1. El primer fundamento del muro: la amatista…
Por: Griselle M Trujillo
Acostumbro levantarme en la madrugada a orar y estudiar la Palabra… Es el diezmo de
mi día al Señor. Como habrán notado, me gusta escribir muuuuuuchooooo… Por eso,
dentro de ese tiempo separado para intimar con mi Amado, saco un tiempito para
escribirle mensajes al Señor; donde le doy gracias por cada cosa que me ha dado y le
pido lo que voy a necesitar ese día y anoto todas aquellas cosas que le oiga decir al
Espíritu Santo. Le pido al Espíritu Santo que me hable, y trato de quedarme en silencio
un rato para poder oír la voz del Señor. Aquellos que me conocen saben que quedarme
quieta o en silencio es muy difícil para mí… ¡Ja! De todas formas, la otra madrugada lo
logré: esperé en silencio para permitirle al Espíritu Santo hablarme. No tardó mucho
tiempo, cuando la voz queda y amorosa del Espíritu Santo me dijo:
- “Anatista mía es esa.”
De más está decirle, que no entendí un comino lo que el Espíritu Santo me quería decir.
No había hablado ni había pedido ni estaba pensando en amatistas, y ni siquiera sabía lo
que era una amatista… ¡Daaaaaaa! Pero es precisamente el hecho de que no sabía un
comino del asunto, lo que me aseguró que aquella palabra provenía del Espíritu Santo y
no de mi alma.
¿Por qué Dios me habla de esa forma? ¿Por qué no me dijo algo que yo pudiera
entender? ¿Saben por qué? Porque un principio bíblico establece que Dios se le revela a
los que le buscan, a aquellos que verdaderamente están interesados en conocerle y
comprenderle; en eso está nuestra gloria– Jeremías 9:25. Para conocerle y
comprenderle es necesario pasar tiempo con Él, hacerle preguntas, estudiar con
detenimiento todo lo que dijo o hizo.
De todas formas, escribí en el diario, justamente debajo de mi última petición, lo que oí
en mi interior; le di gracias al Espíritu Santo y le pedí que me lo explicara. Busqué una
concordancia y en un diccionario bíblico; y encontré que la amatista es un tipo de cuarzo
translúcido, color violeta (dependiendo del hierro que contenga será su color); es
apreciada como una piedra preciosa; y que el Espíritu Santo le ordenó a Moisés que
pusiera una amatista en la tercera fila del pectoral del sacerdote- las cuales
representaban cada una de las doce tribus de Israel – Éxodo 28:17-31; 39:12. Además
averigüé que cuando el apóstol Juan vio el muro de la nueva Jerusalén que descendía
del cielo, vio que ese muro tenía 12 piedras preciosas como fundamento – la de encima,
la número 12 era la amatista (comenzando de abajo hacia arriba- jaspe, zafiro, ágata,
esmeralda, sardónice, sardio, crisólito, berilo, topacio crisopaso, jacinto y amatista)-
Apocalipsis 21:19-20.
Ese conocimiento me demostró que ciertamente lo que Dios me decía era algo
importante para Él y que si de verdad me interesa conocerle y comprenderle, era
necesario descifrar el misterio… Un principio que aprendí hace mucho tiempo es que
2. Dios TODO LO HACE CON PROPÓSITO. Nada, absolutamente nada en Él es
casual.
Pero todavía no entendía… Seguía preguntándole al Espíritu Santo:
-“¿A qué amatista te refieres?”
Seguí indagando, y encontré que en el Imperio Romano, la amatista era usada para
hacer joyas y sellos reales; que también se utilizaba como símbolo de castidad (dentro de
la Iglesia Católica Romana) y que se suponía que fuera un antídoto para la embriaguez
(La embriaguez te hace disoluto, el antídoto (la amatista) te hace sobrio, ponderado-
Efesios 5:18). También averigüé que el nombre Matatías se relacionaba con esta piedra.
¿Quién fue Matatías? Pues en la Escritura ese nombre lo encontramos en Hechos 1:12-
24. Allí se nos dice que los discípulos decidieron sustituir a Judas, el discípulo que
vendió al Señor. Echaron suertes y entendieron que el Espíritu Santo estaba escogiendo
a un discípulo llamado Matatías. En ese sentido, podemos decir que Matatías
representaba todo lo contrario a la deshonra y la negación de Judas; era representante
de honra y fidelidad.
Seguí indagando y encontré que en uno de los libros Deuterocanónicos, Macabeo 3:28
se habla de un levita llamado Matatías; quién fue el líder de un pequeño grupo que
decidió no obedecer las órdenes del rey Antíoco; estableciendo:
-“El cielo nos libre de abandonar la ley y los preceptos de YHVH. Nosotros
(él, sus siete hermanos y su madre) no acataremos las órdenes del rey,
desviándonos de nuestro culto a Dios ni a derecha ni a izquierda”.
Otra vez, Matatías y su actuación significaba honrar a Dios a pesar de todo y en
medio de todo.
Luego noté que lo que le había escrito al Señor justo antes de oír Su voz, decía así:
-“Señor yo quiero que todo lo que haga, diga, piense, proyecte o escriba
este día te honre. Que todo el que me vea, me oiga, lea lo que escribo te
vea, te sienta, te perciba, te conozca, te anhele a ti”.
¡Ahhhhhh, ya estaba entendiendo! Concluí entonces, que lo que el Espíritu Santo me
quería decir era que esa petición que yo le había verbalizado era muy preciada para Él꞉
era una amatista, un fundamento que todo creyente debía poner en su
muralla. Si honrar a nuestros padres y madres tiene como recompensa largura de días
(Éxodo 20:12), imagínate la recompensa y bendición que vivir para honrar a Dios,
nuestro Padre Celestial, traerá a nuestras vidas.
Debo vivir cada momento de mi vida para que todo el que me vea tenga que decir:
-“Esta mujer tiene un gran Padre.”
Honrar significa “valorar, dar mucho valor.” Usted honra a Dios cuando usted
permite que Su Palabra lleve tanto valor en su vida que nada ni nadie puede desviarle de
3. la Sagrada Palabra. El honor viene de su corazón (Mateo 15:8). La “devoción de
labios” no honra a Dios.
Dios es honrado cuando sus decisiones y acciones están totalmente basadas en Su
Palabra. No puedo honrar a Dios si no conozco Su carácter; y Su carácter y propósito me
son reveladas en la Escritura. El desconocimiento de la Escritura me impide honrarle.
La Escritura promete que Dios honrará a quienes le honran delante de los hombres y de
Sus ángeles– 1 Samuel 2:30.
Así que, elemental Mr. Watson, mi deber y tu deber hoy y siempre es poner en nuestras
vidas el fundamento de la amatista: honrar y demostrar fidelidad a nuestro Padre
celestial con todo y en todo lo que pensemos, digamos, hagamos, proyectemos,
aprobemos o desaprobemos, escribamos, veamos, escuchemos…
"¡Sí Señor, yo quiero que mi vida y la vida de todos los míos te honre hoy y
siempre! ¡Ayúdanos, Espíritu Santo!"
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El vestido más costoso…
Por: Griselle M Trujillo
Aunque usted o yo no lo podamos creer, el diseñador Ronee Straus confeccionó un
vestido de novia valorado en doce millones de dólares; porque contiene incrustaciones
de diamantes de ciento cincuenta quilates… Otro diseñador japonés llamado Yumir
Katsura, diseñó otro vestido de novia valorado en ocho y medio millones de dólares. Ese
vestido estaba confeccionado en oro blanco con unas mil perlas cultivadas incrustadas,
además de un diamante de oro blanco de cinco quilates y otro diamante verde de ocho
punto ocho quilates. Esos trajes no fueron creados para persona alguna, sino para
exhibiciones de modas.
Pero aunque no lo podamos entender, cada año las artistas que participan en la
premiación de los Óscares, también gastan miles y miles de dólares en sus vestidos que
usarán esa noche. Por ejemplo, en el 2013, Jennifer Lawrence, usó un vestido diseñado
por Dior por el que pagó la friolera de cuatro millones de dólares; siendo quizás el
vestido más caro que ha pasado por la famosa alfombra roja. Pero el vestido de cuatro
millones de dólares no pudo evitar que Lawrence tropezara en la escalera mientras subía
a recoger su tan preciado galardón. El tropezón de la famosa actriz fue más difundido en
la prensa que el millonario valor de su vestido…
Nada, el puertorriqueño lo resumiría de esta forma: “El mono aunque se vista de
seda, mono se queda”. ¡Ja!
¡Ay Padre, no puedo imaginarme pagar esa cantidad de dinero por un vestido que
usarás una vez en tu vida; después quedará obsoleto, usado, visto, descartado…!
4. Pero ¿saben una cosa? No son las artistas de Hollywood o los diseñadores famosos los
que han confeccionado el vestido más costoso de la historia de la humanidad… ¡No! El
vestido más costoso es aquel que cada creyente en Jesucristo posee; tú y yo si es que
hemos aceptado a Jesús como nuestro Señor y Salvador! Estamos cubiertos con un
vestido, una cubierta hecha con la poderosa sangre del Unigénito Hijo del Padre,
Jesucristo el Señor.
El profeta Isaías lo dice de esta forma: “¡Me llené de alegría en el Señor mi
Dios! Pues él me vistió con ropas de salvación y me envolvió en un manto
de justicia. Soy como un novio vestido para su boda o una novia con sus
joyas.” – Isaías 61:10.
El Padre nos ha dado un vestido, una cubierta que puede cubrir cada tropezón, cada
pecado, cada transgresión, cada iniquidad o pecado cometido. Sin ese vestido, nadie
podrá entrar a la vida eterna- Mateo 22:1-15; Romanos 5:9; Efesios 1:7, 2:13; Colosenses
1:20; 1 Juan 1:7; Hebreos 9:12-22; Ap. 1:5; 5:9; 7:14; 12:11. ¿Saben otra cosa? No hay
hombre o mujer en la historia del planeta tierra que se merezca usar ese vestido… ni hay
tesoro en el mundo que lo pueda comprar… - Romanos 3:20; 9:11; 11:6; Gálatas 2:16;
Efesios 2:9. ¡Ese vestido tan costoso nos ha sido dado por pura gracias! ¡ Gracias Papá!
Si hoy te sientes la persona más pobre o infeliz del mundo siendo un hijo o hija de
Dios en Jesucristo, déjame decirte que eres el más ingrato de los ingratos. ¡Tu cubierta,
tu vestido costó Su preciosa y santa vida! ¡Ese detallito nada más debe mantenerte de
cara al suelo en agradecimiento el resto de tus días!
Hoy es un gran día para postrarse delante del Padre y agradecerle la preciosa y poderosa
sangre del Cordero de Dios que quita el pecado del mundo.
¡Sí Padre, te doy gracias por la sangre del Hijo que fue derramada por mí! ¡Oh Padre,
que hoy el Hijo reciba recompensa en mi vida; que cada pensamiento, sentimiento,
mirada, palabra o acción te honre en las puertas de la ciudad!
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Hablando de vestidos…
Por: Griselle M Trujillo
Desde el Huerto, en Su amor y misericordia, Dios ha ofrecido cobertura y vestido
inmerecido a sus criaturas…
Después de su asquerosa ingratitud en el Huerto, Adán y Eva trataron de cubrir su
suciedad y desnudez con obras humanas – hojas de parra. Pero no lo lograron… A pesar
de sus intentos, Dios seguía viéndolos en su desnudez… Pero en ese amor
incomprensible del Señor, en vez de quemarlos, destruirlos o desecharlos; Dios se baja a
amarlos y con amor, sacrifica un animal (el relato bíblico no lo dice, pero obviamente
tenía que ser un cordero que representara a aquel Cordero de Dios que quita el pecado
5. del mundo que vendría siglos después…); y con la piel de éste cubre a aquellos dos
desobedientes hijos… - Génesis 3:21.
En amor y por amor, Dios siguió, sigue y seguirá vistiendo la desnudez del hombre
pecador… Como dije ayer, no hay hombre o mujer que sea tan santo que pueda entrar a
la presencia del Padre sin la sangre del Hijo y que tampoco hay riqueza u acción
religiosa que pueda comprar ese costoso vestido. Se recibe solamente por gracia,
gratuitamente.
Pero como he dicho muchas otras veces, Jesús no es Santa Clauce… El vestido es
gratuito y por pura gracia; pero es REQUERIDO. Nada ni nadie podrá ver al Padre si no
está cubierto por esa sangre.
Sé que hay líderes religiosos que han dicho con mucha arrogancia que la iglesia es tan
poderosa que aun a los incrédulos o hasta los extraterrestres podrán salvar. Pero eso es
una gran mentira. Jesús (el Dueño y Señor del Reino) estableció que sin
arrepentimiento NO HAY PERDÓN DE PECADOS. El traje es requerido y el traje
solamente se adquiere a través de la confesión, el arrepentimiento y la aceptación
personal de Jesús como su Señor y Salvador.
En Mateo 22:1-14, Jesús explica el asunto a través de una simple parábola. Resumiré la
parábola en el estilo Griselle Trujillo… ¡Ja!
Bueno, en la parábola encontramos varios personajes. Veamos:
-Un rey que hace una fiesta de bodas para su hijo. Ese rey representa al Padre, el cual ha
preparado una gran fiesta para Su Hijo, el Mesías.
- Los siervos del rey – Hacían todo lo que el rey les encomendaba. Esos siervos pueden
representar a los profetas bíblicos.
- Los primeros invitados - esos habían sido invitados con un año de antelación para la
fiesta a las bodas, por lo tanto no debían tener ninguna excusa para asistir. Pero cuando
los siervos del rey van a avisarles que la fiesta está lista, éstos se excusan alegando que
tienen "gestiones" que realizar – se fueron al campo, a sus negocios y aun otros
afrentaron, maltrataron y mataron a los siervos del rey que les trajeron la segunda
invitación. ¡Ups! Esas excusas se parecen mucho a las que algunos cristianos ofrecen
para no asistir a las reuniones… Tal parece que esos primeros invitados era el pueblo de
Israel, fueron los primeros invitados a las bodas, pero cuando vieron a Jesús no lo
aceptaron. "A los suyos vino y los suyos no lo recibieron"’ – Juan 1꞉11.
- Los otros invitados que sustituirían a los primeros que rechazaron la invitación-Ese es
uno de mis textos predilectos, porque el Padre le dice a sus siervos que vayan por las
plazas y por los caminos para traer, invitar a la boda todos aquellos que encontrara,
buenos o malos. El asunto era que el Padre quería que su fiesta fuera llenada. ¿No es eso
lo que establece la Escritura? Sí, así es; la Escritura dice que el Padre no quiere que
ninguno se pierda, sino que todos vengan al arrepentimiento
6. (REQUERIMIENTO)- 2Pedro 3꞉9; Ezequiel 33꞉11. ¿A quiénes encontraron los siervos
del rey en las plazas y los caminos? ¡Daaaaaa! ¡A ti y a mí!
El rey, el Padre, no solo le dio órdenes a sus siervos para que trajeran a todos aquellos
que encontraran en los caminos, sino que proveyó vestidos reales, de bodas, de fiesta
para que les proveyeran a aquellos que el rey sabía, que sabía, que sabía que no podían
comprar una vestimenta apropiada para venir a las bodas. Así que aquellos hombres y
mujeres inmerecedores de la invitación, no solo fueron invitados sino también vestidos.
Pero encontramos otro personaje en la parábola…
- Uno de los invitados, uno de aquellos inmerecedores de ser invitados, que decidió con
arrogancia entrar a las bodas con sus propios vestidos. ¡Ups! Es como si hubiera dicho:
--Yo entro como a mí me dé la pura y real gana y a nadie le tiene que
importar.
¡Ja! Pero se le acabó la guapería, cuando se encontró de cara con el Rey de reyes y Señor
de los señores. Cuando el Padre le preguntó cómo había podido entrar en las fiestas sin
la apropiada ropa – la santa y poderosa sangre del Hijo, el hombre no pudo contestar. Y
contrario a lo que predican algunos líderes religiosos, el Rey le dijo a sus siervos꞉
-"Atadle las manos y los pies, y echadlo a las tinieblas de afuera; allí será
el llanto y el crujir de dientes. Porque muchos son llamados, pero
pocos son escogidos."
Elemental, Mr. Watson, digan los líderes religiosos lo que quieran, el dueño del Reino
no aceptará en Su territorio a ningún rebelde que no quiera aceptar el boleto gratuito a
la salvación꞉ la poderosa y santa sangre de Yeshua Yamashía, nuestro Señor y Salvador.
"y de Jesucristo, el testigo fiel, el primogénito de los muertos y el
soberano de los reyes de la tierra. Al que nos ama y nos libertó de nuestros
pecados con su sangre, e hizo de nosotros un reino y sacerdotes para su
Dios y Padre, a Él sea la gloria y el dominio por los siglos de los siglos.
Amén"-Apocalipsis 1꞉5꞉ "Cuando tomó el libro, los cuatro seres vivientes y los
veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero; cada uno tenía un
arpa y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones de los
santos. Y cantaban un cántico nuevo, diciendo: Digno eres de tomar el
libro y de abrir sus sellos, porque tú fuiste inmolado, y con tu sangre
compraste para Diosa gente de toda tribu, lengua, pueblo y nación. Y los
has hecho un reino y sacerdotes para nuestro Dios; y reinarán sobre la
tierra." –Apocalipsis 5꞉8-10.
7. (REQUERIMIENTO)- 2Pedro 3꞉9; Ezequiel 33꞉11. ¿A quiénes encontraron los siervos
del rey en las plazas y los caminos? ¡Daaaaaa! ¡A ti y a mí!
El rey, el Padre, no solo le dio órdenes a sus siervos para que trajeran a todos aquellos
que encontraran en los caminos, sino que proveyó vestidos reales, de bodas, de fiesta
para que les proveyeran a aquellos que el rey sabía, que sabía, que sabía que no podían
comprar una vestimenta apropiada para venir a las bodas. Así que aquellos hombres y
mujeres inmerecedores de la invitación, no solo fueron invitados sino también vestidos.
Pero encontramos otro personaje en la parábola…
- Uno de los invitados, uno de aquellos inmerecedores de ser invitados, que decidió con
arrogancia entrar a las bodas con sus propios vestidos. ¡Ups! Es como si hubiera dicho:
--Yo entro como a mí me dé la pura y real gana y a nadie le tiene que
importar.
¡Ja! Pero se le acabó la guapería, cuando se encontró de cara con el Rey de reyes y Señor
de los señores. Cuando el Padre le preguntó cómo había podido entrar en las fiestas sin
la apropiada ropa – la santa y poderosa sangre del Hijo, el hombre no pudo contestar. Y
contrario a lo que predican algunos líderes religiosos, el Rey le dijo a sus siervos꞉
-"Atadle las manos y los pies, y echadlo a las tinieblas de afuera; allí será
el llanto y el crujir de dientes. Porque muchos son llamados, pero
pocos son escogidos."
Elemental, Mr. Watson, digan los líderes religiosos lo que quieran, el dueño del Reino
no aceptará en Su territorio a ningún rebelde que no quiera aceptar el boleto gratuito a
la salvación꞉ la poderosa y santa sangre de Yeshua Yamashía, nuestro Señor y Salvador.
"y de Jesucristo, el testigo fiel, el primogénito de los muertos y el
soberano de los reyes de la tierra. Al que nos ama y nos libertó de nuestros
pecados con su sangre, e hizo de nosotros un reino y sacerdotes para su
Dios y Padre, a Él sea la gloria y el dominio por los siglos de los siglos.
Amén"-Apocalipsis 1꞉5꞉ "Cuando tomó el libro, los cuatro seres vivientes y los
veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero; cada uno tenía un
arpa y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones de los
santos. Y cantaban un cántico nuevo, diciendo: Digno eres de tomar el
libro y de abrir sus sellos, porque tú fuiste inmolado, y con tu sangre
compraste para Diosa gente de toda tribu, lengua, pueblo y nación. Y los
has hecho un reino y sacerdotes para nuestro Dios; y reinarán sobre la
tierra." –Apocalipsis 5꞉8-10.