El teatro representa historias frente a una audiencia usando una combinación de discurso, gestos, escenografía, música, sonido y espectáculo. Tradicionalmente se divide en comedia, con final feliz y protagonistas normales, y tragedia, con protagonistas heroicos y destino trágico. En la Edad Media se representaba en iglesias en fechas especiales y dio lugar a los autosacramentales, piezas de un acto sobre la Fe, la Gracia y el Alma.