Este documento presenta una introducción a la tipología textual y los elementos de la comunicación literaria. Brevemente describe el origen de la literatura desde los primeros textos orales en la prehistoria hasta la consolidación de géneros como la épica, el teatro y los cuentos. Además, define qué es un texto literario, sus características discursivas y lingüísticas, e incluye el análisis de un poema de Juana de Ibarbouru como ejemplo.
2. 1. ¿Para qué vale la literatura? ¿ Qué lugar tiene la
literatura en la vida del ser humano?
2. ¿Qué es un texto literario?
3. ¿Cuáles son los ELEMENTOS DE LA
COMUNICACIÓN LITARARIA?
4. ¿Qué CARACTERÍSTICAS DISCURSIVAS Y
LINGÜÍSTICAS tiene?
5. ANÁLISIS DEL POEMA DE JUANA IBARBOURU
6. CONCLUSIONES
ÍNDICE
3. - Los textos literarios
comienzan desde el
mismo momento en que la
{ raza humana es capaz de
procesar una información
y transmitirla a través del
lenguaje.
- Los textos orales,
perdidos. No, así otras
artes plásticas.
Del origen de la literatura
4. El hombre prehistórico necesitaba explicar
los fenómenos naturales (atmosféricos,
biológicos, etc).
Divinizaron los elementos de la naturaleza y
trataron de comunicarse con ellos (para pedir
perdón, favores, etc.).
Surgen los mitos, la cosmogonía. Con ellos
las artes plásticas y la literatura.
Los mitos, el origen de cuentos y leyendas.
Venus de Willendorf
El nacimiento del mito
5. Los prehistóricos atribuían un
significado o una función mágica a
las representaciones de sus pinturas.
Creían que la representación
de un bisonte era una forma de
propiciar su caza o que la
representación de una mujer con
unos senos enormes aseguraba la
fertilidad.
Los mitos explican la realidad
6. Ritual para los preparativos
de la caza.
Incipiente ficción dramática:
hombres disfrazados de
animales, interpretando,
engañando.
Ritos, ceremonias son
germen del teatro.
El origen del teatro
7. Relata las hazañas de un pueblo o
de sus héroes.
Estimula a los guerreros y afianza
el sentimiento nacional.
Conforma una identidad colectiva
de los pueblos.
Los cantares de gesta medievales se
componían para ser escuchados.
Los juglares los cantaban o
recitaban.
El Cantar de Mio Cid se conserva
casi completo. De finales del XII, se
conserva gracias a una copia del
1207, hecha por Per Abbat.
Las narraciones orales: épica.
8. Curiosidad por saber, por conocer
historias.
Carácter didáctico: transmisión de
valores y enseñanzas.
Orígenes remotos:
Panchatantra, sanscrito, III a. C
Hacia el 570 fue traducido al persa
Del persa pasó al árabe (850).
Alfonso X (1251) mandó
traducirlo al castellano: Calila e
Dimna
Ilustración de una edición siria del
Panchatantra datada en 1354. El conejo engaña
al rey de los elefantes al mostrarle el reflejo de
la Luna
Los cuentos
9. El hombre necesita soñar, necesita contar y que le cuenten.
Somos fabuladores natos. Como Simbad, vivimos y luego lo contamos,
y diríase que hasta que no contamos lo vivido, no hemos acabado de
vivir del todo.
Necesitamos añadir a la realidad objetiva la realidad
imaginada.
Como Simbad, vamos a de la vida al cuento (primero vivimos
y luego contamos), y como Don Quijote, también, a veces, vamos del
cuento a la vida (primero leemos y luego intentamos vivir lo leído).
Y todo eso es vivir.
Luis Landero
Respuesta a ¿para qué vale la literatura?
10. Desde el momento en que el hombre tiene conciencia de sí mismo
y encapsula los conceptos en sustancia lingüística, desde entonces
hay literatura.
No siempre han existido los móviles, ni los coches, ni los
ordenadores, pero siempre ha existido la literatura. Tal vez, por la
necesidad del ser humano de acercarse a las verdades esenciales.
Es decir, como una forma de conocimiento, transmitida entre
generaciones.
Si hemos podido prescindir de tantas cosas, pero no así de la
literatura, habremos de concluir que es necesaria para la vida,
porque nos humaniza.
Los soportes cambian (piedra, pergamino, papiro, papel, ebook,
tablet, …) la literatura permanece d{ndole vueltas a los temas
esenciales del ser humano (, la muerte, la vida -amor, sexo,
desamor, etc-, el origen de la vida (Dios), el tiempo…
Ninguna disciplina humanística os ayudará tanto a pensar(nos).
Bueno, a mí, también, me vale para…ganar el jornal. ;-}
La importancia de la literatura
11. 2. ¿Qué es un texto
literario?
{ Texto retórico
12. Es la palabra con vocación de arte, es decir, que aspira a la
inmortalidad: palabra fijada en el tiempo.
Producto de la inteligencia humana. Plantea horizontes para
la reflexión sobre el ser humano: sus miserias, sus grandezas.
Nos gusta que nos cuenten historias. Ese “había una vez…”
es el umbral del mundo mágico de la literatura.
Permite la transmisión del saber. Quevedo:
Retirado en la paz de estos desiertos,
Con pocos pero doctos libros juntos,
Vivo en conversación con los difuntos
Y escucho con mis ojos a los muertos.
Definición
15. Distante. Emisor y receptor(es), la
mayoría de las veces, no se conocen
personalmente.
La intención que le lleva a emitir su
mensaje no deriva de ninguna urgencia
comunicativa inmediata ni de ninguna
utilidad práctica: ni siquiera es seguro
que sea él mismo quien nos habla desde
las páginas de su obra.
Su mensaje no nace sujeto a un contexto
definido, sino que se proyecta hacia otros
tiempos y otros espacios.
No desea respuesta, sino acogida: que su
obra perdure y se difunda.
Emisor: AUTOR
16. Tiene la iniciativa del contacto: es él
quien se acerca al mensaje.
Este acercamiento no suele ser fruto
de la urgencia comunicativa o la
necesidad práctica.
Su interacción con el emisor se
realiza necesariamente a distancia:
puede que no coincidan ni en el
lugar ni en el tiempo.
El mensaje no está construido
especialmente para él, sino que se
presenta como una realidad cerrada,
conclusa: podrá asentir o disentir
pero nunca dialogar, replicar o
modificarla.
Receptor: LECTOR, OYENTE
17. No es único y compartido, como
ocurre en buena parte de la
comunicación cotidiana. Pueden
variar el lugar, la época, la cultura...
No puede hablarse, por tanto, de un
contexto “exterior” único.
La obra literaria tiene que crear ella
misma su propio contexto, con
arreglo al cual todo debe ser
interpretado.
CONTEXTO
18. Nace para ser siempre de la
misma manera, perdurable,
distinto y distinguible.
Forma y contenido se han
concedido para ir siempre
indisociablemente ligados.
MENSAJE
19. No constituye un
desvío de la norma
común, sino un sistema
propio: el de la lengua
literaria.
Además, cada tipo de
género cuenta con sus
propias convenciones y
restricciones.
CÓDIGO
20. ORAL: pues la literatura es
anterior a la escritura.
La literatura asociada a la
recitación con acompañamiento
musical (épica, lírica).
El teatro, representación
Guiones de cine, series tv., etc.
La difusión afecta a la creación.
ESCRITO: novelas, poesía, etc.
CANAL
22. FINALIDAD LÚDICA. Se basa en el uso del lenguaje, para crear
belleza o para conseguir ciertos efectos en los receptores.
Función estética o poética. Se centra en el mensaje.
Uso de figuras retóricas.
En general, recursos que alteran y transgreden las estructuras
lingüísticas más habituales. CAUSAR SORPRESA,
“EXTRAÑAMIENTO”.
Géneros:
Poemas
Canciones, adivinanzas,
refranes, eslóganes,
máximas y aforismos,
anuncios, etc.
Rasgos básicos
25. LA HORA
Tómame ahora que aún es temprano
y que llevo dalias nuevas en la mano.
Tómame ahora que aún es sombría
esta taciturna cabellera mía.
Ahora que tengo la carne olorosa
y los ojos limpios y la piel de rosa.
Ahora que calza mi planta ligera
la sandalia viva de la primavera.
Ahora que en mis labios repica la risa
como una campana sacudida aprisa.
Después..., ¡ah, yo sé
que ya nada de eso más tarde tendré!
Que entonces inútil será tu deseo,
como ofrenda puesta sobre un mausoleo.
¡Tómame ahora que aún es temprano
y que tengo rica de nardos la mano!
Hoy, y no más tarde. Antes que anochezca
y se vuelva mustia la corola fresca.
Hoy, y no mañana. ¡Oh amante! ¿no ves
que la enredadera crecerá ciprés?
26. La urgencia por gozar de los
placeres amorosos ante la
amenaza aniquiladora del
tiempo.
Amor, muerte, tiempo.
Tema
27. EXTERNA:
Se trata de 10 pareados dodecasílabos (Arte mayor), con
rima consonante. El verso 11 marca un punto de inflexión en el
discurso al introducir las consecuencias de obviar las demandas
que la voz lírica demanda. Se destaca por tener la mitad de
silabas :6 (hexasílabo). Es una ruptura rítmica.
INTERNA:
Ahora: Versos 1 al 10: Invitación al goce de la juventud en plenitud.
Después: Versos 11 al 14: el tiempo destruye la belleza y el deseo.
“Hoy, y no más tarde”: Versos 15 al 20: Apremio por disfrutar el presente
ante la fuerza aniquiladora del tiempo fugitivo.
ESTRUCTURA
28. Género Se trata de un poema lírico. La responsable de la enunciación es una
primera persona verbal, un “yo”. El emisor explora su mundo interior
y expresa su opinión sobre los temas esenciales del ser humano.
Un poema épico, en cambio, se ocupa del “nosotros” , su tema es la
historia y se recrea en las señas de identidad de la colectividad.
Intención. Pretende crear un texto literario bello, con un lenguaje alejado de lo
natural, artificioso que cause sorpresa y admiración en el lector. Al
mismo tiempo, propone una reflexión sobre la fugacidad de la vida e
invita al disfrute de los placeres de la juventud que se asocian al amor
y al goce de la sexualidad.
Tipo de Es, por tanto, un texto retórico. El poema tiene vocación de
texto perpetuidad, no en vano, recrea el tópico literario del “Carpe diem”
(“Aprovecha el momento”) ya que el “Tempus fugit” (“el tiempo
huye”).
Tipología I
29. Caract. Discursivas
Predomina la función poética, ya que se utiliza el lenguaje con el fin de crear
belleza y admiración. El interés de la comunicación se centra en el código, es decir, en
la propia lengua.
El poema, en este caso, es palabra sometida a ritmo y contiene una
musicalidad. Lo consigue mediante la rima y el cómputo silábico. Se trata de 10
pareados dodecasílabos (Arte mayor), con rima consonante. El verso 11 marca un
punto de inflexión en el discurso al introducir las consecuencias de obviar las
demandas que la voz lírica demanda. Se destaca por tener la mitad de silabas:6
(hexasílabo). Es una ruptura muy rítmica. Además, el ritmo se consigue mediante la
repetición de estructuras sintácticas: a) paralelismos de los versos impares, b)
anáforas, repetición de la misma palabra al principio del verso.
Destacaremos figuras literarias como las metáforas para referirse al amor
(enredadera, planta trepadora que crece adherida a una superficie) y a la muerte
(ciprés, árbol típico de los cementerios por su forma de flecha que apunta hacia el
cielo).
Finalmente, señalamos la función expresiva por las distintas modalidades
oracionales que expresan la turbación del estado de ánimo de la poetisa, por ejemplo,
preguntas retóricas (¿No ves...?”), exclamaciones (apóstrofe: ¡Oh, amante!),
exhortaciones (“Tómame...”)
Tipología II
30. Caract. Cabe destacar el uso de la primera persona (voz lírica): “¡ah, yo
lingüísticas sé...!”l. 11, determinantes posesivos, (“mis labios”). El emisor lanza
su texto a su amante que no necesariamente ha de estar presente en
el lugar de la enunciación, ya que un texto literario es de naturaleza
unidireccional y su receptor es universal y heterogéneo. Es un texto
que no espera respuesta sino acogida. Interpela al alocutario
mediante el uso de modo verbal imperativo (“Tómame”),
determinantes posesivos (“tu deseo”) y, finalmente, mediante el
apóstrofe (¡Oh, amante...!)
Por último destaremos, la importancia de los adverbios
temporales (ahora, después, entonces, hoy, tarde, mañana). Son
fundamentales pues el poema plantea el tema de la urgencia por
gozar de los placeres amorosos ante la amenaza aniquiladora del
tiempo.
Tipología III
32. La literatura es esencial para
la vida, consustancial al ser
humano desde sus orígenes.
No muere porque se reinventa
en cada época.
Anterior a la escritura.
PICTOGRAFÍAS: Se considera que el hombre ha
comenzado a manifestarse con signos fonéticos
hace unos 30.000 años y a comunicarse por medio
de la escritura hace 5 o 6.000 años a. C
33. Se centran en el mensaje.
Predomina la función poética.
No uso utilitario del lenguaje,
sino lúdico.
No buscan respuesta del
receptor sino acogida.
34. Nos acercamos a ellos en
busca de respuestas, para
saber de nosotros mismos
(“Nosce te ipsum”) en
nuestra condición de
humanos.
Buscamos en ellos la
verdad, la belleza, la
bondad.
35. ¿La literatura, con todo lo
dicho, mejora al ser humano?
No, pero sí potencia sus
virtudes: inteligencia,
memoria, voluntad,
imaginación.
Y, nos permite, salir de
nosotros mismos, para:
- vivir aventuras que
nos niega nuestra vida y
- meternos en la piel de
otros para comprenderlos
mejor (empatía).
36. Así, que si no lees, tú te lo mierdes. Prometo por mi conciencia y honor
que este vocable nace de un “lapsus lingue”, pero me gusta y lo dejo.