6. Alégrate por el
nuevo día que Dios
te concede.
Dale las gracias y
aprovecha el
tiempo trabajando
con dignidad.
7. Ante las acciones de la vida, tómate
tiempo.
Lo que importa es cómo las haces,
no en cuánto tiempo.
No improvises las decisiones
importantes .
Consúltalas con alguien de tu
confianza, con la almohada y,
sobre todo,
CON DIOS.
8. Vacía tu mente
de temores
y
llénala de ilusión
y esperanza.
”Quien a Dios
tiene, nada le
falta”.
9. Si tienes éxito, es por ti.
Si fracasas, es por ti.
Si eres feliz, es por ti.
Si estás triste, es por ti.
Si vives bien, es por ti.
Si vives mal, es por ti.
Asume tu vida con
responsabibidad.
En todas las facetas de la
vida, pon a trabajar los dones
que Dios te ha dado,
y lograrás una vidas plena.