1. UNIVERSIDAD NACIONAL DE CHIMBORAZO
FACULTAD DE CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN HUMANAS Y TECNOLOGÍAS
INFOPEDAGOGÍA
Nombre: Tatiana Vivanco
Curso: Tercer Semestre
Fecha: 22 de mayo de 2019
Comunicación tecnológica
La capacidad de comunicarnos como seres humanos ha permitido el surgimiento de todo lo que
conocemos hoy como tal, la comunicación es la base de la cultura. Es evidente que desde hace
mucho hemos acatado nuevas formas de comunicarnos. Pero, si bien la tecnología que tenemos
nos permite estar más cerca y realizar las cosas de manera más fácil, todo al alcance de un click
¿nos ha vuelto seres más pensantes y comunicativos?
“Las mismas tecnologías que hoy articulan nuestro mundo y permiten acumular saber, nos están
convirtiendo en individuos cada vez más ignorantes. Tarde o temprano se desvanecerá el espejismo
actual y descubriremos que, en realidad, nos encaminamos hacia una Sociedad de la Ignorancia”
(Brey, Innerarity, & Mayos, 2009).
A la par que descubrimos nuevas y mejores formas de conectarnos con el mundo, nos estamos
convirtiendo en personas frívolas e irónicamente, desconectadas de todo. El acceso a la
información de todo el mundo nos ha hecho ver realidades distintas que quizá no son de nuestro
agrado, creando así un miedo y rechazo a lo que nos rodea, obligándonos así a mantenernos en
constante aislamiento del mundo, aunque no parezca o no queramos reconocerlo.
2. A su vez, estamos inundados de datos, algo que algunos autores han denominado, infoxicación,
una intoxicación por exceso de información, y esto ha llevado a que no podamos distinguir lo
importante de lo banal ni poder seleccionar fuentes confiables.
No obstante, el deseo y la necesidad constante de permanecer frente a una pantalla electrónica ha
provocado que la mayoría de gente pueda estar por horas frente a esta, ya sea por entretenimiento
o lo que sea, pero con dificultad puede soportar una conferencia, una exposición de arte, un recital
de poemas o una simple interacción con otra persona sin que nazca la necesidad de acudir a la
tecnología.
Lo que resulta curioso, es que hablamos de estar conectados y crear vínculos con gente más allá
de nuestras pantallas, que queremos ser empáticos y ayudar al mundo, que estamos en la búsqueda
de algo que nos llene, cuando la realidad es completamente diferente. Incluso, cuando nos
atrevemos a hacer algo que nos permite salir de nuestra zona de confort, no dejamos la tecnología
que nos esclaviza, a pesar de todo preferimos estar enganchados a una pantalla donde publicamos
la vida que se nos escapa.
Referencia
Brey, A., Innerarity, D., & Mayos, G. (2009). La Sociedad de la Ignorancia. libros infonomia, 73.