1. COMENTARIO:
¿QUÉ SE ESCONDE DETRÁS DE LA FACTURA DE
LA LUZ?
Ya acabado el año muchos echarán la vista atrás y recordarán lo que hicieron
durante el pasado año, pensarán en sus errores y se propondrán nuevos
propósitos que seguramente caerán en el olvido con el paso de los meses e
incluso los días. Pues bien, en este 2017 ya se ha alcanzado un propósito que
se anunciaba desde hace tiempo y no es otro que el aumento del precio de la
luz. ¿No es increíble que cada año varíe su precio y que este año haya
aumentado un 75% con respecto a 2016? Desgraciadamente tras leer el
informe 11 del Seminari d´economia crítica Taifa parece muy real.
En este informe concretamente se explica, entre otras cosas, el funcionamiento
del sistema eléctrico español, donde además se exponen diversos datos y
gráficos que refuerzan los argumentos del autor.
Muchas personas viven el día a día de una forma muy similar; se levantan,
comen, realizan sus actividades diarias, descansan y vuelta a empezar. Cada
vez de una forma más repetitiva descuidándose de lo que gastan ya que viven
en una constante rutina y se lo tienen todo prácticamente memorizado. Pero un
día muy de vez en cuando, llegan unos sobres a casa, uno en concreto es la
factura de la luz y se asombran de que el coste haya cambiado. ¿Cómo puede
ser que haya cambiado el precio si han gastado lo mismo? Bueno, en primer
lugar debemos hablar de tarifa en vez de precio. Entonces, si vemos la
definición de tarifa es un precio fijado por el Estado para los servicios públicos y
esta suele indicar la presencia de igualdad en el Estado del bienestar. Aunque
difícilmente podemos asignar esta palabra a lo que tenemos que pagar cada
mes porque ni costeamos un “servicio público” ni esta indica igualdad entre
individuos.
Es difícil cuestionar el hecho de que la electricidad actualmente es una
necesidad para poder vivir dignamente en sociedad, luego ¿por qué las
compañías eléctricas nos dificultan poder obtenerla al mínimo coste posible?
Es cierto que la “tarifa” debe ser justa con el proceso, aunque este sea muy
complicado y difícil de contabilizar, y debe ofrecer una remuneración a los
agentes involucrados, pero es seguro que esto no alcanza la cifra que nos
vemos en las facturas.
2. Como bien explica el informe 11 del Seminari d´economia crítica Taifa, el
funcionamiento del sistema eléctrico español tiene un gran grado de
centralización. Esto significa que los usuarios dependen totalmente de la
unidad de generación de energía y si se quedan descolgados de esta, nadie les
puede proveer de electricidad. Por ello, aquello a lo que nos referíamos de
igualad en la tarifa se va alejando cada vez más. Podría explicar el
funcionamiento de este sistema y también del grupo UNESA y de sus
actividades moralmente cuestionables pero todo esto está muy bien explicado
en el propio informe. Aún así puedo confirmar que este grupo de empresas
tiene un gran poder e influencia:
Una compañía eléctrica perteneciente a ese grupo que seguramente conocéis
llamada Iberdrola, ha protagonizado una noticia de la página web de “el
Economista” en la cual se ha librado de una multa de 600.000 € impuesta a
finales del 2011. En estos momentos ya no me parece extraño. Es interesante
comentar que según Iberdrola, en 62% del importe de sus facturas va dirigido a
impuestos y otros recargos, pero esa cantidad va dirigida en realidad a la
compensación económica por gastos imprevistos en la generación de la
electricidad, cifra que aumenta cada año. Las leyes van favoreciendo los
intereses del grupo UNESA que en sus inicios buscaba dotar un servicio
público pero que ahora se ha convertido en un gran conjunto de empresas que
ansían alcanzar el máximo beneficio posible dejando de lado las repercusiones
de sus actividades. Para argumentar esto únicamente hay que observar el
gráfico del accionariado de UNESA por categoría de inversor elaborado por el
autor del informe 11 del Seminari d´economia crítica Taifa con la ayuda de la
base de datos AMADEUS y el boletín mensual OMIE en el cual los dos tercios
de los accionistas son del sector bancario y financiero.
Según pasa el tiempo parece que esta situación no va a cambiar sino que va
empeorando. Esto no es sólo en el ámbito del sector eléctrico, esta mentalidad
por parte de los grandes grupos y empresas de todos los sectores está
olvidado cualquier tipo de moral.
Pienso que detrás de la factura de la luz se esconden muchas mentiras que
desgraciadamente son muy reales. Estoy seguro que dentro de poco no me
interesaré por este tema en mucho tiempo, eso sí, cuando en las próximas
Navidades salga a la calle y vea esas decoraciones y grandes luces con
motivos navideños, en lugar de transmitirme un ambiente festivo y familiar, me
recordarán los beneficios que están recibiendo las empresas de UNESA cada
segundo a costa de muchas familias en esas fechas tan señaladas.