Ian Davie es un pintor inglés de 44 años que demuestra su maestría pintando con acrílico sobre plumas de cisne. Recolecta las plumas cerca de su casa en Gales y las lava y limpia antes de comenzar a pintar en ellas, un proceso que toma una semana por pieza. Sus composiciones más pequeñas se venden por 600-800 euros, mientras que las más complejas alcanzan los 2000 euros. Ha sido invitado a exhibir su trabajo en importantes museos de Gales y Gloucestershire.