Interesante presentación que nos ofreció el Dr. Abraham Sánchez Aguilar en la casa sede de la Sociedad Teosófica de Puebla sobre el tema de como abordar la muerte.

1. ¿A dónde van nuestros
seres queridos cuando
mueren?
Conferencia
Dr. Abraham Sánchez
Aguilar

2. ¿A dónde van nuestros seres
queridos cuando mueren?
• El morir es una de las
experiencias más
transformadoras, poderosas y
espiritualmente
enriquecedoras. Iosu
Cabodevilla:
• Es una oportunidad única e
irrepetible, aunque durante
nuestra vida tenemos muchas
“pequeñas muertes”.
• Es la última experiencia para
la que la persona, cada uno de
nosotros, se acerque más y
más a la profundidad de sí
mismo.

3. ¿A dónde van nuestros seres
queridos cuando mueren?
• Sthepen Levin en su
magnífico libro
¿Quién muere? Nos
dice que vivimos en
una sociedad
condicionada para
negar la muerte, pues
nos sentimos
culpables de morir
porque no sabemos
cómo vivir.

4. ¿A dónde van nuestros seres
queridos cuando mueren?
• La muerte no es un
fracaso, forma parte de la
vida. (Cabodevilla). Es un
acontecimiento que debe
vivirse.
• La vida incluye el morir,
de hecho es parte de ella.
La condición humana es
caduca. La vida tiene que
ser sobre todo una vida
vivenciada.

5. ¿A dónde van nuestros seres
queridos cuando mueren?
• La vida es Una, lo
que vemos y
experimentamos son
múltiples formas de
esa vida.
• Morir es
desprenderse. La
muerte no quita
nada, porque morir es
volver a ser lo que
somos.

6. ¿A dónde van nuestros seres
queridos cuando mueren?
• Proceso de la Muerte:
• 1. Muerte: dejamos el cuerpo
físico, vitalidad y doble etérico
• 2. Despertamos como de un
sueño, deambulamos por un
tiempo en plano paralelo terrestre.
• Recorremos un túnel, o subimos a
un tren, o en una barca, u otros.
• 3. Percibimos la Luz Fundamental
y decidimos entrar en ella.
• 4. O por el contrario no nos
unificamos en la Luz, entonces
vemos sus componentes
individuales personificados como:
Jesús, Buda, Krishna, Hermes.
Ahí un ser de gran sabiduría que
nos guía.

7. El acompañamiento al moribundo
también es nuestra
Preparación.
• El conocimiento de uno
mismo, es algo previo a
cualquier intento de
acompañamiento.
• ¿Cómo pretender escuchar
el sufrimiento espiritual de
un moribundo si no se ha
empezado por escuchar el
propio?
• Escuchar y acompañar al
moribundo al final de la vida,
no solo es ayudarlo a saber
vivir el momento presente, con
toda su intensidad.

8. ¿A dónde van nuestros seres
queridos cuando mueren?
• Si uno no es capaz de
prestarse atención a sí
mismo, tampoco lo podrá
prestar a los demás.
• No se puede realizar un
acompañamiento
espiritual adecuado sin
aceptar nuestra propia
angustia y tener un
conocimiento de nuestras
heridas y de nuestras
defensas.

9. ¿A dónde van nuestros seres
queridos cuando mueren?
• Le agradeceremos de
respuesta al siguiente
ejercicio:
• Ejercicio n. 1

10. El acompañamiento al moribundo
también es nuestra
Preparación.
• La muerte es la etapa
final del crecimiento en
esta vida. Pero no es una
muerte completa, pues
solo muere el cuerpo. La
consciencia espiritual es
eterna y sigue su camino
hacia las esferas
superiores.
• Nuevas etapas esperan
al viajero, y para ello el
apoyo espiritual del
acompañante es muy
valioso.

11. El acompañamiento al moribundo
también es nuestra
Preparación.
• Algunas de las condiciones y valores
que el acompañamiento espiritual
demanda:
• 1. Escucha efectiva (importante)
• 2. Desapego (importante)
• 3. Paz consigo mismo (temas
emocionales y psicológicos
pendientes) Una mente en silencio y
sin ruidos interiores
(necesidades insatisfechas)
• 4. Integridad (importante)
• 5. Autorrespeto – aceptación
(importante)
• 6. Seguridad, autoestima estable
• 7. Enfrentamiento de situaciones
difíciles como su propia muerte
• 8. Empatía con el sufrimiento de los
demás. (importante)
• 9. Amarnos

12. El acompañamiento al moribundo
también es nuestra
Preparación.
• Desapego – cercanía:
Guardar silencio para permitir un
espacio necesario para sentir sin tener
que expresar ningún comentario. Se
trata de que el moribundo viva y
atraviese para sanar sus viejas
heridas.
• Integridad:
Es la característica que nos permite
ser nosotros mismos, sin falsedad. Es
cuando las palabras y el
comportamiento concuerdan con
nuestros sentimientos internos.
• Autorrespeto – aceptación:
Aceptamos cuando permitimos que el
moribundo descubra su propia
responsabilidad en sus decisiones, sin
hacerle sentir culpable por ello.
• Concreción: Ayudar a la persona a
concretar lo que de verdad le hace
sufrir.

13. El acompañamiento al moribundo
también es nuestra
Preparación.
• ¿En qué consiste la ayuda al
moribundo?
• Esta ayuda consiste,
básicamente, en permitirle
enfrentarse a sí mismo/ma, y a
su propia muerte, en un intento
de resolver esta última crisis
de la existencia de un modo
razonablemente satisfactorio,
fortaleciendo su autoestima,
dignidad e integridad.
• Debemos rodear al moribundo
de una atmósfera apacible.
Ello puede crearse a través de
una presencia viva, atenta y
respetuosa.

14. El acompañamiento al moribundo
también es nuestra
Preparación.
• Demostraciones de
espiritualidad en el
moribundo
• 1. Reconciliación con la
vida
• 2. Las elecciones
• 3. Los hitos
• 4. Elaboración del dolor
de la separación
• 5. La continuidad de la
vida en otra forma
• 6. La esperanza

15. El acompañamiento al moribundo
también es nuestra
Preparación.
• Este acompañamiento
espiritual solo puede surgir
desde la humildad de saberse
en comunión con el
enfermo, de que también
nosotros moriremos algún
día, y lo que el moribundo vive
es algo que también me
pertenece a mí.
• Vivenciando mi propia
Muerte:
• En el instante que
abandonamos el
cuerpo, tenemos la capacidad
potencial de ver como la
mente forma el mundo, como
el mundo está en nosotros y
no nosotros en él.

16. El acompañamiento al moribundo
también es nuestra
Preparación.
• Ejercicio n. 2
¿Cómo le gustaría
morir?:

17. El acompañamiento al moribundo
también es nuestra
Preparación.
• Tendencias Mentales
acumuladas durante su vida
• Según como nos relacionemos
con la experiencia en el
presente, nos relacionaremos
con el mismo estado de ánimo
en el futuro.
• Nuestras tendencias
inconscientes, lo que vamos
acumulando en la
mente, parecen continuar
momento a momento, y la
muerte no impide esa
continuidad.
• Ejercicio n. 3

18. El acompañamiento al moribundo
también es nuestra
Preparación.
• Mis temores a la
muerte:
• Es nuestra autoimagen lo
que perdura después de
la muerte.
• ¿Por qué imaginar que el
miedo a la muerte, a la
disolución del cuerpo,
cesará en el momento de
abandonar este cuerpo?
• Le agradeceremos de
respuesta a las
siguientes preguntas:
• Ejercicio n. 4

19. El acompañamiento al moribundo
también es nuestra
Preparación.
• Ejercicio n. 5:
• Visualización de la propia
Muerte:
• En base a la información
anterior, el participante seguirá
las instrucciones del
moderador para hacer una
visualización.
• Trate de sentarse en posición
cómoda y preste atención a su
respiración. Deje que su
mente y su cuerpo se
aquieten.
• (Seguir indicaciones del
moderador en este ejercicio)

20. El acompañamiento al moribundo
también es nuestra
Preparación.
• La Luz Fundamental:
• Empero, al producirse el
esclarecimiento se
elimina total y
definitivamente la ilusión
de la
separatividad, volvemos
a lo que siempre
fuimos, y la
transformación superficial
del pasado se disuelve
dentro de la Luz de la
realidad subyacente.

21. ¿A dónde van nuestros seres
queridos cuando mueren?
• Quizás veamos personificada
la bondad en la Madre Teresa
• Quizás veamos personificada
la ira en algún enemigo que
tuvimos en asunto pasado que
dejamos pendiente.
• Celos o envidia como el
furioso amante que dejamos
plantado
• El miedo como una gran
serpiente que intenta
comernos

22. ¿A dónde van nuestros seres
queridos cuando mueren?
• ¿Por que volvemos a la vida?
• En la medida en la que reconozcamos que
somos el espacio donde todo está sucediendo,
afrontamos cualquier circunstancia futura con la
misma espontaneidad.
• Siempre que queden ataduras para que se
produzca la encarnación, esta se producirá. Si
lo ilusorio parece real en esa misma medida lo
ilusorio volverá a atraer la percepción sobre sí
mismo.
• ¿Qué ataduras tiene aun sin resolver?
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23. ¿A dónde van nuestros seres
queridos cuando mueren?
• Para el sujeto que ha muerto
desorientado:
• Bueno (nombre) el solo hecho
de que sigas mi voz y veas tu
cuerpo significa que las cosas
no son como pensabas. Has
muerto y eso está
bien, probablemente no sea la
primera vez.
• Decirle desde el fondo de
nuestro corazón:
Suéltate, vamos. Solo has
muerto. No estés confundido
déjate guiar por el amor.
Entrégate y entra en la LUZ.