1. Hoy va Simona Molona
al cole la mar de mona.
Van a hacer una excursión
al museo. ¡Qué emoción!
Después de mucho meneo
llegan por fin al museo
y ven en varios salones
estatuas de faraones.
También adornos dorados,
jeroglificos, grabados,
un dios con fauces y cola
y una momia un poco sola.
Lleva tres mil años quieta
y el sarcófago le aprieta.
Tiene los brazos dormidos,
los músculos entumecidos…
Simona, como es tan buena,
casi se muere de pena
al verla tan aburrida,
y decide darle vida.
Llegó el fin de su quietud.
La momia, de su ataúd,
sale loca de alegría
y anda por la galería.
Asustados, los chiquillos,
cuando ven por los pasillos
a momia tan espantosa,
ponen pies en polvorosa.
La momia está preocupada:
¡no entiende nada de nada!,
porque ella se ve estupenda
con su modelo de venda.
Todo el mundo chilla y grita,
hasta la momia Hipatita.
¡Caramba! ¡Vaya jaleo
que se forma en el museo!
Con tantísimo ajetreo,
la momia siente mareo.
Hipatita está tarumba.
" ¡Quiero volver a mi tumba!"