Este documento proporciona información sobre los alebrijes, incluyendo su origen, cómo se elaboran y el desfile anual de alebrijes en la Ciudad de México. Explica que los alebrijes son figuras de papel maché con formas fantásticas creadas por el artesano mexicano Pedro Linares. También describe la ruta del desfile anual de más de 200 alebrijes creados por artesanos de varios estados de México.
7. 7
nal
y
2007 el Museo de
Arte
Popular empieza
a organizar
desfile
1922 Fallece
Linares
DESFILE DE
ALEBRIJES
Más de 200 alebrijes creados por
artesanos de varios estados de la
república, como
Puebla
Hidalgo
Oaxaca
CDMX
8. 8
Av Centro
Av 5 de Mayo
Av Juárez
Ángel de la
Independencia
Paseo de la Reforma
RECORRIDO:
Del sábado
20 de
Octubre
hasta el
Domingo 4
de
Noviembre
9. 9
ALVARADO MAYA MARÍA FERNANDA
FLORES GONZALEZ ANDREA
GARCIA GIL NAYELI
VEGA MAYA KARLA
10. Trabajó jornadas de 16 horas
todos los días hasta un día
antes de su fallecimiento el 26 10
Notas del editor
En 1936, cuando tenía 30 años, Pedro Linares López, cartonero de oficio y originario de la Ciudad de México, enfermó, perdió la conciencia y cayó en un profundo sueño; el cual, le revelaría unas criaturas extrañas que cambiarían su destino como artesano de La Merced.
Se dice que, en cama e inconsciente, Pedro soñaba con un lugar extraño e interesante, muy apacible, algo así como un bosque en el que había árboles, rocas y animales; podía ver las nubes y el cielo de aquel mágico escenario. Él sentía que todo estaba en calma, no experimentaba dolor alguno y era feliz por estar caminando en ese lugar; sin embargo, de repente, las rocas, las nubes y los animales se convirtieron en criaturas extrañas; se trataba de animales que no podía distinguir porque eran de una naturaleza muy rara. Don Pedro vio un burro con alas, un gallo con cuernos de toro, un león con cabeza de perro. Todos esos animales gritaban al unísono una sola palabra: ¡Alebrijes! Gritaban más y más fuerte: ¡Alebrijes, alebrijes, alebrijes!
Pedro siguió su camino en aquel fantástico sueño y mientras recorría un sendero de piedras vio a un hombre que caminaba tranquilamente y le pidió ayuda para salir de aquel lugar. El hombre le respondió que él no debía estar allí todavía y que tenía que seguir andando pues a unos cuantos metros había una salida. Pedro corrió y corrió hasta que quedó frente a una ventana estrecha por la que apenas pudo escabullirse, momento en el que despertó.
Como al despertar se levantó repentinamente en medio de su propio velorio, al verlo reaccionar de lo que parecía ser su muerte alguien lanzó una expresión de asombro que se perdió entre rezos y exclamaciones. Pedro estaba totalmente recuperado y ya a partir de entonces empezó a recordar su sueño. Quería que su familia y todas las personas conocieran a esos animales fantásticos.