9. Paco se alegró y prometió aprender su nombre completo
y su dirección.
10. ¡Pobre Paco! Por no saber su nombre, ni su apellido ni su domicilio, no
lo podían encontrar cuando se perdió. Para que eso no te pase,
aprende a escribir tu nombre completo, apréndete tu dirección y el
teléfono de tu casa o de algún pariente o vecino de confianza.
Además, rotula tus libros, útiles y pertenencias con tu nombre: ¡Así los
identificarás si se pierden!