1. Forzando acontecimientos
Hacia el fin de los objetos
JuliCapella
“Adivinar el futuro es el segundo oficio más antiguo de la historia”
Jorge Wagensberg
El futuro no acontece, se persigue. No somos a 5000 años y dar testimonio de la cultura
ajenos a él, lo forjamos desde el presente. material del siglo XX.
El 23 de septiembre de 1938, unos meses Siempre nos ha interesado dejar testimonio
antes de comenzar la Feria Internacional de para el futuro. Pero ¿cómo serán los objetos
Nueva York (1939-40) se enterraba una cotidianos en ese lejano año 6965 cuando
cápsula metálica con forma de misil, bajo los alguien decida desenterrar y abrir la cápsula?
cimientos del pabellón de la empresa Entre nuestros vestigios del siglo XX y los
Westinghouse. Su interior contenía diversos objetos que estarán vigentes en ese
objetos representativos de su época: “a momento, suponemos que habrá un salto
comprehensivecrossection of abismal que hoy se nos hace imposible
today’scivilization”, es decir, un concentrado imaginar. Pensemos que nuestros abuelos
del diseño americano del momento. Para la jamás hubiesen predicho la televisión o el
exposición de 1965, en la misma ciudad, ordenador, y muchos aún no se creen que el
volvió a repetirse la experiencia, y en la hombre haya pisado la Luna. Ni siquiera
cápsula esta vez se introdujo: un bikini, un nosotros mismos hubiésemos creído factible
cepillo de dientes eléctrico, tranquilizantes, hace pocos años que acabaríamos con
anticonceptivos, una Polaroid, tarjetas de teléfonos móviles, que sin embargo son ya
crédito, un paquete de cigarrillos, comida imprescindibles. Concluyamos, pues, que
enlatada, microfilms, una válvula cardiaca, resulta casi imposible predecir a tan largo
una unidad de memoria de computadora, y término, 50 siglos, cómo será el entorno
cómo no, una bandera americana y una material humano. Sin embargo, “la
Biblia. Ambas “cápsulas del tiempo”, anticipación del futuro es tan ineludible y
concebidas para resistir todo tipo de vulgar como el respirar… cuando observamos
embates de la naturaleza y la destrucción el vuelo de una ave anticipamos su futuro
humana, reposan juntas cubiertas de curso y posición” decía Charles Jencks en un
hormigón, en el FlushingMeadow Park, 20 delicioso libro titulado Arquitectura 2000
metros bajo tierra, para ser abiertas de aquí escrito en 1971, y lleno de pronósticos
cumplidos.

2. Predecir el efecto Edipo Queremos ser guionistas y protagonistas de
nuestra película, no espectadores sumisos.
Adelantarnos unos pocos segundos a lo que
va a suceder parece fácil, –abro el grifo:
saldrá agua–; pero hacerlo unos decenios
yaresulta más comprometido –hay ¿Adiós a las bombillas?
contaminación: usaremos coches eléctricos–. Ya no se estilan las visiones futuristas idílicas
Al hacerlo, precisamente estamos de los años veinte; ya vimos que George
interviniendo en su discurrir. La predicción es Orwell no se equivocaba mucho con su 1984,
parte del efecto final. Karl Popper denominó ciertamente los “grandes hermanos”
este fenómeno efecto Edipo, como en la acechan; sabemos que el futuro será más
tragedia, que al pronosticar que mataría a su parecido al mestizo BladeRunner que al
padre, evitaron que supiese quien era, y impoluto 2001. Una odisea del espacio.
precisamente por eso acabó matándolo. “La Muchos objetos de nuestra actual vida
idea de que una predicción pueda tener cotidiana desaparecerán como sucedió, por
influencia sobre el acontecimiento ejemplo, con los braseros.
pronosticado es muy antigua… Ése es el
motivo de que yo sugiriese la denominación Está sucediendo con las máquinas de escribir
efecto Edipo para la influencia de la y sucederá con las llaves, objetos sin duda
predicción sobre el acontecimiento caducos. Pero al mismo tiempo,
pronosticado, tanto si esta influencia tiende comprobamos cómo las velas no
a dar lugar al mencionado acontecimiento desaparecieron con la invención del candil, ni
como si tiende a evitarlo”. éste con la de la bombilla; ni los lápices de
carbón con las plumas estilográficas, ni éstas
Es decir, si se prevé que en el año 2028 la con los bolígrafos, cada objeto va
ciudad de Venecia quedará sumergida, es encontrando su hueco funcional y evocativo.
probable que la propia advertencia ayude a Cuando el disco de vinilo estaba sentenciado
evitar el fatal desenlace. Si se prevé una a muerte, parece resurgir bajo el imperio
densidad demográfica imposible para el año digital como reivindicación de autenticidad
3000 en el planeta, se pondrán en marcha imperfecta.
medidas de control de natalidad que eviten
la catástrofe. Y también, si se prevé que será Más que desaparecer, los objetos se
necesario determinado número de escuelas acumulan y superponen, y las tecnologías se
para atender una población creciente, éstas reparten el pastel. Se decía que el cine
podrán estar a punto y disponibles cuando acabaría con la radio, pero ésta sigue
sea menester. gozando de buena salud, también se predijo
que la televisión acabaría con el cine, pero
Precisamente la sentencia futura han acabado acostándose juntos.
abhorretvacuum –el futuro sale perjudicado
si no se persigue– nos anima a elucubrar Intuimos que muchos objetos de nueva
predicciones para, en todo caso, ser autores generación, ahora inimaginables, pasarán a
responsables y no meros monigotes conformar el escenario de nuestra vejez y, a
expectantes de nuestro devenir histórico. la vez, de la infancia de nuestros

3. descendientes, responsables a su vez de los objetos que habrá en la Tierra de aquí a 15
siguientes. Predecir el entorno futuro puede años aún no han sido fabricados. La mitad
parecer un ejercicio banal más propio del del mundo en nuestras manos.
cómic de ciencia-ficción que de la profesión
de diseñador, pero no hacerlo, es una Tenemos una ocasión de oro. Veamos, pues,
insensatez irresponsable que nos dejaría a la cómo podrían ser estos “objetos blandos”
deriva. Precisamente porque al predecir del futuro inmediato:
objetos más humanos, sostenibles, afectivos - Menores. Tan sólo para ahorrar materia y
y serviciales, estaremos ayudando a crearlos volumen, además de utilizar menos energía
con tales atributos. Y paralelamente cuando productiva y ocupar menor espacio de
avistemos horizontes insostenibles y almacenamiento. Recuperemos el slogan
absurdos, podremos esquivarlos a tiempo. “smallisbeautiful” y sigamos la
No deja de ser inquietante y, a la vez, miniaturización iniciada por Japón.
esperanzadora la aseveración del gurú de la
revolución digital, Nicholas Negroponte - Ligeros. Menos peso significa menor
director del Media Lab del MIT: “nuestro energía en el transporte, por lo tanto, menos
proyecto más nuevo y apasionante es dotar a contaminación. También mayor versatilidad
los objetos de la capacidad de pensar”. ¿Pero de uso al facilitar su movilidad en una
esto no es lo que nos tocaba hacer sociedad nómada. Si los objetos se mueven,
precisamente a nosotros? no hemos de duplicarlos.
- Perdurables. Hay que sustituir el concepto
de “usar y tirar” propio de la época del
Sillas cariñosas despilfarro, por el de “usar y volver a usar”.
¿Por qué no? El futuro deparará todo aquello Los productos deben estar pensados para
que proyectemos. Y si adivinar su forma, sus resistir el uso y el paso del tiempo, y no para
caducar estética o funcionalmente la
componentes y materiales, su proceso
constructivo, resulta aventurado, sí es temporada siguiente, como sucede con
posible establecer una guía de criterios. La muchos aparatos domésticos.
forma importa poco, pero el carácter sí que - Reparables. Es posible alargar la vida del
cuenta. objeto si está pensado para poder ser
Por primera vez en la historia tenemos la arreglado, o para admitir modificaciones que
sensación de que producir más no es prolonguen y actualicen su servicio. Desechar
sinónimo de progreso. Ir vomitando más y alegremente lo estropeado es suicida.
más objetos en el planeta no supone vivir - Desmontables. Un objeto sellado y
mejor, sino tal vez ir esquilmando algo compacto no permite su reparación, y lo que
irrecuperable. Sin tremendismos ni es peor, impide su correcto reciclaje. Los
demagogia, debemos afrontar esta certeza diversos componentes y materiales de un
con una reflexión que dé luz y alternativas. objeto han de poder desensamblarse para
Aún tenemos la posibilidad de modificar esta iniciar nuevos ciclos. Hay que pensar en
tendencia. Se calcula que el 50% de los

4. objetos monomatéricos y sustituir el debe ser un instrumento de precisión que no
pegamento por tornillos. derrame ni una gota de más.
- Autoportantes. Productos autónomos que - Tecnológicamente adecuados. Ni más ni
no dependan de otros. menos tecnología de la necesaria. No se trata
de hipertecnificarlo todo, sino en el grado
La abusiva y absurda proliferación del justo que la función requiera. Pensar que
embalaje debe detenerse. Más del 50% de la todo debe acumular chips, baterías y
basura occidental es mero packaging.
funciones extras, puede ser un error de
Necesitamos objetos que no necesiten exceso, un sobre-diseño innecesario.
envoltorio, volver a los productos a granel,
recuperar contenedores universales… - Multiusos. Es absurdo comprar un objeto
para cada servicio exclusivo, de cada modelo,
- Degradables. Todo objeto deberá tener de cada marca. Necesitamos diseños
previsto su “retiro” (pues ya no se trata de universales, plurifuncionales y versátiles,
tirar nada). Es decir, deberá desaparecer diseños comodín que ahorren la
íntegramente del mapa, ya sea por causas proliferación de otros tantos artilugios a su
naturales o por la acción limpia del hombre. vez exclusivos.
- Reutilizables. Son aquellos objetos que - Compartidos. Para optimizar el uso de
usamos y volvemos a usar sin necesidad de algunos productos caros o muy
proceso de reciclaje. A veces para el mismo
especializados, será conveniente
uso o a veces y según la imaginación, para compartirlos. De este modo no se duplican y
otros usos muy diversos. Con menores no permanecen inactivos. Y además se
medios, mayor ingenio. fomenta la convivencia. El alquiler también
- Reciclables. Esconder las basuras o puede ser una alternativa eco-eficiente,
quemarlas ya no es admisible. Los objetos, ya máximo provecho, coste repartido.
sea en parte o en su totalidad, deben poder - Afectivos. Parece una tontería, pero
acceder a un nuevo ciclo que los integre de conseguir una relación de empatía y afecto
nuevo en la sociedad. entre hombre y objeto, además de
- Reciclados. Están fabricados con partes o beneficios íntimos, es un garante del cuidado
restos de otros. Cada vez tenemos más y longevidad de la pieza.
ejemplos de esta nueva raza de objetos y a - Informativos. Todos los productos deberán
medida que aumentan los desechos irán ofrecer información al usuario. Cómo son,
siendo más rentables. cómo repararlos, cómo desecharlos. Los
- Eficientes. Siempre, pero ahora más que productos ya no serán más inocentes, y cada
nunca, debemos rodearnos de aparatos uno deberá explicitar su currículum.
eficientes, que consuman la mínima energía,
que den con rigor el servicio necesario que
ofrecen. La cisterna del váter, por ejemplo,

5. No objeto JuliCapella
Pero aún y con todas estas y otras Arquitecto. Creador de la Primavera del
cualidades, los diseños del futuro tan sólo Diseño, de la colección de diseño industrial
lograrán ser un poco mejores, menos nocivos del Museo de Artes Decorativas, ha sido
con el medio ambiente que los actuales. también comisario de exposiciones de
Como dijo el diseñador DieterRams, AchilleCastiglioni, PhillipeStarck, Ingo
entramos en la era del “menos pero mejor”. Maurer, Oriol Bohigas, Oscar Tusuets, Diseño
Aunque el verdadero reto, la revolución industrial en España, Cocos copias y
pendiente, consiste en encontrar artefactos coincidencias… Autor del Centro de ocio Zig-
radicalmente alternativos hoy por hoy Zag en Murcia, Heron City, Hotel Omm en
desconocidos. Barcelona. Ha recibido la mención especial
del Premio Nacional de Diseño (2000).
Productos realmente innovadores en su Presiente del FAD y promotor del Año del
concepción. O mejor aún, nos toca
Diseño 2003. Fundador y director de las
evolucionar hacia la desmaterialización del revistas De Diseño y ARDI, responsable de
objeto, única y verdadera estrategia de freno diseño de Domus, escribe en El País y en El
al colapso, y auténtico reto de futuro.
Periódico.
Lyotard ya lo avanzó en 1985 en su
exposición Les inmateriauxen el Centre
Georges Pompidou.
Parece un sinsentido, pero no lo es: objetos
inmateriales. Productos no físicos. Porque
veamos: la gente no quiere coches, sino
desplazarse; la gente no necesita sillas, sino
sentarse; no compra un aparato de
televisión, sino que quiere poder ver
imágenes. Nadie quiere grifos, sino agua; no
queremos trajes, sino vestirnos. Éste es el
verdadero dilema, el auténtico reto utópico
de diseñadores e industriales, discurrir hacia
un mundo ideal inmaterial, pero pleno de
servicios. Flotar en el espacio cómodamente
sin muebles, desplazarnos a través de flujos,
escribir con la mente sin teclados: el fin del
diseño, por fin.
Aunque ésta es otra historia y seguro que de
otro siglo futuro.