Este documento presenta una tesis para obtener el título de Maestra en Estudios Sociales y Culturales. La tesis analiza las dinámicas familiares en el barrio de Tierras Negras en Celaya, Guanajuato. El documento incluye una introducción sobre la construcción teórica de la familia, el marco contextual de la familia en México y la metodología mixta utilizada. Los resultados muestran datos cuantitativos sobre la estructura poblacional y tipos de hogares en Celaya, así como una descripción etn
“Entre la permanencia y la ruptura: Análisis en las familias del barrio de Tierras Negras, Celaya, Guanajuato"
1. 1
UNIVERSIDAD DE GUANAJUATO
CAMPUS CELAYA-SALVATIERRA
DIVISIÓN DE CIENCIAS SOCIALES Y
ADMINISTRATIVAS
“Entre la permanencia y la ruptura:
Análisis en las familias del barrio de Tierras Negras,
Celaya, Guanajuato”
TESIS
QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE
MAESTRA EN ESTUDIOS SOCIALES Y CULTURALES
PRESENTA
Karla Peinado Gutiérrez
DIRECTOR
Dr. Héctor Daniel Vega Macías
Celaya, Guanajuato Julio, 2019
Becaria del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología dentro del
Programa Nacional de Posgrado de Calidad (PNPC)
2. 2
UNIVERSIDAD DE GUANAJUATO
CAMPUS CELAYA-SALVATIERRA
DIVISIÓN DE CIENCIAS SOCIALES Y
ADMINISTRATIVAS
“Entre la permanencia y la ruptura:
Análisis en las familias del barrio de Tierras Negras,
Celaya, Guanajuato”
TESIS
QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE
MAESTRA EN ESTUDIOS SOCIALES Y CULTURALES
PRESENTA
Karla Peinado Gutiérrez
DIRECTOR
Dr. Héctor Daniel Vega Macías
Celaya, Guanajuato Julio, 2019
Becaria del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología dentro del
Programa Nacional de Posgrado de Calidad (PNPC)
3. 3
Se han dado casos
Se han dado casos de cosas inexplicables,
de hombres que se bañan con sirenas,
de cicatrices en la frente de hombres valientes,
de abecedarios del mal,
de canciones de cuna,
de carreras que nada tienen que ver con distancias,
de conversaciones con la culpa,
de homenajes a las palabras,
y de paradojas con lógica.
S. Balmes, Canción de Bruma (2017)
4. 4
Esta investigación pudo lograrse con
el apoyo de la beca otorgada por el
CONACYT.
Beca de la Dirección de Apoyo a la
Investigación y al Posgrado que
otorga la Universidad de
Guanajuato.
El Colegio de México, quien fue la
institución receptora de estancia de
investigación en octubre 2018.
5. 5
Agradecimientos
De esta forma, en este apartado se presenta el agradecimiento
a la Universidad de Guanajuato como institución en la cual he
concluido los estudios de posgrado.
Vale la pena otorgar en estos párrafos el agradecimiento total
para la Dra. Perla Del Carpio y al Dr. Eduardo Fernández,
gracias por el apoyo incondicional y compartir sus
conocimientos.
Esta investigación tuvo la oportunidad de contar con el apoyo
intelectual del Dr. Alberto Cobos Valdés quien desde su
perspectiva sociológica ayudó a alumbrar el camino teórico y a
aterrizar en diversos enfoques de la teoría social. Gracias por el
acompañamiento durante este trayecto.
El más sincero agradecimiento al Dr. Daniel Vega Macías quien
dirigió está investigación. Siempre un profesor objetivo, quien
de manera sencilla (a pesar de no ser algo fácil) enseña el gusto
por la demografía. El Dr. Daniel es parte fundamental del breve
recorrido por la Maestría. Gracias por la paciencia, por
apoyarme, animarme y por ser un ejemplo para mí.
Agradezco a la Dra. Carmen Rea Campos por aportar a este
trabajo su conocimiento y formar parte del núcleo evaluador de
la investigación.
Tuve la oportunidad de asistir en algunas ocasiones al Colegio
de México como ponente y asistente al III Coloquio
Internacional Estudiantil en Población, Ciudad y Medio
Ambiente. Posteriormente, durante el proceso de análisis y
decodificación de la información cualitativa está investigación
6. 6
contó con la asesoría de la Dra. Julieta Quilodrán Salgado,
profesora-investigadora de El Colegio de México, quien es una
autoridad reconocida nacional e internacionalmente en
temáticas como nupcialidad y familia en México: la formación
de las parejas conyugales y de su descendencia en el contexto
de la segunda transición demográfica en México y América
Latina. La Dra. Quilodrán proporcionó material original de
entrevistas realizadas en su tesis doctoral “Un siglo de
matrimonio en México “, aportando de esta forma en la
decodificación de las entrevistas realizadas en esta
investigación.
Por último, y sin restar importancia en estos agradecimientos se
mencionan a las cuatro familias con las que se trabajó en el
Barrio de Tierras Negras durante junio-noviembre 2018. A la
familia Badillo y Familia Lemart se les agradece por la confianza
de permitir la entrada a una extraña a sus hogares y realizara
las entrevistas en varias sesiones, quienes siempre se
mostraron respetuosos e interesados en compartir sus historias
de vida. A la familia Medina y familia Ramos, también se les
agradece por la confianza con la que compartieron parte de sus
vidas, esperando desde todo momento que sus respuestas
aportaran en esta investigación y en sus resultados. Gracias por
la confianza y por ser parte fundamental de esta investigación.
8. 8
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN
CAPÍTULO I. LA CONSTRUCCIÓN TEÓRICA DE LA FAMILIA......................... 21
1.1 La familia: sociedad tradicional y sociedad moderna................................... 21
1.2 Perspectivas macrosociológicas de la familia .............................................. 24
1.2 Teoría demográfica...................................................................................... 35
CAPÍTULO II. MARCO CONTEXTUAL: FAMILIA EN MÉXICO .......................... 38
2.1 Familia en México ........................................................................................ 38
2.2 La primera transición demográfica............................................................... 43
2.3 La segunda transición demográfica ............................................................. 44
2.4 Perfil demográfico en Guanajuato................................................................ 47
CAPÍTULO III. RECUENTO METODOLÓGICO ................................................... 51
3.1 Método mixto................................................................................................ 51
3.2 Método cuantitativo...................................................................................... 53
3.3 Método cualitativo ........................................................................................ 56
CAPÍTULO IV. ANALISIS EN LA COMPOSICIÓN FAMILIAR ............................ 64
4.1 Resultados cuantitativos: Contexto demográfico de Celaya ........................ 64
Estructura de población en Celaya ................................................................. 64
Composición de hogares en Celaya............................................................... 70
4.2 Resultados cualitativos: Historia y descripción etnográfica.......................... 75
Breve relato histórico de Celaya..................................................................... 75
El barrio de Tierras Negras............................................................................. 78
Descripción etnográfica .................................................................................. 82
4.3 Estudio de caso: Familias en el barrio de Tierras Negras............................83
Identificación de perfiles Mujer y Hombre....................................................... 85
Representación del barrio............................................................................... 96
9. 9
Percepción de matrimonio ............................................................................ 101
Representación de la familia......................................................................... 107
Familia ascendente....................................................................................... 116
Familia actual................................................................................................ 125
Familia descendente..................................................................................... 130
Opiniones en perfiles Mujer y Hombre.......................................................... 139
ENTRE LA PERMANENCIA Y LA RUPTURA ................................................... 144
CONCLUSIÓN
BIBLIOGRAFÍA
ÍNDICE DE DIAGRAMA
Diagrama I. Categoría de análisis...........................................................................18
ÍNDICE DE TABLAS
Tabla I. Método Mixto..............................................................................................52
Tabla II. Familias agrupadas por grupo de edad.....................................................62
Tabla III. Índices......................................................................................................69
Tabla VI. Comparación de resultados...................................................................153
ÍNDICE DE GRÁFICOS
Gráfico I. Celaya: Estructura por edad y sexo, 2000...............................................66
Gráfico II. Celaya: Estructura por edad y sexo, 2010..............................................67
Gráfico III. Celaya: Índice de masculinidad..............................................................68
Gráfico IV. Celaya, 2015: Tipo de hogares (porcentajes)........................................72
Gráfico V. Celaya, 2015: Relación de parentesco con el jefe o jefa del hogar
(porcentajes)............................................................................................................74
10. 10
ÍNDICE DE IMÁGENES
Imagen I. Municipio de Celaya, Guanajuato...........................................................55
Imagen II. Ubicación del barrio te Tierras Negras en relación al centro de la
ciudad.....................................................................................................................60
Imagen III. Templo del barrio de Tierras Negras....................................................61
Imagen IV. Escudo de Celaya................................................................................76
Imagen V. Festejos del barrio de Tierras Negras...................................................79
Imagen VI. Danzantes en el Templo de Tierras Negras.........................................80
Imagen VII. Danzantes en el desfile de las Luminarias..........................................81
Imagen VIII. Alumbrando el camino........................................................................82
Imagen IX. Mural de fundación del barrio...............................................................83
Imagen X. Mural de las tradiciones del barrio.........................................................84
11. 11
INTRODUCCIÓN
Durante las últimas décadas uno de los referentes de transformación en la sociedad
se ha presentado en los cambios de la familia, donde se encuentran diversos
factores que influyen en este proceso. Un ejemplo en estas transformaciones trae
como resultado el crecimiento acelerado de la población como en el caso de México
desde mediados del siglo XX presentando un aumento de la fecundidad y natalidad;
este panorama ha permitido que en los últimos años se establecieran nuevas
perspectivas en relación a las dinámicas familiares. Esta investigación parte con la
inquietud ante estos crecientes procesos.
Si bien es cierto que la familia dentro de las ciencias sociales puede ser
comprendida de dos formas: la primera es analizarla como una institución y la
segunda se centra en observar su composición de acuerdo a los lazos parentales.
Sin embargo, el análisis teórico de la familia no concluye en estas dos perspectivas.
Para la sociología, autores como Schaefer (2006) la familia representa un primer
panorama social donde se centra en la razón y la reproducción como medio de
supervivencia humana. Mientras que, un segundo panorama se ubica en la
protección humana fundamentada en cuidados y seguridad económica permanente.
Posteriormente, en tercer lugar, la base del comportamiento de los individuos se
enfoca en los padres y otros familiares donde se trasmiten las normas y valores de
un contexto. En cuarto lugar, se menciona que la regulación del comportamiento
sexual, el afecto y compañerismo son ideales fundamentales de la familia para llevar
a cabo sus relaciones y condiciones afectuosas, y finalmente en quinto lugar, se
hace referencia a la provisión del status social que es heredado de la reputación de
los padres y hermanos.
De esta forma, la familia se desarrolla como un proceso de legitimación por
medio de la institucionalización y códigos existentes. Sin embargo, las necesidades
básicas en los individuos a través del desarrollo de las sociedades han sido un
12. 12
panorama heterogéneo (Sztompka, 2012). Asimismo, entender el proceso histórico
que delimita a la familia como una unidad doméstica, lleva a plantear que esta es
una institución básica en la sociedad contemporánea donde las evidencias de este
proceso muestran diferencias históricas que han contribuido a evidenciar a la familia
ante la adaptación de lo tradicional ante la modernidad.
En relación a los nuevos procesos de adaptación ante la modernidad,
algunos autores (Bonvalet, 2016; De Singly, 2004) han presentado investigaciones
que revelan que la estructura familiar moderna ha tenido modificaciones en relación
al surgimiento del individuo y el creciente énfasis en las cuestiones personales. Por
ejemplo, el sociólogo francés De Singly (2001) propone que el primer proceso del
cambio en la estructura familiar ha sido añadir los ideales del amor romántico a las
uniones matrimoniales. Los ideales del amor en la modernidad son el resultado de
una serie de transformaciones del afecto y los roles de expresión a finales del siglo
XX.
De esta forma, Bonvalet (2016) plantea que una de las modificaciones en la
vida familiar se centra en la individualización, donde el individuo pasa a ser la
primera referencia; ya no es el individuo quien está al servicio de la familia, sino que
es la familia la que está al servicio de cada uno de sus miembros. De esta manera
Bonvalet menciona que la familia nuclear mantiene la garantía del equilibrio en las
familias. El desarrollo de la familia nuclear, está marcado por el surgimiento del
“individualismo afectivo”, como lo mencionaba De Singly. La idea de la familia
nuclear descansa en la formación de vínculos matrimoniales basados en la libertad
de elección personal, guiada por normas y sentimientos de amor, afecto y
solidaridad (Gomes, 2001). Asimismo, estos estudios recientes proponen la notable
presencia de las familias modernas dentro de sociedades patriarcales. Es así, que
la literatura de la familia moderna centrada en los vínculos afectivos entre sus
integrantes forma parte esencial de este trabajo.
Este trabajo se realizó con el enfoque sociológico y el análisis
sociodemográfico de la familia. El contexto de esta investigación se desarrolla en
un país dinámico como México, particularizando en uno de los estados que se
13. 13
consideran con características de tradición histórica y cultural como Guanajuato. La
heterogeneidad de la sociedad mexicana y los procesos demográficos de cada
región traen consigo transformaciones en las dinámicas de los individuos. Sin
embargo, aunque se visibilicen algunas transformaciones o cambios en la sociedad,
la estructura familiar como célula de la sociedad se presenta como una constante.
De esta forma, la familia es vista como una institución natural en la cual los
individuos desarrollan capacidades de integración y función en su contexto social.
Por lo cual se considera que este estudio tiene relevancia en la temática de familia
con el enfoque sociológico y sociodemográfico.
Dentro del enfoque sociológico se presenta la teoría macrosociológica del
estructural funcionalismo que aborda dicha temática, mientras que en el enfoque
sociodemográfico se muestra la teoría demográfica con la cual se analiza a la familia
como un proceso. Desde el punto de vista social es importante esta investigación
para comprender que los procesos de la vida familiar se encuentran en
transformación y cualquier forma de familia es válida, desde la nuclear hasta la
monoparental. Por lo tanto, la importancia de esta temática es relevante en la
actualidad para comprender algunas problemáticas que aquejan a la sociedad
iniciando con un análisis sobre dinámicas y composición familiar.
Los estudios acerca de la familia también resaltan en relevancia para explicar
las dinámicas de población de acuerdo a nupcialidad, la unión libre y la cohabitación.
De esta forma, hablar de familia es ampliar hacia temáticas que aporten mayor
claridad en el comportamiento social de los individuos. A su vez, este estudio es
relevante por la escasa investigación sobre la familia en el estado de Guanajuato,
por lo cual se esperaría que este trabajo sea la pauta para investigaciones futuras.
De igual manera, al lector se le hace la invitación a adentrarse a esta temática en la
cual se plasman las historias de vida de cuatro familias, y la cuales son analizadas
a través de la perspectiva sociológica y sociodemográfica.
Este trabajo se fundamenta con dos hipótesis; la primera corresponde al
enfoque cuantitativo de corte demográfico, donde se estima que la composición de
la familia en Guanajuato, particularmente en la ciudad de Celaya se encuentra en
14. 14
un porcentaje elevado de hogares nucleares con una concentración en la jefatura
masculina, por lo cual se esperaría que no se encontraran cambios en la
composición. La segunda corresponde al enfoque cualitativo de corte sociológico
donde se esperaría encontrar que la estructura familiar se encuentra dentro de los
parámetros de sociedad tradicional, mostrando algunos acercamientos de
transformación.
Ambas hipótesis convergen permitiendo que se planteé un panorama
tradicional de la familia en la composición de hogares nucleares y una concentración
de jefatura masculina; la familia se encuentra cercana a un periodo lento de
transformación en la estructura familiar. Dentro de la hipótesis de corte teórico
cualitativo, se plantea que el proceso de transformación en la vida familiar se
encuentra en la adaptación de los roles entre los integrantes de la familia, lo cual
permitiría próximos cambios en las dinámicas familiares. Por último, se considera
que este estudio puede dar pauta a nuevas investigaciones acerca de la familia, y
se esperaría que contribuya en aspectos de proyectos de desarrollo y políticas
públicas para conocer a las familias que habitan la ciudad de Celaya.
Se consideró conveniente el uso de una metodología mixta, la cual
fundamenta que los resultados cuantitativos puedan ser complementados con los
cualitativos, y obtener un análisis a profundidad, debido a que la recolección de
datos cuantitativos y cualitativos se apoya en el análisis de una metodología mixta
que con frecuencia se llevan a cabo de forma similar sin que haya una combinación
importante, que los separe uno del otro (Pacheco y Blanco, 2015). De esta forma,
los datos cualitativos pueden utilizarse como base para desarrollar un estudio
cuantitativo, y los datos cuantitativos pueden utilizarse para elaborar un estudio de
caso cualitativo.
Lo que respecta al objetivo en el método cuantitativo, en esta investigación
se emplea mediante la investigación de tipo secundaria, se busca analizar la
composición poblacional tanto del Estado de Guanajuato como del municipio de
Celaya, por medio de un perfil demográfico de la población. Los datos utilizados
para este apartado se encuentran en los anuarios estadísticos de población del
15. 15
periodo 2010-2015, a través del Instituto Nacional de Estadística y Geografía y el
Consejo Nacional de Población por medio de Censo de Población y Encuesta
Intercensal. Asimismo, los resultados cuantitativos en este estudio tienen la finalidad
de presentar un perfil demográfico, y de la composición de hogares en la ciudad de
Celaya durante el 2015.
De acuerdo a la metodología cualitativa, el objetivo principal es identificar
cambios entre cuatro generaciones, y de esta forma identificar la composición y
dinámicas entre los integrantes de las familias en Celaya, Guanajuato. El estudio de
caso fue el barrio de Tierras Negras, el cual es uno de los nueve barrios en la ciudad
de Celaya, Guanajuato; su ubicación se encuentra cercana al centro de la ciudad
(aproximadamente 4 cuadras) y se considera uno de los lugares más
representativos debido a sus dinámicas culturales y a las tradiciones religiosas de
sus habitantes. Cabe mencionar, que la importancia de la elección de la ciudad de
Celaya consta de ser un espacio lleno de contrastes, tradiciones rodeadas de
modernidad que conforman la identidad de esta ciudad del bajío guanajuatense.
Esta investigación inicialmente se llevó a cabo por medio de la observación
etnográfica realizada aproximadamente de febrero 2017 a octubre 2018, en visitas
semanales en horarios matutino, vespertino y nocturno. Sin embargo, el trabajo de
campo a través de entrevistas se inició a finales de junio 2018 hasta octubre 2018.
Las familias que participaron en esta investigación fueron agrupadas en la
decodificación de resultados según su género y edad. Tras obtener la información
por medio de entrevistas a profundidad, las respuestas de los integrantes de cada
familia se ordenaron en las siguientes categorías: identificación de perfiles Mujer y
Hombre, representación del barrio, percepción del matrimonio, representación de la
familia, familia ascendente, familia actual, familia descendente y opiniones en
perfiles Mujer y Hombre. Es importante señalar que los resultados obtenidos en este
trabajo no son explorables en todas las familias del Estado de Guanajuato; de igual
forma que las conclusiones presentadas en esta investigación forman parte
únicamente de una reducida muestra de cuatro familias en el barrio de Tierras
Negras en la Ciudad de Celaya, Guanajuato. Estos resultados son de carácter
representativo ante la temática de familia.
16. 16
El trabajo se compone de cuatro capítulos: en el primer capítulo se presentan
algunas perspectivas teóricas desde las perspectivas teóricas macro y
microsociológicas sobre la familia. Dentro de la teoría macrosociologica se
encuentra el análisis por medio del paradigma funcionalista, en el cual la familia se
comprende como una institución donde sus integrantes actúan de acuerdo a los
roles y funciones establecidas, las cuales se estructuran en relación al nivel
jerárquico que ocupa cada miembro de la familia de acuerdo a su composición
biológica.
En el capítulo II, se encuentran algunos apuntes acerca de la situación
demográfica en el país durante su paso por la primera y segunda transición
demográfica. Para Quilodrán (2011), la idea de la primera transición demográfica se
establece en México a mediados del siglo XX, comparando algunos países
europeos como Francia donde su proceso de transición demográfica fue lento,
México alcanzó precipitadamente los niveles de baja mortalidad y fecundidad en
menos de un siglo. La transición demográfica en México, es un ejemplo amplio del
crecimiento acelerado en la población mexicana, ubicándose en elevadas tasas de
crecimiento entre mediados del siglo XX, donde las condiciones económicas y de
salud mejoraron notablemente, lo que trajo consigo el aumento en el número de
nacimientos y los cuidados personales de la población, dando como resultado el
aumento en la tasa de fecundidad y el aumento en la esperanza de vida (Quilodrán,
2001).
Los referentes de transición traen consigo modificaciones en las dinámicas
de población, por cual, argumentan algunos autores (Esteve et al, 2016) que los
regímenes demográficos permiten modificaciones en la estructura familiar como la
disminución de hijos por mujer, reducción de integrantes por familia, el aplazamiento
de la maternidad, las uniones libres y la cohabitación.
En las últimas décadas se han presentado nuevas modalidades de estas
dinámicas, basadas en el aumento de nacimientos fuera del matrimonio,
disoluciones de matrimonio, reincidencia a segundas nupcias, etc. Recordando que,
el comportamiento individual en este régimen demográfico es característico de esta
transición (Esteve et al, 2016). En México, el matrimonio como institución ha sido
17. 17
cuestionado, y estas manifestaciones de la segunda transición demográfica han
sido participe en la disminución del control social de la práctica de la sexualidad
fuera de las uniones conyugales y matrimonio (Pérez, 2011). Dentro de este capítulo
se encuentra el perfil demográfico del Estado de Guanajuato presentando algunos
indicadores relevantes para contextualizar su situación. También en este apartado
se presenta la condición de los hogares familiares en la entidad.
En el capítulo III se presenta la metodología utilizada en esta investigación.
Primero se desarrolla la justificación del método mixto, después se encuentra la
metodología cuantitativa, y por último la metodología cualitativa; dentro de la
metodología cualitativa se encuentra la localización de la zona de estudio elegida
para esta investigación. A su vez, es en este último apartado es donde se presenta
el cuadro de perfiles por grupo de edad, generación y sexo de los integrantes de las
familias entrevistadas.
El capítulo IV se divide en los apartados de resultados cuantitativos y de los
cualitativos. En el apartado de resultados cuantitativos presenta el análisis en la
estructura de población según sexo y edad en la ciudad de Celaya, Guanajuato
durante el periodo 2000-2010. Los índices analizados en esta sección corresponden
al índice de masculinidad, dependencia y envejecimiento. En la segunda parte de
los resultados cuantitativos se encuentra el análisis de composición de tipo hogares
y la relación de parentesco con el jefe o jefa del hogar en Celaya durante el 2015.
En el apartado de resultados cualitativos se encuentran algunos
antecedentes históricos de la ciudad de Celaya con la finalidad de contextualizar al
lector. También se presenta la breve historia del barrio de Tierras Negras, lugar que
fue elegido como objeto de estudio por sus características, tradiciones y prácticas
culturales. Cabe señalar, que la segunda categoría de análisis presentada en los
resultados cualitativos se enfoca a la representación que tienen las familias entorno
al barrio. De esta forma en dicha categoría a las familias se realizaron preguntas
respecto a qué relación tiene el barrio entre sus dinámicas familiares y la
importancia de las prácticas culturales y religiosas del lugar.
A su vez, el relato histórico del barrio va acompañado de la descripción
etnográfica del lugar, la cual se realizó por medio de visitas frecuentes al barrio en
18. 18
un periodo de poco más de un año. En la última parte de este capítulo se ubica el
estudio de caso de las familias del barrio de Tierras Negras. En esta sección se
muestran los perfiles de cada entrevistado con sus respectivos familiogramas de
acuerdo a la familia troncal, familia descendente y familia actual. La información
recopilada a través de las entrevistas a profundidad se encuentra segmentada por
medio de cuadros en donde los datos se acomodaron según el género y grupo de
edad.
La decodificación de la información se divide en ocho categorías de análisis
iniciando con la identificación de perfiles Mujer y Hombre donde se presentan los
perfiles de los entrevistados. En la categoría de representación del barrio se
ubicaron las respuestas de los entrevistados en relación al apego y significado hacia
el lugar donde viven. Después, se encuentran las categorías de percepción del
matrimonio y representación de la familia. Dentro de la categoría de familia
ascendente se presenta el contenido de las preguntas respecto a la composición de
la familia troncal. Posteriormente se encuentran las categorías de familia actual y
familia descendente. En el siguiente diagrama se ejemplifican las ocho categorías
utilizadas para el análisis de resultados:
Para finalizar este capítulo se localiza la categoría de opiniones de perfiles
Mujer y Hombre donde se plasmaron los comentarios personales y emocionales de
los entrevistados en relación al significado de su familia. Por último, en el apartado
Fuente: elaboración propia
Identificación
de perfiles
Mujer y
Hombre
Representación
del barrio
Percepción de
matrimonio
Representación
de la familia
Familia
ascendente
Familia actual
Familia
descendente
Opiniones en
perfiles Mujer y
Hombre
Diagrama I. Categorías de análisis
19. 19
de discusión se presentan los tres conceptos con los cuales se explican los
resultados de esta investigación: permanencia, transformación y ruptura.
Un panorama general del trabajo refleja que la familia en el barrio de Tierras
Negras se encuentra en un proceso hacia la ruptura. Los individuos que se
encuentran en el grupo de edad de 60-70 y 50-60 años corresponden a la
permanencia de la familia; la cual fue analizada por medio del paradigma
funcionalista, donde la familia se percibe como una institución natural que funge
como precursora de la familia tradicional, familias grandes; y su estructura se
mantiene a través del orden y la reproducción social de los roles y de los
estereotipos de la familia.
El grupo de 40-50 años corresponden al proceso de transformación. Son
aquellas familias en las que las dinámicas y la estructura familiar se ha ido
modificando desde la familia troncal, descendente y actual. En la familia de este
grupo de edad se vislumbran los vínculos afectivos y la notable reducción de
integrantes. La ruptura en la composición y dinámica familiar se presenta en el grupo
de edad de 30-40 años donde las transformaciones que se muestran en el grupo de
edad de 40-50 años se hacen evidentes. Entre las características relevantes que
atribuyen a la ruptura se encuentran las uniones libres, segundas uniones, adopción
de hijos y reducción de integrantes por familia.
En el análisis de resultados y de acuerdo a las hipótesis, se esperaba
encontrar a familias tradicionales en proceso de transformación. Respecto al estudio
de caso en el barrio de Tierras Negras; elegir esta zona fue de gran importancia
debido a ser un sitio rodeado de tradiciones y prácticas culturales llamativas en la
ciudad de Celaya. A su vez, los entrevistados mantienen una estrecha relación con
el Templo católico de Tierras Negras, por lo que se esperaba que se tuviera un
discurso religioso respecto a las tradiciones de la familia católica.
La teoría utilizada para el análisis de las familias 60-70 y 50-60 años fue el
paradigma estructuralista. Esta teoría se eligió para analizar estas dos familias
según las características encontradas. Posterior al haber realizado el trabajo de
campo, y después de encontrar ciertas particularidades entre las familias con las
cuales se trabajó, se consideró pertinente utilizar el paradigma funcionalista sobre
20. 20
esta temática, debido a que el objetivo de este trabajo únicamente se centra en
explicar la estructura y dinámica familiar respecto a los roles entre los integrantes.
De esta forma, el estructural funcionalismo contiene las herramientas adecuadas
para realizar un análisis en el desarrollo de la estructura desde la familia troncal, la
familia actual y la familia descendente.
Es importante señalar que existen otras teorías dentro de la sociología como
el interaccionismo simbólico, cuyo análisis se enfoca en los aspectos simbólicos que
existen entre las relaciones face to face de los individuos; sin embargo, en el caso
este trabajo no se considera relevante realizar tal análisis, simplemente mantenerse
en el estudio a profundidad de la estructura familiar.
En relación a la familia moderna, debido a que este trabajo de fundamenta
en la teoría de la segunda transición demográfica enfocada en los cambios de la
composición familiar. Lo que respecta al caso de las familias de 40-50 y 30-40 años,
en su análisis se emplearon las teorías de la segunda transición demográfica y los
estudios relevantes de corte demográfico de forma complementaria al estructural
funcionalismo. A su vez, las familias ubicadas en este grupo de edad también se
analizaron con algunos parámetros del estructuralismo, sin embargo, al realizar un
análisis más profundo se llegó a la conclusión de que estás familias no podían ser
analizadas de igual forma que las familias de 60-70 y 50-60 años debido a ciertas
características que el funcionalismo no menciona, por ejemplo; las uniones libres.
El estructuralismo analiza a las familias dentro de la estructura de la sociedad
tradicional y la sociedad moderna, siendo este el preámbulo de análisis de esta
investigación.
21. 21
CAPÍTULO I. LA CONSTRUCCIÓN TEÓRICA DE LA FAMILIA
La sociedad se caracteriza por su dinamismo y las diferencias entre los elementos
de interacción social de los individuos; estableciendo un proceso de construcción
social de la realidad como un conjunto de cambios donde los efectos de la transición
de lo tradicional a lo moderno redefinen dicha dinámica en el entorno cultural y
social. Los individuos requieren de ciertos procesos de adaptación, que resultan
entre la complejidad ante los crecientes parámetros de nuevas formas de
convivencia, donde las costumbres se modifican notablemente; no sólo es hablar
de una readaptación y de redefinirse como colectivo, también es referirse a los
crecientes desafíos en la integración y reproducción social de los individuos.
De manera general e introductoria a la temática de esta investigación, en este
primer capítulo se encuentra el planteamiento acerca de la revisión teórica en torno
a familia, cabe mencionar que la teoría elegida para analizar los resultados de esta
investigación se fundamenta en el funcionalismo en conjunto a la adaptación de
roles y estatus.
Este recorrido teórico inicia con el paradigma funcionalista, en seguida, se
presenta lo referente a roles y status en la familia, y para finalizar este capítulo se
presenta el apartado de teoría demográfica aunando algunas posturas que se han
establecido recientemente sobre la temática de la familia.
1.1 La familia: sociedad tradicional y sociedad moderna
De acuerdo al planteamiento acerca de la composición de la sociedad, se debe
presentar la explicación conceptual, en este caso, sociológica, acerca de las
características y diferencias, que, a su vez, proporcionen elementos para ubicar
aspectos relevantes de la familia entre la sociedad tradicional, y la sociedad
moderna. De este modo, los conceptos de sociedad tradicional y sociedad moderna
22. 22
aportan hacia la comprensión de cómo surgen la familia en estos contextos, y cómo
ésta se ha encontrado en constantes procesos de cambios, mencionando que, las
transformaciones que se pueden presentar en la sociedad son modificaciones y
alteraciones estructurales en la dinámica de las sociedades (Abercromie et al 1997).
Se concibe a la familia en una sociedad tradicional desde la perspectiva de
la colectividad en los individuos, donde la formación de este conjunto se estableció
mediante la construcción histórica de la comunidad, basada en una reproducción
social lineal como medio de legitimación. De tal manera que el individuo buscará
que su colectivo sea aceptado socialmente mediante la reproducción de estructuras
sociales definidas por un proceso histórico e ideológico. Stompka (2012) menciona
que el medio de legitimación de la familia corresponde a las formas de vida, a las
instituciones, y los códigos culturales existentes, indicando que todos aquellos
requieren alguna justificación que los haga obligatorios y que les haga ganar
aceptación. Sin embargo, toda tradición y toda sociedad tradicional, comienza a
poner en duda su existencia y su dinámica de acuerdo a su desarrollo y proceso
histórico; las dinámicas entre los integrantes de una familia comienzan a modificarse
de acuerdo al contexto histórico-social y la evolución que tenga este tipo de
sociedad (Stompka, 2012).
Engels (2006) indica que la inmersión de la familia en la sociedad tradicional
surge mediante redes de apoyo y sobrevivencia de este conjunto de individuos. En
relación, Lévi-Strauss (2015) hace un recorrido por diversas culturas que se
clasificarían como sociedades tradicionales, donde los tipos de familia comparten
distintos códigos culturales a diferencia de las familias occidentales consideradas
dentro del esquema de sociedad moderna.
La familia dentro de la sociedad tradicional se fundamenta en aspectos
biológicos y naturales; a su vez, estos elementos aportan a la creación de valores
culturales que ayudan a la convivencia. Sin embargo, el contexto histórico se
modifica por procesos sociales y principalmente económicos. Por ejemplo, para la
sociología la transición de sociedades tradicionales a sociedad moderna se debió
por la revolución industrial y la apertura a nuevos sistemas económicos que
23. 23
modificaron la estructura de la sociedad (Engels, 2006), y por ende, trajo consigo
cambios en las dinámicas familiares.
Desde el siglo XIX, la importancia de la individualidad se hizo evidente,
planteando que el sujeto es un producto del sistema; sin embargo, Stompka (2012)
menciona que, en todos los niveles de su complejidad interna de la sociedad, los
individuos están en cambio incesante; los cuales cambian en el macro nivel de la
economía, la política y la cultura; en el nivel medio de las comunidades, los grupos
y las organizaciones; y en el micro nivel se modifican las acciones individuales e
interacciones.
De esta forma, los individuos les otorgan sentido y significación social a
aspectos materiales como un elemento verificable en los campos económico,
político, social y cultural: economías industriales, capitalistas, organización política
democrática, y la estructura social dividida en clases. En el ámbito cultural, la
modernidad alude al gusto por la fragmentación de la experiencia, la comodidad y
racionalidad de todos los aspectos de la vida, y la aceleración del paso de la vida
cotidiana.
A su vez, la concepción de la existencia de las instituciones como mediadores
sociales, se acrecentó durante el surgimiento de las sociedades modernas que la
diferencia entre la sociedad tradicional y la sociedad moderna; donde en la primera
se establece una reproducción sistemática de la estructura social, en la cual se
determina al individuo el cual actúa en colectivo, y éste no es representativo para el
análisis de la realidad social.
La familia se convierte en un medio de legitimación y de control institucional,
donde se deben preservar los valores e ideologías modernas de la sociedad
(Giddens y Sutton, 2014). De igual forma, para la sociedad moderna, el sujeto tiene
el papel esencial para el análisis, y el individuo es un ser consciente de su realidad,
el cual determina y direcciona sus acciones con base a sus ideales, a los
sentimientos, a su cotidianidad, y de esta manera regula sus interacciones,
delimitando su propia realidad.
24. 24
1.2 Perspectivas macrosociológicas de la familia
El paradigma funcionalista
Dentro de la perspectiva macro, se concibe a la familia desde un enfoque de
sociedad tradicional donde su función parte de los ideales de un grupo que se
establece mediante la construcción histórica de una comunidad. Dicha idea tiene
como base la convivencia de la reproducción social lineal de sus integrantes como
medio de legitimación. De tal manera que el individuo buscará que su construcción
social sea aceptada mediante la reproducción de estructuras sociales definidas, -en
este caso el entorno familiar- por un proceso histórico e ideológico.
Para algunos autores en la sociología (Burgos, 2005) la familia nace como
una institución natural, la cual se origina antes de que ésta se constituyera mediante
un proceso normativo y con función de orden. La familia como un proceso natural
de reproducción social se encuentra delimitada por cuestiones reproductivas y por
medio de la construcción social del género (Burgos, 2005). Las instituciones se
crean como medio de control, reguladoras de la conducta y de comportamientos
humanos, estableciendo pautas que canalizan la orientación de los individuos. Se
entiende, dentro de esta corriente, a la familia como una “institución”; sus usos y
tendencias la delimitan como un conjunto fundamentado en normas sociales
interrelacionadas que se asocian con un núcleo de valores de alta prioridad y con
una o más necesidades humanas básicas.
Sin embargo, algunas perspectivas antropológicas, pero estructuralistas,
suelen contradecir este principio. Por ejemplo, Lévi-Strauss (2015) plantea que la
naturaleza se encuentra inmersa en el mundo humano, la cual se ve drásticamente
moldeada hacia las necesidades del ser humano; donde este tiene la necesidad de
crear “cultura” como el fundamento de su sociedad. De esta forma, se encuentra
como un primer precepto que toda creación del individuo se establece mediante
constructos sociales para el funcionamiento y orden de un colectivo. De esta forma,
25. 25
las regulaciones culturales/sociales transgreden el orden natural, por lo cual Lévi-
Strauss (2015) menciona el ejemplo del incesto dentro de la estructura familiar; el
cual en distintas sociedades tradicionales puede percibirse como lo “natural”
mientras que, en sociedades modernas occidentales, el incesto infringe el orden
natural y transgrede el orden social.
Para Lévi-Strauss (2015) la estructura parental puede ser “sutil y
complicada”, que puede causar consecuencias fatales entre las relaciones
consanguíneas quienes no desempeñan los roles impuestos por el orden cultural.
Para el autor, el orden impuesto en el sistema parental crea un conflicto entre la
naturaleza y la cultura. Es entonces cuando la teoría funcionalista de la familia se
cuestiona sobre el orden natural del individuo, y la familia pasa a ser un constructo
occidental de familias monogámicas. Cualquier otra modalidad fuera de lo social y
culturalmente aprobado pasaría a ser “abominable” o “retrógrada” menciona Lévi-
Strauss (2015).
Siguiendo esta perspectiva sobre lo natural o la construcción cultural del
orden se encuentra lo planteado por Engels (2006) donde realiza un recorrido por
la evolución histórica de la familia. La primera etapa que Engels plantea es acerca
de la familia consanguínea donde los grupos conyugales se clasifican de acuerdo a
su generación dentro de la sociedad tradicional. Mientras que, dentro de esta
evolución histórica de la familia, Engels (2006) ubica a la familia monogámica como
un reflejo de la sociedad moderna, donde se caracteriza una mayor solidez de los
lazos conyugales, convirtiéndose en el tipo de familia moderna occidental. Este tipo
de familia, se considera como la familia moderna y contemporánea, en las cuales
se han estipulado teorías donde el matrimonio o las uniones conyugales son un
medio de legitimación para la familia (Engels, 2006).
Por el contrario, a lo que menciona Engels (2006), respecto a la familia y sus
características en la sociedad moderna: se encuentra la tradición estructuralista
parsoniana, donde se puntualizan algunas diferencias teóricas respecto a las ya
mencionadas, donde el individuo no tiene consciencia de las construcciones
sociales que regulan su vida y su función dentro del núcleo familiar, y la estructura
26. 26
será el fundamento en sus deseos “naturales” de acuerdo al orden social (Parsons
y Bales, 2002).
Parsons (1991) describe a la familia como un colectivo social en donde se
comparten los procesos, y donde las motivaciones individuales y comunitarias
pueden llevar a desarrollar el afecto siempre y cuando éste se encuentre regulado
por el sistema social. Más bien para Parsons (1991) el afecto y lazos emotivos entre
los individuos son desarrollados con base al sistema social; esto no indica que el
individuo esté consciente de dichas cuestiones, más bien son construcciones
simbólicas y genéricas. Lo referente a la estructura familiar regulada por el contexto
social que explica Parsons atribuye a la explicación funcionalista acerca de la familia
vista como una institución.
Parsons (1991) menciona respecto a las interacciones sociales, las cuales
como indica el autor corresponden al Ego del individuo (motivaciones
personales/individuales) y son reguladas por los medios y condiciones del mismo.
Los objetos culturales se convierten en elementos simbólicos que se trasmiten a los
individuos por medio de ideas, creencias, símbolos expresivos o valores en medida
que el individuo los considere relevantes en su entorno social. De esta forma,
Parsons Y Bales (2002) indican que los actores sociales suelen tener motivaciones
colectivas en beneficio a sus componentes individuales. Por lo cual, los autores
refieren al proceso de socialización de la familia como un medio de interacción en
el cual se ven inmersos diversos elementos regulados por los valores y las
condiciones sociales y simbólicas.
De esta forma, se desarrolla un proceso de legitimación de la forma de vida
familiar, por medio de la institucionalización y códigos existentes, los cuales
requieren de alguna justificación que los haga obligatorios y que les haga ganar
aceptación (Sztompka, 2012). Respecto a la legitimación de la familia como
institución a nivel macro, se encuentra que esta forma parte del proceso tradicional
en la dinámica social, la fundamenta como institución, entendiendo este como un
sistema organizado de relaciones sociales en las que son participe valores y normas
comunes que sirven para regular las necesidades básicas en la sociedad (Horton y
Hunt, 1992).
27. 27
Dentro de la perspectiva funcionalista Horton y Hunt (1992), también
proponen que la familia es una institución básica, y definirla con exactitud resulta
complejo. Por lo cual los autores (Horton y Hunt, 1992) proponen que la familia
puede ser un grupo con ancestros comunes, un grupo de personas que comparten
lazo consanguíneo o unido por el matrimonio, y, posteriormente, su composición
puede variar de ser una pareja casada con o sin hijos.
A su vez, en el paradigma estructuralista se establece que la familia mantiene
ciertos objetivos básicos en su estructura: en primer lugar, se encuentra la
socialización donde los padres le enseñan a los hijos a ser miembros integrados de
la sociedad. En segundo lugar, la actividad sexual es regulada de tal manera que la
organización del parentesco se siga preservando; dentro de este apartado se
encuentra la regulación del incesto que prohíbe las relaciones sexuales entre
parientes. En tercer lugar, se presenta la escala y jerarquización familiar de acuerdo
a las características biológicas. Y en cuarto lugar, la familia se concibe como un
paraíso emocional, donde los integrantes de la familia crean una red de apoyo de
protección física, emocional y principalmente económica (Macionis y Plummer,
1999).
Siguiendo un esquema similar al propuesto por Macionis y Plummer;
Schaefer (2006) menciona que la familia cumple cinco funciones esenciales:
La primera función de la familia, se centra en la razón y reproducción como
medio de supervivencia humana. En segundo lugar, se ubica la protección humana
fundamentada en cuidados y seguridad económica permanente. Posteriormente, en
tercer lugar, Schaefer propone que la socialización de los padres y otros familiares
es la base del comportamiento de los hijos, donde se le trasmiten las normas y
valores de su contexto. En cuarto lugar, el autor menciona que la regulación del
comportamiento sexual, el afecto y compañerismo son ideales fundamentales de la
familia para llevar a cabo sus relaciones y condiciones afectuosas, y finalmente en
quinto lugar, el autor hace referencia a la provisión del status social que es heredado
de la reputación de los padres y hermanos (Schaefer, 2006).
28. 28
Para Chinoy (2010), los dos elementos básicos de la familia como institución
son el matrimonio y la filiación. Siendo que el matrimonio debe distinguirse de la
familia, cuyo valor recae en la representación de las normas que especifican la
relación entre marido y mujer. Lo referente a la filiación se define como las reglas
de dicho matrimonio que se llevan a cabo con base a expectativas y obligaciones.
El autor también menciona que la autoridad dentro de la familia es un elemento
fundamental dentro de la estructura de los integrantes, señalando que en mayoría
se encuentra los modos de familia patriarcal representada por el padre/esposo. A
su vez, Chinoy relaciona que la familia matriarcal se encuentra en menor
concentración y pone en duda si realmente existe este tipo de estructura familiar.
Por una parte, el sistema que regula una institución tiene como base un
número variado de concepciones de comportamientos y funciones que son
específicas y normativamente reguladas (Tejeiro, 2012). De esta manera, se
presenta la premisa del orden en función a la familia, como el primer entorno donde
el individuo se encontrará para adoptar y reproducir acciones; desarrollará algún
tipo de ideología, valores, normas, y posteriormente aprenderá lo “moralmente”
adecuado por el orden social.
El funcionamiento de la familia como institución y su creación existe como
medio de control/orden “natural”, con base a un proceso normativo de las acciones
habitualizadas de los individuos. Para Horton y Hunt (1988), este aspecto surge en
un contexto económico, donde éste ha sido la principal fuente proveedora desde la
consideración de las sociedades primitivas y tradicionales, y donde actualmente el
rol de proveedor del hogar se ha modificado, y ahora tanto hombres como mujeres
pueden desempeñar actividades económicas laborales externas al hogar. Aún de
esta forma, el hombre se sigue considerando como un sujeto con un rol único
asociado al bienestar de la familia ejerciendo, en algunos casos, poder y dominio
sobre los demás integrantes de la familia.
Dentro de esta perspectiva, Valois (1966) menciona la cuestión de transición
de una institución doméstica tradicional a una moderna -la cual simplemente se
29. 29
basa en la cuestión económica-, en donde las relaciones personales se revalorizan
y los parámetros de interacción de los miembros del pequeño colectivo comienzan
a redefinirse, donde los individuos tienden a resinificar sus roles de acuerdo a las
nuevas demandas de una sociedad moderna.
Para comprender la composición entre los vínculos de la familia, se debe
tener presente desde la perspectiva teórica como concepto; por ejemplo, Dallos
(1996), señala que la idea de esta institución primordial varía constantemente, ya
que la sociedad va exigiendo un nuevo orden en cuanto al desarrollo y convivencia
de las personas dentro de este núcleo. También menciona que a pesar de la
transición que pueda observarse en esta institución, se siguen presentando etapas
tradicionales dentro de la misma como; el noviazgo, el matrimonio y sus
consecuencias (nacimiento de los hijos, dificultades del matrimonio, independencia
de los hijos y finalmente la vejez). Si se analiza lo que el autor expone, puede
plantearse la idea de por qué las personas siguen reproduciendo este tipo de
sistema familiar, donde el matrimonio y la vida familiar se pueden asociar al
bienestar y la tranquilidad social, y a la reproducción social del orden dentro de esta
institución.
Dentro de otros planteamientos, Rocher (1996), expone que la familia
conforma una red más amplia de interdependencia y ayuda mutua en relación a las
obligaciones que esta pequeña sociedad pueden establecer entre sus integrantes.
De esta manera, se relaciona que la parentela, como unidad doméstica, emplea
roles sociales en el sentido clásico de la estructura como un microcosmos social, en
donde es esencial delimitar las funciones de cada integrante, para evidenciar sus
posiciones, y donde la organización social tradicional gira en torno a dos ejes
principales: la parentela y los grupos de edad. Además, cada integrante de la familia
obedece y reproduce los modelos integrados a acciones de acuerdo a la función
que empeña (Giddens y Sutton, 2014).
Entender el proceso histórico que delimita a la familia como una unidad
doméstica, lleva a plantear que es una institución básica en la sociedad
contemporánea donde las evidencias de este proceso muestran las diferencias
30. 30
históricas que han contribuido a demostrar a la familia como una sociedad que se
encuentra en constante cambio debido a la industrialización, a la adaptación de la
modernidad y la dinámica urbana.
Recordando lo mencionado anteriormente, acerca de la necesidad de la
construcción social de parámetros que aporten orden de acuerdo a las funciones en
la dinámica cotidiana del individuo; la unión parental se puede analizar como un
colectivo que parte de una construcción mediada por el orden natural de la especie
humana, en donde se tiene presente, de manera indirecta que constitución de este
pequeño colectivo se fundamenta en la dinámica natural del ser humano.
“La función, organización y composición de la unidad familiar y del grupo
doméstico tienden a conformarse y a cambiar siguiendo patrones de referencia
institucionalizados, que se hallan social e históricamente determinados” (Salvia,
1995: 148). No obstante, este tipo de relaciones también busca representar las
formas de relaciones domésticas y familiares que construyen el primer entorno de
socialización. Dentro de esta unidad doméstica, Salvia destaca que se reconoce
socialmente a este tipo de organización estructurada a partir de las redes de
relaciones sociales entre individuos que comparten una residencia en común. Al
mismo tiempo el autor reconoce que la familia se ve implícitamente relacionada a
las uniones parentales como personas que comparten un espacio de interacción
cotidiana instituido por relaciones parentales, los cuales se encuentran
institucionalmente establecidas.
La familia no siempre ha existido como se percibe en la actualidad, no solía
ser una referencia de lazos parentales o uniones simbólicas emocionales, sino como
un complejo sistema de red compuesto por personas que compartían intereses y
proveían económicamente a personas que podían o no compartir los lazos
sanguíneos. Dentro de la revisión del concepto de familia (en procesos históricos),
como menciona Norbert Elias (1993), alude a un significante contemporáneo de un
“nosotros”; y no a la posesión de las que gozaba un varón de clase gobernante que
incluían a su mujer, hijos, castillo y esclavos, y a la conjunción de intereses
monetarios entre familias. Entre otros discursos sociológicos se presenta lo
31. 31
propuesto por Macionis y Plummer (2011) de acuerdo a los debates entre las
explicaciones de historiadores en contraste a planteamientos sociológicos acerca
de la evolución de la familia, estableciendo un parámetro entre las nociones de lo
que es la familia “ideal” que se entiende como la familia “nuclear” y aquellas
combinaciones variadas y complejas que presentan cambios en la estructura de la
familia.
Para la sociología, las familias han estado en continuos procesos de cambio,
por lo que, para hablar de familia, es hablar del primer lugar en donde el individuo
socializa; donde los padres se encargan de enseñar a sus hijos a formar parte de la
sociedad, tomando en cuenta que esta socialización equivale a crecimiento natural
del sujeto y este, se encuentra determinado por el ciclo vital: “El funcionalismo
identifica una serie de papeles que desempeñan las familias. Desde este punto de
vista resulta fácil reconocer que la sociedad actual, tal como la conocemos, no
podría existir sin las familias” (Macionis y Plummer, 2011:542).
Esto ofrece a la familia una serie de elementos que, a la vez, les otorga a los
individuos oportunidades de socialización interna, y un tipo de socialización externa
previamente enseñada en el hogar. La estructura de algunos tipos de familia, como
la familia ampliada, le ofrece al individuo diversas ventajas en comparación a la
familia nuclear, que suele tener menos integrantes. Schaefer (2006) fortalece dicho
planteamiento refiriendo a ciertos momentos de crisis por los que pasa la familia;
propone que -siendo el caso de la familia ampliada- la muerte, divorcio o
enfermedades, los miembros de este grupo ofrecen un mayor soporte emocional,
siendo una ventaja de este tipo de familia. De esta forma, la estructura de las
relaciones familiares se va adecuando según el contexto y sus
necesidades/obligaciones que van generando cambios en la familia, pero que al
final la “estática” de la familia sigue siendo considerada como un refugio y una
garantía de estabilidad.
32. 32
Roles y status en la familia
La transmutación de las instituciones recae en la construcción del rol y status, como
medios de legitimación de la familia y sentido al orden social. Los roles en sociedad
son elementos que se encuentran preestablecidos como base de la sociedad
industrializada, y los cuales, no sólo son un vestigio tradicional, sino que estos
también se encuentran tan arraigados a la estructura social, que resultaría
complicado desprenderse socialmente de estas construcciones. De esta forma, se
comprende que los roles se encuentran inmersos en la realidad social, donde ésta
se encuentra delimitada por el contexto por la acumulación de conocimientos; para
posteriormente, crear patrones de comportamiento institucionalizado en el que se
establecen las normas de interacción y los patrones de reproducción social de cada
individuo (Ulrich Beck y Elizabeth, 2001).
Horton y Hunt (1992) plantean que los individuos suelen tener varios status y
también pueden desempeñar los roles adecuados según el contexto. Por lo tanto,
los autores establecen que los status y roles pueden ser adquiridos- aquellos que el
sujeto obtiene socialmente por méritos- y los adscritos mediante esfuerzos
personales. Dentro de este planteamiento, Horton y Hunt mencionan que los roles
por adscripción se encuentran previamente desarrollados, por ejemplo: se
encuentra la adscripción por sexo que regula los roles femeninos o masculinos, la
adscripción por edad que delimitara diferencias sociales de aprendizaje entre los
individuos; y finalmente, la adscripción por mérito que le otorgará movilidad a las
personas de acuerdo al status que deseen conseguir.
Los roles son tipificaciones de las formas de acción con sentido objetivo los
cuales los individuos adoptan según el sentido de su acción y su limitación de
tiempo-espacio. “El rol, en efecto, está integrado por normas a las que se sujeta la
acción de los individuos que ocupan una posición o desempeñan una función
particular en el seno de un grupo o de una colectividad” (Rocher, 1996:43). Los roles
también están determinados por la acumulación de conocimientos, los cuales
pueden ser heredados o adquiridos dentro del núcleo familiar, y por esta razón son
necesarios el comportamiento institucionalizado.
33. 33
Partiendo de la delimitación institucional por medio de la reproducción de los
roles, se entiende que estas tipificaciones implementan objetivos particulares y
generales en donde estos entran en función con la interacción cotidiana de otras
personas que también ejercen sus “roles” predeterminados.
Las instituciones se encarnan en la experiencia individual por medio de los
‘roles’, los que, objetivados lingüísticamente, constituyen un ingrediente
esencial del mundo objetivamente accesible para cualquier sociedad. Al
desempeñar ‘roles’ los individuos participan en un mundo social; al
internalizar dichos ‘roles’, ese mismo mundo cobra realidad para ellos
subjetivamente (Berger y Luckman, 2003: 97).
Haciendo hincapié a que la reproducción de roles se convierte en patrones
de conducta necesarios para la institucionalización de un comportamiento ordenado
socialmente. No obstante, la función de la lógica social de la reproducción de roles
dentro de la familia, donde no todo integrante de este núcleo, puede socialmente
ser aceptado para llevar a cabo una acción en determinado contexto. En efecto, la
adaptación y reproducción de un “rol” es solo una particularidad para entender la
realidad de la interacción entre los sujetos, basándose en la jerarquización entre los
integrantes de la familia.
Dentro de la corriente del interaccionismo simbólico se encuentra la
delimitación de las acciones sociales por medio de roles y status. El status en una
sociedad tradicional se asociaba al honor y prestigio social que un grupo social le
otorgaba al sujeto. Dentro de la tradición interaccionista, el status se asocia al estilo
de vida y las particularidades del espacio donde se encuentra el sujeto, por ejemplo,
para Giddens y Sutton (2014) los códigos de vestido, la manera de hablar y la forma
de comportamiento contribuyen a la posición social de un sujeto en relación a los
demás.
Retomando lo mencionado anteriormente a la función de las instituciones se
puede plantear lo siguiente: el status se puede adquirir de manera natural y biológica
de manera inherente. Por ejemplo, la construcción social del género es parte del
status con el cual los individuos ya nacen, y socialmente se establece el parámetro
34. 34
de ser “hombre” o ser “mujer”. También el rol entra en juego en este constructo, de
tal manera en la que el “hombre” tiene una serie de ordenamientos y reproducciones
sociales que lo forman como “hombre” en su dinámica social, igualmente la “mujer”,
de tal manera que cada rol será representado según su status; hombre/padre,
mujer/madre, hombre/abuelo, mujer/hija (por mencionar algunos casos de
integrantes de una familia). Mientras que el status adquirido se determina mediante
el proceso de socialización por una acción o motivos indirectos.
De manera simbólica, la adaptación de rol y status dentro de la familia,
establecen una estrecha vinculación de acuerdo al orden social requerido dentro de
esta institución, donde las funciones de cada sujeto se desarrollan dentro de la
lógica necesaria para establecer dicho orden, y es por estas cuestiones que, en las
familias, aún con procesos externos que modifiquen su contexto, se siguen
desarrollando ciertos patrones que conllevan a la reproducción de dicho orden
social.
Desde que un individuo nace o se integra en la familia, adquiere una serie de
status, inicialmente adscritos según su condición social: género, edad, lugar de
nacimiento, etc. La familia también es participe de distribuir varios status sociales
que juegan como adjetivos dentro de la denominación natural, por ejemplo: hijo,
católico, de clase media en sector urbano (Horton y Hunt, 1992). El status definirá
ordinariamente la posición de un individuo dentro de la familia, mientras que el rol
se convierte en las acciones que deberá desarrollar el individuo en cierta
circunstancia. A su vez, mencionan Horton y Hunt, que el status y el rol son parte
esencial de la dinámica familiar, planteando que el status contiene una serie de
privilegios y obligaciones, mientras que el rol se fundamente entre obligaciones y
privilegios.
Cabe señalar la importancia de la elección de la teoría del interaccionismo
simbólico para realizar el análisis de esta investigación. La importancia de esta
perspectiva, reside en presentar las particularidades de los miembros de la familia.
El interaccionismo aporta las herramientas de análisis para intentar comprender
35. 35
cómo las dinámicas familiares se modifican de acuerdo al contexto, y principalmente
en el proceso histórico particular de cada familia.
No es hablar de modelos generales de familia, ni intentar tipificar a cada uno
de los miembros de este núcleo; es fundamentar la singularidad de las interacciones
simbólicas y el medio simbólico en el que una familia se reproduce. A su vez,
también cabe mencionar puntualmente que lo referente a rol y status en esta
investigación, se adapta a una propuesta que surge de la inquietud acerca de cómo
el rol y status pueden ser sustituibles, y transferibles dentro de la familia -tomando
en cuenta que la teoría base de este trabajo es el interaccionismo simbólico-. Por
ejemplo, uno de los integrantes del núcleo familiar puede reproducir más de un rol,
sin importar si el rol es dado socialmente con una carga de género.
1.2 Teoría demográfica
Actualmente el camino acerca de los estudios de familia se ha redireccionado.
Algunos autores (De Singly, 2004; Bonvalet, 2016) han presentado investigaciones
que revelan que la estructura familiar moderna ha tenido modificaciones en relación
al surgimiento del individuo y el creciente énfasis en las cuestiones personales. De
Singly (2001) propone que el primer proceso del cambio en la estructura familiar ha
sido añadir los ideales del amor romántico a las uniones matrimoniales. Los ideales
del amor en la modernidad son el resultado de una serie de transformaciones del
afecto y los roles de expresión. Asimismo, Bonvalet (2016) plantea que una de las
modificaciones en la vida familiar se centra en la individualización, donde el
individuo pasa a ser la primera referencia; ya no es el individuo quien está al servicio
de la familia, sino que es la familia la que está al servicio de cada uno de sus
miembros.
Sin embargo, estas transformaciones siguen funcionando con el modelo de
la familia patriarcal, convirtiéndose en la única capaz de garantizar la protección de
sus miembros. De esta manera Bonvalet menciona que la familia nuclear mantiene
la garantía del equilibrio en las familias. El desarrollo de la familia nuclear, está
36. 36
marcado por el surgimiento del “individualismo afectivo”, como lo mencionaba De
Singly. La idea de la familia nuclear descansa en la formación de vínculos
matrimoniales basados en la libertad de elección personal guiada por normas y
sentimientos de amor, afecto y solidaridad (Gomes, 2001).
En las últimas décadas se han planteado nuevas conformaciones de la
estructura familiar, de la misma forma, los hogares también se han reconfigurado
en diversos aspectos como la forma de matrimonio. A partir de los años treinta se
ha encontrado que el matrimonio religioso ha disminuido notablemente hasta el
2010, mientras que los matrimonios civiles y religiosos han aumentado
evidentemente, al igual que la cohabitación (Esteve, Albert et al, 2016) donde los
roles y estereotipos de los miembros de la familia se transforman en distintas formas
de hacer familia y se han presentado nuevos preceptos acerca de la construcción
de familias tradicionales y modernas (Gómez, 2011).
El análisis de la familia puede enfocarse entre dos periodos de estudio: la
sociedad tradicional, que algunos teóricos nombran sociedad patriarcal, y la
sociedad moderna; en la primera se presentaba la tolerancia ante uniones libres,
nacimientos ilegítimos y la estructura familiar prácticamente se convertía en el
medio de reproducción sexual y preservación de bienes. En el caso de la sociedad
moderna se concentra en el predominio de uniones libres, y el deslinde entre el
matrimonio y reproducción (Bonvalet, 2016).
De esta forma, Bonvalet (2016) plantea que una de las modificaciones en la
vida familiar se centra en la individualización, donde el individuo pasa a ser la
primera referencia; ya no es el individuo quien está al servicio de la familia, sino que
es la familia la que está al servicio de cada uno de sus miembros. De esta manera
Bonvalet menciona que la familia nuclear mantiene la garantía del equilibrio en las
familias. El desarrollo de la familia nuclear, está marcado por el surgimiento del
“individualismo afectivo”, como lo mencionaba De Singly. La idea de la familia
nuclear descansa en la formación de vínculos matrimoniales basados en la libertad
de elección personal guiada por normas y sentimientos de amor, afecto y solidaridad
(Gomes, 2001).
37. 37
Asimismo, estos estudios recientes proponen la notable presencia de las
familias modernas dentro de sociedades patriarcales. Welti (2015) señala que este
tipo de transformaciones se manifiestan a través del incremento del nivel de
escolaridad en la población femenina, quienes aplazan la maternidad, pasan más
tiempo fuera del hogar, y amplían sus actividades extra domésticas. Algunos
autores (Arriagada, 2002; Quilodrán, 2011; Welti, 2015;) han analizado las
transformaciones sociales de la familia de acuerdo a la condición y la figura de la
mujer en la organización familiar.
38. 38
CAPÍTULO II. MARCO CONTEXTUAL: FAMILIA EN MÉXICO
Hablar de familia en México se relaciona a una serie de cambios, al transitar en la
modernidad y a la vez el discurso sobre mantener tradiciones. También en las
últimas décadas se han planteado nuevas posturas acerca de las conformaciones
en la estructura familiar, donde los roles de los miembros de la familia se sustituyen
y se convierten en transformaciones en las dinámicas familiares.
En este capítulo se hace un recorrido por algunos apuntes acerca de familia
en México. Después se encuentra un referente de transformación y cambio en las
sociedades explicado con la teoría de la primera transición demográfica
particularmente, posteriormente se desarrolla la segunda transición demográfica,
buscando direccionar hacia las transformaciones en la dinámica familiar. Por último,
en este capítulo se presenta un acercamiento a la temática sociodemográfica del
Estado de Guanajuato, respecto a las condiciones y estructura de la población.
2.1 Familia en México
En este trabajo el estudio de la familia se ubica desde la concepción de las
sociedades modernas. Sin embargo, en el contexto mexicano es importante realizar
un breve recorrido histórico a través de la evolución de la familia desde la época
virreinal hasta inicios del siglo XX. Cabe señalar que esta investigación no es de
corte histórico, pero es necesario para contextualizar señalar aspectos importantes
acerca de la familia en el país.
La familia es parte fundamental del conocimiento en distintas áreas de
estudio; sin embargo, su investigación adquiere relevancia por ser unidades de
observación y análisis que permiten la cuantificación y particularidad en las
dinámicas de los individuos (Figueroa, 2008). Dentro de la investigación
39. 39
sociodemográfica, la familia se relaciona con el análisis del hogar y vivienda, pero
hay que señalar que los conceptos de hogar y familia, aunque se relacionan
estrechamente no son lo mismo. Por una parte, el estudio de la familia se centra en
sus características como una red de derechos y obligaciones sociales que regulan
las relaciones de parentesco y conyugales (Echarri, 2003). Por otra parte, el análisis
se compone de la concepción biológica del intercambio sexual y la regulación de
este aspecto. En efecto, la organización de la familia dentro de un hogar dependerá
de las reglas de residencia o filiación, estableciendo normas que definen la
interacción social de los integrantes de dicho núcleo.
En el caso de México, se han planteado cambios en las dinámicas de familia
desde mediados del siglo XX; donde el país ha transitado por una serie de eventos
que han ido modificando la estructura social, política, religiosa y principalmente
económica (Gonzalbo, 2009). De esta manera, los cambios macrosociales y
económicos recaen en instituciones, principalmente en la familia, el crecimiento
acelerado de población en las últimas décadas, la migración y la influencia externa
de la modernidad han permitido que se hable de transformaciones en la familia. En
esta perspectiva, se comprende que la contribución de los procesos históricos
sociales, forman parte fundamental del análisis de la familia. No sólo es ofrecer una
perspectiva de los cambios de la familia dentro de los periodos específicos, sino en
varios contextos sociales y culturales.
En relación, se encuentran algunos apuntes referentes a análisis que se han
realizado de familia en registros durante el Virreinato de la Nueva España, cuya
visión solía ser distinta a la contemporánea en algunos sentidos. En cuanto al orden
patriarcal, la situación no se ha modificado drásticamente, las obligaciones de los
hijos ante sus padres establecían un orden de obediencia y reverencia. El prestigio
familiar entre los hijos y la esposa, era esencialmente regulador por tomar roles de
sumisión ante el jefe de familia. Sin embargo, en cuanto al papel de la mujer en la
familia se sigue recuperando que la fecundidad y aspectos de la vida familiar; como
hogar y vida cotidiana, el rol femenino funge como base del análisis de este tipo de
procesos históricos (Gonzalbo, 2013). Cabe señalar la importancia en la
40. 40
diferenciación entre las estructuras y funciones de la familia en el ámbito rural y
urbano, mencionando que, este trabajo se centrará únicamente en el sector urbano.
Retomando el contexto histórico de la familia, Gonzalbo (2013) afirma que la
familia solía ser la base de la organización comunitaria, y que el matrimonio se
contraía en edades tempranas, poniendo en juicio la legitimidad del mismo. Aun así,
con la legitimidad del matrimonio, la ausencia temporal o definitiva del varón como
jefe de familia era un patrón común en este periodo. Desde la época virreinal la
familia se encontraba regulada en aspectos de la vida en el hogar, la fecundidad los
roles en el hogar, sin embargo, Gonzalbo (2013) indica que la familia se encontraba
a cargo de los poderes eclesiásticos y los censos que se realizaban durante este
periodo eran a cargo del registro civil que formaba parte de la Corona.
En estos registros se encontraba información de acuerdo a las viviendas,
quiénes integraban la familia, si pertenecían a alguna casta o si provenían de una
segunda unión. Un dato que proporciona Gonzalbo (2013) acerca de las familias de
esta época es que, si se tenían hijos ilegítimos o en segunda unión, el padre estaba
obligado a darle el apellido al hijo; entonces, este dato que parecería poco relevante,
proporcionaría un principio y contradicción ante la separación de los tipos de familia
en sociedades modernas y tradicionales, de igual manera, este dato establece la
conexión entre la evidente existencia de las segundas uniones e hijos fuera del
matrimonio.
Por lo cual se podría pensar -arriesgadamente- que los cambios en la familia
en el país siempre han transitado en el cambio social, debido a que la evolución de
la familia, puede enfocarse entre dos periodos de análisis: la sociedad tradicional,
que algunos teóricos (Dallos, 1996) nombran sociedad patriarcal, y la sociedad
moderna; donde en la primera etapa se presentaba la tolerancia ante uniones
informales, nacimientos ilegítimos y la estructura familiar prácticamente se convertía
en el medio de reproducción sexual y preservación de bienes. En el caso de la
sociedad moderna se concentra en el predominio de uniones libres, y el deslinde
entre el matrimonio y reproducción.
Sin embargo, para otros autores como Gutiérrez (2015), hablar de cambios
en la estructura en las familias mexicanas es remontarse a las transformaciones
41. 41
posteriores al periodo de revolución y la crisis económica de 1929. De esta forma,
se menciona acerca de cómo la sociedad sufrió los estragos de la crisis donde el
país entró a una creciente etapa migratoria que posteriormente, le daría a México la
pauta para iniciar una etapa de industrialización, donde los roles femeninos y
masculinos se incrementaron, las familias extensas eran comunes, la ausencia del
padre debido a causas laborales, y la fuerte presencia femenina en los hogares.
El autor establece una serie de delimitaciones para el concepto de familia de
acuerdo al contexto mexicano donde refiere a una reconstrucción del término de
familia donde propone que esta no debe observarse de manera uniforme ni unilineal,
propone que es necesario visualizar los aspectos necesarios que determinan a las
familias según la concepción del género tomando en cuenta el contexto geográfico
donde se desarrollan las familias y las actividades económicas del sitio.
La sociedad mexicana en las últimas décadas, ha experimentado cambios
económicos y sociodemográficos de importancia (Valenzuela y Salles, 1998). En
efecto, algunos autores han analizado las transformaciones sociales de la familia de
acuerdo a la condición y la figura de la mujer en la organización familiar. Welti (2015)
señala que este tipo de transformaciones se manifiestan a través del incremento del
nivel de escolaridad en la población femenina, aplazando la maternidad, pasando
más tiempo fuera del hogar, y ampliando sus actividades extra domésticas. En la
mayoría de familias, tanto el status y rol femenino se han modificado, pero cabe
mencionar, que aún en algunas regiones se sigue un patrón tradicional referente a
las actividades domésticas desempeñadas por la mujer.
Para algunos autores (Semenova et al, 2016) los cambios en los patrones
del ciclo de vida de las familias mexicanas se han modificado dramáticamente,
debido a la disminución en la tasa de natalidad; la esperanza de vida; la evolución
del papel de la mujer; las altas tasas de divorcio y nuevo matrimonio; el aumento de
madre solteras, las parejas no casadas, y las adopciones monoparentales.
En los tiempos modernos también se replantean las relaciones de pareja y el
deslinde de la sexualidad, sin embargo, este tipo de connotaciones de modernidad
se estrechan a distintos tipos de intimidad delimitando un marco de interacción que
define la cercanía y acercamiento de los miembros de una familia (Esteinou, 2010).
42. 42
De esta forma las relaciones familiares desde mediados del siglo XX en México
comenzaron a estrecharse dentro de la estructura nuclear e inclusive la extensa.
Este fenómeno va a la par con el proceso demográfica donde las familias
comenzaron a hacerse más pequeñas y la esperanza de vida en las personas se
comenzó a alargar por lo cual tienen mayor oportunidad de desarrollar una cohesión
e intimidad en su vida familiar.
Otros autores como Díaz-Muñoz (2009) indican que la evolución de las
familias según los tipos de hogares desde la década de los 90 hasta el 2000,
muestran una reducción de las familias nucleares, que, aunque sigan siendo el
modelo predominante en el país, disminuyeron desde un 63.1 a 61.4%. Esto, según
señala el autor se debió al incremento de hogares no familiares, la disminución de
familias nucleares biparentales con hijos desde un 46.3 a 41.1%. Para el 2005, Díaz-
Muñóz (2009) indica que estas modificaciones trajeron consigo la transformación de
las familias monoparentales con hijos, de jefatura femenina, y un aumento de
hogares monoparentales con jefas. Y durante este periodo un 13.1% son familias
monoparentales, de las cuales 86.8% son de jefatura femenina; este proceso es un
referente ante la baja del modelo patriarcal y aumento de las familias biparentales
con hijos.
El proceso de la formación de las familias no se ha mantenido aparte de estas
transformaciones; la fecundidad se redujo, y las pautas de nupcialidad también se
han modificado. Para Bárcenas (2012), en México, la conformación de los hogares
en México continúa determinada por la presencia de las familias nucleares, familias
monoparentales y de las parejas sin hijos. Las cuales, son composiciones
agrupadas en la categoría de hogares nucleares, representaron el 71% de los
hogares familiares en México. La autora realiza un análisis acerca de la condición
actual de la familia como institución a nivel nacional, aludiendo a que se pueden
identificar un conjunto de prácticas a través de las cuales se le ha legitimado esta
institución, dentro de un orden social en el la familia se encuentra regulada por
medio de la religión y normas civiles, que se encargan de preservar las prácticas
socialmente aprobadas para esta.
43. 43
Bárcenas propone que la formación de las familias tradicionales se direcciona
a un tipo de tensión entre los imaginarios instituidos y los imaginarios instituyentes
de los mexicanos sobre las familias que permiten la modificación de las dinámicas
cotidianas de las familias y nuevas formas de familia. Sin duda, la importancia del
análisis recae en obtener datos que cuantifiquen la realidad social en el país;
permitiendo que el investigador genere una interpretación de la realidad
argumentada y justificada mediante anuarios estadísticos e información censal
(Eternod, 2008). De esta manera, el acercamiento hacia la temática de la familia es
entendida mediante los indicadores de hogar y vivienda que permiten esquematizar
la calidad de vida que tienen las personas.
2.2 La primera transición demográfica
La primera transición demográfica, o también llamada revolución demográfica se
plantea en países europeos durante el siglo XVIII, donde la apertura de las
sociedades ante la modernidad e industrialización se encargaron de cambiar
algunos indicadores demográficos entre la población, dando como resultado cierto
equilibrio entre las tasas de mortalidad y natalidad (Figueroa, 2008). Durante la post
segunda guerra mundial en países europeos se presentó una disminución de la
fecundidad, es decir, disminuyó el número de hijos por cada mujer en edad
reproductiva, donde a su vez, el embarazo y matrimonio se comenzó a postergar
(Quilodrán, 2003). Asimismo, iniciaron medidas de control natal y educación sexual
principalmente para las mujeres. Sin embargo, actualmente los procesos
demográficos en diversos países se encuentran en distintas etapas de transición
por cuestiones históricas y socioeconómicas.
Para Quilodrán (2011), la idea de la primera transición demográfica se
establece en México a mediados del siglo XX, comparando algunos países
europeos como Francia donde su proceso de transición demográfica fue lento,
México alcanzó precipitadamente los niveles de baja mortalidad y fecundidad en
menos de un siglo. La transición demográfica en México, es un ejemplo amplio del
crecimiento acelerado en la población mexicana, ubicándose en elevadas tasas de
44. 44
crecimiento entre mediados del siglo XX, donde las condiciones económicas y de
salud mejoraron notablemente, lo que trajo consigo el aumento en el número de
nacimientos y los cuidados personales de la población, dando como resultado el
aumento en la tasa de fecundidad y el aumento en la esperanza de vida.
En relación la implementación de los servicios públicos de salud ayudó a
controlar, y disminuir las tasas de mortalidad y fecundidad; sin embargo, menciona
Zavala de Cosio (2014), que el país pasó por una crisis demográfica a principio del
siglo XX; donde la revolución mexicana, la epidemia de gripe española en 1918 y la
inestabilidad posrevolucionaria, fueron el hincapié del crecimiento de las tasas de
mortalidad.
El ritmo de esta transición en el país ha perdido fuerza, como consecuencia
de la baja de fecundidad; la cual ha sido participe de las transformaciones en la
estructura familiar. A su vez, estas modificaciones se han reflejado en la estructura
poblacional y las tasas de mortalidad y fecundidad presentan cierta rigidez en las
dinámicas sociales (Quilodrán, 2011). Entre las características demográficas de la
sociedad mexicana, se encuentra una presencia elevada de nacimientos de mujeres
y una concentración femenina en la población, al igual que, la información de que
las mujeres viven más que los hombres referenciando a cuestiones de mortalidad.
Los cambios estructurales en la dinámica de la población mexicana, aporta
interpretaciones y explicaciones acerca de las modificaciones o rupturas en las
dinámicas cotidianas de los individuos, las cuales, forman parte de los reflejos en la
conformación de hogares, cuestiones educativas, políticas y religiosas que delimitan
el contexto de la sociedad mexicana.
2.3 La segunda transición demográfica
Se puede hablar de lo tradicional, de familias modernas, sin embargo, preservan
una forma tan elemental y nuclear, y a su vez, determinada por la estructura de
género: padre, madre e hijos; pero que una familia conste de tales integrantes no
es un indicador de ser el tipo de familia ideal. Tras las nuevas dinámicas de
45. 45
población ofrecidas por las condiciones de la disminución de las tasas de fecundidad
y mortalidad, se comenzaron a hacer notables nuevas formas de interacción y de
estructuración del entorno social. Estos cambios, se caracterizan sobre todo en el
comportamiento de los individuos: el número de divorcios en aumento, y las parejas
preferían la cohabitación, la procreación en uniones consensuadas previamente al
matrimonio, o simplemente había una sustitución de esta práctica, menciona
Lesthaeghe (2014) en el análisis de la segunda transición en el caso europeo.
Es imposible establecer un tipo de familia por la heterogeneidad en el país.
Dentro de un hogar puede haber más de una familia, o una familia con más de dos
generaciones compartiendo una vivienda. No es solamente hablar de “nuevas
formas de familia” sino, referenciar todo un contexto social y las condiciones
económicas que determinan la singularidad de las familias.
Sin embargo, algunos autores como Savia (1995) expresa que la tipología de
familia o la relación “familia-individuos” busca representar las formas en que las
interacciones doméstico-familiares constituyen un campo dominante de relaciones
interpersonales que operan como estructura de oportunidades para la reproducción
física y social de los individuos, así como para el desarrollo de los comportamientos.
Mientras que Vásquez (2005) hace referencia a una serie de procesos en los que
los integrantes de las familias han establecido en las últimas décadas, todo cambio
trajo consigo una serie de modificaciones en las dinámicas cotidianas, por lo que
resulta común encontrar familias integradas por los hijos de la pareja e hijos de uno
o de ambos integrantes por fuera de la relación de pareja; a ésta la denominamos
familia mixta, restableciéndose de esta manera un nuevo núcleo familiar. También
Vásquez propone que la sociedad se encuentra en una etapa “moderna” donde el
consumo y las falsas ideas de bienestar, influyen en los cambios de la dinámica
familiar.
A su vez, las formas de familia se convierten en cambios coyunturales, en
donde la mujer en más ocasiones se encuentra a cargo del hogar o comparte la
jornada laboral y de hogar con su pareja; la familia tradicional o nuclear se modifica
y permite nuevas pautas en la interacción cotidiana. Ruiz y Cano (2012), hablan de
46. 46
una ruptura en el “viejo sistema” donde la familia conyugal o nuclear, puede estar
compuesta por una pareja heterosexual, casada, con o sin descendencia.
Relacionando lo expuesto por Vásquez (2005), los autores también proponen un
nuevo tipo de familia, la familia recompuesta, formada por parejas que al menos uno
de sus miembros proviene de una unión anterior.
Estos cambios, se caracterizan sobre todo en el comportamiento de los
individuos; el número de divorcios aumentó, y las parejas preferían la cohabitación,
procreación en uniones consensuadas previamente al matrimonio, o simplemente
había una sustitución de esta práctica Lesthaeghe (2014).
Cabe mencionar que las transformaciones que se han observado en las
dinámicas familiares, y en relación al comportamiento reproductivo y familiar de
acuerdo a la elección individual de las sociedades han sido representativas en las
últimas décadas; se menciona entre diversos autores que hay demasiados estudios
para la familia, pero no acerca del conocimiento y las nuevas implicaciones sociales
de estos nuevos procesos (Casares, 2008). La vida familiar se ha visto modificada
a su vez, por las rupturas y disoluciones en los patrones de la vida conyugal, las
cuales han afectado a la familia como institución. Estos crecientes patrones de vida
familiar, se concentran en la estimación de los niveles demográficos y a las cohortes
en el país; como en las únicas regulaciones de la vida familiar y en matrimonio que
surgen desde el aspecto religioso y civil (Esteve et al, 2016).
De esta forma, los cambios que México ha experimentado tras la disminución
de la mortalidad, lo que equivale al aumento de esperanza de vida, modificó
inevitablemente la estructura familiar; la vida de hombres y mujeres solía tener un
ritmo más acelerado de acuerdo a su vitalidad natural y social, por lo que se tenían
hijos a una temprana edad, aumentaba la posibilidad de tener más de un hijo, y
finalmente, uno de los cónyuges llegaría a su nivel máximo de la esperanza de vida
(Quilodrán, 2003). Con el aumento de la esperanza de vida, se han prolongado las
uniones conyugales y de matrimonio, por lo cual han aumentado las rupturas,
separaciones y divorcios (Gómez, 2011)
47. 47
Las transformaciones en la forma de establecer una familia también han
modificado los roles masculinos dentro del hogar, se ha aplazado la jefatura
masculina o el estereotipo del hombre como proveedor en algunos contextos. El
aumento en los niveles de escolaridad de la mujer se encuentra en aumento, su
inserción al mercado laboral, y se establece un tipo de familia, como lo menciona
Arriagada (2002) de “familias de doble ingreso” donde la jefatura del hogar es
compartida. Dentro de las características de la segunda transición demográfica se
encuentra la disociación de la vida sexual en relación al matrimonio. La ruptura (o
disminución) de esta práctica en México se ha hecho notable.
En las últimas décadas se han presentado nuevas modalidades de estas
dinámicas, basadas en el aumento de nacimientos fuera del matrimonio,
disoluciones de matrimonio, reincidencia a segundas nupcias, etc. Recordando que,
el comportamiento individual en este régimen demográfico es característico de esta
transición (Esteve et al, 2016). En México, el matrimonio como institución ha sido
cuestionado, y estas manifestaciones de la segunda transición demográfica han
sido participe de la disminución del control social de la práctica de la sexualidad
fuera de las uniones conyugales y matrimonio (Pérez, 2011). Esta serie de
procesos, y transformaciones estructurales en las dinámicas de la sociedad se
encuentra explicada, y justificada por el crecimiento poblacional que ha tenido
México en el siglo pasado, pasando por un crecimiento acelerado de habitantes.
Hablar de cambios es pequeña escala, son solamente el resultado de grandes
transformaciones en la dinámica natural de los individuos.
2.4 Perfil demográfico en Guanajuato
Previamente a recuperar la información entorno a la familia y la composición de
hogares en Guanajuato; de manera general se presentan en este apartado las
características en la condición de la población en el estado, y a su vez, el esbozo a
nivel región de la composición de su población. Como se ha mencionado
anteriormente, hay diversidad nacional acerca de los estudios de hogares y familia
48. 48
en distintas áreas. Lo que respecta al estado de Guanajuato, los trabajos de familia
son muy escasos, de igual forma que la interpretación y análisis de las fuentes
estadísticas son casi nulas para este contexto.
De acuerdo al Consejo Nacional de Población (2011), se han presentado
datos acerca de los aspectos demográficos generales de la población en cuanto a
perfiles de salud reproductiva. Durante el 2010 el estado alcanzó cerca de 5.49
millones de habitantes. Durante 1990 en mayoría, la población se encontraba entre
el grupo de edad de 0-14 años con (41.6%), para el 2010 la población en este grupo
disminuyó ligeramente (37.0%) distribuyéndose a la población joven de 25-44 años
con (26.1%), durante el 2010 estos de grupos de edad seguían manteniendo
porcentajes altos. En relación con la década de los noventa, la población femenina
se comienza a hacer más evidente a comparación de la masculina, vislumbrando la
creciente tradición migratoria de ese entonces.
En lo que respecta al comportamiento demográfico de fecundidad, como ya
se ha mencionado, durante las últimas décadas se ha observado la reducción de
los números de hijos por mujer a nivel nacional como resultado de los procesos
demográficos, donde también las políticas de salud y prevención reproductiva han
ejercido un papel fundamental. En el caso de Guanajuato, en la década de los
noventa, las mujeres tenían alrededor de 3.35 hijos; para el censo del 2010 se
redujo notablemente a 2.37 hijos por mujer, tomando en cuenta la media nacional
de 2.26 hijos (CONAPO, 2014).
De esta manera, vale la pena mencionar que la población actual de
Guanajuato se encuentra en edades jóvenes; en relación al aspecto
socioeconómico, algunos autores que proponen que el estado se encuentra en un
proceso de retos y oportunidades tanto en el aspecto social como en el económico,
debido a la concentración de población joven en edades productivas laboralmente
(De la Fuente, et al 2012). Sin embargo, también se rescata que, si el llamado bono
demográfico por el cual transita el estado concluye y no se activa la economía, esto
podría resultar en un panorama desfavorable para la región.
49. 49
Los cambios en la estructura poblacional y el aumento en los servicios de
salud trajeron consigo el aumento de la esperanza de vida en la entidad durante el
2010; para los hombres se encontraba en 72.2, y en mujeres 77.2 años (CONAPO,
2014). En 2015, la esperanza de vida se ubicaba alrededor de los 75 años. El alza
en la esperanza de vida también es un referente ante el creciente envejecimiento
poblacional en Guanajuato, el cual representa una de las principales
preocupaciones de acuerdo a la salud de este grupo poblacional; debido al aumento
de adultos con discapacidades (Vega, et al 2015). En efecto, lo que respecta al
indicador de mortalidad en Guanajuato, se ha mostrado un descenso entre 1990 a
2010 siendo que los niveles de defunciones de menores de un año pasaron de 35.7
a 13.6 por cada mil nacimientos; de esta forma se estima que para el 2020 la
mortalidad infantil siga disminuyendo a 9.9 y para el 2030 aproximadamente se
encontraría en 8.3 (CONAPO, 2014b).
El estado de Guanajuato se encuentra entre los primeros estados con una
concentración de población migratoria hacia los Estados Unidos. La fuerte y
constante migración al extranjero, es parte de las dinámicas de la población de esta
región. Durante el periodo 1990-2000 CONAPO (2014) ubicó la tasa más elevada
de pérdida de población migrante de -1.24 por cada mil habitantes. Cerca de treinta
y dos mil personas al año emigran de los diferentes municipios de Guanajuato, lo
que equivale a siete personas migrantes por cada mil en la tasa anual. La población
migrante se concentra en edades jóvenes, en mayoría se presenta una fuerte
migración masculina, y un 16% de población femenina migrante (Montes de Oca,
2009). Dentro de este planteamiento, el proceso migratorio en el estado también
está transitando por una etapa de retorno de población; donde el flujo migratorio se
ha frenado y el retorno de los guanajuatenses en el extranjero ha ido en aumento
(Vega, 2014)
La migración trae consigo reconfiguraciones sociales y económicas entre los
habitantes de la entidad. Estas notables dinámicas transforman la estructura
familiar. En 2003, Macías y Díaz (2013) según la información censal, encontraron
que el 36% de los hogares tienen alguna relación con el proceso migratorio. Las
50. 50
condiciones que se plantean en la entidad oscilan entre “los que se quedan” y “los
que se van”, afectando de esta forma la estructura familiar; descomponiendo y a su
vez, reconfigurando a sus integrantes.
Los autores consideran que durante el 2005 aproximadamente el 13% de los
hogares de Guanajuato se encontraban a cargo de una persona mayor de 60 años-
retomando el tema del envejecimiento poblacional-. Durante este mismo año, se
registró el aumento de hogares en Guanajuato, representado por 1.105 millones de
hogares en su mayoría de tipo nuclear (Macías y Díaz, 2013).
Respecto al tamaño de los hogares guanajuatenses durante el 2016, se
ubican en 3.9 integrantes, ligeramente arriba de la media nacional de 3.7, con un
porcentaje de 26.4 de jefatura femenina, en relación a la media nacional 27.3. El
porcentaje de hogares familiares en la entidad se encuentra elevado, siendo de los
tres primeros estados con mayor reincidencia a este tipo de hogar con 91.9%.
Respecto a hogares biparentales, también en porcentajes altos, Guanajuato se
ubica en 61.4%, en contraste con la media nacional de 56.2%. (INEGI, 2016).
Después de presentar de manera general algunos referentes puntuales de la
condición poblacional de Guanajuato, se puede determinar lo siguiente: la
complejidad de los procesos sociales se encuentra determinada, en su mayoría, por
el ritmo de transición demográfica en la región de estudio. El régimen demográfico
no es en lo absoluto homogéneo; y dentro de una misma región, estas transiciones
suelen tener diferentes ritmos de acuerdo a especificidades sociales.
El estado de Guanajuato se encuentra en una etapa avanzada de la
transición demográfica pero no se puede generalizar dicho planteamiento en todos
sus municipios. Esta misma referencia, funciona para hablar de la segunda
transición demográfica; -tomando en cuenta que los apuntes presentados en este
capítulo son a nivel estatal- y mencionado que, aunque la tasa de mortalidad haya
disminuido, y la fecundidad se encuentre controlada; se encuentra un desfase entre
la alta fecundidad adolescente, la concentración de hogares nucleares y la jefatura
masculina, por mencionar algunos casos.
51. 51
CAPÍTULO III. RECUENTO METODOLÓGICO
El contenido de este capítulo se compone de la explicación de la metodología mixta.
De esta forma, en este apartado también presentan los instrumentos y técnicas que
se utilizaron en esta investigación desde el enfoque cuantitativo y el cualitativo.
3.1 Método mixto
La importancia en la elección del método de investigación tiene el fin de
alcanzar un objetivo en el cual su denominación lo convierta en un fenómeno
científico basado en parámetros de medición que le ofrezcan y, a su vez, le otorguen
credibilidad. De manera general, para elaborar una investigación en ciencias
sociales se encuentran los métodos cualitativos, métodos cuantitativos y los
métodos mixtos; para esta investigación se eligió una metodología mixta. La
justificación ante la elección de este método reside en la búsqueda del contraste, la
comparación de un panorama amplio de abordaje teórico, documental y
fundamentado en bases de datos.
La manera en la cual se aborda esta investigación es la siguiente: se
encuentran dos apartados definiendo el método cuantitativo, el método cualitativo,
y el método mixto presentando sus especificaciones, instrumentos, técnicas y
alcances respectivamente. De acuerdo con Teddlie y Tashakkori (2007) la
investigación con metodologías mixtas busca la recolección y análisis de datos
cuantitativos y cualitativos en los métodos que forman parte del objeto de estudio.
Estos elementos, poseen una serie de procedimientos que conllevan a la
recolección de datos cuantitativos y cualitativos o métodos mixtos de investigación.
Aunque la investigación con metodologías mixtas se apoya en la recolección y
análisis de datos cuantitativos y cualitativos, con frecuencia se llevan a cabo de
forma similar sin que haya una combinación importante, que los separe uno del otro.