El documento habla sobre la paz como fruto del Espíritu según lo enseñado por Jesús. Explica que la paz de Jesús es una paz interior que proviene de confiar en Dios y someterse a su disciplina, lo que trae descanso al alma. También menciona que los cristianos deben compartir esta paz en el hogar, la iglesia y la sociedad, soportándose unos a otros, perdonándose unos a otros y vistiendo sus vidas de amor.