1. Tal como sucede con otras
manifestaciones culturales, el aporte
indígena a la música popular uruguaya
fue casi inexistente. Las primeras danzas
procedían de Espacia y se practicaron en
los salones. De España llego también el
instrumento básico de la música popular
de la región: la guitarra.
Los primeros bailes estaban relacionados con el canto, originado en
romances, seguidillas y coplas españolas que se diseminaron por todo el
continente americano. De estas formas arcaicas surgieron los bailes
criollos y gauchos, como el pericón, el gato y el cielito.
Las danzas de a dos también tuvieron un
origen español. Bailes como el minué, la
contradanza, la gavota y la cuadrilla
influyeron en los estilos hispánicos
preexistentes, dando lugar a nuevas
formas, como el minué montonero, el
cuando, la condición, etcétera. Desde el
periodo colonial se distinguieron las
danzas de salón y los bailes gauchos, si
bien su origen fue común.
Entre los bailes colectivos, en
parejas y amatorios que se
practicaron en el Uruguay figuran el
fandango, la firmeza, el gato y la
huella. El malambo, por su parte, fue
un tipo de danza gaucha, individual y
que generalmente era bailada solo
por el hombre.