El documento discute las actitudes de los jóvenes hacia el tabaco y otras drogas, sugiriendo que los que fuman creen que reduce el estrés pero no consideran los daños a la salud, mientras que los que no fuman lo ven como un vicio dañino y tratan de evitar a los usuarios, concluyendo que los padres y amigos deben brindar apoyo psicológico a quienes usan drogas.