El documento describe la evolución del diseño gráfico desde sus orígenes en las pinturas rupestres hasta convertirse en una disciplina profesional a partir de 1970. Explica que el diseño gráfico se ha convertido en una herramienta fundamental de comunicación para las empresas y organizaciones en su competencia por el mercado, y que los diseñadores son actores clave en los campos social, cultural e histórico en la era de la imagen.