Este documento describe dos tipos de flujos de procesos: lineales e intermitentes. Los flujos de procesos lineales implican que los productos siguen siempre la misma secuencia de operaciones desde el principio hasta el final de la línea de producción. Los flujos de procesos intermitentes implican que los productos pueden detenerse en diferentes centros de trabajo según sus especificaciones y no necesariamente usan todos los departamentos.