El documento discute el rol del docente en la era digital y el uso de recursos tecnológicos para mejorar el aprendizaje de idiomas. Reconoce que el docente debe servir como guía para validar información en línea y facilitar la autonomía de los estudiantes. Propone el uso de material auténtico como películas, videos y audios complementados con actividades. Finalmente, cita a expertos que enfatizan la importancia de un uso equilibrado y significativo de la tecnología en la enseñanza.