1. Todos soñamos varias veces mientras dormimos, nos
acordemos o no al despertar, puesto que soñar es una
experiencia universal. Los sueños nos ayudan a
procesar la información que guarda nuestro
cerebro, sobre todo a un nivel emocional, pues nunca
mienten sobre nuestros sentimientos.
2. Los sueños se pueden clasificar en:
*Sueños fronterizos: son aquellos que se tienen en los
momentos antes de perder la conciencia y
dormirnos, normalmente están relacionados con las
actividades que se hacen durante el día.
*Sueños de reajuste: se producen a causa de agentes físicos
externos, como golpes, roces o incluso calor excesivo. Por
ejemplo, muchas veces se sueña que corremos pero que no se
puede avanzar y cuando nos despertamos vemos que
tenemos las piernas enredadas en las sábanas.
3. • Sueños de satisfacción: son los sueños en que se ven
realizados los deseos que tenemos en la vida real, nos dan lo
que la vida en la realidad nos niega. Un ejemplo es el de la
persona que sueña con comida cuando acaba de ponerse a
dieta.
Sueños de satisfacción intelectual: estos sueños los tienen
aquellas personas que están tan absortas en su trabajo
que, aunque duerman, su subconsciente sigue trabajando y
son altamente creativos puesto que durante ese tiempo
surgen ideas que después pueden aplicar a su trabajo.
4. • Sueños premonitorios: son mensajes que no afectan al pasado
sino que pueden prevenirnos de algún peligro o nos ayudan para
alcanzar el éxito en alguna empresa.
Sueños lúcidos: son aquellos en los que nos damos cuenta de que
estamos soñando y podemos cambiar el curso de los
acontecimientos a nuestro antojo.
Pesadillas: son el último recurso que utiliza nuestro inconsciente
para mostrarnos algo no reconocido en nosotros mismos pero que
necesitamos comprender.
5. • A lo largo de la Historia los seres humanos se han preguntado cual
era el significado de sus sueños, pero pocos han sido los que eran
capaces de descifrarlos. Cuando alguien quería saber qué
significaba el sueño que había tenido, debía recurrir a otra persona
para que se lo interpretara, persona que no siempre era conocida o
estaba a su alcance, por lo que el sueño quedaba sin interpretación.
Los sueños no tienen el lenguaje que usamos cotidianamente
cuando estamos despiertos sino un lenguaje mucho más sutil
aunque más efectivo, puesto que es el mismo lenguaje que usa
nuestra mente subconsciente en todo momento, estemos
despiertos o dormidos.