El embarazo en la adolescencia ocurre entre los 10 y 13 años y puede deberse a factores como el mal funcionamiento familiar, la pobreza, la falta de educación o haber sido víctima de abuso. Esto conlleva mayores tasas de morbilidad y mortalidad tanto para la madre como para el niño. La prevención requiere fortalecer la educación y la confianza dentro de la familia.