Descubrimos 4 alimentos proinflamatorios, a evitar en casos de inflamación crónica.

1. DIETA ANTIINFLAMATORIA
4 alimentos
prohibidos

2. QUÉ ES INFLAMACIÓN CRÓNICA
CAUSAS DE INFLAMACIÓN CRÓNICA
BOLLERÍA INDUSTRIAL
ACEITES SEMILLAS REFINADOS
EMBUTIDOS Y PROCESADOS CÁRNICOS
HARINA DE TRIGO
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3. La inflamación es un mecanismo de defensa de nuestro
organismo que se inicia con un daño concreto (químico,
mecánico o microbiano) y que está diseñado para eliminar
la fuente del daño.
Sin embargo, un exceso de señal inflamatoria o un fallo en
los mecanismos antiinflamatorios conducen a la
inflamación crónica.
Sin inflamación no podríamos recuperarnos de afecciones
habituales. Pero cuando nuestro sistema inmunitario falla y
la inflamación se prolonga en el tiempo se vuelve crónica y
favorece la aparición de enfermedades.
QUÉ ES
INFLAMACIÓN CRÓNICA

4. Obesidad: El tejido adiposo es un órgano
endocrino capaz de producir citoquinas
inductoras de respuesta inflamatoria. Así, a
mayor grado de sobrepeso u obesidad, mayor
grado de inflamación crónica.
Sedentarismo: La falta de ejercicio físico es uno
de los principales factores no dietéticos
proinflamatorios.
Envejecimiento: Con la edad se va acumulando
el daño oxidativo y la disfunción mitocondrial,
que a su vez desajustan el sistema inmune.
Estrés crónico: Un aumento sostenido de la
hormona del estrés, el cortisol, debilita el
organismo.
CAUSAS DE LA
INFLAMACIÓN
CRÓNICA
Sueño y ritmo circadiano alterado.
Infecciones crónicas: Enfermedades como la
Hepatitis C o la enfermedad de Lyme.
Exposición a toxinas y algunos medicamentos:
Contaminación, productos químicos, tabaco…
Disbiosis: Alteraciones en la microbiota
intestinal.
Dieta: Existen alimentos antiinflamatorios,
capaces de disminuir nuestra respuesta
inflamatoria, pero también existen alimentos
que provocan, agravan o mantienen el
proceso inflamatorio y son alimentos
prohibidos en la dieta antiinflamatoria.

5. BOLLERÍA
INDUSTRIAL
La mayoría de la bollería industrial está
elaborada con grandes cantidades de
azúcares y/o edulcorantes, grasas
vegetales de mala calidad, grasas
trans, multitud de colorantes,
conservantes y aditivos varios.
Además, su contenido calórico es
elevadísimo para una concentración
nutricional realmente pobre.
Ejemplos: donuts, tortitas de arroz,
cereales, galletas María...

6. ACEITES DE SEMILLAS
REFINADOS
Se obtienen tras largos procesos químicos y físicos de transformación
para poder extraer el aceite contenido en estas semillas.
Los aceites de semillas refinados son ricos en ácidos grasos
poliinsaturados, principalmente ácido linoleico, relacionados con la
enfermedad cardiovascular. Además, su elevado contenido en ácidos
grasos omega 6 desequilibra el ratio omega6-omega3, con efectos
proinflamatorios.
Ejemplos: aceite de girasol, soja, canola, maíz, margarinas...

7. EMBUTIDOS Y
PROCESADOS CÁRNICOS
Son ricos en ácidos grasos saturados que se
han enranciado y grasas trans, ambos muy
pro-inflamatorios.
Suelen incluir otros elementos también muy
inflamatorios como jarabe de maíz alto en
fructosa, nitritos, sulfitos y polifosfatos.
Ejemplos: salchichas, chorizos, bacon, fiambres,
jamón de york...

8. HARINA DE TRIGO
La harina de trigo es rica en gluten.
El gluten aumenta la permeabilidad intestinal en personas celíacas y no
celíacas, y se ha relacionado con enfermedades autoinmunes (tiroiditis
de Hashimoto, artritis reumatoide…), infecciones crónicas, alergias e
incluso cáncer.
Pero no todo el gluten es igualmente perjudicial. El trigo es, con mucho, el
cereal que mayor respuesta inflamatoria genera, mientras que los
cereales ancestrales como la espelta o el trigo sarraceno son menos
inflamatorios.

9. BIBLIOGRAFÍA
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Alemania.
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