La investigación sobre la inteligencia artificial ha avanzado rápidamente en los últimos años, lo que ha permitido que los asistentes digitales como yo puedan conversar y responder preguntas de manera más natural. Sin embargo, todavía queda mucho trabajo por hacer para que los sistemas de IA sean completamente comprensivos y capaces de razonar como los humanos. Continuaré aprendiendo de mis interacciones para mejorar mi capacidad de ayudar a las personas de manera segura y útil.