El documento describe el sistema nervioso humano. Este sistema está formado principalmente por neuronas y células gliales. Tiene tres funciones principales: sensitiva, integradora y motora. Se compone del sistema nervioso central y periférico. El sistema nervioso central incluye el cerebro y la médula espinal, mientras que el periférico conecta el central con el resto del cuerpo.
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Sistema nervioso: estructura, partes y funciones
1. Que es y como se estructura el sistema nervioso
El sistema nervioso es uno de los más importantes y complejos del cuerpo humano.
Muchas personas, cuando escuchan hablar del sistema nervioso, piensan solamente en los nervios. Pero lo cierto es que se
trata de un entramado que comprende muchas más partes del cuerpo, y que tiene una función esencial en él.
Tiene múltiples funciones, entre ellas recibir y procesar toda la información que proviene tanto del interior del cuerpo como
del entorno, con el fin de regular el funcionamiento de los demás órganos y sistemas.
Este sistema está formado, principalmente, por dos tipos de células, las neuronas y las células gliales. La primera es la
célula fundamental, se encarga de procesar y transmitir la información a través de todo el sistema nervioso. Las segundas
son células que realizan la función de soporte y protección de las neuronas. Las neuronas no pueden funcionar en ausencia
de las células gliales.
El sistema nevioso
Se llama sistema nervioso al conjunto de órganos y estructuras de control e información del cuerpo humano, constituido por
células altamente diferenciadas, conocidas como neuronas, que son capaces de transmitir impulsos eléctricos a lo largo de
una gran red de terminaciones nerviosas.
El sistema nervioso es común al ser humano y a la mayoría de los animales cordados, los
artrópodos, los moluscos, platelmintos y cnidarios. Otros grupos animales, como los
protozoos, los poríferos y las plantas, en cambio, no poseen sistema nervioso diferenciado.
Este aparato de transmisión de energía química y eléctrica recorre el cuerpo entero y permite
la coordinación de los movimientos y acciones, tanto las conscientes como las reflejas, a
partir de lo cual se distinguen dos tipos de sistema nervioso: el somático y el autónomo. El
primero se ocupa de la conexión entre las extremidades del cuerpo y el cerebro, mientras
que el segundo lo hace de las acciones reflejas e involuntarias.
2. Funciones
El sistema nervioso tiene tres funciones básicas: la sensitiva, la integradora y la motora.
– Sensorial: Percibe los cambios (estímulos) internos y externos con los receptores u órganos receptivos. Los cambios
incluyen una amplia gama de factores físicos como la luz, presión o concentración de sustancias químicas disueltas.
– Integradora: Analiza la información sensorial y toma las decisiones apropiadas. Se activa o modifica por la información que
está almacenada y se recupera de la memoria.
– Motora: Provoca respuestas de músculos o glándulas. El sistema nervioso puede estimular músculos y glándulas para que
actúen o inhibirlos.
Partes del sistema nervioso
3. Sistema nervioso central (SNC): está compuesto del encéfalo y la médula espinal. El encéfalo, a su vez se compone
de: cerebro, cerebelo y bulbo raquídeo. La médula espinal, en tanto, se conecta al encéfalo y se extiende a lo largo del
cuerpo por el interior de la columna vertebral.
Sistema nervioso periférico (SNP): engloba todos los nervios que salen del sistema nervioso central hacia todo el
cuerpo. Está constituido por nervios y ganglios nerviosos.
Las neuronas
Las células del sistema nervioso se llaman neuronas, y son de suma importancia para su correcto funcionamiento, ya
que se encargan de transmitir la información sensorial.
Las neuronas reciben los estímulos de todas las partes del cuerpo y, a su vez, mandan las respuestas para que los
órganos y otras capacidades físicas funcionen adecuadamente.
Estructura del cerebro
El cerebro tiene una estructura muy compleja. Hay varias secciones grandes: los hemisferios, el cerebelo y el tronco
cerebral: médula oblonga, puente de Varolio y el cerebro medio.
Si se mira el cerebro desde arriba y desde un lado, vemos los hemisferios derecho e izquierdo, entre los que hay un
gran surco que los separa (interhemisferio, o brecha longitudinal). En lo más profundo del cerebro se encuentra el
cuerpo calloso, un haz de fibras nerviosas que conectan las dos mitades del cerebro y permiten la transmisión de
información de un hemisferio al otro y viceversa. La superficie de los hemisferios está marcada con hendiduras y
surcos más o menos profundos, entre los que se encuentran los giros.
La superficie plegada del cerebro se llama corteza o córtex. Está formada por los cuerpos de miles de millones de
células nerviosas, por su color oscuro la sustancia de la corteza se llama materia gris. El córtex puede verse como un
mapa en el que diferentes áreas son responsables de distintas funciones del cerebro, además cubre los hemisferios
derecho e izquierdo del cerebro.
Los hemisferios cerebrales son los responsables de procesar la información de los sentidos, así como del
pensamiento, la lógica, el aprendizaje y la memoria, es decir, de las funciones que llamamos mente.
Varios surcos grandes dividen cada hemisferio en cuatro lóbulos:
• frontal
• temporal
• parietal
• occipital
4. Los lóbulos frontales proporcionan el pensamiento creativo o abstracto, la expresión de las emociones, la
expresividad del habla y el control de los movimientos voluntarios. Son responsables en gran medida del intelecto y el
comportamiento social de una persona. Sus funciones incluyen la planificación de la acción, el establecimiento de
prioridades, la concentración, el recuerdo y el control del comportamiento. Los daños en el lóbulo frontal pueden
provocar un comportamiento antisocial agresivo.
Los lóbulos parietales son responsables del sentido del tacto, la percepción de la presión, el dolor, el calor y el frío,
así como de las habilidades de cálculo y del habla y la orientación del cuerpo en el espacio. La parte anterior del lóbulo
parietal alberga la llamada zona sensorial (sensitiva), donde confluye la información sobre la influencia del mundo
circundante en nuestro cuerpo procedente del dolor, la temperatura y otros receptores.
Los lóbulos temporales son en gran parte responsables de la memoria, la audición y la capacidad de absorber
información verbal o escrita. También contienen objetos complejos adicionales. Por ejemplo, los cuerpos de la
amígdala desempeñan un papel importante en el desencadenamiento de estados como la excitación, la agresión, el
miedo o la ira. A su vez, las amígdalas se asocian con el hipocampo, que contribuye a la formación de recuerdos a
partir de eventos experimentados.
Los lóbulos occipitales son el centro visual del cerebro que analiza la información que proviene de los ojos. El lóbulo
occipital izquierdo recibe información del campo visual derecho y el lóbulo derecho recibe información del campo visual
izquierdo. Aunque todos los lóbulos de los grandes hemisferios son responsables de ciertas funciones, no operan de
forma aislada y ningún proceso está asociado a un solo lóbulo en particular. Debido a la amplia red de interconexiones
del cerebro, siempre hay comunicación entre los distintos hemisferios y lóbulos, así como entre las estructuras
subcorticales. El cerebro funciona como un todo.
El cerebelo es una estructura más pequeña que se encuentra
en la parte posterior inferior del cerebro, por debajo de los
grandes hemisferios, y está separado de ellos por una
excrecencia de la duramadre, la llamada tienda del cerebelo
(tentorium). Es aproximadamente ocho veces más pequeño que
el cerebro anterior. El cerebelo realiza de forma continua y
automática la regulación fina de la coordinación del movimiento y
el equilibrio corporal.
5. El tronco cerebral se extiende hacia abajo desde el centro del cerebro y pasa por delante del cerebelo antes de
fusionarse con la parte superior de la médula espinal. El tronco cerebral es responsable de las funciones corporales
básicas, muchas de las cuales se realizan de forma automática, fuera de nuestro control consciente, como los latidos del
corazón y la respiración. El maletero incluye las siguientes partes:
La médula oblonga, que controla la respiración, la deglución, la presión arterial y el ritmo cardíaco.
El puente de Varolio, que conecta el cerebelo con el gran cerebro.
El cerebro medio, que interviene en las funciones de visión y audición.
Estructura de la médula espinal
La médula espinal es en realidad una prolongación del
cerebro, rodeada por las mismas membranas y el líquido
cefalorraquídeo. Constituye dos tercios del SNC y es una
especie de sistema de conducción de los impulsos nerviosos.
La médula espinal constituye dos tercios del SNC y es una
especie de sistema de conducción de los impulsos nerviosos.
La información sensorial (sensaciones táctiles, temperatura,
presión, dolor) viaja a través de ella hasta el cerebro, y las
órdenes motoras (función motora) y los reflejos viajan desde
el cerebro a través de la médula espinal a todas las partes del
cuerpo. La columna vertebral está formada por huesos
flexibles que protegen la médula espinal de las influencias
externas. Los huesos que componen la columna vertebral se
denominan vértebras; sus partes salientes se pueden palpar a
lo largo de la espalda y la nuca. Las diferentes partes de la
columna vertebral se denominan divisiones, hay cinco en
total: cervicales, torácicas, lumbares, sacras y coccígeas.
6. ¿Que son las neuronas?
Las neuronas, o células nerviosas, son las principales unidades estructurales y funcionales del sistema nervioso. Cada
neurona consta de un cuerpo (soma) y una serie de proyecciones que salen desde la neurona (neuritas). El cuerpo de
la célula nerviosa contiene los orgánulos celulares y es donde se generan los impulsos neurales (potenciales de
acción). Las proyecciones provienen del cuerpo de la neurona, conectan las neuronas entre sí y con otras células del
cuerpo, permitiendo el flujo de impulsos neuronales. Hay dos tipos de proyecciones neuronales que difieren en
estructura y función; los axones y las dendritas.
Los axones son largos y conducen los impulsos lejos del cuerpo neuronal.
Las dendritas son cortas y actúan para recibir impulsos de otras neuronas, conduciendo la señal eléctrica hacia el
cuerpo de la célula nerviosa.
Cada neurona tiene un solo axón, mientras que el número de dendritas varía. Según ese número, hay cuatro tipos
estructurales de neuronas; multipolar, bipolar, pseudounipolar y unipolar.
¿Cómo funcionan las neuronas?
La morfología de las neuronas las hace altamente especializadas para trabajar con impulsos neuronales; generan,
reciben y envían estos impulsos a otras neuronas y tejidos no neuronales.
Hay dos tipos de neuronas, las cuales se nombran de acuerdo a si envían su
señal eléctrica hacia o desde el SNC:
Las neuronas eferentes (motoras o descendentes) envían impulsos neurales
desde el SNC hacia los tejidos periféricos, indicándoles cómo funcionar.
Las neuronas aferentes (sensitivas o ascendentes) conducen impulsos
desde los tejidos periféricos hacia el SNC. Estos impulsos contienen
información sensitiva que describe el entorno del tejido.