4. La vida se está poniendo insopotable: no hay paz, no hay
tranquilidad, no hay trabajo…
5. …todo es afán de poder, de ganar dinero, de subir, de
figurar, de hacerse famoso.
6. Pongo sobre la mesa la bandeja con tazas, todas
diferentes: De porcelana decorada, de cristal de
bohemia con hermosos dibujos, de simple vidrio, de
barro cocido y hasta de plástico.
7. Lleno las tazas del sabroso
café y les invito a que, sin
guardar orden ni cercanía,
cojamos, uno por uno, la
taza preferida.
9. Entonces les hago la siguiente
reflexión:
Tomando el café, les hago la
siguiente reflexión:
Mientras tomamos el café, alguien hace la
siguiente reflexión:
10. Me da la impresión de que, al tomar las tazas, hemos
reflejado la situación de nuestra sociedad:
11. Como la cosa más natural del mundo, cada uno hemos
cogido la taza más bonita de las que iban quedando.
12. ¿No creéis que muchos males de la sociedad radican en
que cada cual elige para sí lo que “piensa” que es lo
mejor, aunque no lo sea?
13. Añado, por mi parte: Con harta frecuencia, se suele
confundir la belleza de la taza con la calidad del café.
14. Las tazas pueden ser diferentes, en calidad y en
valor, pero al café es el mismo para todos.
15. Otro comenta:
Si el café
simbolizase la
VIDA, ¿Cuál
sería el
simbolismo de
las tazas?
16. Las tazas serían: El poder, el dinero, la posición social, el
trabajo, las diversiones, las enfermedades, etc. Todo lo
que conforma y soporta la vida.
17. ¿No os parece que nos preocupamos tanto de las tazas
que olvidamos disfrutar del café?.
18. MORALEJA:
Y demos gracias a Dios que nos concede el “café y
las tazas”. Jejisánchez
¡Disfrutemos del café!
¡Disfrutemos de la vida!