El documento describe la visión ancestral de ordenamiento territorial entre los pueblos originarios de América, que compartían una cosmovisión que veía al territorio como un tejido de vida que reflejaba el orden cósmico. Ordenaban el territorio observando el cielo y reflejando su orden preciso y predecible en la Tierra de forma menos fija a través de calendarios y sistemas de ordenamiento a diferentes escalas. Estos sistemas mantuvieron una extraordinaria coherencia por milenios y lograron resultados que cumplirían los paradigmas del des
1. ORDENANDO EL TERRITORIO: UNA VISIÓN ANCESTRAL ENTRE CIELO Y
TIERRA.
Por: Roberto Arturo Restrepo Arcila
Coordinador Programa Agua y Cultura Países Andinos, UNESCO PHI en
UNESCO PHI
Universidad de Los Andes
Colombia
Día: Sábado 3 de Febrero de 2018
Hora: 11 am.
Lugar: Auditorio del Planetario de Medellín “Jesús Emilio Ramírez
González”
Presentación:
En nuestros 40 años de contacto profundo con el conocimiento ancestral
desarrollado por los pueblos originarios que poblaron América desde hace, por
lo menos, 30.000 años, nos hemos encontrado con algunos aspectos
sorprendentes, que le dan una característica única en el contexto de los
sistemas de ordenamiento territorial en el Planeta:
Primero, el haber constatado la existencia de un verdadero “pensamiento
americano” entre estos pueblos originarios, tejido en una urdimbre muy amplia -
la cosmovisión (visión propia de sí mismo, el mundo y el cosmos)- compartida
diacrónica y sincrónicamente por milenios en todo el continente, que se
expande espacio-temporalmente a semejanza de un tejido de vida que es
igualmente espejo de una matriz cósmica, donde la urdimbre (lo compartido
2. diacrónica y sincrónicamente en todo el continente) está contenida
coherentemente en cada uno de sus hilos (visión holística), proyectándose en
tramas transversales, sistemas menores de pensamiento que permiten
identificar las cinco grandes área culturales: Andina, Amazónica, Intermedia-
Caribeña, Mesoamericana y Norteamericana, áreas que a su vez se
concretan en una enorme variedad de tramas culturales, paisajes humanizados
dentro de una geografía sagrada, cuya unión coherente con el pensamiento y
la cosmovisión (Ley de Origen, Derecho Mayor) permite una verdadera unidad
en la diversidad, simbolizada en el arco iris, la Wiphala (estandarte incaico)
quechua-aymara en los Andes Centrales.
Desde un comienzo este sistema de ordenamiento parte de la observación de
un cielo cuyos componentes e interrelaciones son más definidos, seguros y
predecibles, lo que permite definir el entrecruzamiento del espacio-tiempo a
través de muy precisos calendarios; reflejar este orden como un espejo sobre
la Tierra, permitió no solo entender la urdimbre y la trama de sus relaciones,
sino ordenar, comprender y prever un orden menos fijo, seguro y predecible, el
terrestre. Miraremos pues, los principios que regularon este orden y el sistema
de ordenamiento, a diferentes escalas y dimensiones, que resulta de ello. No
solo por la coherencia que mantuvo por milenios, sino por los extraordinarios
logros obtenidos, que hoy cumplirían muchos de los paradigmas del desarrollo
sostenible y equitativo, se hace imprescindible conocer este sistema, ancestral
y propio.
Temario:
Qué es el territorio: cosmovisión y pensamiento
El tejido de la vida: una matriz que se auto ordena
Interrelaciones entre cielo, tierra e inframundo
Ordenando el territorio como espejo del orden cósmico: cosmovisión,
pensamiento y cultura.
Sistemas de ordenamiento en Abya Yala: Entre el corazón del cielo y el corazón
de la tierra, territorio, centro urbano ceremonial y casa.
El asunto de los límites y el ordenamiento contemporáneo
Coherencias e incoherencias: cuál sistema tiene sentido