Reflexión sobre el sonido del Silencio y cómo lo vemos con los otros sentidos.

1. UNIVERSIDAD NACIONAL DEL CENTRO DEL PERÚ
FACULTAD DE CIENCIAS DE LA
COMUNICACIÓN
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APELLIDOS Y NOMBRES: LEÓN RICALDI, NOELIA INDIRA CÓDIGO: 2016200116D
ASIGNATURA: TEORÍA DE LA COMUNICACIÓN SEMESTRE: TERCERO
SONIDO DEL SILENCIO
La canción fue escrita por Paul Simon en el año 1964, después de un año del
asesinato de JF Kennedy. Se ha dicho en muchas ocasiones sobre cuál sería el
motivo que llevó a Simon a escribir esta canción; se dice que fue el asesinato a
Kennedy, otros prefieren decir que fue por los soldados que no volvían de Vietnam.
Desde mi punto de vista cual sea el motivo que llevo a Simon a escribir este tema nos
dejó una hermosa canción donde nos habla del silencio, de ese silencio que en
ocasiones hemos oído a los hombres y mujeres que viven en los conventos o abadías.
De ese silencio que a veces suele ser incómoda en un momento de mucha tensión y
queremos saber la respuesta. Ese silencio que dice más que mil palabras que sale del
que no piensa antes de hablar.
Mientras oyes la canción, te encuentras con un halo de oscuridad, esa que fue nuestra
compañera cuando fuimos concebidos y fue nuestro hogar por los primeros 9 meses
que vivimos en el vientre de nuestra madre. Y lo único que haces es dormir en un
mundo resguardado. Oscuro pero seguro. Pero, ¿alguna vez nos quedamos en un
absoluto silencio? ¿Recordamos ese momento? No. El mundo está lleno de sonidos
que nos acompañan durante toda nuestra vida, ese momento de soledad muchas
veces son consideradas un silencio estremecedor. Que da miedo, que aterra e ir por
ese sendero nos lleva a un valle lleno de misterio que pocas veces logramos escuchar
el llamado del que quizás quiere que le oigas y no quiere que camines por ese valle.
En la canción nos habla de recordar ese episodio triste, que daño o daña a personas
pero que muchas veces callamos. Un ejemplo en nuestra ciudad, las víctimas del
terrorismo no fueron escuchadas en su momento y dejamos que el odio y el
resentimiento matarán la confianza, no hicieron eco para una justicia real que sentará
las bases de la dignidad del hombre que fue muerto por las balas, los coche bombas y
las torturas que sufrieron antes de ver la oscuridad. En esta canción nos dice que no
debemos olvidar. Que la oscuridad no sea sinónimo de muerte. Que una ráfaga de
metralletas no sean los dioses que nos guían por este valle que es de sufrimiento. En
algún momento hable con el maestro Sandro Bossio sobre la época del Terrorismo y la
violencia política en nuestro país, me decía en sus palabras: “nuestro país necesita
trabajar en la reconciliación, pero una reconciliación verdadera donde logremos sanar
las heridas”. Partiendo de esta frase, podemos decir que las palabras no sean como
gotas de lluvia que solo recaen en el suelo y no son más que un silencio aterrador que
no logrará curar ninguna herida, al contrario será cómo el cáncer que va destruyendo
todo a su paso.

2. El silencio y su sonido nos llevan a reflexionar en todas esas palabras que no se
dijeron, desde las más inocentes confesiones hasta las más aterradoras historias que
rompen el corazón al que oye. Si tuviese sonido el silencio, de seguro debería ser una
melodía muy triste si tenemos en cuenta nuestra historia como humanidad. El llanto
del niño que acaba de nacer y debe enfrentar una oscuridad que tiene luz, un silencio
que tiene sonido.