3. Jesucristo
Salvador Adorador
1 Pedro 2:21-25Nueva Traducción Viviente (NTV)
21 Pues Dios los llamó a hacer lo bueno, aunque eso signifique que tengan que
sufrir, tal como Cristo sufrió por ustedes. Él es su ejemplo, y deben seguir sus
pasos.
22 Él nunca pecó
y jamás engañó a nadie.
23 No respondía cuando lo insultaban
ni amenazaba con vengarse cuando sufría.
Dejaba su causa en manos de Dios,
quien siempre juzga con justicia.
24 Él mismo cargó nuestros pecados
sobre su cuerpo en la cruz,
para que nosotros podamos estar muertos al pecado
y vivir para lo que es recto.
Por sus heridas,
son sanados.
25 Antes eran como ovejas
que andaban descarriadas.
Pero ahora han vuelto a su Pastor,
al Guardián de sus almas.
4. Jesucristo
Salvador Adorador
Como nos muestra la palabra, no hay mejor ejemplo de como ser
un adorador que nuestro Salvador Jesús.
Toda su vida estaba enfocada en Dios, en hacer su obra y en
agradarle siempre.
La palabra de Dios nos enseña que Jesús cuando niño paso tres
días en el templo, «Tres días después, por fin lo encontraron
en el templo, sentado entre los maestros religiosos,
escuchándolos y haciéndoles preguntas. Lucas 2:46» vemos
que para él, compartir con otras personas hablando de su Padre
era algo muy importante, aun cuando joven compartía
enseñanzas dentro y fuera del templo.
5. Jesucristo
Salvador Adorador
Nuestro señor Jesucristo era una persona que
buscaba estar a solas con Dios, tanto así que la
mayor parte de su tiempo la pasaba en
oración, antes de compartir las enseñanzas y
al terminarlas, se retiraba a un lugar solitario
a orar. Este es otro punto muy importante en
la adoración, mantener una relación intima y
personal con Dios.
Marcos 1:35 (NTV)
Jesús predica en Galilea
35 A la mañana siguiente, antes del
amanecer, Jesús se levantó y fue a un lugar
aislado para orar.
6. Jesucristo
Salvador Adorador
«De madrugada, cuando todavía
estaba muy oscuro, se levantó, salió
y fue a un lugar solitario donde se
puso a orar. Simón y sus compañeros
fueron en su busca; al encontrarle, le
dicen: “Todos te buscan”» (Marcos 1,
35-37).
Aunque estaba totalmente entregado al
servicio de la gente, Jesús no se dejaba
vencer por el activismo, la prisa, la
agitación, sino que sabía reservarse
para sí mismo un tiempo especial; un
tiempo en el que, en contacto directo
con su Padre, respiraba y tomaba
fuerzas para seguir realizando su tarea
de la mejor manera posible
7. Jesucristo
Salvador Adorador
Jesús es no sólo la personificación de la autoridad,
sino también la personificación de la obediencia.
El es “el Obediente”. Toda su vida es un misterio
continuado y radical de obediencia al Padre: desde
su venida al mundo, en la Encarnación, hasta su
muerte en la cruz. Y tiene clara conciencia de ello.
Por eso, lo afirma y proclama abiertamente, sin la
menor vacilación:
“Mi alimento es hacer la voluntad del Padre que
me ha enviado, y llevar a cabo su obra” (Jn 4,
34).
“El Hijo no puede hacer nada por su cuenta, sino
lo que ve hacer al Padre” (Jn 5, 19).
“Yo no puedo hacer nada por mi cuenta… No
busco mi voluntad, sino la voluntad del que me
ha enviado” (Jn 5, 30).
8.
9. Jesucristo
Salvador Adorador
Estas son solo algunas de las muchas características de un
adorador, en donde Jesús nos da un claro ejemplo de ese
adorador en espíritu y en verdad que Dios busca.
Esforcémonos por alcanzar esa madurez en donde adoremos a
Dios como a él le agrada, en todo momento, y con toda verdad.