2. Dadas todas las definiciones aprobadas por la
Real Academia Española de la Lengua se puede
establecer un vínculo entre ellas, e incluso me
atrevería a afirmar que toda reproducción
cinematográfica es histórica, pues representa
en cierta medida una historia narrada, tanto
ficticia como real, y que intenta ofrecer al
espectador una forma de evasión de su vida
cotidiana para sumergirse en otras situaciones
que bien pueden ser totalmente diferentes a las
de su entorno, o bien sentirse identificado con
ellas
3. El cine constituye un magnífico
recurso para acercarse al
conocimiento de la Historia.
Permite dar forma a aquello que
hemos estudiado en teoría y
recrea como nada aspectos como
el paisaje, la vestimenta o el
carácter de los personajes, algo
generalmente difícil de entender a
través del exclusivo trabajo
académico.
4. Algo que debe quedar claro desde un inicio, es
que la literatura y el cine son dos tipos de
arte completamente diferentes. Son dos
medios que manejan lenguajes propios y
particulares. El cine presenta matices que un
papel no logra transmitir y un escrito brinda la
oportunidad de plasmar algo que en muchas
ocasiones es difícilmente podría ser planteado
en imágenes.
5. Entrar en el mundo del cine
abre a las personas un
universo apasionante. La
mayoría tiene un contacto
con el cine, limitado a la
asistencia esporádica a salas
comerciales, a ver la película
de actualidad en compañía
de sus grupos de amistades.
En muchos casos,
preparados para consumir
durante la función un
soberano paquete de
palomitas de maíz
6. Por último si queremos que a una persona
le guste el cine, o la lectura, no le
pongamos películas de contenido muy
confuso, hay que ir de lo fácil a lo difícil.
Acordémonos de los que nos gustaba
cuando éramos pequeños y lo que nos
aburría pero que les gustaba a nuestros
mayores.
Como todo aprendizaje, necesita de
experiencias, de afectos, de motivaciones,
de reiteración de hechos, de personas que
contagien el entusiasmo