Prueba libre de Geografía para obtención título Bachillerato - 2024
Teatro anterior a 1936 : Lorca y otros autores
1.
2. “La historia del teatro español del primer tercio del siglo XX no es
una, sino múltiples: la de los autores exitosos y marginados, la de
los teatros madrileños y de provincias, la de las compañías y sus
actores, la del desarrollo del papel escenográfico, del
luminotécnico, la de las condiciones físicas de la
representación, la del drama convencional del teatro poético,
del costumbrismo, del género chico, etc.”
Andrés AMORÓS.
En las primeras décadas del siglo XX:
› Siglo anterior: dominado por el drama realista y las
obras de José Echegaray.
› Hubo diversos intentos de renovación teatral pero no
tuvieron gran éxito.
› El teatro del primer tercio de siglo se ve fragmentado
en dos: el teatro que triunfa entre el público y que
mantiene las fórmulas anteriores y el teatro que
pretende innovar.
3. LAS COMEDIAS BURGUESAS
› Jacinto BENAVENTE: retrató a las clases altas, con sus
hipocresías y convencionalismos. Sus obras siguen la línea
de las comedias de salón, excepto su obra maestra: Los
intereses creados (elementos de la comedia
dell’arte)También intentó el subgénero del drama
rural: La Malquerida.
EL TEATRO POÉTICO: escrito en verso, exalta los
ideales nobiliarios y los grandes hechos del pasado;
cierta voluntad de emular el teatro del Siglo de Oro, con
matices neorrománticos y aspectos formales del
Modernismo. Francisco VILLAESPESA y EDUARDO MARQUINA.
› EDUARDO MARQUINA cosechó grandes éxitos con dramas
históricos, como Las hijas del Cid.
4. LOS GÉNEROS CÓMICOS que alcanzaron el
éxito fueron: la comedia costumbrista y el sainete.
Los hermanos Álvarez Quintero: llevan a escena
una Andalucía tópica y sin más problemas que los
sentimentales. Destacamos: los sainetes en un acto
y ciertas comedias que son sainetes en tres actos. El
patio o El genio alegre.
Carlos Arniches: mostró en su producción dos
vertientes:
› Los sainetes de ambiente madrileño.
› Lo que él llamó tragedia grotesca, interesante
intento. Son obras que funden lo grotesco y lo
conmovedor con la observación de costumbres y
una actitud crítica ante las injusticias. Esto se aprecia
en La señorita de Trévelez.
5. Esta otra faceta del teatro busca
innovaciones técnicas, nuevos enfoques
ideológicos, cambios en la actitud, en la
forma de representar… Dichos cambios no
fueron bien acogidos en la época.
En esta vertiente encontramos a:
› Valle-Inclán, Unamuno, Azorín, Jacinto Grau,
Ramón Gómez de la Serna, Miguel
Hernández, Rafael Alberti, Max Aub,
Alejandro Casona, Jardiel Poncela… y
cómo no: Federico García Lorca.
6. UNAMUNO: escribe un tipo de dramas de ideas, con
diálogo denso y poca escenografía. Era un “teatro desnudo”
que suponía la reducción de los personajes al mínimo.
Escribió nueve dramas, entre ellos El otro.
AZORÍN: combatió la estética naturalista y luchó por un
teatro antirrealista que incluyera lo subconsciente y lo
maravilloso. Su obra más interesante: Lo invisible.
JACINTO GRAU: se dedicó a hacer un teatro culto
que despertó intereses en París, Londres, Berlín… y fracasó en
España. Su obra maestra es El señor de Pigmalión
(transposición del famoso mito clásico, en la que presenta a
un artista, creador de unos muñecos que, anhelantes de
vida propia, se rebelan contra él.)
7. Pedro Salinas, Rafael Alberti, Miguel
Hernández, Alejandro Casona, Max Aub
y Federico García Lorca intentaron crear
otro tipo de teatro con la pretensión de:
› Depurar el teatro poético.
› Incorporar las formas de la vanguardia.
› Acercar el teatro al pueblo.
Estas tres facetas confluyeron en Federico
García Lorca.
8. Pedro Salinas: escribió teatro del exilio principalmente.
Rafael Alberti hace un teatro de tipo surrealista: El
hombre deshabitado.
Miguel Hernández: cultivó un teatro social con ecos
de Lope de Vega; su obra de más éxito fue El labrador
de más aire.
Alejandro Casona es un dramaturgo puro que se
reveló con el Premio Lope de Vega otorgado a La
sirena varada.
Max Aub fue un gran dramaturgo que escribió
comedias de vanguardia impropias de los teatros
españoles del primer tercio. Entre sus obras: Espejo de
avaricia o Narciso.
Sin embargo, con todos, el teatro español de las
primeras décadas sólo alcanzó la cima con la obra de
Valle Inclán y Lorca, los únicos que lograron una
calidad indudable en la renovación teatral. Sus obras
influyeron decisivamente en el teatro posterior.
9. “El teatro de Valle es, como totalidad, una de las más extraordinarias
aventuras del teatro europeo contemporáneo y, desde luego, el de más
absoluta y radical originalidad en el teatro español del siglo XX”. Ruíz
Ramón.
En su trayectoria dramática se observa una constante voluntad de
renovación formal y temática y una pretensión de romper con el
teatro de su época. Su teatro no se ajustaba al espacio escénico
de la época, exigía técnicas especiales, todo esto supuso una
exclusión en los escenarios pero, en los últimos años, los dramas de
Valle han sido llevados a escena frecuentemente.
Progresivamente Valle evolucionó hacia su creación máxima, el
esperpento, cuyos elementos se observan desde sus primeras
obras: El marqués de Bradomín, El yermo de las almas.
La producción de Valle culminó en el esperpento: un mundo
distorsionado, en el que se deforman aspectos de los personajes,
produciendo una visión caricaturizada, cómica y macabra. Esta
nueva técnica se refleja en Luces de bohemia y Martes de
carnaval.
Otros dramas son: Comedias bárbaras, El embrujado y Divinas
palabras. Escribió cuatro farsas, las tres últimas se reúnen bajo el
título Tablado de marionetas para educación de príncipes.
Valle escribió desafiando las convenciones del teatro de la época.
10. Fue el creador del verdadero teatro poético. En él, además de
la palabra, cobran importancia otros componentes, como la
música, la danza y la escenografía, configurando, así un
espectáculo total.
La producción dramática de Lorca expresa los problemas de
la vida y de la historia, a través de un lenguaje cargado de
connotaciones.
Desde 1930, en su teatro se observa una diversidad de líneas
temáticas:
› Escribió farsas: El retablillo de don Cristobal.
› Comedias imposibles u obras “irrepresentables” que anticipan la
ruptura de la lógica espacio-temporal, el desdoblamiento de la
personalidad y la posibilidad de posibles interpretaciones: El público.
› Obras de temática social: Mariana Pineda.
› La “trilogía dramática de la tierra española”, que estaría
representada por Bodas de sangre, Yerma y La casa de Bernarda
Alba. Las tragedias lorquinas se desarrollan en un ambiente rural.
Años antes de que llegara el teatro del absurdo, Lorca rompe
con todas las convenciones vigentes en la escena de su
tiempo; el resultado es un teatro de la vida.
11. Lorca se acerca al teatro como poeta que es
y eso ha hecho que la expresión «teatro
poético» sea la que mejor se acomode a su
producción dramática. No estamos hablando
de teatro en verso, hay que aclarar (aunque
Lorca sí que utiliza el verso en algunas de sus
obras) sino de la concepción del hecho
teatral.
En 1936, mientras está escribiendo La casa de
Bernarda Alba, Lorca lo explica así: «El teatro
es la poesía que sale del libro y se hace
humana. Y al hacerse habla y grita, llora y se
desespera». Lorca ve en el teatro el medio
más perfecto para llegar directamente a la
gente, más inmediato y efectivo que la
poesía, pero sin renunciar a ella.
12. Lorca añade a su condición de autor, la de «hombre
de teatro». Sus conocimientos de las interioridades
de una representación, su trabajo como actor,
como director de escena, como constructor de
decorados, todo ello le lleva a dominar cada vez
con mayor perfección todos los elementos del
desarrollo dramático.
En lo que se suele considerar su periodo de madurez
como autor dramático produce cinco obras (Bodas
de Sangre, La Zapatera Prodigiosa [en su segunda y
definitiva versión], Yerma, Doña Rosita la Soltera y La
casa de Bernarda Alba) que representan una de las
cimas del teatro universal y que indicaban un
camino que nadie ha podido seguir. Porque además
de hombre de teatro y de poeta, Lorca es un
innovador. Un innovador arriesgado, que busca
siempre hacer algo diferente y que se atreve con lo
que nadie se ha atrevido.
13. En síntesis, podemos afirmar que el teatro de
Federico García Lorca inició el cambio en las
formas de “hacer teatro” porque intentó
instalar la escena española en la modernidad
artística. Su teatro discurre desde el “teatro de
arte” hasta un “teatro deshumanizado” pero
que atiende a las necesidades del pueblo,
pretensión primera del teatro, y él lo consiguió
mezclando en sus obras tradición, vanguardia,
floclore y todos los géneros y subgéneros que
tuvo a su alcance (farsa, comedia, tragedia,
drama). Tan bien lo hizo que hoy día seguimos
estudiando sus obras y disfrutando de esa
cercanía que logró con el espectador.