 8.2.=El tiempo
espacializado y el tiempo como duración. 8.3. Por que la duración
fundamenta la libertad. 8.4. Materia y` memoria. 8.5. Impulso vital y
evolución creadora. 8.6. Instinto, inteligencia e intuición. 8.7. El rlo
de la vida. 8.8. Sociedad cerrada y sociedad abierta. 8.9. Religión
estática y religión dinámica.
Elpersonalismo...................................................................... ..
Principios generales............................................ ............... .. '639
641
642
1.
2. Jean Lacroix: 'el personalismo entre el existencialismo y el
marxismo .................................................... ..... ............
3. Emmanuel Mounier y la «revolución personalista y comunitaria» ..
3.1. La persona de Mounier. 3.2. Las dimensiones -de la persona.
3.3. El personalismo, contra el moralismo y el individualismo. 3.4.
La persona, contra el capitalismo y contra el marxismo. 3.5. Hacia la
nueva sociedad. 3.6. El cristianismo debe romper con todos los des-
órdenes establecidos.
La renovación delpensamiento teológica en elsiglo XX .._...... . .. .
1. La renovación de la teología protestante ....................................
1.1. Karl Barth: la «teología dialéctica» contra la «teología liberal».
1.2. La analogía fidel contra la analogía entís. 1.3. Karl Barth y la
política. 1.4. Paul Tillich y el «principio de correlación». 1.5. Rudolf
Bultmann: el método «histórico-morfológico» y la «desmitìficación».
1.6. Dietrich Bonhoeffer y el mundo salido de la «tutela-de Dios».
2. La renovación de la teologíacatólica ...... .............
2.1. La teología católica y el concilio Vaticano tx. 2.2. Karl Rahner y
las «condiciones a priori» de la posibilidad de la revelación. 2.3.
Hans Urs von Balthasar y la estética teológica.
3. Paul M. van Buren y la «teología de l`a muerte de Dios» ............... ..
3.1. El significado secular del Evangelio. 3.2. La superación de la
«teología de la muerte de Dios».
4. Lateología dela esperanza ............. ...............
4.1. J. Moltmann-y la contradicción entre «esperanzan y «experien-
cia». 4.2. W. Pannenberg: «la prioridad corresponde a la fe, pero la
primacía, a la esperanza.›› 4.3. Johannes B. Metz: la_teología de la
esperanza como teología política. 4.4. E. Schillebeeckx: «Dios es
aquel que vendrá.»
La neoescolâstica ...................;........................ ........,..............
1. La encíclica Aeterni Patrir y la filosofia neoescolástiea ;...............
2. La neoescolástica en la Humani Generis, en el concilio Vaticano u
y en un discurso de Juan Pablo tt.............................................
3. El cardenal Mercier y la neoescolástica en Lovaina ......
4.1. Jacques Maritain: los grados del saber y el humanisino_integ'ral.
4.2. Étíenne Gilson: por qué no puede suprimirse el tomismo.
5. La neoescolåstica en la universidad católica de Milán .......... ....... 685
-15
615
617
620
622
624
639
653
653
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675
675
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678
4. La neoescolástica en Francia ............ ........... ........... '680
ndice
Paura ouooécma
EL MARx1sMo Después De MARX Y LA Escuem DE
FRANCFORT
XXX. El marxismo después de Marx ......................................................
1
2.
3
4
S
6.
7
8
La Primera, la Segunda y la Tercera Internacional;.......................
El revisionismo del reformista Eduard Bemstein ..........................
2.1. Las razones del fracaso del marxismo. 2.2. Contra la revolución
y la dictadura del proletariado. 2.3. La democracia como,-alta escuela
del compromiso.
El debate sobre el refonnismo ............................................... ..
3.1. Karl Kautslry y la «ortodoxia››. 3.2. Rosa Luxemburg: «La vic-
toria del socialismo no cae del cielo.››
El austromarxìsmo ................................................................
4.1. Génesis y características del austromarxismo. 4.2. Max Adler y
el marxismo como «programa científico». 4.3. La posición neokan-
tiana de los austromarxistas y la fundamentación de los valores del
socialismo ......................................................................... ..
El marxismo en la Unión Soviética.......................................... ..
5.1. Plejanov y la difusión de la «ortodoxia››. 5.2. Lenin: el partido
como vanguardia armada del proletariado. 5.3. Estado, revolución,
dictadura del proletariado y moral comunista. 5.4. Lenin contra los
partidarios de Mach. 5.5. Stalin y el marxismo-leninismo como ideo-
logia oficial de la Unión Soviética.
El «marxismo occidental» de Lukãcs, Korsch y Bloch....................
6.1. Gyôrgy Lukács: totalidad y dialéctica. 6.2. Clase y conciencia de
clase. 6.3. Lukács, historiógrafo de la filosofía. 6.4. La estética mar-
xista y el «realismo››. 6.5. Karl Korsch, entre «dialéctica» y «cien-
cia». 6.6. Ernst Bloch: la vida de un «utópico››. 6.7. «Lo que importa
es aprender a esperan» 6.8. «Hay que ampliar el marxismo con
fidelidad» 6.9. «Donde hay esperanza, hay religión.››
El neomarxismo en Francia ................................................... ..
7.1. Roger Garaudy: los errores del sistema soviético. 7.2. La alter-
nativa. 7.3. Marxismo y cristianismo. 7.4. Louis Althusser: la «rup-
tura epistemológica» del Marx de 1845. 7.5. Por qué cl marxismo cs
un antihumanismo y un antihistoricismo.
El neomarxismo en Italia ........................................................
8.1. Antonio Labriola: «el marxismo no es positivismo ni naturalis-
mo.›› 8.2. La concepción materialista de la historia. 8.3. Antonio
Gramsci: la «filosofía de la praxis» contra la «filosofia especulativa››
de Croce. 8.4. El «método dialéctico» y la revolución contra El Ca-
pital. 8.5. La teoría de la hegemonía. 8.6. Sociedad politica y socie-
dad civil. 8.7. El intelectual «orgánico››; el partido como «príncipe
modcrnon; la revolución como «guerra de posición».
XXXI. La escuela de Francfort...............................................................
1
2
3
4
5
16
Génesis, evolución y programa de la escuela de Francfort...............
Adorno y la «dialéctica negativa» .............................................
Adorno y Horlcheimer: la dialéctica de la ilustración .....................
La industria cultural .......................... ................................_ 742
Max Horkheimer: el eclipse de la razón......................................
5.-1. El lucro y la planificación como generadores de represión. 5.2.
La razón instrumental. 5.3. La filosofía como denuncia de la razón
instrumental. 5.4. La nostalgia de lo «completamente otro».
XXXII.
Índice
6. Herbert Marcuse y el «gran rechazo»......................................._. 748
6.1. ¿Es imposible una civilización no represiva? 6.2. El Eros, libe-
rado. 6.3. El hombre unidimensional.
7. Erich Fromm y la «Ciudad del Ser» ........................................... 752
7.1. ¿La desobediencia es realmente un vicio? 7.2. _¿Tener o ser?
8. La lógica de las ciencias sociales: Adorno contra Popper ................ 755
9. El «`dialéctico›› Jürgen I-Iabcrmas contra el «decisionista›› Hans
Albert .............................................................................. .. 757
I
I
PARTE DECIMOTBRCERA
LAS CIENCIAS HUMANAS EN EL SIGLO XX
' FREUD Y EL PSICOANALISIS
EL ESTRUCTURALISMO
Las ciencias hupzanas en elsiglo XX............................................. _ 763
l. Cuestiones generales .............................................................
2. La psicologia de la forma ........................................................
2.1. C. von Ehrenfels; la escuela de Graz; la escuela de Würzburgo.
2.2. Max Wertheimer y la escuela de Berlin.
763
764
168 tf
mi
3. Elconductismo ....................................................................
3.1. J.B. Watson y el esquema «estímulo-respuestaa; I.P. Pavlov y
los «retlejos condicionados». 3.2. Los avances del conductismo y
B.F. Skinner.
4. La epistemología genética de Jean Piaget .......................-.......... . .
4.1. Qué es la epistemología genética. 4.2. Las fases del desarrollo
mental en el niño.
5. La teoría lingüística desde F. de Saussure hasta N. Chomsky....... 775 Y
5.1. Ferdinand de Saussure: qué es la semiología y qué es el signo.
5.2. La primera gran oposición: lengua y habla. 5.3. La segunda gran
oposición: sincronía y diacronía. 5.4. El Círculo lingüístico de Praga.
5.5. El Círculo lingüístico de Copenhague. 5.6. La gramática genera'-
tiva de Noam Chomsky: estructura profunda y estructura superficial.
5.7. Competencia y rendimiento.
6. La antropologia cultural ...............................................Ã.`...... ._
7. K. Mannheim y la sociología del conocimiento.............................
7.1. Concepción parcial y concepción total de la ideologia. 7.2. ¿El
marxismo es ideológico? La diferencia entre ideología y utopía. 7.3.
¿El relacionìsmo evita el relativismo?
784
786
8. Los avances de las teorías económicas........................................ 790
8.1. La teoría marginalista. 8.2. El liberalismo keynesiana.
9. La filosofía del derecho: el iusnaturalismo; el realismo jurídico;
Kelsen y el positivismo jurídico ............................................. ._.
9.1. G. Radbruch y el ìusnaturalismo. 9.2. El realismo jurídico, des-
de F.C. von Savigny hasta R. Pound. 9.3. Hans Kelsen: «ser», «de-
ber scr» y la ciencia de los valores. 9.4. Sanción, norma jurídica y
norma fundamental.
795
10. Chaïm Perelman y la «nueva retórica» .................. .................. 800
10.1. Qué es la teoría de la argumentación. .10.2. La razonabilidad V.-
no es racionalidad, pero tampoco emocìonalidad. 10.3. Argumen-
tación y auditorio.
17
indiee
`Í XXXIV.
xxxv
XXXIII. Sigmund Freudy el desarrollo del movimientopsicoanalitico ........ 805
1. De la anatomía cerebral a la «catarsis hipnótica›› ........................ ..
2. Del hipnotismo al psicoanálisis.........L......................................
3. inconsciente, represión, censura c interpretación de los sueños ...... ..
4. La noción de «libido›› y la sexualidad infantil ...............................
'5. El complejo de Edipo .........................................................._.
6. El desarrollo de las técnicas terapéuticas y la teoría de la transfe-
rencia.................................................................................
7. La estructura del aparato psíquico: «ello››, «yo›› y «superyó››
8. La lucha entre Eros-y Thanatosy el malestar en la civilización .........
9. La rebelión contra Freud y el psicoanálisis después de Freud...........
9.1. La «psicología individual» de Alfred Adler. 9.2. La «psicología
analítica» de Carl Gustav Jung. 9.3. Wilhelm Reich y la'sintesis entre
marxismo y teoria freudiana. 9.4. El psicoanálisis infantil en Anna
Freud y Melanie Klein. 9.5. La terapia no directiva de Carl Rogers.
9.6. Rogers: la «comunicación auténtica», el individuo y el grupo.
El estructuralismo ........,........................................'..........,....... ..
1. El uso científico y el uso filosófico del término «estructura» ............
2. Claude Levi-Strauss y el estructuralismo en antropología ............. ..
2.1. Las estructuras elementales del parentesco. 2.2. Un «kantismo
sin sujeto trascendental››. 2.3. La estructura de los mitos.
3. Michel Foucault y el estructuralismo en la historia ............... .... ..
3.1. Estructuras epistémicas y prácticas discursìvas. 3.2. Las estruc-
turas epistémicas de la historia del saber occidental.
4. Jacques Lacan y el estructuralismo en psicoanálisis
4.1. Lo inconsciente está estructurado como un lenguaje. 4.2. El
estadio del espejo. 4.3. Necesidad, demanda, deseo.
S. Por qué para el estructuralismo «el hombre está muerto» ...............
6. ¿Es irracional el racionalismo estmcturalista?..............................
rxnre Decir-iocuxarlx
EL 1:›BsARnoLLo DE LA CIENCIA Y LAS T1-ïoaíxs
EP1sTBMoLóG1cAs EN EL srGLo xx
Lógica, matemúiica, _/lírica y biologia en el siglo XX . .. .._.................... ..
1. Los avances de la lógica y de la matemática en el siglo xx ...............
1.1. La «investigación sobre los -fundamentos» y el descubrimiento
de la «antinomia de las clases». 1.2. El programa de Hilbert y los
teoremas de _Gödel. 1.3. La semántica de Tarski y el intuicionismo
de Brouwer.
$2. El desarrollo de la física en el siglo xx ,.......................................
19
2.1. Cuestiones generales. 2.2. Einstein y las teorías de la relativi-
dad. 2.3. La teoría de los cuantos. 2.4. Física atómica, nuclear y
subnuclear. 2.5. La interdisciplinar-¡edad y las disciplinas «de
frontera». '
3. La biología después de Darwin............................................... ..
3.1. El neodanvinismo: A. Weismann y H. De Vries. 3.2. El descu-
brimiento de los cromosomas y el redescubrimiento de las leyes de
Mendel. 3.3. En el interior del cromosoma: los genes. 3.4. El código
genético.
XXXVI.
XXXVII.
XXXVIII
Índice
La filosofía de Ia ciencia entre las dos guerras mundiales. El neopositi-
vismo, el operacionismo y la epistemología de Gaston Bachelard ........._ 864
1. Directrices generales .............................................................
2. El neopositivismo vienés ......................................,............... ..
2.1. Los orígenes y la formación del Círculo de Viena. 2.2. El mani-
fiesto programático del Wiener Kreís. 2.3. Las teorías fundamentales
del neopositivismo. 2.4. La antimetafísica del Wiener Kreis. 2.5.
M. Schlick y el principio de verificación. 2.6. Neurath y el fisicalis-
mo. 2.7. Camap y el lenguaje fisicalista como lenguaje universal de
la ciencia. 2.8. El trasplante del neopositivismo a América. 2.9. Li-
beralización y superación de las tesis neopositivistas..
864
865
3. El operacionismo de P.W. Bridgman ...................-...................... 877
3.1. Los conceptos reducidos a operaciones. 3.2. Contemplar todo lo
que hace la teoría. 3.3. El debate sobre el operacionismo.
4. La epistemología de Gaston Bachelard ...................................... 881
4.1. La 'ciencia no tiene la filosofía que se merece. 4.2. La ciencia es
la que instruye a la razón. 4.3. Las «rupturas epistemológicas». 4.4.
No hay verdad si no se rectifica el error. 4.5. El «obstáculo episte-
mológico». 4.6. Ciencia e historia de la ciencia.
El racionalismo crítico de KarlR. Popper ....................................... 889
1. Su vida y sus obras ............................................................... 889
2. Popper, el neopositivismo y la filosofia analítica ....................... _. 890
3. La inducción no existe ................_.......................................... 891
4. La mente no es una tabula rasa ............................................... 892
5. Problemas y creatividad; génesis y comprobación de las ideas ...... .. 894
6. El criterio de falsación ........................................................ .. 894
7. La verosimilitud y la probabilidad de las teorías son objetivos
incompatibles entre sí......................................................... .. 895
8. El progreso de la ciencia .............................. ....................... 896
9; Falsación lógica y falsación metodológica; saber de trasfondo y
«nuevos problemas» ............................................................ 897
10. Significación y criticabilidad de las teorias metafísicas .................. 899
11. Contra la dialéctica; la «miseria del historícismo››.'.................. 901
12. La sociedad abierta............................. .... ............... 902
13. Los enemigos de la sociedad abierta...... ....... ...................... ' 905
La epistemologíapostpopperiana..................................................
1. Thomas S. Kuhn y la estructura de las revoluciones científicas ....... .. 908
1.1. Paradigmas, ciencia normal y anomalías. 1.2; Las revoluciones
científicas. 1.3. El desarrollo ateleológico de la ciencia.
2. Imre Lakatos y la metodología de los programas de investigación
científica.................................................... ......................
2.1. Tres tipos de falsacionismo. 2.2. Los programas cientificos de
investigación. 2.3. Cómo avanza la ciencia.
911'
3. La epistemología anarquista de Paul K. Feyerabend ................... .. 915
3.1. La anarquía epistemológica en función delìprogreso. 3.2. El
anarquismo epistemológico y la historia de la ciencia. 3.3. La provo-
cación de Contra el método.
4. Larry Laudan y la metodología _de las tradiciones de investigación.
4.1. El objetivo de la ciencia consiste en resolver problemas. 4.2.
Qué son las tradiciones de investigación ;.................... ................
918
5. La cuestión del progreso en la ciencia ...................................... .. _920
19
908-
Indice
5.1. Criticas a la teoría de la verosimilitud de Popper. 5.2. El progre-
so de la ciencia en la perspectiva de Larry Laudan.
6. Epistemología y metafísica................................. _., ................_. 923
6.1. Cómo y por qué los epistemólogos contemporáneos defienden
la metafísica. 6.2. John Watlcins y la metafísica confìrmable e in-
fluyente.
7. Epistemologíay marxismo ...................................................... 927
7.1. Lakatos y el marxismo como programa de investigación degene-
rativo. 7.2. Feyerabend: la «sociedad libre» y el marxismo.
8. Epistemología e historiografía de la ciencia .............................. .. 930
8.1. El «porqué›› y el «córno›› de la historia de la ciencia. 8.2. Histo-
ria interna e historia externa. 8.3. Los problemas de la historia
popperìana de la ciencia.
Complemento: Losfilósoƒos españoles ......................................................._ 935
Apéndice ................................................................................................ 953
Tablas cronológicas .............................................................................._. 954
_I_3ibliografía ..................................................................................... 979
Indice de nombres................................................................................._ 1.005
20
PRóLoGo
«Ningún sistema filosófico es definitivo, porque la vida
tampoco es definitiva. Un sistema filosófico soluciona un
grupo de problemas históricamente dados y prepara las
condiciones para el planteamiento de nuevos sistemas. Así
ha sido siempre y siempre lo será.››
Benedetto Croce
¿Cuál es la justificación de un tratamiento tan amplio de la historia del
pensamiento filosófico y científico, dirigido a los centros de enseñanza
secundaria? ¿Es posible acaso -quizás se pregunte el docente, al observar
el tamaño de los tres volúmenes de la obra- afrontar y desarrollar, en las
escasas horas disponibles cada semana, un programa tan vasto y lograr
que el estudiante lo domine?
Sin lugar a dudas, si se mide este libro por el número de páginas, hay
que decir que es un libro extenso. Y no sólo esto: es el libro más exten-
so que se haya concebido y realizado hasta ahora, para su utilización en
los centros de enseñanza secundaria. No obstante, es oportuno recordar
aquí la razonable opinión de Terrasson, citada por Kant en el Prefacio a la
Critica de la razón pura: «Si se mide la extensión del libro no por el
número de páginas, sino por el tiempo necesario para entenderlo, de
muchos libros podría decirse que serían mucho más breves, si no fuesen
tan breves.››
En efecto, con mucha frecuencia los manuales de filosofía provocarían
mucho menos cansancio si tuviesen unas cuantas páginas más sobre una
serie de temas. En la exposición de la problemática filosófica la brevedad
no simplifica las cosas, sino que las complica y en ocasiones las vuelve
poco comprensibles o incluso del todo incomprensibles. En cualquier ca-
so, en un manual de filosofía la brevedad conduce fatalmente al simplis-
mo, a la enumeración de opiniones, a la mera panorámica de lo que han
dicho a lo largo del tiempo los diversos filósofos, cosa si se quiere instruc-
tiva, pero poco formativa.
La presente historia del pensamiento filosófico y científico pretende
abarcar tres planos. Primero el de aquello que han dicho los filósofos, es
'21
Prólogo
decir, plano que los antiguos llamaban «doxográfico›› (cotejo de opinio-
nes). Luego el de por qué los filósofos han dicho lo que han dicho, ofre-
cìendo un adecuado sentido de cómo lo han dicho. Finalmente aquel en
que seindican algunos de los efectos provocados por las teorías filosóficas
y científicas. _
El porqué de las afirmaciones de los filósofos nunca es algo simple,
puestoque a menudo los temas sociales, económicos y culturales se entre-
cruzan y se entrelazan de distintas formas con los temas teóricos y especu-
lativos, Se ha ido dando razón gradualmente del trasfondo del cual han
surgido las teorías de los filósofos, pero evitando el peligro de las reduc-
ciones socìologistas, psicologistas e historicistas (que en los últimos años
han alcanzado una hipertrofia exagerada, hasta el punto de vaciar de
contenido la identidad específica del discurso filosófico), y poniendo de
manifiesto el encadenamiento de los problemas teóricos y los nexos con-
ceptuales y, por tanto, las motivaciones lógicas, racionales y criticas que
en definitiva constituyen la substancia de las ideas filosóficas y cientificas.
_ Además, se ha tratado de ofrecer el sentidodel cómo los pensadores y
los cìentificos han propuesto sus doctrinas, utilizando con amplitud sus
propias palabras. A veces, cuando se trata detextos fáciles, la palabra viva
de los diversos pensadores ha sido utilizada-en el mismo nexo expositivo.
En otros casos, en cambio, se han efectuado citas de los distintos autores
(los más complicados y más difíciles) en apoyo de la exposición, y -según
el nivel, de conocimiento acerca del autor que se desee obtener- pueden
omitirse dichos textossin perjuicio para la comprensión de conjunto. Las
citas textuales de losdiferentes autores se han graduado de `un modo
acorde con la curva discente del joven que al principio se adentra en un
discurso completamente. nuevo y, por tanto, necesita la máxima sencillez.
Poco apoco, sin embargo, va adquiriendo las categorías del pensamiento
filosófico, aumenta su propia capacidad y puede enfrentarse en conse-
cuencia con un tipo más complejo de exposición y comprender el diferente
carácter del lenguaje con el que han hablado los filósofos. Por lo demás,
asícomo no es posible darse una idea del modo de sentir y de imaginar de
un poeta sin leer algunos fragmentos de su obra, resulta imposible hacerse
una ideade la.forma de, pensar de un filósofo, si se ignora totalmente el
modo en que expresaba sus pensamientos. `
Por último, los filósofosson importantes no sólo por aquello que di-
cen, sino también por las tradiciones que generan y que ponen en movi-
miento: algunas de sus-posturas favorecen el nacimiento de ciertas ideas,
pero, al mismo tiempo, impiden el surgimiento de otras. Por tanto los
filósofos son importantes por lo que dicen .y por lo que impiden decir. Éste
es uno _de aquellos aspectos que a menudo silencian las historias de la
filosofía y que aquí se ha querido poner de manifiesto, sobre todo al
explicar las complejas relaciones entre las ideas filosóficas y las ideas
científicas, religiosas, estéticas y sociopolítìcas.
El punto de partida de la enseñanza de_la filosofía reside en los proble-
mas que ésta ha planteado y plantea, y por tanto se ha buscado con
especial dedicación enfocar la exposición desde el punto de vista de los
problemas. A menudo se ha preferido el método sincrónico con.respecto
al diacrónico, si bien este último ha sido respetado en la medida de lo
posible. f
I Prólogo
El punto de llegada fde la enseñanza de la filosofía consiste en formar
mentes ricas en contenidos teóricos, sagaces en lo que respecta al método,
capacitadas para plante_`ar y desarrollar de forma metódica los distintos
problemas, y para leer de modo crítico la compleja realidad que las rodea.
A tal objetivo apuntan* precisamente los cuatro planos antesindicados,
que han servido para concebir y llevar a cabo toda la presente obra: crear
en los jóvenes una razón abierta, capaz de defenderse con respecto a las
múltiples solicitacionesšcontemporáneas de huida hacia lo irracional 0 de
repliegue hacia .posturas estrechamente pragmatistas o cientificistas..Y la
razón abierta es una razón que sabe que lleva a sí misma los factoresrde
corrección para todos los errores ,que -en cuanto que es una razón huma-
na- pueda cometer la fuerza para recomenzar itinerarios siempre
nuevos. f
Este tercer volumen se divide en catorce partes. Se llevó a cabo tal
división teniendo en cuenta la sucesión lógica y cronológica de losproble-
mas expuestos, pero con el propósito de ofrecer a los profesores unas
auténticas unidades didácticas, en cuyo ámbito, según los intereses y el
nivel de los alumnos, puedan llevar a cabo la elección más adecuada. La
amplitud del tratamiento no implica que haya que hacerlo todo, sino que
pretende brindar una amplia y variada posibilidad de elección y profundi-
zación.
En este tercer volumen se expone el desarrollo del pensamiento filosó-
fico desde Hegel hasta nuestros días._Lejos de situarse en la perspectiva de
considerar como realmente válida una sola filosofía, o de utilizar una
ideología científica como tribunal para condenar o absolver a los filósofos
del pasado, los autores de este libro, con el más profundo respeto por los
pensadores tomados en consideración, han querido reconstruir las situa-
ciones problemáticas, las teorías, las argumentaciones, los contrastes, las
polémicas y las consecuencias sociales y teóricas de las distintas construc-
ciones filosóficas que, entretejiéndose, ignorándose o incluso criticándose
recíprocamente, se desarrollan a partir del romanticismo para llegar hasta
el actual debate filosófico.
Por obvias razones, se ha dedicado un amplio espacio a las figuras
preeminentes: Fiehte, Schelling, Hegel, Feuerbach, Marx, Engels, Scho-
penhauer, Kierkegaard, Comte, Stuart Mill, Spencer, Ardigò, Nietz-
sche, Weber, James, Dewey, Croce, Gentile, Husserl, Heidegger, Jas-
pers, Sartre, Bergson, Russell, Wittgenstein, Freud, Popper, etc. Sin
embargo, puesto que tales pensadores han dado origen a una tradición
filosófica o se integran mediante sus aportaciones originales dentro de un
movimiento filosófico, se ha considerado oportuno presentarlos en el inte-
rior de aquellas tradiciones de pensamiento y de aquellos movimientos
filosóficos (0 en todo caso, relacionándolos con ellos), cuyos rasgos histó-
rico-sociales y teóricos se describen aquí. Así lo hemos hecho con'respecto
al romanticismo, el positivismo, el marxismo, el existencialismo, la feno-
menología, el neomarxismo, el estructuralismo, la escuela de Francfort, el
espiritualismo, las nuevas teologías, el neopositivismo, el personalismo,
etc. De este modo, las diferentes partes se configuran como' unidades
didácticas (ordenadas cronológica y/o lógicamente) de gran utilidad para
aquellos estudiantes y aquellos cursos que, si bien tienen que efectuar una
23
Prólogo
selección, poseen un instrumento que al menos les permite conocer en qué
ambiente histórico y teórico se sitúa un pensador.
Las principales características de este volumen III pueden resumirse en
los seis puntossiguientes:
1) Durante el tratamiento de los distintos pensadores y las diversas
corrientes se han tenido siempre en cuenta los hallazgos historiográficos
más recientes.
2) No se han dejado de lado pensadores (Trendelenburg, Cattaneo,
Scheler, Hartmann, Peirce, Vailati, Dilthey, Avenarius, Mach, Duhem,
Poincaré, Merleau-Ponty, Marcel, Blondel, Mounier, Bridgman, Piaget)
o ámbitos de pensamiento'(el personalismo, la fenomenología de la reli-
gión, la sociología del conocimiento, la teoría de la argumentación, la
psicología de la forma, la epistemología genética, Cl marginalismo o las
teorías económicas de Keynes) que se suelen descuidar y a los cuales, en
cambio, los autores de esta obra conceden una mayor relevancia.
3)'La historiografía más reciente ha puesto en claro las complejas
relaciones que van ligando paulatinamente la evolución de las ciencias
matemáticas, biológicas y físicas con la del pensamiento filosófico. Por
consiguiente, en este volumen se encontrará una exposición estructurada
de las teorías lógicas, matemáticas, físicas y biológicas que durante el siglo
pasado y en nuestro siglo se han entrelazado de maneras diversas con el
pensamiento filosófico. Si existe una ciencia de los filósofos, también exis-
te una filosofía de los científicos. Por tal motivo, en los capítulos referen-
tes a la historia del pensamiento científico, no aparecen largas y mudas
enumeraciones de científicos, títulos de libros o nombres de teorías cientí-
ficas. En cambio, se ha procurado trazar el origen y el triunfo de aquellos
resultados técnicos (por ejemplo, las geometrías no euclidianas, la teoría
de la evolución, la relatividad de Einstein, el descubrimiento de las para-
dojas de Russell, los teoremas de Gödel, etc.) que han mostrado la fuerza
suficiente para echar por tierra teorías científicas sobre las cuales se apo-
yaban importantes, influyentes y a menudo venerables teorías filosóficas.
4) El punto anterior aparecerá todavía con mayor claridad en las pági-
nas dedicadas ala historia de las ciencias humanas (psicología, sociología,
economía, lingüística, teoría de la historia, psiquiatría, antropología, psi-
coanálisis, etc.). En resumen, se ha dedicado una atención muy particular
al desarrollo de las ciencias: se .trata de una atención motivada por deter-
minados avances de las teorías filosóficas, en la medida en que algunas de
éstas para ser comprendidas exigen una comprensión de la evolución
de ciertas teorías científicas.
5) La historia de las teorías epistemológicas: empiriocriticismo, con-
vencionalismo, neopositivismo, operacionismo, racionalismo abierto (de
Bachelard), falibilismo (de Popper) y la epistemología de los postpoppe-
rianos, como por ejemplo Thomas S. Kuhn, Imre Lakatos, Paul K. Feyer-
abend, Larry Laudan, William W. Bartley In, Joseph Agassi, J. Watkins
o H. Albert, se halla vinculada con la historia de la ciencia en los siglos xtx
y xx. El amplio tratamiento concedido a las teorías epistemológicas se
debe al hecho de que cada vez nos damos más cuenta de que es imposible
afrontar las cuestiones teóricas de mayor relieve (¿es posible una raciona-
lidad distinta,.e incluso superior, a la de las ciencias?; ¿las ciencias huma-
nas son de veras ciencias?; ¿qué hay de científico en el marxì^.mo?; ¿puede
24
Prólogo
ser científica la historiografía y, en caso positivo, de qué manera?; ¿pode-
mos fundar racionalmente las normas y los valores?, y así sucesivamente)
sin una adecuada teoría de la racionalidad.
6) Hemos dedicado una amplia atención a las teorías lógico-matemáti-
cas, físico-naturalistas, psicológicas e histórico-sociales, pero no menos
atención se ha prestado en las páginas siguientes a los autores y movimien-
tos de pensamiento contemporáneos que están cargados de nociones y
teorías que en la actualidad constituyen instrumentos conceptuales indis-
pensables para la formación de una mente bien preparada y alerta. Se
trata de pensadores como Wertheimer y Piaget; Freud, Jung, Adler y
Rogers; Menger y Keynes; De Saussure y Chomsky; Malinowski; Perel-
man; o de movimientos filosóficos como el neomarxismo (ruso y alemán,
francés e italiano), la escuela de Francfort, las nuevas teologías (protes-
tante y católica), la filosofía del lenguaje de Cambridge y de Oxford, el
estructuralismo, o la hermenéutica de Gadamer. _
El volumen concluye con un apéndice que contiene como complemen-
to indispensable las tablas cronológicas sinópticas, una bibliografía elabo-
rada específicamente para los lectores de esta obra, y el índice de nom-
bres. Este apéndice ha sido realizado por el profesor Claudio Mazzarelli
(cf. p. 935) que, reuniendo su doble capacidad como profesor de enseñan-
za secundaria desde hace mucho tiempo y como investigador científico,
ofrece un instrumento que resulta a la vez eficaz y profundo. También se
deben al profesor Mazzarelli las páginas sobre Hartmann.
Los autores desean señalar de un modo particular su agradecimiento a
los colegas que han tenido la gentileza de leer algunas partes del presente
volumen y de brindar ciertos consejos.
El profesor Pietro Omodeo, catedrático dc zoología de la universidad
de Padua, leyó las partes referentes a la historia de la biología; el profesor
Giovanni Prodi, catedrático de matemáticas complementarias en la uni-
versidad de Pisa, leyó las páginas dedicadas a la historia de la matemática;
el profesor Salvo D'Agostino, que enseña historia de la física en la univer-
sidad de Roma, leyó las partes concernientes a la historia de las ideas
físicas; el profesor Vittorio Somenzi, catedrático de filosofía de la ciencia
en la universidad de Roma, leyó todos los capítulos sobre las teorías
epistemológicas; el profesor Fabio Metelli, catedrático de psicología en la
universidad de Padua, revisó las páginas sobre psicología de la forma; el
profesor Guido Petter, catedrático de psicología de la edad evolutiva en la
universidad de Padua, leyó las páginas dedicadas a la epistemología gené-
tica de Jean Piaget; el profesor Luciano Pellicani, catedrático de sociolo-
gía de la política en la universidad de Nápoles, leyó las secciones referen-
tes al desarrollo de la sociología y la economía. Nuestra gratitud se dirige
también al profesor Franco Blezza (universidad de Padua) por la colabo-
ración prestada en el tratamiento de la física contemporánea, y al profesor
Lauro Galzigna, catedrático de bioquímica de la universidad de Padua,
que tuvo la cortesía de redactar para este libro el apartado correspondien-
te al código genético.
Estos ilustres colegas, con sus sugerencias y sus críticas, contribuyeron
sin ninguna duda ~a mejorar la obra.
Como es natural, la responsabilidad de las eventuales deficiencias sólo
puede atribuirse a los autores del texto.
25
Prólogo
Los autores quieren expresar un agradecido recuerdo a la memoria del
profesor Francesco Brunelli, que fue quien concibió y promovió la iniciati-
va de esta obra. Llegó a dar comienzo a la realización tipográfica del
proyecto, poco antes de su repentina desaparición. Hacen patente al doc-
tor Remo Bemacchia su más reconocido agradecimiento, por haber lleva-
do la iniciativa hasta su culminación, ayudando y convirtiendo en realiza-
bles las numerosas innovaciones que se han aportado ala presente obra.
Por último, expresan-un particular agradecimiento ala doctora Clara For-
tina, quien, en calidad de redactora, se entregó al mejor éxito de la obra,
mucho más allá de sus 'deberes' de oficio, con dedicación y apasiona-
miento.
Los. autores desean asumir en común la responsabilidad de toda la
obia, ya *que han trabajado en conjunto (cada uno de acuerdo con su
propia capacidad, su propia sensibilidad y sus propios intereses) para la
mejor realización de cada uno de los tres volúmenes, con plena unidad de
espíritu-y de propósitos.
Los autores
›_.
PARTE PRIMERA
EL Mov11v_nENTo Ro1v1ÁNr1co'YaLA FORMACIÓN
DEL IDBALISMO
l
«El hombre es un dios cuando sueña, 'y un mendigocuandno
reflexiona.››
Friedrich Höldcrlin
v
«A uno le cupo en suerte el levantar el velo de la diosa de
Sais. Y bien, ¿qué vio? _
Se vio -maravilla de las maravillas- a sl mismo.››
Novalis (Friedrich von I-lardenberg)
«En todas las cosas está presente lo eterno.››
Wolfgang Goethe
«Sólo puede ser artista aquel que posee su propia religión,
es decir, una intuición de lo infinito.››
Friedrich Schlegel
u
u
Goethe (1749-1832): fue la gran figura dominante en la época romántica con su poesía, su
estilo de vida y su pensamiento. También ejerció un influjo extraordinario sobre la política
cultural de la época
CAPíruLo I
EL ROMANTICISMO Y LA sUPERAcIóN DE LA ILUSTRACIÓN
1. EL MovIMIENTo RoMÁNr1co Y sus REPRESENTANTES
1.1. Un antecedente del fenómeno romántico: el «Sturm und Drang»
Es probable que el final de un siglo y el comienzo de otro jamás se
hayan caracterizado por unos cambios tan radicales y tan nítidos como los
ue se dieron en los últimos años del si lo XVIII los rimeros del xtx. En
el campo socio-político ocurrieron acontecimientos que'15an a Imprimir
un nuevo curso en la historia. En 1789 estalló la revolución francesa' en
medio del entusiasmo delos intelectuales más ilustrados pertenecientesa
todas las naciones europeas. Sin embargo, la revolución adquirió muy
pronto un sesgo que tomó a todos por sorpresa.¦"En 1792 se abolió en
Francia la monarquía y se proclamó la república. En 1793 el rey'fue con"-
denado al atíbulo en a osto de ese mismo año se inició el ran Terror,P Y 3 , . . . . . -5 .que produjo centenares de victimas. La guillotma (antiguo instrumento
para la ejecución de la pena capital, convenientemente modificado por el-
médieo Guillotin, miembro de la Asamblea Constituyente, para hacerlo
más eficaz y más rápido) se convirtió en un siniestro símbolo de muerte,
que ponía un final a las grandes esperanzas filantrópieas, huma_r_Ii_tarias y
pacifistas que había provocado el siglo de las «luces››. El ascenso de Napo-
león, que culminó en 1804 con la proclamación del Imperio, y las campa-
ñas militares que asolaron Europa a sangre y fuego, conmocionando la
estructura política y social del viejo continente e-i_nstaurando un nuevo
despotismo, hicieron naufragar las esperanzas ilustradas que .aún per-.
duraban.
Antes de que estallase la revolución en Francia, en la década que
transcurre entre 1770 y 1780, se producían en Alemania las primeras nota-
bles modificaciones del clima cultural, que debían llevar de inmediato, en
lo que quedaba de siglo, a una completa superación de la ilustración. El
movimiento que en los años setenta llevó a cabo tales modificaciones se
conoce con el nombre Sturm und Dmng, que significa en alemán «Tem-
pestad y asalto» o, mejor aún, «Tempestad e ímpetu». Tal denominación
procede del título de una obra de teatro escrita en 1776 por uno de los
representantes de este movimiento, Friedrich Maximilian Klinger (1752-
29
El romanticismo
1831), y al parecer fue A. Schlegel el primero que la utilizó para
designar dicho movimiento, a principios del -siglo xix. Ambos términos
constituyen probablemente una endíadis -expresan una única noción me-
diante dos palabras- y por lo tanto su sentido sería «ímpetu tempestuoso»,
«tempestad de sentimientos», «caótico hervor de sentimientos». (El título
original que Klinger puso a su obra fue Wirrwarr, «confusión caótica››.)
Las posturas y las ideas de fgpdo de este movimiento son las si-
¿'J__ _
ä 1 I 'f Se redescube se exalta a si ., _ ae I como fuerza omni otente
creadora de vida.EÍ enio como fue a ori inaria está li ado íntima-
menfe con la naturgileza; crea de fifiã forma' análoga a la naturaleza; 2
or o tanto no recibe desde fuera sus re las sino ue es re a mismo.
CZ)-Ã la conce ción deísta de la Divinidad como Intelecto o Razón su re-
j mafcaractenlstica de la ilustración, empieza a contraponerse el panteísmo,
mientras ue a re i iosi a asume nuevas formas 'ue se mani estan en
s"'v'_""q""e i t ' d 1 ' 'i ria ' ' ie"ìlël Pi-6"u rsiones ex remas a raves e es in u i nico paganizan -
meteo de Goethe o eii el herísmo cristiano H Isanto del mrtir roio
Íe ciertos personajes de Michael Reinhold Lenz (1751-1792;? El senti-
miento atriótico se ex resa mediante el o io al tirano, Ia exa ación de la
libertad y el deseo de infringir las convenciones y las leyes externascì Son
muy aprecia os los sentimientos ertes y las pasiones arre ata as e impe-
(tuosas, asi como os caracteres rotundos.
Sobre este movimiento habían influido algunos poetas ingleses, como
James Macpherson (1738-1796), que había publicado unos Fragmentos de
poesía antigua, atribuyéndolos a Ossian, un antiguo bardo. Además dela
poesía de^Ossian, habia influidoel redescubrimiento de Shakespeare,
autor sobre el cual Lessing ya había llamado la atención de los alemanes.
Rousseau también había provocado una gran impresión con su nuevo
seiitimieiito de la naturaleza, su nueva pedagogía y sus ideas políticas `(el
Estado como contrato social). Entre los escritores de lengua alemana,
además de Lessing, ejerció influencia sobre los Stürmer en especial el
poeta Friedrich Gottlieb Klopstock (1724-1803), con su valoración eleva-
da del sentimiento.
Si el Sturm und Drang'sólo hubiese estado constituido por figuras
como la.de Klinger (que acabó su vida aventurera como general del ejérci-
to ruso) o la de Lenz (que murió en Rusia enloquecìdo y en la más absolu-
ta miseria), que dejaron un legado literario de un valor muy limitado; el
movimiento habría manifestado una relevancia escasa. El Sturm recibió
sentido relevancia histórica su ranacional racias a ersona`es de la
talla de äoeth Schiller o los filósofos Ílacobi Herder en sus rimeras
obras poéticas y literarias. Cabe afirmar gue las fases más significativas del
movimiento tienen como rota onista al ro io Goethe rimero en Es-
trasburgo y luego en Francfort. Con el tragjagp ge gìpgglie a Weimar
(1775) comienza la fase e decadencia del movimiento.
30
El Sturm un Drang
1.2. El papel desempeñado por el clasicismo con respecto al «Sturm und
Drang» y el romanticismo
Algunos especialistas han comparado el Sturm und Drang con un -
especie de revolución que anticipó de forma verbal en tierras germánicaz
lo que sería poco después en el campo político la revolución francesa. En
cambio, otros especialistas han considerado que se trataba de una especie
de reacción anticipada ante la revolución iriisma, en la medida en' quei,
aparece como una reacción contra la ilustración, que fue coronada- por`la1
revolución francesa. En efecto, como se ha advertido con razón,-se trata
de una recuperación del espíritu alemán después de siglos de sopor, y del
surgimiento de algunas actitudes peculiares del ánimo ïgermánicofi En
cualquier caso, nos encontramos ante un preludio del roman_ticiSmo,šaun-
que inconexo e inmaduro. El historiador de la filosoiïa G. de Ruggieró
expresó esta noción de forma particularmente afortunada. Afirma: «Las
manifestaciones del Stúrm und Drang ofrecen, en estado fluido e incan-
descente, el metal en bruto que habrá de ser templado por el arte ,y la
filosofía alemana.›› Y añade:.«La importancia del Sturm no es la de un,
episodio aislado ycircunscrito, sino la de. una expresión espiritual colecti-
va, que emerge de todo un pueblo. No sólo Klinger y Lenz, sino también
Herder, Schiller, Goethe [a los que se podría agregar Jacobi] pasaron por
el Sturm: los primeros se demoraron allí en. exceso y por ello fueron
rápidamente superados; los segundos, en cambio, lograron otorgar forma
a lo informe, y orden y disciplina al caótico contenido de la propianatura-
leza. 'Para nosotros resulta particularmente importante la experiencia de
estos últimos, porque nos permite estudiar en los individuos dos: fases
sucesivas y opuestas de un mismo proceso histórico. No constituye una
simple forma figurada de hablar el decir que el Sturm representa la juven-
tud desordenada, y el clasicismo, lacoherente y serena madurezdel alma
alemana. El Sturm es realmente la juventud de Herder y Goethe, que se
alza_como símbolo de la juventud de todo un pueblo, y la victoria 'sobre
este posee un significado personal, que concede un fundamento másjnti-
mo y sólido a la crisis del alma colectiva.›› "
En el texto que acabamos de citar se nombra el clasicismo, _qu__e;actuó
como corrector de la incoherencia y el talante caótico de los Stüriñer. =En
efecto, e c asicismo posee una gran importancia para la formación del
espíritu de la época que estamos estudiando. Paulatinarnente, se va impo-
niendo como antecedente e incluso como un componente más del_.roman-
ticismo o, en cualquier caso, como uno de sus po1os~dialécticos,lo cual n`o_s
obliga a hablar de él, aunque sea de manera sucinta. `
Sin ninguna duda, el culto a lo clásico no era algo ajeno al siglo xvm
ilustrado. Empero, se trataba de un clásico artificial, repetitivo y carente
por lo tanto de alma y de vida. Johann Winckelmann (1717-1768), en sus
escritos sobre el arte antiguo, publicados entre 1755 y 1767, ,ya había
expuesto las premisas necesarias para superar las limitaciones del clasicis-
mo como mera repetición pasiva de lo antiguo. En realidad, a primera
vista, una de sus máximas parecería afirmar lo contrario: «Para nosotros,
el único camino para convertirnos en grandes y_, si fuese posible, ir_iimi_ta-
bles, consiste en la imitación de1os'antiguos.›› Sin embargo, esta imitacion
que vuelve inirnitables a quienes la practican consiste en recuperar la
'31
El romanticismo
perspectiva de los antiguos, aquella perspectiva que supieron adquirir
Miguel Angel y Rafael, y que les permitió alcanzar «en su origen el buen
gusto» y redescubrir «la regla perfecta del arte». Es evidente, entonces,
que ara Winckelmann la imitación de lo clásico ' entendida no sólo
lleva a la naturaleza sino también a la Idea: «Los conocedores los imita-
dores de las obras griegas hallan en estas obras maestras no sólo el as ecto
mas Bello de la nafuraleza, sino también al o más ue la naturaleza
detenninadas bellezas ideales de ella, ue... están com uestas or fi uras
creadas sólo en el intelecto.›› Esta Idea es «una naturaleza superior», la
verdadera naturaleza. Por lo tanto, se justifican estas importantes conclu-
siones: «Si el artista se basa en estos fundamentos y deja que su mano y
sus sentimientos sean guiados por las reglas griegas de la belleza, se coloca
en el camino que le conducirá sin errores a la imitación de la naturalezá.
Los conceptos de unidad y perfección naturales, propios de los antiguos,
purificarán sus ideas sobre la esencia separada de nuestra naturaleza y las
harán más sensibles. Descubriendo las bellezas de nuestra naturaleza,
sabrá unirlas con lo perfectamente bello, y con la ayuda de las fomias
sublimes que siempre están presentes en él, el artista se transformará en
regla para si mismo.›› p
Éste es el untode artidadel neoclasiismo romántico Comoexplica
con muc o acierto L. Mittner -insigne istoriador ela iteratura alema
na-,.«tendría que formarse orgánicamente a través de la cultura alemana,
al igual que se había formado orgánicamente -según Winckelmann- el
clasicismo griego. En dicha cultura existía la aspiración a un clasicismo
que no fuese copia y repetición, sino misteriosa y milagrosa palìngenesia
de los supremos valores de la antigüedad». Un «renacer de lo clásico» en
el espíritu alemán y mediante el espíritu alemán, gracias a la perenne
juventud dela naturaleza y del espíritu: ésta será la suprema aspiración de
muchos escritores. Mittner agrega: «Todo el clasicismo alemán, salvo con-
tadísimas realizaciones supremas, oscila entre dos tendencias opuestas,
imitación mecánica del arte griego, arte clasicista más que esencialmente
clásico y aspiración a un clasicismo nuevo y' genuino, inspirado por el
espíritu griego, pero surgido mediante una evolución orgánica desde
el espíritu alemán.›› En consecuencia, el neoclagicismo aspira a cambiar la
naturaleza en forma la vida en arte no repitiendo sino renovando lo
Fi los rie osgue icierop g g .
No obstante, hay que señalar otros dos puntos muy importantes.
En primer lugar, hay que advertir el tipo de influencia'que ejerció el
cla cismo sobre los mc`ores re resentantes del Sturm. a clave del es íri-S1 J P L±¬ __._______E,_...
tu clásico es la medida, el límite, el equilibrio. Herder, Sc iller y Goethe 1
trataron de encauzar as inestructuradas fuerzas del Sturm und Drang en
función de este orden y esta medida. Precisamente. del choque entre la
tempestuosidad y la impetuosidad del Sturm y la noción de «líinite››, que
es el elemento característico de lo clásico, nacerá lo romántico en sentido
estricto.
En segundo lugar, debe senalarse que el renacimiento de los griegos
también será esencial para la filosofía y no sólo para el arte. Schleierma-
cher traduce los diálogos platónicos y los vuelve a introducir en lo mas
vivo del discurso filosófico. Schelling tomará de Platón conceptos tan fun-
damentales como la teoría de las Ideas y la noción de alma del mundo.
32
Complejidad del fenómeno
Hegel elabora un grandioso sistema gracias al redescubrimiento' del anti-
guo sentìdo clásico de la dialéctica, 'con el añadido de`una novedad: el
elemento que él llama «especulativo»_ Hegel se enriquece enormemente a
través del constante coloquio con los filósofos griegos, y no sólo mediante
su coloquio con los grandes pensadores consagrados por una tradición
bimilenaria, sino también con los presocráticos, en especial, con Heracli-
to, cuyos fragmentos aprovechó en su Lógica casi en su totalidad. Por lo
tanto, sin el componente clásico no cabría explicar ni la poesía ni la filoso-
fía~de la nueva época, y lo que acabamos de decir nos ha brindado los
elementos necesarios para determinar cuáles sonlos rasgos esenciales del
romanticismo.
1.3. La complejidad del fenómeno romántico y sus rasgos esenciales
Definir el romanticismo constituye una empresa bastante difícil, y hay
quien dice que resulta imposible. Alguien ha-calculado que se han ofreci-
do más -de 150 definiciones de este fenómeno y Mittner recuerda que el
mismo`F. Schlegel, el 'fundador del círculo de los románticos, escribía a su
hermano que no.podía enviarle su propia definición dela palabra «román-
tico», porque «ocupaba 125 horas». Dejando a un lado las paradojas, uno
puede orientarse con cierta comodidad en esta intrincada cuestión si se
establecen una serie de perspectivas y de categorías que sirven ara deter-
minar los rasgos esenciales del fenómeno del rop1anticismo.@pEn primer
lugar, conviene explicar el ori en etimológico del término, desdeun punto
de vista filológico y léxicm@ luego habrá que determinar los límites
cronológicos y geográficos de fenómeno@será necesario después espe-
cificar cuál es su categoría psicológica o moral, como fue llamada, es
decir, aquel modo peculiar de sentir y a ellas características psicológicas
que son propias del hombre románticmë es necesario establecer el con-'
tenido o contenidos conceptuales que el hombre romántico asume como
propios; habrá que determinar a continua ión las formas artísticas a
través de as cuales se manifiesta todo esto;@finalmente nos hemos de
preguntar en que sentido se puede hablar y se abla de «filosofía románti-
ca». Cosa que en nuestro contexto posee una gran importaiicia. A conti-
nuación vamos a ir solucionando cada uno de estos problemas,__siguiendo
'el rdenen que los hemos expuesto.
W Lapalabra «romántico» posee una historia larga y complicada, que
se inicia en un período anterior al que estamos estudiando y en el que ad-
quiere un significado técnico. A.C. Baugh, autor de una famosa historia
de la literatura inglesa, la resume en los siguientes términos: «El adjetivo
“romántico” aparece por primera vez en Inglaterra hacia mediados del
siglo xvn, como término utilizado para indicar algo fabuloso, extravagan-
te, fantástico e irreal [como se encuentra, por ejemplo, en algunas novelas
caballerescasj. Fue redimido de esta connotación negativa durante el siglo
siguiente, en el que se utilizó para indicar escenas y situaciones placente-
ras, como las que aparecían en la narrativa y en la poesía “románticas” [en
el sentido antes indicado]. Gradualmente el término “romanticismo” lle-
gó a indicar el resurgir del instinto y de la emoción,-que el racionalismo
predominante en el siglo xviii jamás había suprimido del todo.›› F. Schle-
33
El romanticismo
g_e_Lvinculó lo romántico con el romance y con lo que ése había significado
paulatinamente en las expresiones épicas y líricas de la edad media y en la
moderna novela psicológica, autobiográficae histórica. Para Schlegel, ro-
mántica era la moderna forma de arte, que, en cuanto evolución orgánica
que abarcaba desde el medioevo hasta su tiempo, poseía una clave pecu-
liar, su propia esencia específica, una belleza y una verdad propias, dife-
rente de las griegas. Esto, sin embargo, nos remite a otros problemas, que
hemos de exponer más adelante.
Y Como categoría historiográfica (y geográfica), el romanticismo de-
sign el movimiento espiritual gue incluia ng solo la poesia y la filosofia
sino también las artes figurativas y la musica, y gue se desariolló en Euro-
p_a entre finales del siglo xviii y la primera mitad del xix. En Inglaterra
pue en detectarse algunos sintomas anticipa ores e a movimiento, pe-
ro la verdad es que éste lleva una acusada impronta que proviene sobre
todo del ánimo y del' sentir germánicos. Se expandió por toda Europa:
Francia, Italia, España _y, por supuesto, Inglaterra. En cada uno de estos
países el romanticismo asumió rasgos peculiares y se vio sometido a trans-
'f ` . E t d l ' b 1 e to ad' máticoormaciones n o os os casos, sin em argo, e mom n i
del romanticismo es el ue está a caballo entre los si los xviii xix en
Ãlemania, en los círculosconstituidos por los hermanos Schlegel en .Iena
, lue o en Berlín
e u a du an e ste eriodo en estosEnel fenómeno qu tiene l g r r t e p ' y
pai s, pero sobre todo en Alemania, pueden descubrirse, aunque sea con
las debidas cautelas críticas, ciertas constantes que implican una especie
de mínimo común denominador. Este puede h llarse en rimer lugar, en
lo que constituye el estado de ánimo,[Ia aetitãd psicolóàieall el ethoso
clave espiritual del hombre romántico. La actitud romántica consiste en
pr_i_a condición de disensión interior, en un sentimiento de aflicción siem-
preÍ`iì'isati'sfecha, que se halla en contraste con la realidad y que aspira a
algo más,__qu_e sin embargo' se le escapa una y otra vez. Mittner ofrece la
más eficaz descripción del romanticismo como categoría psicológica y se
expresa en estos términos: «En calidad de hecho sicológico, el sentimien-'
to romántico no es aquel gue se afirma por encima de'I'a"'raz'"on, o un
sentimiento de particular inmediatez intensidad o violencia. Tam oco es
lo llamado sentimental es decir, un sentimiento melancólico-contem at'-
vo° es ' bien un hecho de sensibilidad, el hecho uro sim le de la'
sensibilidad, cuando esta se traduce "en" un estadode excesiva o ermane -
te im resionabilid d irritabilidad y reactividad. En la sensibilidad román-
tica plëdñfiina el amor por la irresoluciòn y las ambivalepeias_,_|g inguie-_
tud y el desasosie o ue se com lacen en ellos mismos y en ellos mismos
se agotan.›› El término Sehnggglit se ha convertido en el más típico -es casi
un término técnico- para expresar estos estados de ánimo, y su traducción
más aproximada es «recogco¡pio» (los sinónimos «deseo ardiente»,
«ansia››, «anhelo apasionado», son menos representativos). Mittner tam-
bién explica muy bien este términoy el concepto correspondiente: «La
palabra más característica del romanticismo alemán, Sehnsucht, no'es la
Heimweh, la “nostalgia” (“añoranza”, deseo del regreso a una felicidad
antes poseída o, por lo menos, conocida y deterniinable); en cambio, se
trata de un deseo que jamás puede lograr su propia meta, porque no la
conoce y no quiere, o no puede, conocerla: es la búsqueda (Sucht) -del
34
Complejidad del fenómeno
deseo (Sehnen). Pero Sehnen con mucha frecuencia también significa
un deseo irrealizable porque es indefinible, un desear todo y nada al
mismo tiempo; no por azar Sucht fue reinterpretado como [. . .] un Suchen,
un buscar; y el Sehnsucht es realmente una búsqueda del deseo, un desear
el desear, n_n deseo sentido como algo inextinguible y que 'precisamente
por fsto halla en sí mismo su propia y plena satisfaccìón.››
è, Sin embargo, no es suficiente con esto. Hay que relacionar la cate-
goria psicológica romántica con la categoría del gpntenido ideal y concep-
tualdel romanticismo. En el perío o a que nos estamos refiriendo existen
defeïminadas ideas y representaciones que en la mayoria de los casos
están asociadas con aquel sentir que hemos mencionado, aunque, como se
ha af' mado reiteradamente, el romanticismo no es un sistema concep-
tal. TOCl0át'CC 'Ctn dd°f'°t l -u or m ni o xperim n au ase ein ini o, y aque reconco
mio ue es deseo irrealiza e- o es justamente or ue o ue en rea idad
ansia es lo Infinito. Quizá nunca se baya liablado tanto de «infinito» como
en esta época, entendiéndolo de maneras muy diversas. El romántico
expresa esta tendencia hacia lo Infinito como un Streben, es decir como un
perenne tender, que jamás conoce pausa, porque las experiencias huma-
nas son todas ellas finitas, en la medida en que su objeto siempre es finito
y hay que trascenderlas. A estepropósito es muy ilustrativa la razón por la
cual el protagonista del Fausto goethiano -una de las creaciones más re-
presentativas de este período- llega a la salvación: se salva porque dedicó
íntegramente su existencia a este perenne Streben. Lo Infinito es el senti,-
dl'dlf"tEt tttlf'lf' l 'o araiz e o inio. n ese uno ano a iosoia como a oesia
coinciden plenamente: la filosofia debe captar y mostrar el nexo gue vin-
cula o Infinito con lo finito mientras ue el ar e e e llevarlo a cabo¿__l_a
Iobra de arte es lo infinito due se manifiesta a través de lo finitoä›_I_.._a
naturaleza asume una importancia fundamental, y se ljbegg* tptalmente de
la concepción mecanicista-ilustrada. Es congebida ahora como .vida que
crea etegnamenie y en la cual la muerte no es más gue «un artificio para
poseer más vida» (Goethe). La naturaleza es un gran organismo por com-
pleto afín al organismo humano, es un móvil intercambio de fuerzas gue,
obrando desde dentro, genera todos los fenómenos y, por lo tanto tam-
` ' la fuerza de la naturaleza es la fuerza misma de lo divinobien al hombre:_ ' _ .
«¡Sagrada naturaleza! -exclama Höldcrlin-. Siempre eres igual en nií y
fuera de mí, a lo divino que hay en mí.›› Schelling dirá que la naturaleza es
vida que duerme, inteligencia petrificada, espíritu que se transforma en
cosa visible. Se recupera y se potencia en gran me 'da el antiguo sentido
griego de la Physis y de la naturaleza renacentista@ Estácstrechamente
l' ado e te ent'do de l naturaleza el sentid n`co el nt`d d li a s s i a o i , se i o e a
pertenencia al Quo-Todo, el-sentido de ser un momento orgánico de
la totalidad. ' ' ' '
la inversa- e ` . ' " '
El Todo se refleja de algun modo en el hom re, asi como -a
l hombre se refleja en el Todo Un pasaje de Holderlin puede
suministrarnos un ejemplo muy claro: «Ser uno con el Todo, este es el
vivir de los dioses; esto es el cielo para el hombre. Ser uno con todo lo-que
vive, y volver, en un feliz olvido de sí mismo, al todo de la naturaleza, tal
es el punto más elevado del pensamiento y de la alegría, es la sagrada
cumbre de la montaña, es el lugar de la.eterna calma, donde el mediodía
pierde su bochorno, se desvanece la voz del trueno, y el-mar que se agita y
se llena de espuma recuerda las ondas de un campo de trigo. ¡Ser-uno con
35
reglas de un artista que esta embelesado por su Urania, la ferrea fatalidad
renuncia a su poder, la muerte desaparece de la sociedad de las criaturas,
y la indisolubilidt d y la eterna juventud hacen que el mundo se vuelva
, 'G
«La naturaleza posee un instinto artistico: por eso resulta ocioso distinguir
entre naturaleza y arte. Todo lo más, se distinguen en el poeta, por el
hecho de que son íntegramente intelectuales y no pasionales, y de que se
convierten de manera involuntaria en fenómenos musicales, poéticos»;
«Sin genialidad no existiríamos todos nosotros. En todo es necesario el
El romanticismo
todo lo que vive' Con estas palabras la virtud se desprende de su austera
coraza, el espíritu humano deja su cetro y todos los pensamientos se
dispersan ante la imagen del mundo eternamente uno, al igual que las
feliz y hermosm@ El enio la creación artística son elevados a su rema
expresión de lo erdadero y lo Absolfito. Ñovalis, por su parte, escribe:
genio››; «La poesía sana las heridas asestadas por el intelecto»; «El poeta
com rende la naturaleza me`or ue el científico» El enio ara Novalis.._..2__.._____,_ _ J Q ______f,, -_ 8 ›P ›
se convierte en «instinto magico», «piedra i osofal» del espíritu, aquello
que puede convertirse en todo. Sclielling transformará el arte (cf. p. 87s)
en órgano supremo de la sabiduría trascendental.®Los románticos expe-
rimentan, además, nn yigorosísimo anhelo de libertad, gue para muchos
de ellos expresa el fondo mismo de la realidad, y por lo tanto la aprecian
en toda§ sus manifestaciones. En Enrique de Oƒterdingen, Novalis escribe:
«Toda cultura conduce a aquello que sólo puede calificarse de libertad, ya
que con este término debe desígnarse no un simple concepto, sinoel
fondo activo del ser todo. Tal libertad es magisterio. El maestro ejerce
plenos poderes, de acuerdo con un designio y en una secuencia determina-
da y meditada. Los objetos de su arte son suyos a discreción y no se ve
obstaculizado ni impedido por ellos. Esta libertad, o magisterio, o domi-
nio, es la esencia, la causa de la conciencia. En ella se pone de manifiesto
la sagrada individualidad, el inmediato obrar de la personalidad, y todos
los actos del maestro son al mismo tiempo una revelación del mundo delo
alto, simple, manifiesto, son palabras de Dios.» Fiehte convertirá la liber-
tad en punto focal de su sistema el mismo Hegel considerará que la
libertad es la esencia, del Espíritu.ôEn general, la religión se ve revalori-
zada colocada mu or encima del nivel al ue l había reducido l
ilustración. n la ma oría de los casos, se ie a e la reli ión es una
relación del hombre con lo In inito y o Eterno. Hay un dato de liecho que
resu ta particularmente ilustrativo: casi todos los representantes más nota-
bles del romanticismo experimentaron fuertes crisis religiosas, y momen-
tos de intensa religiosidad: desde Schlegel hasta Novalis, desde Jacobi a
Schleiermacher, Fiehte y Schelling. En Hegel la religión es el momento
más elevado del Espíritu, únicamente superado por la filosofía. Y se con-
sidera que la religión cristiana es la religión por excelencia, aunque en-
tendida de modos divcrsos®Eii elparágrafo anterior ya hemos hablado
del componente que representa la cultura griega y de la influencia del
elemento clásico. Recordemos que se trata de una ecia- focada desde
esta nueva sensibilidad y" notablemente idealizadaìNo es este el lugar
apropia o para alion ar en otros temas más cspecí icos, por ejemplo, el
amor a los orí enes, el sentimiento nacional, o el renacido interes' pgr la
edad media en encral por la historia. Es suficiente con mencionar estos
factores, sobre los que Tendremos que volver más adelante.
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  • 1. GIOVANNI REALE y DARIO ANTISERI HISTORIA DEL PENSAMIENTO FILOSOFICO Y CIENTIFICO< Tomp TERCERO DEL ROMANTICISMO HASTA HOY BARCELONA EDITORIAL HERDER 1988
  • 2.
  • 3. Versión castellana de JUAN Anonés lctssms. de ia obra de Giovanni Ria/mz y Dmuo Amisem. Il pensíero occidemalc dallc arigíni ad oggi. torno lll. Bditricc La Scuola. Brescia "l984 Ilustraciones: Arborio Mella, Ballarin Bild, Costa Farabola Garzant' L R' L Prohibida la reproducción total o parcial dc esta obra. el almacenamiento cn sistema informático y la transmisión cn cuaiquicr forma o medio: cicctrónico. mecánico. por fotocopia, por registro n por . . 1. orcs wa. ottc Mittncr.Graf Tomsich © 1983 Erlirrice La Scuola, Brescia © 1988 Editorial Hcrdcr S./1., Barcelona otros métodos. sin cl permiso previo y por escrito de los titulares del Copyright Es raoi-¡ao/m ISBN 84-254-1591-8, tomo III, rústica ISBN 84-254-1592-6, tomo III, tela _ISBN 84-254-1541-1, obra completa. rústica ISBN 84-254-1593-4, obra completa, tela DEm`›srro i.t:G›|.: B. 25.777-1988 Pnn~m=.n ¡N Sr/un Ga/u=|=sA - Nápoles. 249 - 08013 Barcelona
  • 4. Prólogo ÍNDICE O o Q ~ I I U o r O I I 0 0 0 U 0 o O c o 0 I U I r . D I I I I U o O 0 0 O O 0 0 ¢ 0 0 Q w v I o U 0 0 O 0 I 0 U Q O Q 0 U Q Q u o n Q a c Q J 0 O O 0 I 0 0 0 l O ¡ U I I I U0 PARTE PRIMERA EL MOVIMIENTO ROMANTICO Y LA FORMACIÓN DEL IDEALISMO I El romanticismo y la superación de la ilustración............................. .. El movimiento romántico ysus representantes............................. 1.1. Un antecedente del fenómeno romántico: el Srurm und Drang. 1.2. El papel desempeñado por el clasicismo con respecto al Sturm und Drang y el romanticismo. 1.3. La complejidad del fenómeno romántico y sus rasgos esenciales. Los fundadores de la escuela romántica: los Schlegel, Novalis y Schleiermacher. El poeta Höldcrlin ........................................._ 2.1. La constitución del circulo de los románticos, la revista «Athe- naeum» y la difusión del romanticismo. 2.2. Friedrich Sehlegel, el concepto de «ironia›› y la interpretación del arte como forma supre- ma del espiritu. 2.3. Novalis: desde el idealismo mágico al cristianis- mo como religión universal. 2.4. Schleiermaclier: la interpretación romántica de la religión, el resurgir de Platón y la hermenéutica. 2.5. Höldcrlin y la divinizaeión de la naturaleza. La posición de Schiller y de Goethe .......................................... . 3.1. Schiller: la concepción del «alma bella» y de la educación estética. 3.2. Goethe y sus relaciones con el romanticismo. Otros pensadores que contribuyeron a la superación y a la desapa- rición de la ilustración ........................................................... 4.1. I-Iamann: la rebelión religiosa contra la razón ilustrada. 4.2. Jacobi: la polémica contra Spinoza y la revalorización de la fe. 4.3. I-Ierder: la concepción antiilustrada del lenguaje y de la histo- ria. 4.4. Humboldt, el ideal de humanidad y la lingüística. Los debates acerca de las aporías del kantismo y los precursores del idealismo (Reinhold, Schulze, Maimon y Beck) .................... .. Lafundación del idealismo: Fiehtey Scheiling.................................. 1 Fiehte y el idealismo ético ................... .......................... .. 1.1. Su vida y sus obras. 1.2. El idealismo de Fiehte como explicita-
  • 5. Índice n 2. ción del fundamento del eriticismo kantiano. 1.3. La doctrina de la ciencia y la estructura del idealismo en Fiehte. 1.3.1. El primer prin- cipio del idealismo fichteano: el «yo» se pone a si mismo. 1.3.2. El segundo principio del idealismo fichteano: el «yo» opone a si mismo un «no yo». 1.3.3. El tercer principio del idealismo fiehteano: la limitación recíproca y la oposición en el «yo›› entre el «yo›› limitado y el «no yo» limitado. 1.3.4. La explicación idealista de la actividad cognoseitiva. 1.3.5. La explicación idealista de la actividad moral. 1.4. La moral, el derecho y el Estado. 1.5. La segunda fase del pensamiento de Fiehte (1800-1814). 1.6. Conclusiones: Fiehte y los románticos. Schelling y las tribulaciones románticas del idealismo .................... 2.1. La vida, el desarrollo del pensamiento y las obras de Schel- ling. 2.2. Los comienzos fichteanos del pensamiento de Schelling y los nuevos fermentos (1795-1796). 213. La filosofía de la naturaleza de Schelling (1797-1799). 2.4. idealismo trascendental e idealismo estético (1800). 2.5. La filosofia de la identidad (1801-1804). 2.6. La fase teosófica y la filosofía de la libertad (1804-1811). 2.7. La filoso- fía positiva, o la filosofía de la mitologia y de la revelación (a partir de 1815). 2.8. Conclusiones acerca del pensamiento de Schelling. mare scouuoa EL IDEALISMO ABSOLUTO DE HEGEL Hegely el idealismo absoluto ....................................................... 1. 2. 3. 4. 5. La vida, las obras y la génesisidel pensamiento de Hegel ................ 1.1. La biografia de Hegel. 1.2. Los escritos hegelianos. 1.3. Los escritos teológieos de juventud y la génesis del pensamiento he- geliano. Las lineas maestras del sistema hegeliano ................................... 2.1. La necesidad de determinar de modo preliminar las líneas maes- tras del pensamiento de Hegel. 2.2. La realidad como espiritu: de- tenninación previa de la noción hegeliana de «espfritu››. 2.3. La dialéctica como ley suprema de lo real y como procedimiento del pensamiento filosófico. 2.4. La dimensión de lo especulativo,- el sig- nificado del auƒheben y la proposición especulativa. La fenomcnología del espíritu.................................................. 3.1. Significado y finalidad de la fenomenología del espíritu. 3.2. La trama y las figuras dela Fenomenologia. 3.2.1. Lasetapas del itine- rario fenomcnológico. 3.2.2. La conciencia (certeza sensible, per- cepción e-intelecto). 3.2.3. La autoconciencia (dialéctica del amo y del siervo, estoicismo-escepticismo, y conciencia infeliz). 3.2.4. La razón. 3.2.5. El espiritu. 3.2.6. La religión y el saber absoluto. 3.3. La naturaleza polivalente y la ambigüedad dela Fenomenología del espiritu. ' La lógica............................................................................. 4.1. La nueva concepción de laglógica. 4.2. La lógica del ser. 4.3. La lógica de la esencia. 4.4. La lógica del concepto. La filosofía de la naturaleza..................................................... 5.1. La posición de la naturaleza y su significado en el sistema de Hegel. 5.2. La superación de la visión renacentista y romántica de la naturaleza. 5.3. Los planos y los momentos dialécticos de la filosofia de la naturaleza. 'f
  • 6. Índice 6. La filosofía del espíritu........................................................... 142 6.1. El espiritu y sus tres momentos. 6.2. El espíritu subjetivo. 6.3. El espíritu objetivo. 6.3.1. La concepción hegelianaidel espiritu objetivo. 6.3.2. Los tres momentos del espíritu objetivo y el signifi- cado dela historia. 6.3.3. La naturaleza del Estado y de la historia, y la filosofía de la historia. 6.4_. El espíritu absoluto: arte, religión y filosofia. 7. Algunas reflexiones finales...................................................... 152 PARTE 'rERcERA DEL I-IEGELIANISMO AL MARXISMO- ot:-:REc1¬x›. E izouu:-:¡to›. Hsgsuauas. Nttcmtenro Y DssArutou.o DELManxtsmo Derecha e izquierda hegeliana: Ludwig Feuerbach; el socialismo utópi- co; Karl Marxy Friedrich Engels .................................................. 157 1. La derecha hegeliana ............................................................. 157 2. La izquierda hegeliana ........................................'.................. . 158 2.1. David Friedrich Strauss: la humanidad como unión entre lo finito y lo infinito. 2.2. Bruno Bauer: la religión como «desventura del mundo». 2.3. Max Stimer: «he puesto mi causa en la nada.›› 2.4. Arnold Ruge: «la verdad somete en masa a todo el mundo.›› 3. Ludwig Feuerbach y la reducción de la teología a la antropologia 163 3.1. De Dios al hombre. 3.2. La teología es antropología. 4. El socialismo utópico ....... .... .................................._. 167 4.1. Saint-Simon; la ciencia y la técnica como base de la nüeva socie- dad. 4.2. Charles Fourier y el «nuevo mundo societario». 4.3. Pie- rre-Joseph Proudhon: la autogestión 'obrera de la producción. 5. Karl Marx ........................................................................... 175 5.1. Su vida y sus obras.- 5.2. Marx, crítico de Hegel. 5.3. Marx, crítico de la izquierda hegeliana. 5.4. Marx, crítico de los eeonomis-- tas clásicos. 5.5. Marx, critico del socialismo utópico. 5.6. Marx, crítico de Proudhon. 5.7. Marx y la crítica de la religión. 5.8. La alienación del trabajo. 5.9. El materialismo histórico. 5.10. El mate- rialismo dialéctico. 5.11. La lucha de clases. 5.12. El Capital. 5.13. El advenimiento del comunismo. 6. Friedrich Engels y la fundación del ediamat» ........... ................. 192 7. Problemas pendientes ............................................................ 194 PARTE CUARTA Los GRANDES IMPUGNADDRES DEL s1s'riaMA HEGELIANO _ HERBART, TRENDELENBURG, SCHOPEN_HAUER, KIERKEGAARQ Los grandes impugnadores del sistema hegeliano .............................. 199 1. El realismo de Johann Friedrich I-Ierbart .................................... 199 1.1. La tarea de la filosofia. 1.2. El ser es uno; los conocimientos acerca del ser són múltiples. 1.3. El-alma y Dios. 1f.4. Estética Y pedagogía. 2. Las reacciones psicologistas ante el idealismo: Jakob F. Fries y Friedrich Beneke .................................................................. 203 7
  • 7. Índice AdolfTrendelenburg, crítico dela «dialéctica hegelíana›› ............. .. Artlgur Schopcnhaucr y el mundo como voluntad represen- taci n................................................................................. 4.1. En contra de Hegel, «sicario dela verdad». 4.2. Una defensa de la «verdad no remunerada». 4.3. «EI mundo es una representación mia.›› 4.4. La categoria dela causalidad. 4.5. El mundo como volun- tad. 4.6. La vida oscila entre el dolor y el tedio. 4.7. La liberación a través del arte. 4.8. Asccsis y redención. Sören Kierkegaard: el individuo y la causa del cristianismo ............. 5.1. Una vida que no jugó al cristianismo. 5.2. Kierkegaard: el «poe- ta cristiano». 5.3. El «fundamento ridículo» del sistema hegeliano. 5.4. El individuo ante Dios. 5.5. El principio del cristianismo. 5.6. Posibilidad, angustia y desesperación. 5.7. Kierkegaard: la ciencia y el cientificismo. 5.8. Kierkegaard y la teología científica. PARTE QUINTA LA FILOSOFÍA EN FRANCIA DURANTE LA RESTAURACIÓN Y LA I-¬n.osoFíA ITALIANA EN LA EPDCA DEL «R1soRG1MENTo» VI. Lafilosoƒfa en Francia durante la restauración................................ .. 1. Los ideólogos: Destutt dc Tracy y Cabanis................................ _ . -2. El espiritualismo de Maine de Biran .......................................... 3. Los tradicionalistas: dc Bonald, de Maistre y Lamennais.............. ._ 4. Victor Cousin y el espiritualìsmo ecléctico .................................. VII. Lafilosofia italiana en la época del trrisorgimento» .......................... _. 8 Las lineas maestras.............................................................. _. La «filosofía civil» de Gian Domenico Romagnosi ......................_. La filosofía como ciencia de las «mentes asociadas» y la politica- federalista de Carlo Cattanco .................................................. 3.1. Carlo Cattaneo: «la filosofia es una milicia.›› 3.2. La filosofía como «ciencia›› de las «mentes asociadas». 3.3. La teoria política del federalismo. Giuseppe Ferrari y la filosofía de la revolución........................... .. Pasquale Galluppi y la filosofía de la experiencia ........................ .. 5.1. La realidad del «yo›› y la existencia del mundo externo. 5.2. El principio de causalidad y la demostración de la existencia de Dios. Antonio Rosmini y la filosofia del «ser ideal» ............................._ 6.1. Su vida y sus obras. 6.2. Crítica del scnsismo empirista y del apriorismo kantiano. 6.3. La idea del ser. 6;4. El sentimiento funda- mental corpóreo y la realidad del mundo externo. 6.5. Persona, libertad y propiedad. 6.6. Estado, Iglesia y el principio de la mo- ralidad. Vincenzo Gioberti y la filosofia del «ser real» .............................. 7.1. Su vida y sus obras. 7.2. Contra el psicologismo de la filosofía moderna. 7.3. La «fórmula ideal». 7.4. El prirnado moral y civil de los italianos.
  • 8. VIII Elpositivismo ........................................................................ . 2 3 Prurnz staxm EL POSITIVISMO . Las lineas maestras del positivismo ........................................... . Auguste Comte y el positivismo en Francia ................................. 2.1. La ley de los tres estadios. 2.2. La doctrina de la' ciencia. 2.3. La sociología como fisica social. 2.4. La clasificación de las ciencias. 2.5. La religión -de la humanidad. 2.6. _Las razones de Comte. 2.7. La difusión del positivismo en Francia. 2.8. Claude Bernard y el naci- miento de la medicina experimental. John Stuart Mill y el positivismo utilitarista inglés........................ . 3.1. Los problemas de Malthus. 3.2. La economía clásica: Adam Smith y David Ricardo. 3.3. Robert Owen: desde el utilitarismo al socialismo utópico. 3.4. El utilitarismo de Jeremiah Bentham. 3.5. El utìlitarismo de James Mill. 3.6. John Stuart Mill: la crisis de los veinte años. 3.7. Critica a la teoria del silogismo. 3.8. El principio de inducción: la uniformidad de la naturaleza. 3.9. Las ciencias mora- les, la economía y la politica. 3.10. La defensa dc la libertad del individuo. El positivismo cvolucionista de Herbert Spencer .......................... 4.1. La religión y la ciencia son correlativas. 4.2. La evolución del universo: de lo homogéneo a lo heterogéneo. 4.3. Biología, ética y sociedad. El positivismo' materialista en Alemania..................................... 5.1. Principios generales. 5.2. Jakob Moleschott y la sacralización de la materia y de la vida. 5.3. Carl Vogt, opuesto a Rudolf Wagner con respecto a la existencia del alma. 5.4. Ludwig Büchner y la etemidad de la materia. 5.5. Emil Du Bois-Reymond y «los siete enigmas del mundo». 5.6. Ernst Haeckel y el mundo sin enigmas. 5.7. El positi- vismo social de Ernst Laas y Friedrich Jodl. 5.8. Eugen Dühñng y el socialismo personalista. El positivismo en Italia ........................................................._. 6.1. Principios generales. 6.2. Cesare Lombroso y la sociología del crimen. 6.3. Un médico positivista: Salvatore Tommasi. 6.4. Augus- to Murri: método científico y lógica del diagnóstico. 6.5. Pasquale Villari y la historiografía posìtivista. 6.6. Aristide Gabelli y la reno- vación de la pedagogia. 6.7. Roberto Ardigò: de la saeralidad de la religión a la saeralidad del «hecl1o››. 6.8. Lo ignorado no es in- cognoscible. La evolución avanza desde lo indistinto a lo distinto. 6.9. Moral y sociedad. Paura sérfnw. EL DESARROLLO DE LAS CIENCIAS EN EL SIGLO XIX, EL EMPIRIOCRITICISMO Y EL CONVENCIONALISMO El desarrollo de las ciencias en elsiglo XIX...................................... . 3211. Cuestiones generales ............................................................ 1.1. La ,ciencia adquiere significado filosólìco. 1.2. Ciencia y socie dad en el siglo xlx. Índice . -271 271 273 283 298 303 308 321 _ Una mmemåtìga más «1-ígurosa» ..............................................- 324 _ Las gggmglfiag 110 cuclldranas................................................ -- 327 9
  • 9. Índice 3.1. La geometria euclidiana y la cuestión del quinto postulado. 3.2. _El nacimiento de las geometrías no euclidianas. 3.3. El significado ñlosófico de la geometría no euclidiana. 4. El.desarrollo de la teoría de la evolución biológica ........................ 4.1. El debate sobre la «evolución» en Francia: J.B. Lamarck, G. Cuvier y Geoffrey Saint-Hilaire. 4.2. Charles Darwin y El origen de las especies. 4.3. El origen del hombre. 4.4. El debate sobre El origen de las especies y la cuestión dãl darwinismo social. 4.5. Tho- mas I-I. Huxley y el darwìnismo en Inglaterra. . La fisica del siglo xxx............................l................................. 5.1. La física a comienzos de siglo. 5.2. El mecanicismo determinista XII. como programa de investigación. 5.2-)._ïlI_)e la electrostática a la elec- trodinámica. 5.4. El electromagnetisino y la nueva sintesis teórica. 5.5. El enfrentamiento con la mecánica de Newton. 6. La_ lingüística: W. von Humboldt; F..Bopp; la «ley de Grimm» y los neogramátieos ._........................................... .'.................... 7. El nacimiento de la psicologia experimental ................................ 7.1. La ley psicofísica fundamental de Weber-Fechner. 7.2. W. Wundt y el laboratorio de psicologia experimental de Leipzig. J. 8. Los orígenes de la sociología cientifica ....................................... 8.1. Emile Durkheim y Las reglas del rnétodo sociológico. 8.2. El suicidio y la anemia. * Elempiríocriticismo de RichardAvenaríusy Ernst Mach .................... 1. Richard Avenaríus y la critica de la experiencia pura ..................... 1.1. ¿Qué es la experiencia pura? 1.2. El regreso al «concepto natu- ral del mundo». 1.3. Más allá de la distinción 'entre lo físico y lo psíquico. 1.4. Los perjuicios de la «introyección››. 2. Ernst Mach: bases, estructura y desarrollo de la ciencia ................. 2.-1. El análisis de las sensaciones. 2.2. El conocimiento científico como acontecimiento biológico. 2.3. Problemas, hipótesis y selec- ción de las hipótesis. 2.4. La ciencia como economia del pensamien- to. 2.5. Criticas a-la mecánica newtoniana. El convencionalismo de Henri Poincaré y Pierre Duhem ......... ._......... . . 1. El convencionalismo moderado de Henri Poincaré ....................... 1.1. Poincaré: la convención no es un capricho. 1.2. La teoria institu- ye el hecho: «la experiencia es la única fuente de verdad.›› 1.3. Los axiomas de la geometria, como definiciones disfrazadas. 2. Pierre Duhem y la naturaleza de' la teoria fisica ............................ 2.1. Duhem: qué es una teoría fisica. 2.2. Controles holísticos y negación del experimentum crucir. 3. Una evaluación del convencionalismo......................... ..........., *ratrre octava LA FILOSOFÍA DESDE EL SIGLO XIX AL SIGLO XX Nietzsche. Fidelidad ala tierra y transmutación de todos los valores ..... .. _ 1. Nietzsche, intérprete de su propio destino ......................'........... 2. El destino de Nietzsche como «profeta del nazismo››..-................_. 334 ' 343 349 352 355 359 a 359 364 371 371 374 376 379 379 380
  • 10. XIII. XI XV. V. Índice 3. Su vida y sus obras .................-..................................... ...... 381 4. Lo «dionisiaco››, lo «apolíneo›› y el «problema de Sócrates»...... .. ..= 382 S. Los hechos son estúpidos y la saturación de historia es un peligro.... 384 6. El distanciamiento de Schopenhauer y'de Wagner........ ............ I-3,85 7. El anuncio de la «muerte de Dios»........................................... 3:86 8. El Anticristo, o el cristianismo como vicio ................................. 387 9. La genealogía de la moral....... ............. ........................... .. 389 10. Nihilismo, eterno retorno y amorƒati ................................. 390 11. El superhombre es el sentido de la tierra ...................... ..... 391 El neocriticismo. La escuela de Marburgoy la escuela de Baden -........... 393 1. Tendencias generales............................................................. 393 2. La escuela de Marburgo .............................................-..Ã......... 395 ` 2.1. Hermann Cohen: la crítica,como metodologia de la ciencia. 2.2. Paul Natorp: «el proceso, el método lo es todo.›› 3. Ernst Cassirer y la filosofía de las formas simbólicas ............ 397 3.1. Substancia y función. 3.2. Las formas simbólicas. 3.3. El hom- bre: anirnal symbolicum. 4. Laescuela de Baden .............................................................. 400 4.1. Wilhelm Windelband y la filosofia como teoria de los valores. 4.2. Heinrich Rickert: conocer es juzgar con base en el valor de verdad. Elhtlstoricismo alemán ..................................................... . _ ....... . 404 1. Directrices generales ............................................................. 404 2. Wilhelm Dilthey y la critica de la razón histórica ..........=................ 406 2.1. Hacia una crítica de la razón histórica. 2.2.' La fundamentación de las ciencias del espíritu. 2.3. La constitutiva historicídad del mun- do humano. É 3. W. Windelband y la distinción entre ciencias nomotéticas y cien- cias idiogråficas ......................................... ......... 410 4. H. Rickert: la relación con los valores y la autonomiagdel conoci- miento histórico ......................... .. . .-. ................. ............. . . 412 5. G1 Simmel: los valores del historiador-y el relativismo de los hechos.......................... ..... 413 6. Oswald Spengler y el «ocaso de Occidente»....... ........................ 414 7. Emst Troeltsch y el carácter absoluto delos valores religiosos ....... .. 415 8. F. Meinecke y la búsqueda de lo eterno en el instante ............... 415 Max-` Weber. La metodologia de las ciencias histórico-socitiles y el des- encantamiento delmundo................................,...........f.._.............. 417 1. La obra de Weber: principios generales.....¡.............. ................ 417 2. La «doctrina 'de la ciencia››:; finalidad y objeto de las ciencias histó- rico-sociales.........................................................-.............. .. 420 3. La cuestión de la referencia alos valores ...................,................ 421 4. La teoría del «tipo ideal» ............... ................... .............._. 422 s. La posibilidad objetiva y el peso diferencial de las distintas causas- de un acontecimiento histórico................................................. 423 6. El debate acerca de la objetividad.......... ............ ................_ 424 7. Laética protestante y el espíritu del capitalismo ......................... 426 8. WeberyMarx ............................................... ................ 428 9. El desencantamiento del mundo y la fe como sacrificio del intelecto .............................................................._.,.... 430 11
  • 11. .tnulce J XVI XVII XVIII 1 xa. 12 Elpragmatismo ........................................................................ I 433 1. Principios generales............................................................._. 2. El pragmatismo lógico de Charles S. Peirce................................. 2.1. Los procedimientos para establecer las creencias. 2.2. Deduc- ción, inducción y abduccìón. 2:3. Cómo aclarar nuestras ideas: la regla pragmática. 2.4. La semiótica, 2.5. La faneroscopia. 2.6. La cosmología: tiquismo, sinequismo y agapismo. 433 434 3. El empirismo radical de William James .............. ..................._. 439 3.1. El pragmatismo es sólo un método. 3.2. La verdad de una idea se reduce a su capacidad de actuar. 3.3. Los principios de la psicolo- gía y la mente como instrumento de adaptación. 3.4. La cuestión moral: ¿cómo se jerarquizan y se escogen ideales contradictorios? 3.5. La variedad de la experiencia religiosa y el universo pluralista. 4. El desarrollo del pragmatismo ............................................... _. 445 5. El pragmatismo italiano ....................................................... .. 446 El instrumentalismo deJohn Dewey............................................. .. 449 1. La experiencia no se reduce a la conciencia o al conocimiento ......... 2. Precariedad y riesgo en la existencia ........................................._ 3. La teoría de la investigación .................................................... 4. Sentido común e investigación científica: las ideas como instru- mentos ............................................................................. ._ 5. La teoria de los valores........................................................... 6. La teoría de la democracia ...................................................... 449 451 453 454 455 457 EI ncoidealismo italiano: Croce y Gentile. El idealismo angIo-norte- americano ............................................................................. ._ 459 1. El idealismo en Italia antes de Croce y Gentile............................. 2. Benedetto Croce y el ncoidealismo como historicismo absoluto ....._. 2.1. Su vida y sus obras; 2.2. Lo que está vivo y lo que está muerto en la filosoƒia de Hegel, o el manifiesto del nuevo espiritualismo de Croce. 2.3. La estética de Croee y el concepto de arte. 2.4; La lógica de Croce: los conceptos y los pseudoconceptos. 2.51 La actividad práctica, económica y ética. 2.6. La historia como pensamiento y como acción. 2.7. Reflexioncs finales. 459 461 3. Giovanni Gentile y el ncoidealismo actualista .............................. 476 3.l.'Su vida y sus obras. 3.2. La reforma de Gentile de la dialéctica hegeliana. 3.3. Los criterios básicos del actualismo. 3.4. La naturale- za del actualismo de Gentile. 3.5. Reflexioncs finales. 4. El ncoidealismo en Norteamérica y en Inglaterra ......................... 483 4.1. Los precedentes: Carlyle y Emerson; Ferrier y Grotc. 4.2. F.H. Bradley y el ncoidealismo inglés. 4.3. J. Royce y el ncoidealismo en los Estados Unidos. 5. La reacción neorrealista en los Estados Unidos ............................ 488 PARTE Novena FENoMENoLooíA, Ex1s'rENcrAL1sMo, HERMENÉUTICA Edmund Hnsscrl y el :novimienioƒenomenológico .........................._. 493 1. Principios generales............................................................. .. 493 2. Los orígenes dela icnomenología ............................................. 496
  • 12. XX XXI XXII. índice 3. Edmund Husserl................................................................. .. 3.1. La polémica contra el psicologismo. 3.2. La intuición eidética. 3.3. Ontologías regionales y ontología formal. 3.4. La intencionali- dad de la conciencia. 3.5. La epoche o reducción fenomenológica. 3.6. La crisis de las ciencias europeas y el «mundo de la vida». 497 4. Max Scheler .................................... .................................. 505 4.1. En contra del formalismo kantiano. 4.2. Los valores materiales y su jerarquía. 4.3. La persona. 4.4. La sociología del saber. 5. Nicolai I-lartmann ................................................................. 510 5.1. Del neocriticismo a la fenomenologia. 5.2. La fundamentación de la ontología. 6. La fenomenología de la religión ............................................. .. 513 6.1. Rudolf Otto y la experiencia de lo «totalmente otro». 6.2. Ge- rardus van der Leeuw y el sentido último de la vida. Martin Heidegger: de Iafenomenologla al existencialismo ................. .. 517 . De la fenomenología al existencialismo ...................................... . El «estar ahi» y la analítica existencial ........................................ . El «estar en el mundo» y el «estar con los otros» ......................... .. I 517 2 518 3 4. El «ser para la muerte», existencia inauténtica y auténtica ..... ....... 5 6 7 519 521 . La valentía ante la angustia ..................................................... 522 . El tiempo ................................... ..................................... .. 523 . La metafísica occidental como olvido del ser y el lenguaje de la poesía como lenguaje del ser ................................................. .. 524 8. La técnica y el mundo occidental ...................... ...................... 525 El existencialismo .................................... ............... .... 527 1. Principios generales ............................................................. 2. Karl Jaspers y el naufragio de la existencia................................. 2.1. Ciencia y filosofía. 2.2. La orientación en el mundo y lo «om- niabarcador». 2.3. La inobjetividad de la existencia. 2.4. El naufra- gio dela existencia y las cifras de la trascendencia. 2.5. Existencia y comunicación. 527 529 3. Jean-Paul Sartre: desde la libertad absoluta e inútil hasta la liber- tad histórica....................................................................... .. 3.1. Escribir para entenderse. 3.2. La nãusea ante la gratuidad de las cosas. 3.3. El «en sí» y el «para sí››; el ser y la nada. 3.4. El «ser para otro». 3.5. El existencialismo es un humanismo. 3.6. La crítica de la razón dialéctica. 537 4. Maurice Merleau-Ponty: entre el existencialismo y la fenome- nologia ......................................;...........................'............. 544 4.1. La relación entre la conciencia y el cuerpo, y entre el hombre y el mundo. 4.2. La libertad condicionada. 5. Gabriel Marcel y el neosocratismo cristiano ................................ 547 5.1. La defensa de lo concreto. 5.2. La asimetría que se da entre creer y verificar. 5.3. Problema y metaproblema. 5.4. Tener y ser. 5.5. Contra el culto a lo moralmente absurdo. 6. El influjo del existencialismosobre las «ciencias humanas» ............. 553 Hans-Georg Gadamery la teoria dela hermenéutica .......................... 555 1. El «círculo hermenéutico›› .................................................... .. 555 2. Precomprensión, prejuicios y alteridad del texto .......................... 558 13
  • 13. Índice 3. Interpretacióne historia delos efectos ....................................... 4. Prejuicio, razón y tradición: Bacon, los ilustrados y los ro- mánticos ...... ....... ......................................................... 5. Lateoría dela experiencia ...... ............................................. 6. Gadamer yla «experiencia dialéctica» de Hegel ..... .................... nutre Décima -BERTRAND RUSSELL,_LUDWIG WITTGENSTEIN Y LA FILOSO- FIA DEL LENGUAJE XXIII. Bertrand Russell: del rechazo del idealismo a la crítica de la filosofia analítica.................................................................................; 1. Bertrand Russell: el rechazo del idealismo ................................_. 2. El atomismo lógico y el encuentro entre Russell y Peano ................ 3. La teoría de las descripciones................................................. _. 4. Russell, en contra del «segundo›› Wittgenstein y la filosofía ana- lítica .................................................................................. 5. Russell: la moral y el cristianismo ............................................. 6. A.N. Whitehead: proceso y realidad ....................................... .. XXIV. Ludwig Wittgenstein,- desde el «Tractatus logico-philosophicus» hasta las «Investigacionesfilosóficas» .................. .: ............' ...................... . . 1. Su vida ............................................................................... 2. El Tractatus logico-philosophicus.............................................. 3. La antimetatísica de Wittgenstein ............................................_ 4. La interpretación no neopositivista del Tractatus .......................... 5. El retorno a la filosofía........................................................... 6. Las Investigaciones filosóficas y la teoría de los juegos lingüís- ticos................................................................................. _. 7. Contra el esencialismo ........................................................... 8. El principio del uso y la filosofía como terapia lingüística.............. .. 9. Wittgenstein, maestro de enseñanza primaria .............................. XXV. -Lafilosofia del lenguaje .............................................................. 1. El movimiento analítico de Cambridge y Oxford .......................... 1.1. La filosofía analítica en Cambridge. 1.2. La filosofía analítica en Oxford. 2. Filosofia analítica y lenguaje ordinario....................................... 3. Filosofía analítica y metafísica................................................. . -4. Filosofia analítica y lenguaje ético............................................_ 5. Filosofía analítica y lenguaje político ......................................... 6. Filosofía analítica e historiografía ............................................. 7. Filosofía analítica y lenguaje religioso ........................................ entre tmoéctmx ESPIRITUALISMO, PERSONALISMO, NUEVAS TEOLOGÍAS Y NEOESCOLASTICA `XXVI. El espiritualismo como fenómeno europeo; el modernismo; Bergson y la evolución creadora .... ........................................................ .. 611 1. El espiritualismo. Principios generales ....................................._. 2. El espiritualismo en Inglaterra ................................................_ 3. El espiritualismo en Alemania ................................................. 14
  • 14. XXVII. XXVIII XXIX. " Índice 4. El espiritualismo en Italia: Martinetti, Varisco y Carabellese .... 5. El espiritualismo en Francia: Lequier, Ravaisson y Boutroux ........ .. 6. Maurice Blonde! y la filosofía de la acción.......................t........... 6.1. Los precedentes de la tìlosofíade la acción. 6.2. La dialéctica de la voluntad. 6.3. El método de la inmanencia. 7. El modernismo y sus problemas .............................. ........ 8. Henri Bergson y la evolución creadora ...................... ........ 8.1. La originalidad del espiritualismo de Bergson. 8.2.=El tiempo espacializado y el tiempo como duración. 8.3. Por que la duración fundamenta la libertad. 8.4. Materia y` memoria. 8.5. Impulso vital y evolución creadora. 8.6. Instinto, inteligencia e intuición. 8.7. El rlo de la vida. 8.8. Sociedad cerrada y sociedad abierta. 8.9. Religión estática y religión dinámica. Elpersonalismo...................................................................... .. Principios generales............................................ ............... .. '639 641 642 1. 2. Jean Lacroix: 'el personalismo entre el existencialismo y el marxismo .................................................... ..... ............ 3. Emmanuel Mounier y la «revolución personalista y comunitaria» .. 3.1. La persona de Mounier. 3.2. Las dimensiones -de la persona. 3.3. El personalismo, contra el moralismo y el individualismo. 3.4. La persona, contra el capitalismo y contra el marxismo. 3.5. Hacia la nueva sociedad. 3.6. El cristianismo debe romper con todos los des- órdenes establecidos. La renovación delpensamiento teológica en elsiglo XX .._...... . .. . 1. La renovación de la teología protestante .................................... 1.1. Karl Barth: la «teología dialéctica» contra la «teología liberal». 1.2. La analogía fidel contra la analogía entís. 1.3. Karl Barth y la política. 1.4. Paul Tillich y el «principio de correlación». 1.5. Rudolf Bultmann: el método «histórico-morfológico» y la «desmitìficación». 1.6. Dietrich Bonhoeffer y el mundo salido de la «tutela-de Dios». 2. La renovación de la teologíacatólica ...... ............. 2.1. La teología católica y el concilio Vaticano tx. 2.2. Karl Rahner y las «condiciones a priori» de la posibilidad de la revelación. 2.3. Hans Urs von Balthasar y la estética teológica. 3. Paul M. van Buren y la «teología de l`a muerte de Dios» ............... .. 3.1. El significado secular del Evangelio. 3.2. La superación de la «teología de la muerte de Dios». 4. Lateología dela esperanza ............. ............... 4.1. J. Moltmann-y la contradicción entre «esperanzan y «experien- cia». 4.2. W. Pannenberg: «la prioridad corresponde a la fe, pero la primacía, a la esperanza.›› 4.3. Johannes B. Metz: la_teología de la esperanza como teología política. 4.4. E. Schillebeeckx: «Dios es aquel que vendrá.» La neoescolâstica ...................;........................ ........,.............. 1. La encíclica Aeterni Patrir y la filosofia neoescolástiea ;............... 2. La neoescolástica en la Humani Generis, en el concilio Vaticano u y en un discurso de Juan Pablo tt............................................. 3. El cardenal Mercier y la neoescolástica en Lovaina ...... 4.1. Jacques Maritain: los grados del saber y el humanisino_integ'ral. 4.2. Étíenne Gilson: por qué no puede suprimirse el tomismo. 5. La neoescolåstica en la universidad católica de Milán .......... ....... 685 -15 615 617 620 622 624 639 653 653 660 665 668 675 675 677 678 4. La neoescolástica en Francia ............ ........... ........... '680
  • 15. ndice Paura ouooécma EL MARx1sMo Después De MARX Y LA Escuem DE FRANCFORT XXX. El marxismo después de Marx ...................................................... 1 2. 3 4 S 6. 7 8 La Primera, la Segunda y la Tercera Internacional;....................... El revisionismo del reformista Eduard Bemstein .......................... 2.1. Las razones del fracaso del marxismo. 2.2. Contra la revolución y la dictadura del proletariado. 2.3. La democracia como,-alta escuela del compromiso. El debate sobre el refonnismo ............................................... .. 3.1. Karl Kautslry y la «ortodoxia››. 3.2. Rosa Luxemburg: «La vic- toria del socialismo no cae del cielo.›› El austromarxìsmo ................................................................ 4.1. Génesis y características del austromarxismo. 4.2. Max Adler y el marxismo como «programa científico». 4.3. La posición neokan- tiana de los austromarxistas y la fundamentación de los valores del socialismo ......................................................................... .. El marxismo en la Unión Soviética.......................................... .. 5.1. Plejanov y la difusión de la «ortodoxia››. 5.2. Lenin: el partido como vanguardia armada del proletariado. 5.3. Estado, revolución, dictadura del proletariado y moral comunista. 5.4. Lenin contra los partidarios de Mach. 5.5. Stalin y el marxismo-leninismo como ideo- logia oficial de la Unión Soviética. El «marxismo occidental» de Lukãcs, Korsch y Bloch.................... 6.1. Gyôrgy Lukács: totalidad y dialéctica. 6.2. Clase y conciencia de clase. 6.3. Lukács, historiógrafo de la filosofía. 6.4. La estética mar- xista y el «realismo››. 6.5. Karl Korsch, entre «dialéctica» y «cien- cia». 6.6. Ernst Bloch: la vida de un «utópico››. 6.7. «Lo que importa es aprender a esperan» 6.8. «Hay que ampliar el marxismo con fidelidad» 6.9. «Donde hay esperanza, hay religión.›› El neomarxismo en Francia ................................................... .. 7.1. Roger Garaudy: los errores del sistema soviético. 7.2. La alter- nativa. 7.3. Marxismo y cristianismo. 7.4. Louis Althusser: la «rup- tura epistemológica» del Marx de 1845. 7.5. Por qué cl marxismo cs un antihumanismo y un antihistoricismo. El neomarxismo en Italia ........................................................ 8.1. Antonio Labriola: «el marxismo no es positivismo ni naturalis- mo.›› 8.2. La concepción materialista de la historia. 8.3. Antonio Gramsci: la «filosofía de la praxis» contra la «filosofia especulativa›› de Croce. 8.4. El «método dialéctico» y la revolución contra El Ca- pital. 8.5. La teoría de la hegemonía. 8.6. Sociedad politica y socie- dad civil. 8.7. El intelectual «orgánico››; el partido como «príncipe modcrnon; la revolución como «guerra de posición». XXXI. La escuela de Francfort............................................................... 1 2 3 4 5 16 Génesis, evolución y programa de la escuela de Francfort............... Adorno y la «dialéctica negativa» ............................................. Adorno y Horlcheimer: la dialéctica de la ilustración ..................... La industria cultural .......................... ................................_ 742 Max Horkheimer: el eclipse de la razón...................................... 5.-1. El lucro y la planificación como generadores de represión. 5.2. La razón instrumental. 5.3. La filosofía como denuncia de la razón instrumental. 5.4. La nostalgia de lo «completamente otro».
  • 16. XXXII. Índice 6. Herbert Marcuse y el «gran rechazo»......................................._. 748 6.1. ¿Es imposible una civilización no represiva? 6.2. El Eros, libe- rado. 6.3. El hombre unidimensional. 7. Erich Fromm y la «Ciudad del Ser» ........................................... 752 7.1. ¿La desobediencia es realmente un vicio? 7.2. _¿Tener o ser? 8. La lógica de las ciencias sociales: Adorno contra Popper ................ 755 9. El «`dialéctico›› Jürgen I-Iabcrmas contra el «decisionista›› Hans Albert .............................................................................. .. 757 I I PARTE DECIMOTBRCERA LAS CIENCIAS HUMANAS EN EL SIGLO XX ' FREUD Y EL PSICOANALISIS EL ESTRUCTURALISMO Las ciencias hupzanas en elsiglo XX............................................. _ 763 l. Cuestiones generales ............................................................. 2. La psicologia de la forma ........................................................ 2.1. C. von Ehrenfels; la escuela de Graz; la escuela de Würzburgo. 2.2. Max Wertheimer y la escuela de Berlin. 763 764 168 tf mi 3. Elconductismo .................................................................... 3.1. J.B. Watson y el esquema «estímulo-respuestaa; I.P. Pavlov y los «retlejos condicionados». 3.2. Los avances del conductismo y B.F. Skinner. 4. La epistemología genética de Jean Piaget .......................-.......... . . 4.1. Qué es la epistemología genética. 4.2. Las fases del desarrollo mental en el niño. 5. La teoría lingüística desde F. de Saussure hasta N. Chomsky....... 775 Y 5.1. Ferdinand de Saussure: qué es la semiología y qué es el signo. 5.2. La primera gran oposición: lengua y habla. 5.3. La segunda gran oposición: sincronía y diacronía. 5.4. El Círculo lingüístico de Praga. 5.5. El Círculo lingüístico de Copenhague. 5.6. La gramática genera'- tiva de Noam Chomsky: estructura profunda y estructura superficial. 5.7. Competencia y rendimiento. 6. La antropologia cultural ...............................................Ã.`...... ._ 7. K. Mannheim y la sociología del conocimiento............................. 7.1. Concepción parcial y concepción total de la ideologia. 7.2. ¿El marxismo es ideológico? La diferencia entre ideología y utopía. 7.3. ¿El relacionìsmo evita el relativismo? 784 786 8. Los avances de las teorías económicas........................................ 790 8.1. La teoría marginalista. 8.2. El liberalismo keynesiana. 9. La filosofía del derecho: el iusnaturalismo; el realismo jurídico; Kelsen y el positivismo jurídico ............................................. ._. 9.1. G. Radbruch y el ìusnaturalismo. 9.2. El realismo jurídico, des- de F.C. von Savigny hasta R. Pound. 9.3. Hans Kelsen: «ser», «de- ber scr» y la ciencia de los valores. 9.4. Sanción, norma jurídica y norma fundamental. 795 10. Chaïm Perelman y la «nueva retórica» .................. .................. 800 10.1. Qué es la teoría de la argumentación. .10.2. La razonabilidad V.- no es racionalidad, pero tampoco emocìonalidad. 10.3. Argumen- tación y auditorio. 17
  • 17. indiee `Í XXXIV. xxxv XXXIII. Sigmund Freudy el desarrollo del movimientopsicoanalitico ........ 805 1. De la anatomía cerebral a la «catarsis hipnótica›› ........................ .. 2. Del hipnotismo al psicoanálisis.........L...................................... 3. inconsciente, represión, censura c interpretación de los sueños ...... .. 4. La noción de «libido›› y la sexualidad infantil ............................... '5. El complejo de Edipo .........................................................._. 6. El desarrollo de las técnicas terapéuticas y la teoría de la transfe- rencia................................................................................. 7. La estructura del aparato psíquico: «ello››, «yo›› y «superyó›› 8. La lucha entre Eros-y Thanatosy el malestar en la civilización ......... 9. La rebelión contra Freud y el psicoanálisis después de Freud........... 9.1. La «psicología individual» de Alfred Adler. 9.2. La «psicología analítica» de Carl Gustav Jung. 9.3. Wilhelm Reich y la'sintesis entre marxismo y teoria freudiana. 9.4. El psicoanálisis infantil en Anna Freud y Melanie Klein. 9.5. La terapia no directiva de Carl Rogers. 9.6. Rogers: la «comunicación auténtica», el individuo y el grupo. El estructuralismo ........,........................................'..........,....... .. 1. El uso científico y el uso filosófico del término «estructura» ............ 2. Claude Levi-Strauss y el estructuralismo en antropología ............. .. 2.1. Las estructuras elementales del parentesco. 2.2. Un «kantismo sin sujeto trascendental››. 2.3. La estructura de los mitos. 3. Michel Foucault y el estructuralismo en la historia ............... .... .. 3.1. Estructuras epistémicas y prácticas discursìvas. 3.2. Las estruc- turas epistémicas de la historia del saber occidental. 4. Jacques Lacan y el estructuralismo en psicoanálisis 4.1. Lo inconsciente está estructurado como un lenguaje. 4.2. El estadio del espejo. 4.3. Necesidad, demanda, deseo. S. Por qué para el estructuralismo «el hombre está muerto» ............... 6. ¿Es irracional el racionalismo estmcturalista?.............................. rxnre Decir-iocuxarlx EL 1:›BsARnoLLo DE LA CIENCIA Y LAS T1-ïoaíxs EP1sTBMoLóG1cAs EN EL srGLo xx Lógica, matemúiica, _/lírica y biologia en el siglo XX . .. .._.................... .. 1. Los avances de la lógica y de la matemática en el siglo xx ............... 1.1. La «investigación sobre los -fundamentos» y el descubrimiento de la «antinomia de las clases». 1.2. El programa de Hilbert y los teoremas de _Gödel. 1.3. La semántica de Tarski y el intuicionismo de Brouwer. $2. El desarrollo de la física en el siglo xx ,....................................... 19 2.1. Cuestiones generales. 2.2. Einstein y las teorías de la relativi- dad. 2.3. La teoría de los cuantos. 2.4. Física atómica, nuclear y subnuclear. 2.5. La interdisciplinar-¡edad y las disciplinas «de frontera». ' 3. La biología después de Darwin............................................... .. 3.1. El neodanvinismo: A. Weismann y H. De Vries. 3.2. El descu- brimiento de los cromosomas y el redescubrimiento de las leyes de Mendel. 3.3. En el interior del cromosoma: los genes. 3.4. El código genético.
  • 18. XXXVI. XXXVII. XXXVIII Índice La filosofía de Ia ciencia entre las dos guerras mundiales. El neopositi- vismo, el operacionismo y la epistemología de Gaston Bachelard ........._ 864 1. Directrices generales ............................................................. 2. El neopositivismo vienés ......................................,............... .. 2.1. Los orígenes y la formación del Círculo de Viena. 2.2. El mani- fiesto programático del Wiener Kreís. 2.3. Las teorías fundamentales del neopositivismo. 2.4. La antimetafísica del Wiener Kreis. 2.5. M. Schlick y el principio de verificación. 2.6. Neurath y el fisicalis- mo. 2.7. Camap y el lenguaje fisicalista como lenguaje universal de la ciencia. 2.8. El trasplante del neopositivismo a América. 2.9. Li- beralización y superación de las tesis neopositivistas.. 864 865 3. El operacionismo de P.W. Bridgman ...................-...................... 877 3.1. Los conceptos reducidos a operaciones. 3.2. Contemplar todo lo que hace la teoría. 3.3. El debate sobre el operacionismo. 4. La epistemología de Gaston Bachelard ...................................... 881 4.1. La 'ciencia no tiene la filosofía que se merece. 4.2. La ciencia es la que instruye a la razón. 4.3. Las «rupturas epistemológicas». 4.4. No hay verdad si no se rectifica el error. 4.5. El «obstáculo episte- mológico». 4.6. Ciencia e historia de la ciencia. El racionalismo crítico de KarlR. Popper ....................................... 889 1. Su vida y sus obras ............................................................... 889 2. Popper, el neopositivismo y la filosofia analítica ....................... _. 890 3. La inducción no existe ................_.......................................... 891 4. La mente no es una tabula rasa ............................................... 892 5. Problemas y creatividad; génesis y comprobación de las ideas ...... .. 894 6. El criterio de falsación ........................................................ .. 894 7. La verosimilitud y la probabilidad de las teorías son objetivos incompatibles entre sí......................................................... .. 895 8. El progreso de la ciencia .............................. ....................... 896 9; Falsación lógica y falsación metodológica; saber de trasfondo y «nuevos problemas» ............................................................ 897 10. Significación y criticabilidad de las teorias metafísicas .................. 899 11. Contra la dialéctica; la «miseria del historícismo››.'.................. 901 12. La sociedad abierta............................. .... ............... 902 13. Los enemigos de la sociedad abierta...... ....... ...................... ' 905 La epistemologíapostpopperiana.................................................. 1. Thomas S. Kuhn y la estructura de las revoluciones científicas ....... .. 908 1.1. Paradigmas, ciencia normal y anomalías. 1.2; Las revoluciones científicas. 1.3. El desarrollo ateleológico de la ciencia. 2. Imre Lakatos y la metodología de los programas de investigación científica.................................................... ...................... 2.1. Tres tipos de falsacionismo. 2.2. Los programas cientificos de investigación. 2.3. Cómo avanza la ciencia. 911' 3. La epistemología anarquista de Paul K. Feyerabend ................... .. 915 3.1. La anarquía epistemológica en función delìprogreso. 3.2. El anarquismo epistemológico y la historia de la ciencia. 3.3. La provo- cación de Contra el método. 4. Larry Laudan y la metodología _de las tradiciones de investigación. 4.1. El objetivo de la ciencia consiste en resolver problemas. 4.2. Qué son las tradiciones de investigación ;.................... ................ 918 5. La cuestión del progreso en la ciencia ...................................... .. _920 19 908-
  • 19. Indice 5.1. Criticas a la teoría de la verosimilitud de Popper. 5.2. El progre- so de la ciencia en la perspectiva de Larry Laudan. 6. Epistemología y metafísica................................. _., ................_. 923 6.1. Cómo y por qué los epistemólogos contemporáneos defienden la metafísica. 6.2. John Watlcins y la metafísica confìrmable e in- fluyente. 7. Epistemologíay marxismo ...................................................... 927 7.1. Lakatos y el marxismo como programa de investigación degene- rativo. 7.2. Feyerabend: la «sociedad libre» y el marxismo. 8. Epistemología e historiografía de la ciencia .............................. .. 930 8.1. El «porqué›› y el «córno›› de la historia de la ciencia. 8.2. Histo- ria interna e historia externa. 8.3. Los problemas de la historia popperìana de la ciencia. Complemento: Losfilósoƒos españoles ......................................................._ 935 Apéndice ................................................................................................ 953 Tablas cronológicas .............................................................................._. 954 _I_3ibliografía ..................................................................................... 979 Indice de nombres................................................................................._ 1.005 20
  • 20. PRóLoGo «Ningún sistema filosófico es definitivo, porque la vida tampoco es definitiva. Un sistema filosófico soluciona un grupo de problemas históricamente dados y prepara las condiciones para el planteamiento de nuevos sistemas. Así ha sido siempre y siempre lo será.›› Benedetto Croce ¿Cuál es la justificación de un tratamiento tan amplio de la historia del pensamiento filosófico y científico, dirigido a los centros de enseñanza secundaria? ¿Es posible acaso -quizás se pregunte el docente, al observar el tamaño de los tres volúmenes de la obra- afrontar y desarrollar, en las escasas horas disponibles cada semana, un programa tan vasto y lograr que el estudiante lo domine? Sin lugar a dudas, si se mide este libro por el número de páginas, hay que decir que es un libro extenso. Y no sólo esto: es el libro más exten- so que se haya concebido y realizado hasta ahora, para su utilización en los centros de enseñanza secundaria. No obstante, es oportuno recordar aquí la razonable opinión de Terrasson, citada por Kant en el Prefacio a la Critica de la razón pura: «Si se mide la extensión del libro no por el número de páginas, sino por el tiempo necesario para entenderlo, de muchos libros podría decirse que serían mucho más breves, si no fuesen tan breves.›› En efecto, con mucha frecuencia los manuales de filosofía provocarían mucho menos cansancio si tuviesen unas cuantas páginas más sobre una serie de temas. En la exposición de la problemática filosófica la brevedad no simplifica las cosas, sino que las complica y en ocasiones las vuelve poco comprensibles o incluso del todo incomprensibles. En cualquier ca- so, en un manual de filosofía la brevedad conduce fatalmente al simplis- mo, a la enumeración de opiniones, a la mera panorámica de lo que han dicho a lo largo del tiempo los diversos filósofos, cosa si se quiere instruc- tiva, pero poco formativa. La presente historia del pensamiento filosófico y científico pretende abarcar tres planos. Primero el de aquello que han dicho los filósofos, es '21
  • 21. Prólogo decir, plano que los antiguos llamaban «doxográfico›› (cotejo de opinio- nes). Luego el de por qué los filósofos han dicho lo que han dicho, ofre- cìendo un adecuado sentido de cómo lo han dicho. Finalmente aquel en que seindican algunos de los efectos provocados por las teorías filosóficas y científicas. _ El porqué de las afirmaciones de los filósofos nunca es algo simple, puestoque a menudo los temas sociales, económicos y culturales se entre- cruzan y se entrelazan de distintas formas con los temas teóricos y especu- lativos, Se ha ido dando razón gradualmente del trasfondo del cual han surgido las teorías de los filósofos, pero evitando el peligro de las reduc- ciones socìologistas, psicologistas e historicistas (que en los últimos años han alcanzado una hipertrofia exagerada, hasta el punto de vaciar de contenido la identidad específica del discurso filosófico), y poniendo de manifiesto el encadenamiento de los problemas teóricos y los nexos con- ceptuales y, por tanto, las motivaciones lógicas, racionales y criticas que en definitiva constituyen la substancia de las ideas filosóficas y cientificas. _ Además, se ha tratado de ofrecer el sentidodel cómo los pensadores y los cìentificos han propuesto sus doctrinas, utilizando con amplitud sus propias palabras. A veces, cuando se trata detextos fáciles, la palabra viva de los diversos pensadores ha sido utilizada-en el mismo nexo expositivo. En otros casos, en cambio, se han efectuado citas de los distintos autores (los más complicados y más difíciles) en apoyo de la exposición, y -según el nivel, de conocimiento acerca del autor que se desee obtener- pueden omitirse dichos textossin perjuicio para la comprensión de conjunto. Las citas textuales de losdiferentes autores se han graduado de `un modo acorde con la curva discente del joven que al principio se adentra en un discurso completamente. nuevo y, por tanto, necesita la máxima sencillez. Poco apoco, sin embargo, va adquiriendo las categorías del pensamiento filosófico, aumenta su propia capacidad y puede enfrentarse en conse- cuencia con un tipo más complejo de exposición y comprender el diferente carácter del lenguaje con el que han hablado los filósofos. Por lo demás, asícomo no es posible darse una idea del modo de sentir y de imaginar de un poeta sin leer algunos fragmentos de su obra, resulta imposible hacerse una ideade la.forma de, pensar de un filósofo, si se ignora totalmente el modo en que expresaba sus pensamientos. ` Por último, los filósofosson importantes no sólo por aquello que di- cen, sino también por las tradiciones que generan y que ponen en movi- miento: algunas de sus-posturas favorecen el nacimiento de ciertas ideas, pero, al mismo tiempo, impiden el surgimiento de otras. Por tanto los filósofos son importantes por lo que dicen .y por lo que impiden decir. Éste es uno _de aquellos aspectos que a menudo silencian las historias de la filosofía y que aquí se ha querido poner de manifiesto, sobre todo al explicar las complejas relaciones entre las ideas filosóficas y las ideas científicas, religiosas, estéticas y sociopolítìcas. El punto de partida de la enseñanza de_la filosofía reside en los proble- mas que ésta ha planteado y plantea, y por tanto se ha buscado con especial dedicación enfocar la exposición desde el punto de vista de los problemas. A menudo se ha preferido el método sincrónico con.respecto al diacrónico, si bien este último ha sido respetado en la medida de lo posible. f
  • 22. I Prólogo El punto de llegada fde la enseñanza de la filosofía consiste en formar mentes ricas en contenidos teóricos, sagaces en lo que respecta al método, capacitadas para plante_`ar y desarrollar de forma metódica los distintos problemas, y para leer de modo crítico la compleja realidad que las rodea. A tal objetivo apuntan* precisamente los cuatro planos antesindicados, que han servido para concebir y llevar a cabo toda la presente obra: crear en los jóvenes una razón abierta, capaz de defenderse con respecto a las múltiples solicitacionesšcontemporáneas de huida hacia lo irracional 0 de repliegue hacia .posturas estrechamente pragmatistas o cientificistas..Y la razón abierta es una razón que sabe que lleva a sí misma los factoresrde corrección para todos los errores ,que -en cuanto que es una razón huma- na- pueda cometer la fuerza para recomenzar itinerarios siempre nuevos. f Este tercer volumen se divide en catorce partes. Se llevó a cabo tal división teniendo en cuenta la sucesión lógica y cronológica de losproble- mas expuestos, pero con el propósito de ofrecer a los profesores unas auténticas unidades didácticas, en cuyo ámbito, según los intereses y el nivel de los alumnos, puedan llevar a cabo la elección más adecuada. La amplitud del tratamiento no implica que haya que hacerlo todo, sino que pretende brindar una amplia y variada posibilidad de elección y profundi- zación. En este tercer volumen se expone el desarrollo del pensamiento filosó- fico desde Hegel hasta nuestros días._Lejos de situarse en la perspectiva de considerar como realmente válida una sola filosofía, o de utilizar una ideología científica como tribunal para condenar o absolver a los filósofos del pasado, los autores de este libro, con el más profundo respeto por los pensadores tomados en consideración, han querido reconstruir las situa- ciones problemáticas, las teorías, las argumentaciones, los contrastes, las polémicas y las consecuencias sociales y teóricas de las distintas construc- ciones filosóficas que, entretejiéndose, ignorándose o incluso criticándose recíprocamente, se desarrollan a partir del romanticismo para llegar hasta el actual debate filosófico. Por obvias razones, se ha dedicado un amplio espacio a las figuras preeminentes: Fiehte, Schelling, Hegel, Feuerbach, Marx, Engels, Scho- penhauer, Kierkegaard, Comte, Stuart Mill, Spencer, Ardigò, Nietz- sche, Weber, James, Dewey, Croce, Gentile, Husserl, Heidegger, Jas- pers, Sartre, Bergson, Russell, Wittgenstein, Freud, Popper, etc. Sin embargo, puesto que tales pensadores han dado origen a una tradición filosófica o se integran mediante sus aportaciones originales dentro de un movimiento filosófico, se ha considerado oportuno presentarlos en el inte- rior de aquellas tradiciones de pensamiento y de aquellos movimientos filosóficos (0 en todo caso, relacionándolos con ellos), cuyos rasgos histó- rico-sociales y teóricos se describen aquí. Así lo hemos hecho con'respecto al romanticismo, el positivismo, el marxismo, el existencialismo, la feno- menología, el neomarxismo, el estructuralismo, la escuela de Francfort, el espiritualismo, las nuevas teologías, el neopositivismo, el personalismo, etc. De este modo, las diferentes partes se configuran como' unidades didácticas (ordenadas cronológica y/o lógicamente) de gran utilidad para aquellos estudiantes y aquellos cursos que, si bien tienen que efectuar una 23
  • 23. Prólogo selección, poseen un instrumento que al menos les permite conocer en qué ambiente histórico y teórico se sitúa un pensador. Las principales características de este volumen III pueden resumirse en los seis puntossiguientes: 1) Durante el tratamiento de los distintos pensadores y las diversas corrientes se han tenido siempre en cuenta los hallazgos historiográficos más recientes. 2) No se han dejado de lado pensadores (Trendelenburg, Cattaneo, Scheler, Hartmann, Peirce, Vailati, Dilthey, Avenarius, Mach, Duhem, Poincaré, Merleau-Ponty, Marcel, Blondel, Mounier, Bridgman, Piaget) o ámbitos de pensamiento'(el personalismo, la fenomenología de la reli- gión, la sociología del conocimiento, la teoría de la argumentación, la psicología de la forma, la epistemología genética, Cl marginalismo o las teorías económicas de Keynes) que se suelen descuidar y a los cuales, en cambio, los autores de esta obra conceden una mayor relevancia. 3)'La historiografía más reciente ha puesto en claro las complejas relaciones que van ligando paulatinamente la evolución de las ciencias matemáticas, biológicas y físicas con la del pensamiento filosófico. Por consiguiente, en este volumen se encontrará una exposición estructurada de las teorías lógicas, matemáticas, físicas y biológicas que durante el siglo pasado y en nuestro siglo se han entrelazado de maneras diversas con el pensamiento filosófico. Si existe una ciencia de los filósofos, también exis- te una filosofía de los científicos. Por tal motivo, en los capítulos referen- tes a la historia del pensamiento científico, no aparecen largas y mudas enumeraciones de científicos, títulos de libros o nombres de teorías cientí- ficas. En cambio, se ha procurado trazar el origen y el triunfo de aquellos resultados técnicos (por ejemplo, las geometrías no euclidianas, la teoría de la evolución, la relatividad de Einstein, el descubrimiento de las para- dojas de Russell, los teoremas de Gödel, etc.) que han mostrado la fuerza suficiente para echar por tierra teorías científicas sobre las cuales se apo- yaban importantes, influyentes y a menudo venerables teorías filosóficas. 4) El punto anterior aparecerá todavía con mayor claridad en las pági- nas dedicadas ala historia de las ciencias humanas (psicología, sociología, economía, lingüística, teoría de la historia, psiquiatría, antropología, psi- coanálisis, etc.). En resumen, se ha dedicado una atención muy particular al desarrollo de las ciencias: se .trata de una atención motivada por deter- minados avances de las teorías filosóficas, en la medida en que algunas de éstas para ser comprendidas exigen una comprensión de la evolución de ciertas teorías científicas. 5) La historia de las teorías epistemológicas: empiriocriticismo, con- vencionalismo, neopositivismo, operacionismo, racionalismo abierto (de Bachelard), falibilismo (de Popper) y la epistemología de los postpoppe- rianos, como por ejemplo Thomas S. Kuhn, Imre Lakatos, Paul K. Feyer- abend, Larry Laudan, William W. Bartley In, Joseph Agassi, J. Watkins o H. Albert, se halla vinculada con la historia de la ciencia en los siglos xtx y xx. El amplio tratamiento concedido a las teorías epistemológicas se debe al hecho de que cada vez nos damos más cuenta de que es imposible afrontar las cuestiones teóricas de mayor relieve (¿es posible una raciona- lidad distinta,.e incluso superior, a la de las ciencias?; ¿las ciencias huma- nas son de veras ciencias?; ¿qué hay de científico en el marxì^.mo?; ¿puede 24
  • 24. Prólogo ser científica la historiografía y, en caso positivo, de qué manera?; ¿pode- mos fundar racionalmente las normas y los valores?, y así sucesivamente) sin una adecuada teoría de la racionalidad. 6) Hemos dedicado una amplia atención a las teorías lógico-matemáti- cas, físico-naturalistas, psicológicas e histórico-sociales, pero no menos atención se ha prestado en las páginas siguientes a los autores y movimien- tos de pensamiento contemporáneos que están cargados de nociones y teorías que en la actualidad constituyen instrumentos conceptuales indis- pensables para la formación de una mente bien preparada y alerta. Se trata de pensadores como Wertheimer y Piaget; Freud, Jung, Adler y Rogers; Menger y Keynes; De Saussure y Chomsky; Malinowski; Perel- man; o de movimientos filosóficos como el neomarxismo (ruso y alemán, francés e italiano), la escuela de Francfort, las nuevas teologías (protes- tante y católica), la filosofía del lenguaje de Cambridge y de Oxford, el estructuralismo, o la hermenéutica de Gadamer. _ El volumen concluye con un apéndice que contiene como complemen- to indispensable las tablas cronológicas sinópticas, una bibliografía elabo- rada específicamente para los lectores de esta obra, y el índice de nom- bres. Este apéndice ha sido realizado por el profesor Claudio Mazzarelli (cf. p. 935) que, reuniendo su doble capacidad como profesor de enseñan- za secundaria desde hace mucho tiempo y como investigador científico, ofrece un instrumento que resulta a la vez eficaz y profundo. También se deben al profesor Mazzarelli las páginas sobre Hartmann. Los autores desean señalar de un modo particular su agradecimiento a los colegas que han tenido la gentileza de leer algunas partes del presente volumen y de brindar ciertos consejos. El profesor Pietro Omodeo, catedrático dc zoología de la universidad de Padua, leyó las partes referentes a la historia de la biología; el profesor Giovanni Prodi, catedrático de matemáticas complementarias en la uni- versidad de Pisa, leyó las páginas dedicadas a la historia de la matemática; el profesor Salvo D'Agostino, que enseña historia de la física en la univer- sidad de Roma, leyó las partes concernientes a la historia de las ideas físicas; el profesor Vittorio Somenzi, catedrático de filosofía de la ciencia en la universidad de Roma, leyó todos los capítulos sobre las teorías epistemológicas; el profesor Fabio Metelli, catedrático de psicología en la universidad de Padua, revisó las páginas sobre psicología de la forma; el profesor Guido Petter, catedrático de psicología de la edad evolutiva en la universidad de Padua, leyó las páginas dedicadas a la epistemología gené- tica de Jean Piaget; el profesor Luciano Pellicani, catedrático de sociolo- gía de la política en la universidad de Nápoles, leyó las secciones referen- tes al desarrollo de la sociología y la economía. Nuestra gratitud se dirige también al profesor Franco Blezza (universidad de Padua) por la colabo- ración prestada en el tratamiento de la física contemporánea, y al profesor Lauro Galzigna, catedrático de bioquímica de la universidad de Padua, que tuvo la cortesía de redactar para este libro el apartado correspondien- te al código genético. Estos ilustres colegas, con sus sugerencias y sus críticas, contribuyeron sin ninguna duda ~a mejorar la obra. Como es natural, la responsabilidad de las eventuales deficiencias sólo puede atribuirse a los autores del texto. 25
  • 25. Prólogo Los autores quieren expresar un agradecido recuerdo a la memoria del profesor Francesco Brunelli, que fue quien concibió y promovió la iniciati- va de esta obra. Llegó a dar comienzo a la realización tipográfica del proyecto, poco antes de su repentina desaparición. Hacen patente al doc- tor Remo Bemacchia su más reconocido agradecimiento, por haber lleva- do la iniciativa hasta su culminación, ayudando y convirtiendo en realiza- bles las numerosas innovaciones que se han aportado ala presente obra. Por último, expresan-un particular agradecimiento ala doctora Clara For- tina, quien, en calidad de redactora, se entregó al mejor éxito de la obra, mucho más allá de sus 'deberes' de oficio, con dedicación y apasiona- miento. Los. autores desean asumir en común la responsabilidad de toda la obia, ya *que han trabajado en conjunto (cada uno de acuerdo con su propia capacidad, su propia sensibilidad y sus propios intereses) para la mejor realización de cada uno de los tres volúmenes, con plena unidad de espíritu-y de propósitos. Los autores ›_.
  • 26. PARTE PRIMERA EL Mov11v_nENTo Ro1v1ÁNr1co'YaLA FORMACIÓN DEL IDBALISMO l «El hombre es un dios cuando sueña, 'y un mendigocuandno reflexiona.›› Friedrich Höldcrlin v «A uno le cupo en suerte el levantar el velo de la diosa de Sais. Y bien, ¿qué vio? _ Se vio -maravilla de las maravillas- a sl mismo.›› Novalis (Friedrich von I-lardenberg) «En todas las cosas está presente lo eterno.›› Wolfgang Goethe «Sólo puede ser artista aquel que posee su propia religión, es decir, una intuición de lo infinito.›› Friedrich Schlegel
  • 27. u u Goethe (1749-1832): fue la gran figura dominante en la época romántica con su poesía, su estilo de vida y su pensamiento. También ejerció un influjo extraordinario sobre la política cultural de la época
  • 28. CAPíruLo I EL ROMANTICISMO Y LA sUPERAcIóN DE LA ILUSTRACIÓN 1. EL MovIMIENTo RoMÁNr1co Y sus REPRESENTANTES 1.1. Un antecedente del fenómeno romántico: el «Sturm und Drang» Es probable que el final de un siglo y el comienzo de otro jamás se hayan caracterizado por unos cambios tan radicales y tan nítidos como los ue se dieron en los últimos años del si lo XVIII los rimeros del xtx. En el campo socio-político ocurrieron acontecimientos que'15an a Imprimir un nuevo curso en la historia. En 1789 estalló la revolución francesa' en medio del entusiasmo delos intelectuales más ilustrados pertenecientesa todas las naciones europeas. Sin embargo, la revolución adquirió muy pronto un sesgo que tomó a todos por sorpresa.¦"En 1792 se abolió en Francia la monarquía y se proclamó la república. En 1793 el rey'fue con"- denado al atíbulo en a osto de ese mismo año se inició el ran Terror,P Y 3 , . . . . . -5 .que produjo centenares de victimas. La guillotma (antiguo instrumento para la ejecución de la pena capital, convenientemente modificado por el- médieo Guillotin, miembro de la Asamblea Constituyente, para hacerlo más eficaz y más rápido) se convirtió en un siniestro símbolo de muerte, que ponía un final a las grandes esperanzas filantrópieas, huma_r_Ii_tarias y pacifistas que había provocado el siglo de las «luces››. El ascenso de Napo- león, que culminó en 1804 con la proclamación del Imperio, y las campa- ñas militares que asolaron Europa a sangre y fuego, conmocionando la estructura política y social del viejo continente e-i_nstaurando un nuevo despotismo, hicieron naufragar las esperanzas ilustradas que .aún per-. duraban. Antes de que estallase la revolución en Francia, en la década que transcurre entre 1770 y 1780, se producían en Alemania las primeras nota- bles modificaciones del clima cultural, que debían llevar de inmediato, en lo que quedaba de siglo, a una completa superación de la ilustración. El movimiento que en los años setenta llevó a cabo tales modificaciones se conoce con el nombre Sturm und Dmng, que significa en alemán «Tem- pestad y asalto» o, mejor aún, «Tempestad e ímpetu». Tal denominación procede del título de una obra de teatro escrita en 1776 por uno de los representantes de este movimiento, Friedrich Maximilian Klinger (1752- 29
  • 29. El romanticismo 1831), y al parecer fue A. Schlegel el primero que la utilizó para designar dicho movimiento, a principios del -siglo xix. Ambos términos constituyen probablemente una endíadis -expresan una única noción me- diante dos palabras- y por lo tanto su sentido sería «ímpetu tempestuoso», «tempestad de sentimientos», «caótico hervor de sentimientos». (El título original que Klinger puso a su obra fue Wirrwarr, «confusión caótica››.) Las posturas y las ideas de fgpdo de este movimiento son las si- ¿'J__ _ ä 1 I 'f Se redescube se exalta a si ., _ ae I como fuerza omni otente creadora de vida.EÍ enio como fue a ori inaria está li ado íntima- menfe con la naturgileza; crea de fifiã forma' análoga a la naturaleza; 2 or o tanto no recibe desde fuera sus re las sino ue es re a mismo. CZ)-Ã la conce ción deísta de la Divinidad como Intelecto o Razón su re- j mafcaractenlstica de la ilustración, empieza a contraponerse el panteísmo, mientras ue a re i iosi a asume nuevas formas 'ue se mani estan en s"'v'_""q""e i t ' d 1 ' 'i ria ' ' ie"ìlël Pi-6"u rsiones ex remas a raves e es in u i nico paganizan - meteo de Goethe o eii el herísmo cristiano H Isanto del mrtir roio Íe ciertos personajes de Michael Reinhold Lenz (1751-1792;? El senti- miento atriótico se ex resa mediante el o io al tirano, Ia exa ación de la libertad y el deseo de infringir las convenciones y las leyes externascì Son muy aprecia os los sentimientos ertes y las pasiones arre ata as e impe- (tuosas, asi como os caracteres rotundos. Sobre este movimiento habían influido algunos poetas ingleses, como James Macpherson (1738-1796), que había publicado unos Fragmentos de poesía antigua, atribuyéndolos a Ossian, un antiguo bardo. Además dela poesía de^Ossian, habia influidoel redescubrimiento de Shakespeare, autor sobre el cual Lessing ya había llamado la atención de los alemanes. Rousseau también había provocado una gran impresión con su nuevo seiitimieiito de la naturaleza, su nueva pedagogía y sus ideas políticas `(el Estado como contrato social). Entre los escritores de lengua alemana, además de Lessing, ejerció influencia sobre los Stürmer en especial el poeta Friedrich Gottlieb Klopstock (1724-1803), con su valoración eleva- da del sentimiento. Si el Sturm und Drang'sólo hubiese estado constituido por figuras como la.de Klinger (que acabó su vida aventurera como general del ejérci- to ruso) o la de Lenz (que murió en Rusia enloquecìdo y en la más absolu- ta miseria), que dejaron un legado literario de un valor muy limitado; el movimiento habría manifestado una relevancia escasa. El Sturm recibió sentido relevancia histórica su ranacional racias a ersona`es de la talla de äoeth Schiller o los filósofos Ílacobi Herder en sus rimeras obras poéticas y literarias. Cabe afirmar gue las fases más significativas del movimiento tienen como rota onista al ro io Goethe rimero en Es- trasburgo y luego en Francfort. Con el tragjagp ge gìpgglie a Weimar (1775) comienza la fase e decadencia del movimiento. 30
  • 30. El Sturm un Drang 1.2. El papel desempeñado por el clasicismo con respecto al «Sturm und Drang» y el romanticismo Algunos especialistas han comparado el Sturm und Drang con un - especie de revolución que anticipó de forma verbal en tierras germánicaz lo que sería poco después en el campo político la revolución francesa. En cambio, otros especialistas han considerado que se trataba de una especie de reacción anticipada ante la revolución iriisma, en la medida en' quei, aparece como una reacción contra la ilustración, que fue coronada- por`la1 revolución francesa. En efecto, como se ha advertido con razón,-se trata de una recuperación del espíritu alemán después de siglos de sopor, y del surgimiento de algunas actitudes peculiares del ánimo ïgermánicofi En cualquier caso, nos encontramos ante un preludio del roman_ticiSmo,šaun- que inconexo e inmaduro. El historiador de la filosoiïa G. de Ruggieró expresó esta noción de forma particularmente afortunada. Afirma: «Las manifestaciones del Stúrm und Drang ofrecen, en estado fluido e incan- descente, el metal en bruto que habrá de ser templado por el arte ,y la filosofía alemana.›› Y añade:.«La importancia del Sturm no es la de un, episodio aislado ycircunscrito, sino la de. una expresión espiritual colecti- va, que emerge de todo un pueblo. No sólo Klinger y Lenz, sino también Herder, Schiller, Goethe [a los que se podría agregar Jacobi] pasaron por el Sturm: los primeros se demoraron allí en. exceso y por ello fueron rápidamente superados; los segundos, en cambio, lograron otorgar forma a lo informe, y orden y disciplina al caótico contenido de la propianatura- leza. 'Para nosotros resulta particularmente importante la experiencia de estos últimos, porque nos permite estudiar en los individuos dos: fases sucesivas y opuestas de un mismo proceso histórico. No constituye una simple forma figurada de hablar el decir que el Sturm representa la juven- tud desordenada, y el clasicismo, lacoherente y serena madurezdel alma alemana. El Sturm es realmente la juventud de Herder y Goethe, que se alza_como símbolo de la juventud de todo un pueblo, y la victoria 'sobre este posee un significado personal, que concede un fundamento másjnti- mo y sólido a la crisis del alma colectiva.›› " En el texto que acabamos de citar se nombra el clasicismo, _qu__e;actuó como corrector de la incoherencia y el talante caótico de los Stüriñer. =En efecto, e c asicismo posee una gran importancia para la formación del espíritu de la época que estamos estudiando. Paulatinarnente, se va impo- niendo como antecedente e incluso como un componente más del_.roman- ticismo o, en cualquier caso, como uno de sus po1os~dialécticos,lo cual n`o_s obliga a hablar de él, aunque sea de manera sucinta. ` Sin ninguna duda, el culto a lo clásico no era algo ajeno al siglo xvm ilustrado. Empero, se trataba de un clásico artificial, repetitivo y carente por lo tanto de alma y de vida. Johann Winckelmann (1717-1768), en sus escritos sobre el arte antiguo, publicados entre 1755 y 1767, ,ya había expuesto las premisas necesarias para superar las limitaciones del clasicis- mo como mera repetición pasiva de lo antiguo. En realidad, a primera vista, una de sus máximas parecería afirmar lo contrario: «Para nosotros, el único camino para convertirnos en grandes y_, si fuese posible, ir_iimi_ta- bles, consiste en la imitación de1os'antiguos.›› Sin embargo, esta imitacion que vuelve inirnitables a quienes la practican consiste en recuperar la '31
  • 31. El romanticismo perspectiva de los antiguos, aquella perspectiva que supieron adquirir Miguel Angel y Rafael, y que les permitió alcanzar «en su origen el buen gusto» y redescubrir «la regla perfecta del arte». Es evidente, entonces, que ara Winckelmann la imitación de lo clásico ' entendida no sólo lleva a la naturaleza sino también a la Idea: «Los conocedores los imita- dores de las obras griegas hallan en estas obras maestras no sólo el as ecto mas Bello de la nafuraleza, sino también al o más ue la naturaleza detenninadas bellezas ideales de ella, ue... están com uestas or fi uras creadas sólo en el intelecto.›› Esta Idea es «una naturaleza superior», la verdadera naturaleza. Por lo tanto, se justifican estas importantes conclu- siones: «Si el artista se basa en estos fundamentos y deja que su mano y sus sentimientos sean guiados por las reglas griegas de la belleza, se coloca en el camino que le conducirá sin errores a la imitación de la naturalezá. Los conceptos de unidad y perfección naturales, propios de los antiguos, purificarán sus ideas sobre la esencia separada de nuestra naturaleza y las harán más sensibles. Descubriendo las bellezas de nuestra naturaleza, sabrá unirlas con lo perfectamente bello, y con la ayuda de las fomias sublimes que siempre están presentes en él, el artista se transformará en regla para si mismo.›› p Éste es el untode artidadel neoclasiismo romántico Comoexplica con muc o acierto L. Mittner -insigne istoriador ela iteratura alema na-,.«tendría que formarse orgánicamente a través de la cultura alemana, al igual que se había formado orgánicamente -según Winckelmann- el clasicismo griego. En dicha cultura existía la aspiración a un clasicismo que no fuese copia y repetición, sino misteriosa y milagrosa palìngenesia de los supremos valores de la antigüedad». Un «renacer de lo clásico» en el espíritu alemán y mediante el espíritu alemán, gracias a la perenne juventud dela naturaleza y del espíritu: ésta será la suprema aspiración de muchos escritores. Mittner agrega: «Todo el clasicismo alemán, salvo con- tadísimas realizaciones supremas, oscila entre dos tendencias opuestas, imitación mecánica del arte griego, arte clasicista más que esencialmente clásico y aspiración a un clasicismo nuevo y' genuino, inspirado por el espíritu griego, pero surgido mediante una evolución orgánica desde el espíritu alemán.›› En consecuencia, el neoclagicismo aspira a cambiar la naturaleza en forma la vida en arte no repitiendo sino renovando lo Fi los rie osgue icierop g g . No obstante, hay que señalar otros dos puntos muy importantes. En primer lugar, hay que advertir el tipo de influencia'que ejerció el cla cismo sobre los mc`ores re resentantes del Sturm. a clave del es íri-S1 J P L±¬ __._______E,_... tu clásico es la medida, el límite, el equilibrio. Herder, Sc iller y Goethe 1 trataron de encauzar as inestructuradas fuerzas del Sturm und Drang en función de este orden y esta medida. Precisamente. del choque entre la tempestuosidad y la impetuosidad del Sturm y la noción de «líinite››, que es el elemento característico de lo clásico, nacerá lo romántico en sentido estricto. En segundo lugar, debe senalarse que el renacimiento de los griegos también será esencial para la filosofía y no sólo para el arte. Schleierma- cher traduce los diálogos platónicos y los vuelve a introducir en lo mas vivo del discurso filosófico. Schelling tomará de Platón conceptos tan fun- damentales como la teoría de las Ideas y la noción de alma del mundo. 32
  • 32. Complejidad del fenómeno Hegel elabora un grandioso sistema gracias al redescubrimiento' del anti- guo sentìdo clásico de la dialéctica, 'con el añadido de`una novedad: el elemento que él llama «especulativo»_ Hegel se enriquece enormemente a través del constante coloquio con los filósofos griegos, y no sólo mediante su coloquio con los grandes pensadores consagrados por una tradición bimilenaria, sino también con los presocráticos, en especial, con Heracli- to, cuyos fragmentos aprovechó en su Lógica casi en su totalidad. Por lo tanto, sin el componente clásico no cabría explicar ni la poesía ni la filoso- fía~de la nueva época, y lo que acabamos de decir nos ha brindado los elementos necesarios para determinar cuáles sonlos rasgos esenciales del romanticismo. 1.3. La complejidad del fenómeno romántico y sus rasgos esenciales Definir el romanticismo constituye una empresa bastante difícil, y hay quien dice que resulta imposible. Alguien ha-calculado que se han ofreci- do más -de 150 definiciones de este fenómeno y Mittner recuerda que el mismo`F. Schlegel, el 'fundador del círculo de los románticos, escribía a su hermano que no.podía enviarle su propia definición dela palabra «román- tico», porque «ocupaba 125 horas». Dejando a un lado las paradojas, uno puede orientarse con cierta comodidad en esta intrincada cuestión si se establecen una serie de perspectivas y de categorías que sirven ara deter- minar los rasgos esenciales del fenómeno del rop1anticismo.@pEn primer lugar, conviene explicar el ori en etimológico del término, desdeun punto de vista filológico y léxicm@ luego habrá que determinar los límites cronológicos y geográficos de fenómeno@será necesario después espe- cificar cuál es su categoría psicológica o moral, como fue llamada, es decir, aquel modo peculiar de sentir y a ellas características psicológicas que son propias del hombre románticmë es necesario establecer el con-' tenido o contenidos conceptuales que el hombre romántico asume como propios; habrá que determinar a continua ión las formas artísticas a través de as cuales se manifiesta todo esto;@finalmente nos hemos de preguntar en que sentido se puede hablar y se abla de «filosofía románti- ca». Cosa que en nuestro contexto posee una gran importaiicia. A conti- nuación vamos a ir solucionando cada uno de estos problemas,__siguiendo 'el rdenen que los hemos expuesto. W Lapalabra «romántico» posee una historia larga y complicada, que se inicia en un período anterior al que estamos estudiando y en el que ad- quiere un significado técnico. A.C. Baugh, autor de una famosa historia de la literatura inglesa, la resume en los siguientes términos: «El adjetivo “romántico” aparece por primera vez en Inglaterra hacia mediados del siglo xvn, como término utilizado para indicar algo fabuloso, extravagan- te, fantástico e irreal [como se encuentra, por ejemplo, en algunas novelas caballerescasj. Fue redimido de esta connotación negativa durante el siglo siguiente, en el que se utilizó para indicar escenas y situaciones placente- ras, como las que aparecían en la narrativa y en la poesía “románticas” [en el sentido antes indicado]. Gradualmente el término “romanticismo” lle- gó a indicar el resurgir del instinto y de la emoción,-que el racionalismo predominante en el siglo xviii jamás había suprimido del todo.›› F. Schle- 33
  • 33. El romanticismo g_e_Lvinculó lo romántico con el romance y con lo que ése había significado paulatinamente en las expresiones épicas y líricas de la edad media y en la moderna novela psicológica, autobiográficae histórica. Para Schlegel, ro- mántica era la moderna forma de arte, que, en cuanto evolución orgánica que abarcaba desde el medioevo hasta su tiempo, poseía una clave pecu- liar, su propia esencia específica, una belleza y una verdad propias, dife- rente de las griegas. Esto, sin embargo, nos remite a otros problemas, que hemos de exponer más adelante. Y Como categoría historiográfica (y geográfica), el romanticismo de- sign el movimiento espiritual gue incluia ng solo la poesia y la filosofia sino también las artes figurativas y la musica, y gue se desariolló en Euro- p_a entre finales del siglo xviii y la primera mitad del xix. En Inglaterra pue en detectarse algunos sintomas anticipa ores e a movimiento, pe- ro la verdad es que éste lleva una acusada impronta que proviene sobre todo del ánimo y del' sentir germánicos. Se expandió por toda Europa: Francia, Italia, España _y, por supuesto, Inglaterra. En cada uno de estos países el romanticismo asumió rasgos peculiares y se vio sometido a trans- 'f ` . E t d l ' b 1 e to ad' máticoormaciones n o os os casos, sin em argo, e mom n i del romanticismo es el ue está a caballo entre los si los xviii xix en Ãlemania, en los círculosconstituidos por los hermanos Schlegel en .Iena , lue o en Berlín e u a du an e ste eriodo en estosEnel fenómeno qu tiene l g r r t e p ' y pai s, pero sobre todo en Alemania, pueden descubrirse, aunque sea con las debidas cautelas críticas, ciertas constantes que implican una especie de mínimo común denominador. Este puede h llarse en rimer lugar, en lo que constituye el estado de ánimo,[Ia aetitãd psicolóàieall el ethoso clave espiritual del hombre romántico. La actitud romántica consiste en pr_i_a condición de disensión interior, en un sentimiento de aflicción siem- preÍ`iì'isati'sfecha, que se halla en contraste con la realidad y que aspira a algo más,__qu_e sin embargo' se le escapa una y otra vez. Mittner ofrece la más eficaz descripción del romanticismo como categoría psicológica y se expresa en estos términos: «En calidad de hecho sicológico, el sentimien-' to romántico no es aquel gue se afirma por encima de'I'a"'raz'"on, o un sentimiento de particular inmediatez intensidad o violencia. Tam oco es lo llamado sentimental es decir, un sentimiento melancólico-contem at'- vo° es ' bien un hecho de sensibilidad, el hecho uro sim le de la' sensibilidad, cuando esta se traduce "en" un estadode excesiva o ermane - te im resionabilid d irritabilidad y reactividad. En la sensibilidad román- tica plëdñfiina el amor por la irresoluciòn y las ambivalepeias_,_|g inguie-_ tud y el desasosie o ue se com lacen en ellos mismos y en ellos mismos se agotan.›› El término Sehnggglit se ha convertido en el más típico -es casi un término técnico- para expresar estos estados de ánimo, y su traducción más aproximada es «recogco¡pio» (los sinónimos «deseo ardiente», «ansia››, «anhelo apasionado», son menos representativos). Mittner tam- bién explica muy bien este términoy el concepto correspondiente: «La palabra más característica del romanticismo alemán, Sehnsucht, no'es la Heimweh, la “nostalgia” (“añoranza”, deseo del regreso a una felicidad antes poseída o, por lo menos, conocida y deterniinable); en cambio, se trata de un deseo que jamás puede lograr su propia meta, porque no la conoce y no quiere, o no puede, conocerla: es la búsqueda (Sucht) -del 34
  • 34. Complejidad del fenómeno deseo (Sehnen). Pero Sehnen con mucha frecuencia también significa un deseo irrealizable porque es indefinible, un desear todo y nada al mismo tiempo; no por azar Sucht fue reinterpretado como [. . .] un Suchen, un buscar; y el Sehnsucht es realmente una búsqueda del deseo, un desear el desear, n_n deseo sentido como algo inextinguible y que 'precisamente por fsto halla en sí mismo su propia y plena satisfaccìón.›› è, Sin embargo, no es suficiente con esto. Hay que relacionar la cate- goria psicológica romántica con la categoría del gpntenido ideal y concep- tualdel romanticismo. En el perío o a que nos estamos refiriendo existen defeïminadas ideas y representaciones que en la mayoria de los casos están asociadas con aquel sentir que hemos mencionado, aunque, como se ha af' mado reiteradamente, el romanticismo no es un sistema concep- tal. TOCl0át'CC 'Ctn dd°f'°t l -u or m ni o xperim n au ase ein ini o, y aque reconco mio ue es deseo irrealiza e- o es justamente or ue o ue en rea idad ansia es lo Infinito. Quizá nunca se baya liablado tanto de «infinito» como en esta época, entendiéndolo de maneras muy diversas. El romántico expresa esta tendencia hacia lo Infinito como un Streben, es decir como un perenne tender, que jamás conoce pausa, porque las experiencias huma- nas son todas ellas finitas, en la medida en que su objeto siempre es finito y hay que trascenderlas. A estepropósito es muy ilustrativa la razón por la cual el protagonista del Fausto goethiano -una de las creaciones más re- presentativas de este período- llega a la salvación: se salva porque dedicó íntegramente su existencia a este perenne Streben. Lo Infinito es el senti,- dl'dlf"tEt tttlf'lf' l 'o araiz e o inio. n ese uno ano a iosoia como a oesia coinciden plenamente: la filosofia debe captar y mostrar el nexo gue vin- cula o Infinito con lo finito mientras ue el ar e e e llevarlo a cabo¿__l_a Iobra de arte es lo infinito due se manifiesta a través de lo finitoä›_I_.._a naturaleza asume una importancia fundamental, y se ljbegg* tptalmente de la concepción mecanicista-ilustrada. Es congebida ahora como .vida que crea etegnamenie y en la cual la muerte no es más gue «un artificio para poseer más vida» (Goethe). La naturaleza es un gran organismo por com- pleto afín al organismo humano, es un móvil intercambio de fuerzas gue, obrando desde dentro, genera todos los fenómenos y, por lo tanto tam- ` ' la fuerza de la naturaleza es la fuerza misma de lo divinobien al hombre:_ ' _ . «¡Sagrada naturaleza! -exclama Höldcrlin-. Siempre eres igual en nií y fuera de mí, a lo divino que hay en mí.›› Schelling dirá que la naturaleza es vida que duerme, inteligencia petrificada, espíritu que se transforma en cosa visible. Se recupera y se potencia en gran me 'da el antiguo sentido griego de la Physis y de la naturaleza renacentista@ Estácstrechamente l' ado e te ent'do de l naturaleza el sentid n`co el nt`d d li a s s i a o i , se i o e a pertenencia al Quo-Todo, el-sentido de ser un momento orgánico de la totalidad. ' ' ' ' la inversa- e ` . ' " ' El Todo se refleja de algun modo en el hom re, asi como -a l hombre se refleja en el Todo Un pasaje de Holderlin puede suministrarnos un ejemplo muy claro: «Ser uno con el Todo, este es el vivir de los dioses; esto es el cielo para el hombre. Ser uno con todo lo-que vive, y volver, en un feliz olvido de sí mismo, al todo de la naturaleza, tal es el punto más elevado del pensamiento y de la alegría, es la sagrada cumbre de la montaña, es el lugar de la.eterna calma, donde el mediodía pierde su bochorno, se desvanece la voz del trueno, y el-mar que se agita y se llena de espuma recuerda las ondas de un campo de trigo. ¡Ser-uno con 35
  • 35. reglas de un artista que esta embelesado por su Urania, la ferrea fatalidad renuncia a su poder, la muerte desaparece de la sociedad de las criaturas, y la indisolubilidt d y la eterna juventud hacen que el mundo se vuelva , 'G «La naturaleza posee un instinto artistico: por eso resulta ocioso distinguir entre naturaleza y arte. Todo lo más, se distinguen en el poeta, por el hecho de que son íntegramente intelectuales y no pasionales, y de que se convierten de manera involuntaria en fenómenos musicales, poéticos»; «Sin genialidad no existiríamos todos nosotros. En todo es necesario el El romanticismo todo lo que vive' Con estas palabras la virtud se desprende de su austera coraza, el espíritu humano deja su cetro y todos los pensamientos se dispersan ante la imagen del mundo eternamente uno, al igual que las feliz y hermosm@ El enio la creación artística son elevados a su rema expresión de lo erdadero y lo Absolfito. Ñovalis, por su parte, escribe: genio››; «La poesía sana las heridas asestadas por el intelecto»; «El poeta com rende la naturaleza me`or ue el científico» El enio ara Novalis.._..2__.._____,_ _ J Q ______f,, -_ 8 ›P › se convierte en «instinto magico», «piedra i osofal» del espíritu, aquello que puede convertirse en todo. Sclielling transformará el arte (cf. p. 87s) en órgano supremo de la sabiduría trascendental.®Los románticos expe- rimentan, además, nn yigorosísimo anhelo de libertad, gue para muchos de ellos expresa el fondo mismo de la realidad, y por lo tanto la aprecian en toda§ sus manifestaciones. En Enrique de Oƒterdingen, Novalis escribe: «Toda cultura conduce a aquello que sólo puede calificarse de libertad, ya que con este término debe desígnarse no un simple concepto, sinoel fondo activo del ser todo. Tal libertad es magisterio. El maestro ejerce plenos poderes, de acuerdo con un designio y en una secuencia determina- da y meditada. Los objetos de su arte son suyos a discreción y no se ve obstaculizado ni impedido por ellos. Esta libertad, o magisterio, o domi- nio, es la esencia, la causa de la conciencia. En ella se pone de manifiesto la sagrada individualidad, el inmediato obrar de la personalidad, y todos los actos del maestro son al mismo tiempo una revelación del mundo delo alto, simple, manifiesto, son palabras de Dios.» Fiehte convertirá la liber- tad en punto focal de su sistema el mismo Hegel considerará que la libertad es la esencia, del Espíritu.ôEn general, la religión se ve revalori- zada colocada mu or encima del nivel al ue l había reducido l ilustración. n la ma oría de los casos, se ie a e la reli ión es una relación del hombre con lo In inito y o Eterno. Hay un dato de liecho que resu ta particularmente ilustrativo: casi todos los representantes más nota- bles del romanticismo experimentaron fuertes crisis religiosas, y momen- tos de intensa religiosidad: desde Schlegel hasta Novalis, desde Jacobi a Schleiermacher, Fiehte y Schelling. En Hegel la religión es el momento más elevado del Espíritu, únicamente superado por la filosofía. Y se con- sidera que la religión cristiana es la religión por excelencia, aunque en- tendida de modos divcrsos®Eii elparágrafo anterior ya hemos hablado del componente que representa la cultura griega y de la influencia del elemento clásico. Recordemos que se trata de una ecia- focada desde esta nueva sensibilidad y" notablemente idealizadaìNo es este el lugar apropia o para alion ar en otros temas más cspecí icos, por ejemplo, el amor a los orí enes, el sentimiento nacional, o el renacido interes' pgr la edad media en encral por la historia. Es suficiente con mencionar estos factores, sobre los que Tendremos que volver más adelante. 36