El público puede ser considerado un actante en el sentido de que participa en el desarrollo de la obra a través de sus reacciones colectivas como la risa, el silencio y las exclamaciones de sorpresa o miedo. El concepto de actante se refiere no solo a los personajes sino también a otros elementos como la utilería, los sonidos, las luces y el vestuario que intervienen en la representación de la obra. El público también puede ser considerado un actante debido a su participación e interacción con la obra desde su lugar en el teatro.
1. Publico actanteEn qué sentido puede ser el público un actante?Estefanía Ramírez Calle Carolina Mora Arroyabe Johana Andrea Osorio Yamile Alejandra Idrobo 12/07/2011<br />¿En qué sentido puede ser el público un actante?<br />Mientras la obra leída suele ser un acto individual, la obra representada es siempre un acto colectivo. El público que presencia una representación participa con frecuencia en el desarrollo de la obra atreves de sus reacciones colectivas: risa, silencio, exclamaciones, de sorpresa, de miedo, etc. Sobre todo en el siglo XX, el teatro experimental incluía en el texto secundario indicaciones, para provocar o interactuar con el público. Con este propósito se experimenta también con la forma y emplazamiento del escenario.<br />El actante es quien realiza o el que realiza el acto independientemente de cualquier otra determinación. El concepto de actante tiene un uso en el que amplia un termino de personaje porque no solo se aplica a estos tipos de actante, si no que corresponde al concepto de actor, definido como la figura o el lugar vacio en que las formas sintácticas o las formas semánticas.<br /> El término semántica se refiere a los aspectos del significado, sentido o interpretación del significado de un determinado elemento, símbolo, palabra, expresión o representación formal. En principio cualquier medio de expresión (lenguaje formal o natural) admite una correspondencia entre expresiones de símbolos o palabras y situaciones o conjuntos de cosas que se encuentran en el mundo físico o abstracto que puede ser descrito por dicho medio de expresión. <br />En efecto, el dramaturgo proporciona la estructura de la obra en escenas y la división en actos. También contiene referencia al espacio referido a través de la acción referida que los personajes intercalan en su diálogo. La función del director es estructurar todos esos elementos a través de actantes (actantes pueden ser los personajes, la utilería, los sonidos, las luces, vestuario, coreografía, etc., incluso el público: todo aquello que interviene en la representación de la obra). No obstante, para los efectos de esta introducción vamos a distinguir entre los actores y los actantes. Los actores son las personas que bajo la dirección del director y la guía del dramaturgo (a través de las acotaciones), van a representar la palabra escrita (los elementos verbales), interpretada con elementos mímicos, para crear los personajes que van a representar la historia. Vamos a reservar el término de actante para aquellos elementos (objetos, sonidos, luces, etc.) que pueden adquirir durante la representación la categoría de personaje (bajo el término actante exponemos numerosos ejemplos de los textos incluidos en este curso).<br />Recordemos que la clasificación de los textos literarios en géneros es sólo un modo de aproximarnos a la obra literaria. En el caso particular de la obra de teatro, la única diferencia es la intención implícita de que se escribe para ser representada. Fuera de esta diferencia que se manifiesta en la forma y en el destino final, la obra de teatro es una dramatización de la palabra, independiente del género literario con que pueda ser asociada. Por esta misma razón, las consideraciones en cuanto a los recursos retóricos estudiados en los demás géneros, se aplican igualmente a la obra de teatro. En el pasado, durante el siglo XVI y XVII, en el momento en que triunfaba la comedia española, las obras de teatro se escribían en verso. El romance, la redondilla, el soneto y la octava real constituían formas de versificación que representaban convenciones precisas de la obra de teatro. La reflexión del ensayo y la motivación al diálogo han estado presentes en el teatro en todos los tiempos: desde el carácter filosófico de la obra de Calderón en el siglo XVII, a la reflexión del teatro del oprimido de Augusto Boal en nuestros días. Pero entre todos los géneros literarios, la narrativa es el género más próximo a la obra dramática. La obra de teatro comunica también una historia, aunque sea representada (con frecuencia tiene igualmente partes narradas). Y, como historia, posee, igual que la narrativa, un desarrollo, un clímax, puntos decisivos, desenlace, etc. Como la narrativa, la obra de teatro desarrolla también su historia con el artificio de un discurso, donde a la trama se unen los múltiples recursos de la representación (luces, vestuario, tono de voz, silencios, etc.), para dar lugar a una interpretación explícita.<br />El público también se relaciona con la obra, participando desde el lugar en que se encuentra haciendo así que la obra se tome el teatro obteniendo más espacio, y que la obra sea más emotiva. Se puede participar con exclamaciones: como risa, asombro o miedo. Según lo que esté siendo representado en el escenario.<br />El actante también hace parte en el lugar donde se represente la obra, en el espacio el vestuario, el maquillaje y como hacer representación de ella y dar una buena imagen al público.<br />Referencias Bibliográficas<br />http://www.buenastareas.com/ensayos/Teatro-Preguntas-Generadoras/2230430.html, http://www.ensayistas.org/curso3030/genero/teatro/<br />