El documento resume los cambios en la catequesis en Costa Rica después del Concilio Vaticano II, incluyendo un cambio de enfoque de la memorización a una catequesis más doctrinal dirigida por sacerdotes a un enfoque más participativo que involucra a laicos, familias y comunidades, con nuevos procesos como catecismos actualizados y la confirmación a los 15 años, y un nuevo paradigma pedagógico que pasa de lecciones a encuentros con la fe.