2. El sistema de transporte de los gases en sangre constituye el objetivo último
de la función respiratoria y aunque no es realizado estrictamente hablando
por el aparato respiratorio sino por la sangre y el aparato cardiovascular
Existen dos formas de transporte de gases en sangre:
En forma disuelta siguiendo la ley de Henry.
En forma combinada.
3. CURVA DE DISOCIACIÓN DE LA
HEMOGLOBINA
La relación entre la presión parcial de O2, la saturación de la Hb por
oxígeno o cantidad de oxígeno transportado, se representa
gráficamente mediante la curva de disociación. La forma sigmoide de
la curva se debe a que la afinidad de la hemoglobina por el oxígeno
no es lineal o uniforme, sino que varía en función de cuál sea la
presión parcial de oxígeno.
4. El O2 que difunde desde los alvéolos a la sangre capilar, se disuelve en el
plasma. En esta forma disuelta se transportan 0,3 ml de O2/100 ml sangre
Esta cantidad es muy baja e insuficiente para cubrir las necesidades del
organismo, que en reposo se sitúan ya en unos 250 ml de O2/minuto.
Aunque su valor es pequeño, sin embargo cumple una función importante, ya
que determina la pO2 en plasma de la que dependerá la forma fundamental
de transporte.
5. El grado de afinidad de la hemoglobina por el oxígeno puede estimarse a
través de un parámetro denominado P50, o presión parcial de oxígeno
necesaria para saturar el 50% de la hemoglobina con oxígeno, se sitúa en 27
mm Hg.
6. Cualquier cambio en la afinidad de la hemoglobina por el oxígeno, se
traducirá en un desplazamiento de la curva hacia la izquierda o hacia la
derecha. Un desplazamiento hacia la izquierda supone un aumento de la
afinidad (o descenso de la P50) y un desplazamiento hacia la derecha supone
una disminución de la afinidad (o aumento de la P50).
7. TRANSPORTE DE CO
% arterial % venoso % medio
Disuelto 5,5 5,8 5
Carbamino-Hb 4,9 7,2 5-10
HCO3
– 89,6 87 8-90
Total
490 ml/l sangre
535 ml/l sangre
8. DESVIACIÓN DEL CLORURO O
EFECTO HAMBURGUER
El ión bicarbonato difunde hacia el plasma y, para mantener la neutralidad
eléctrica, el ión cloruro (Cl–) difundirá hacia el interior del hematíe. Está
facilitado por un intercambiador cloruro-bicarbonato situado en la membrana
del hematíe.
9. EFECTO HALDANE O LA INFLUENCIA
DEL OXIGENO EN EL TRANSPORTE DE
CO2
La cantidad de anhídrido carbónico transportado en sangre depende
en primer lugar de la presión parcial existente y se representa
gráficamente mediante una curva. Como en la curva de disociación de
la hemoglobina también le afectan algunos factores. El más relevante
es la presencia de oxígeno que desplazará la curva hacia la derecha,
lo que se conoce como efecto Haldane (o efecto Christiansen-
Douglas-Haldane).
Al ser el anhídrido carbónico 20 veces más soluble que el oxígeno, la
sangre podrá captar y liberar grandes cantidades de CO2 con mínimos
cambios en la presión parcial de este gas, lo cual facilitará el
intercambio gaseoso y como se verá en capítulos posteriores el
equilibrio ácido-básico del organismo.