Los Poetas del Ocaso son un colectivo literario emergente que busca una revolución en la literatura paraguaya. Creen que es necesario romper con las élites literarias que cierran las puertas a expresiones jóvenes. Organizarán talleres y presentaciones en la Libroferia para promover nuevas voces poéticas y cuestionar a los "dinosaurios" que dominan la escena actual. Su revista Aposíntesis fomenta la destrucción de valores literarios establecidos para hacer lugar a nuevas creaciones.

1. correosemanal ASUNCIÓN
SÁBADO 30, MAYO 2015
ULTiMAHORA
Blandiendo la palabra. Mónica, Julio y Gabriel creen que es tiempo de un quiebre literario.
La inconformidad e indignación abren
el deseo de una revolución literariaEn esta entrevista, los Poetas del Ocaso hablan de destruir para reconstruir sobre la podredumbre.
S
on seis y a partir del
2013 impulsan el co-
lectivoemergentePoe-
tas del Ocaso. Su carta
de presentación hace 2 edi-
ciones es la revista Aposíntesis,
desde donde interpelan los
esquemas y liberan la creación
con la palabra. Sin medias
tintas –al igual que otras ex-
periencias similares– cuestio-
nan lo que denominan las
élites literarias que cierran las
puertas a las expresiones jó-
venes; y plantean que esa in-
diferencia es la que justifica la
idea de una necesaria ruptura
en este campo de la creación.
Gabriel Ojeda –quien pa-
radójicamente es miembro di-
rectivo de la Sociedad de Es-
critores del Paraguay– con-
sidera que en el país hace falta
“una revolución literaria. Una
revolución llevada de la mano
de la poesía, una revolución
poética”. Asume que el estar
también “dentro del sistema”
desdeelgremioqueintegra,se
da cuenta de que “hay cosas
quehayquecambiardeforma
radical”.
Puertas que se cierran
Ellos forman parte de la
efervescente movida literaria
que se proyecta desde hace
aproximadamente 5 años, en
circuitosurbanosyrurales,con
inusitada inquietud y vehe-
mencia en la periferia y a
distancia marcada de las “va-
cas sagradas” y las grandes
editoriales.
Julio de Torres señala que el
propósito de construir el es-
pacio es precisamente evitar
reproducir el error “de la ma-
yoría de las élites literarias que
cierran las puertas; que para
permitirte publicar con ellos te
obliganaquehagasuntaller,te
aggiornan, te dogmatizan y te
parametran”. Agrega que estas
prácticas “de élites de museos,
de artes visuales, de salas de
teatro,deespaciosculturales,se
traducenenciertamedidaenel
campo literario, en las élites
literarias.Vosnopodésentrarsi
no sos salamero, no compartís
ciertas ideologías políticas, o
sus posturas en cuanto a si-
tuaciones culturales, sociales,
etc. Medran intereses políticos
y eso jode a los emprendi-
mientos que pueden aportar a
la cultura”.
Élites y dinosaurios
No niegan la posibilidad de
que en algún punto los Poetas
del Ocaso y las élites que
cuestionan puedan sentarse a
discutir la creación literaria en
el país desde las diversas mi-
radas y abordajes que expe-
rimentan. Al respecto, Mónica
Airaldi –la única mujer in-
tegrante del grupo– explica
que de momento no existe
contacto directo, lo que no
significa “que no pueda dar-
se”.
Sin embargo, en la práctica
existeunquiebre.Julioexpresa
que son consecuentes “con la
indiferencia de estas élites”.
Miguel H.
López
Periodista
@miguelhache
Literatura
Poetas del Ocaso. Víctor Sosa, Bolívar Garcete, Julio, Mónica, Jorge Domínguez y Gabriel.
Un movimiento que puede marcar el quiebre histórico
La emergencia de una serie
de experiencias literarias
contracorriente, en su ma-
yoría con la impronta de la
colectivización del proceso
de creación y recreación res-
petando las particularidades,
constituye para los integran-
tes de Poetas del Ocaso el
comienzo de un movimien-
to que puede llegar a ser
muy grande y marcar el
quiebre que aluden nece-
sario en la historia local.
Dentro de esa idea de bús-
queda –explican– durante la
XXI Libroferia Asunción 2015
eldomingo31demayoy7de
junio habrá dos talleres sobre
Creación poética y Nueva
poesía en Paraguay
(14.00-18.00), al igual que la
presentación de la revista
Aposíntesis y el poemario Re-
volución 2.0 de Gabriel Oje-
da (19.00 y 18.00, respec-
tivamente)
Mónica Airaldi entiende que
todo se agita porque la gente
descubre y busca expresarse.
Gabriel Ojeda considera que
la situación está creciendo
imparable y eso incluso capta
la atención de los medios de
comunicación; y Julio de To-
rres asume que el creador
empiezaadescubrirquedebe
ser gestor cultural y eso mue-
ve el escenario literario, por-
que “la cultura es un bien
socializable y debe llegar a la
comunidad en general”.
Cuestiona además que dentro
de la misma movida literaria
alternativa existan sectores que
no apoyan a otros con las
mismas inquietudes. “Hay
grupos que son mucho más
cerrados. Y aunque eso no
interfiere en nuestra tarea, cri-
ticamos algunos procesos y la
forma en que esta gente tra-
baja; que en el fondo se cons-
tituyen en una élite más”. Ante
esta circunstancia –alega–
apuestan por individualidades
o colectivos que quieren in-
cursionar en la escritura u
otros ámbitos artísticos.
Gabriel, por su lado, con-
sideraperentorio“armarelde-
bate” porque “hay que dis-
cutir” con los escritores y es-
critoras institucionalizados y
lasgrandeseditoriales.Sinem-
bargo, al mismo tiempo des-
cree de la posibilidad de que
alguna cosa pueda recuperarse
y eso –especifica– se refleja en
el nombre de la revista au-
togestionadaAposíntesis:Des-
trucción para la creación; por-
que no puede construirse na-
da sobre un fundamento po-
drido. “Vemos que en Para-
guay hace falta una destruc-
ción de los valores literarios
actuales. Estamos cansados los
jóvenes de no tener espacios y
de encontrarnos con los mis-
mos dinosaurios de siempre
en la literatura”, sentencia.
Todo cabe
Poetas del Ocaso, aseguran
sus integrantes, busca ser un
espacio que canalice las ne-
cesidades literarias de quienes
deseen dar a conocer su crea-
ción. Rescatan de la experien-
ciaquenoexistecensurayque
desde lo que denominan la
narraturgia logran la conviven-
cia de todos los géneros exis-
tentes y otros por explorar.
Mónica detalla que no hay
un solo estilo en la publi-
cación. “Hay creaciones que
gritan cosas, que sangran. Y
hay otras que son más ligth y
quesonmodosparticularesde
escribir. Cada uno tiene su
manera de decir las cosas”,
asegura y revela que en su caso
escribe porque necesita “decir
cosas, sangrar y explotar”.
Entanto,Gabrielseñalaque
su motivación aún le resulta
inasible porque “la escritura es
como la vida misma. No sa-
bemos para qué vivimos, para
qué existimos. Hay algo den-
tro que impele a decir lo que
pienso a través de la palabra
escrita”.
Julio, por su lado, alega que
su creación literaria nace de la
necesidad que siente de es-
cribir, una situación que –in-
siste– se da porque “hay un
proceso de desangramiento”;
unaurgenciapersonalquesin-
tetiza parafraseando a la es-
critora Susana Gertopán: “Pu-
blico para así lograr desha-
cerme de las historias”.
FOTO: MIGUEL HOUDÍN FOTO: GENTILEZA