Cuando se dice que es fuente primaria de energía en la célula se alude a todas las células del planeta, es decir, el adenosín trifosfato es la molécula que dota de energía a los procesos celulares de todas las formas de vida de este planeta y se supone que lleva con nosotros desde el momento mismo en que surgió la vida. Podría decirse que el adenosín trifosfato, ATP, es uno de los pilares fundamentales de la vida, junto al ADN y al ARN entre otros elementos, y una de las causas principales de que aquel primer ser vivo fuese vivo.
3. ATP: Adenosín Trifosfato
Es una compleja molécula que sirve como fuente primaria de energía en la célula.
El ATP fue descubierto en 1929 por
Karl Lohmann. En 1941, Fritz Albert
Lipmann propuso el ATP como
principal molécula de transferencia
de energía en la célula.
4. Otras funciones de la molécula de ATP
Cuando se dice que es fuente primaria de energía en la célula se alude a todas las
células del planeta, es decir, el adenosín trifosfato es la molécula que dota de
energía a los procesos celulares de todas las formas de vida de este planeta y se
supone que lleva con nosotros desde el momento mismo en que surgió la vida.
Podría decirse que el adenosín trifosfato, ATP, es uno de los pilares fundamentales
de la vida, junto al ADN y al ARN entre otros elementos, y una de las causas
principales de que aquel primer ser vivo fuese vivo.
Secreción
Hormonal
Circulación
Reacciones
Acopladas
Contracción
Muscular
Reparación
de Tejidos
Respiración
Contractilidad
Del Miocardio
Transmisión
Nerviosa
5. quizás te preguntes:
¿Para qué comemos o respiramos
si el ATP es la fuente final de energía?
Pues bien, comiendo y respirando creamos en nuestro interior, por
así decirlo, el equilibrio correcto para que nuestras células tengan
el material con el que formar las moléculas de ATP que sirven para
alimentar todos los procesos.
6. ¿Cómo “da energía” a mis células una
molécula de adenosín trifosfato?
El adenosín trifosfato es una molécula
compuesta por adenosina, un azúcar de
cinco carbonos (la ribosa) y por tres
fosfatos. En estos tres fosfatos reside la
clave energética del adenosín trifosfato. La
adenosina es la parte de la molécula que
permite que otras moléculas la “capten”
para sus procesos.
7. Estos tres grupos de fosfatos están “atados” los unos a los otros por lazos químicos
energéticamente potentes, lazos que en determinadas circunstancias van a
“romperse” y liberar una gran cantidad de energía (hablando en proporciones de
célula). El proceso típicamente energético que sucede en la célula es la ruptura del
lazo que ata el último fosfato, esto es, la conversión del adenosín trifosfato en
adenosín difosfato. Este proceso de paso de trifosfato a difosfato está ocurriendo
continuamente en tu interior.
También ocurre en sentido inverso: el adenosín difosfato se recicla y reconvierte en
trifosfato. Para poder llevar a cabo este proceso, se requiere energía y oxígeno: la
energía que consigues con la comida y el oxígeno que consigues respirando. Como
ves, comes para que tus células coman.