El documento resume los efectos de la pandemia de COVID-19 en la calidad del aire en España. Durante el confinamiento, los niveles de NO2 cayeron un 52% debido a la reducción del 90% en el tráfico y el 70% en la actividad industrial. Aunque los niveles aumentaron de nuevo en verano y otoño, se mantuvo una reducción del 38% en promedio. Las ciudades mediterráneas tuvieron mayores caídas. El documento propone medidas como fomentar la bicicleta y el teletrabajo
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Calidad aire urbano España COVID-19
1. INFORME DE ECOLOGISTAS EN ACCIÓN
SOBRE LOS EFECTOS DE LA CRISIS DE LA
COVID-19 SOBRE LA CALIDAD DE AIRE
URBANO EN ESPAÑA
Fabio Vaca Tejedor
Ana Madejón Martínez
2. INFORME:
Julio Díaz y Cristina Linares, del Departamento de Epidemiología y Bioestadística del Instituto de
Salud Carlos III
El NO2 es el contaminante típico emitido por los tubos de escape de los automóviles (además de
por las calderas industriales y domésticas), por lo que su evolución está directamente ligada a
las emisiones del tráfico motorizado, siendo ésta su principal fuente en las ciudades y el principal
factor que influye en la calidad del aire urbano.
Causas de las caídas:
● La reducción de la actividad industrial y la generación de electricidad y un descenso
tan marcado de la circulación y emisiones a la atmósfera del tráfico motorizado,
fuentes principales de la emisión de los contaminantes a la atmósfera, ha incidido
en una mejora muy significativa de la calidad del aire que respiramos. El efecto ha
sido mucho más claro en los dos meses y medio de restricciones severas: caídas del
90 % en el tráfico en grandes ciudades en algunos días, y a descensos superiores al
70 %. El descenso en el uso del transporte público urbano, que superó el 90 % en las
cercanías ferroviarias y en los autobuses urbanos, ya que era percibido como
potencialmente peligroso
● Modificaciones laborales como el teletrabajo y el cierre o suspensión de actividad
de numerosas empresas en sectores de gran impacto como el turismo, han
contribuido a que esta disminución de las emisiones contaminantes se prolongue el
tiempo.
● Las medidas de confinamiento social y de restricción de la actividad económica
adoptadas en un primer momento por las autoridades para limitar el contagio del
virus y evitar un eventual colapso del sistema público de salud
● Marzo de 2020 fue el mes más lluvioso en la Península Ibérica desde que se tienen
registros, lo que favoreció decididamente la dispersión del NO2 y otros
contaminantes atmosféricos.
3. Datos:
Las estaciones de medición de la calidad del aire, la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA)
ha estimado reducciones significativas de la contaminación del aire en las ciudades europeas,
entre ellas 80 ciudades españolas, donde los niveles promedio de NO2 disminuyeron hasta el
89% durante la semana del 16 al 22 de marzo con relación a la semana anterior.
El Instituto Meteorológico de los Países Bajos (KNMI) comparó en un primer momento la
columna promedio de dióxido de nitrógeno (NO2) del 13 de marzo al 13 de abril de 2020 con la
media de marzo y abril de 2019, combinando los datos obtenidos del satélite Copernicus
Sentinel-5P con modelos de química atmosférica, obteniendo para España y en particular para
Madrid un descenso muy significativo de los niveles estimados, próximo al 50%, durante el inicio
del confinamiento en nuestro país.
A partir de los datos OMNO2, obtenidos por la NASA también con mediciones por satélite,
hemos calculado la media de la columna troposférica de NO2 en la Península Ibérica para el
periodo de marzo a octubre de 2019 y de 2020, observándose a lo largo del estado de alarma y
meses posteriores una fuerte disminución de los niveles de este contaminante, así como de su
extensión geográfica a lo largo del territorio estatal. La disminución sigue presente durante todo
el periodo, destacando las áreas de Barcelona, Madrid y Valencia como las más beneficiadas por
este descenso
4. Fases de división del informe:
El periodo de recopilación de la información ha comprendido entre el 1 de marzo y el 31 de
octubre de 2020 y los mismos meses de los diez años anteriores (2010 a 2019). Dentro de este
periodo, que permite observar la variación de la calidad del aire a lo largo de ocho meses de
2020 y de la década anterior, se han analizado y comparado con los correspondientes promedios
de los últimos diez años tres periodos separados. Desde el 14 de marzo al 31 de octubre de 2020
se ha producido una reducción muy importante de los niveles de NO2 por comparación con el
promedio del mismo periodo de los diez años anteriores. La reducción se cuantifica en un 38%
de los niveles habituales para el total del periodo. Estos periodos han sido:
● 14 de marzo al 21 de junio (primavera y estado de alarma), durante el primer estado
de alarma la reducción fue del 52%. Los niveles de NO2 registrados son los más bajos
para los datos de la última década. Se aprecia una menor reducción de la
contaminación en las ciudades de la cornisa cantábrica. En cambio, las ciudades del
litoral mediterráneo son las que más han rebajado los niveles de NO2, hasta
concentraciones en ocasiones propias de estaciones rurales de fondo, circunstancia
en la que puede haber influido la cancelación de la temporada turística.
● 22 de junio a 31 de agosto (verano y vacaciones escolares, en las que suele haber
menos actividad) la disminución media es del 28% para la media de las redes de
medición, y del 33% para las estaciones más expuestas al tráfico. En la mayoría de
las ciudades los valores de 2020 alcanzan a los de la media de la década anterior
(2010-2019) que típicamente conllevan un descenso de las emisiones de NO2 en casi
5. todo el territorio. Este año, el descenso se ve compensado por el levantamiento de
muchas de las restricciones de movilidad asociadas al estado de alarma. En algunas
ciudades andaluzas y en la costa del Mediterráneo hay bastantes días de julio y
agosto en los que la concentración de dióxido de nitrógeno es superior a la media
de la década anterior que sigue por encima del 30%, lo que podría deberse a la
campaña turística de verano.
● 1 de septiembre a 31 de octubre (vuelta al colegio e inicio del otoño) las
disminuciones son similares: 29% de media de las redes de medición y 33% en las
estaciones orientadas al tráfico. En otoño muchas ciudades vuelven a registrar
superaciones del valor límite anual y la recomendación de la OMS para el NO2. En
este periodo la reducción del dióxido de nitrógeno es menor en Andalucía y mayor
en el norte y centro de la Península, probablemente debido al final de la campaña
de verano. La vuelta a la actividad ha supuesto un aumento del uso del vehículo
privado y una reducción del transporte público, percibido como potencialmente
peligroso
Propuestas o soluciones:
● Implantar redes y corredores ciclistas permanentes y facilitar y potenciar viajar con
bicicleta en el transporte público, y de esa manera evitar el uso del vehículo privado.
● Aumentar el teletrabajo siempre que se pueda.
● Ampliar la extensión de zonas verdes en todas las ciudades para evitar aglomeraciones
en parques y jardines y reducir desplazamientos a lugares de recreo.
● Reducir los límites de velocidad de circulación en las ciudades, generalizando las calles
a 30, 20 y 10 km/h para facilitar el ir en bicicleta o caminado.
● Ampliar el número de buses en las zonas urbanas. Además de facilitar sistemas de
protección frente a la COVID-19 a las personas que viajen en el transporte colectivo,
para que ya no se vea como potencialmente peligroso y que la gente lo use más y
disminuya así el uso de vehículo privado.