1. TESTIMONIO DE VIDA
DE JOSE PADILLA
LA BIBLIA DICE ,PARA ÉL QUE CREE
TODO ES POSIBLE,
SI CREYERES VERAS
LA GLORIA DE DIOS
2. Soy de Barranquilla Colombia
En el año 2010 me fui a laborar como docente
a la población de Magangue Bolivar , tenia alrededor
4 meses de estar laborando cuando una tarde comencé
a sentirme mal de salud, ,tome unos medicamentos
pero éstos no surtieron efecto en mi organismo ,
era peor así pase 3 días, mi piel se puso amarilla,
tenia fuertes dolores abdominales y fiebre alta,
no me provocaba la comida.
3. En la mañana del domingo 23 de mayo del 2010, me fui a la
escuela dominical así como estaba; pero estando en la iglesia
no pude mas, entonces decidí ir al hospital y allá me
internaron .
Los médicos diagnosticaron tumor en el páncreas, me
hicieron ecografía de abdomen y radiografía y dijeron que no
era tumor en el páncreas
4. Siguieron haciendo análisis, ahora el diagnostico era
lectopirosis , seguía mas amarillo, dijeron hay que
remitirlo a un centro de alto nivel, no pudieron remitirme,
a la señora que me cuidaba le dijeron sólo un milagro lo
salva, pero yo no sabia eso , si recuerdo que ella siempre se
ponía agua en la cara para ocultar las lagrimas.
5. Una mañana el pastor Abigail y su esposa Nancy Mercado
oraron por mi.
Después que ellos se fueron recordé que hacían años
Dios en un ayuno me dijo: “Te voy a ungir las
manos para cuando te enfermes te las impongas
y seas sano ” ,
6. Entonces hice como me dijo el Señor, ore, imponiendo
las manos en un cuerpo , inmediatamente recibí la
sanidad así como Dios me lo había prometido,
la bilirrubina la tenia en 23 y él cuerpo solo puede
soportar 1.8 aproximadamente . Todo se estabilizo en
mi cuerpo, los médicos no podían explicar que había
pasado.
Los médicos cuando me iban a dar la salida dijeron su
caso lo vamos a llevar a la conferencia latinoamericana,
otro médico me dijo: “estas vivo gracias a Dios” .
7. Amigo , hermano en la fe , Cristo vino a darnos vida y
sólo en él hay salvación y vida eterna
Hoy le doy la gloria y la honra a Dios, que es fiel en sus
promesas y nunca tarda en socorrernos.
Sólo Jesucristo es nuestro Salvador. Amen