La poesía describe las vacaciones de verano y las actividades que los niños disfrutan durante este tiempo, como volar cometas, comer melones y pan recién horneado. El cielo se llena de pájaros, cometas, risas y globos, mientras que los trigales doran las tardes a la espera de ser convertidos en pan. La autora enfatiza lo mucho que a los niños les gusta este período vacacional lleno de dicha, canto, sueños y emociones.