1. 1
Contaminación acústica y lumínica
UNIVERSIDAD NACIONAL JOSÉ FAUSTINO SÁNCHEZ CARRIÓN
ESCUELA DE BIOLOGÍA CON MENCIÓN EN BIOTECNOLOGÍA
DOCENTE: Blgo. Luis Alberto Huayna Dueñas
CURSO: Biotecnología Ambiental
INTEGRANTES:
- Paucar Sánchez, Dahis Harieth
- Rios Villafane Yosari Shantal
- Ruiz Gonzalez, Karol
- Utush Villanueva, Yoselin
- Vega Flores, Maylin Sulay
2. CONTAMINACIÓN ACÚSTICA
Se trata de una de las fuentes de
contaminación más claramente asociadas
con la vida en las ciudades. El ruido no
sólo afecta a nuestra salud y calidad de
vida, sino también a nuestro
comportamiento social y desarrollo
cognitivo.
Se considera contaminación acústica todo
sonido que, por su exceso o intensidad de
niveles, perturba el ambiente en un
entorno determinado. Hace referencia al
ruido: todo sonido no deseado que supone,
por tanto, una perturbación, molestia o
daño.
3.
4. 4
Principales tipos de contaminantes acústicos
No todo sonido es considerado contaminación sonora. La Organización Mundial de la Salud (OMS) define como ruido
cualquier sonido superior a 65 decibelios (dB). En concreto, dicho ruido se vuelve dañino si supera los 75 dB y doloroso
a partir de los 120 db. En consecuencia, este estamento recomienda no superar los 65 dB durante el día e indica que para
que el sueño sea reparador el ruido ambiente nocturno no debe exceder los 30 dB.
Tráfico
automovilístico
El principal foco de
ruido en las ciudades es
el generado por los
automóviles. Por
ejemplo, el claxon de
un coche produce 90 db
y el de un autobús 100
dB.
Tráfico aéreo
El número de aviones
que sobrevuelan una
ciudad es inferior al de
coches, pero su
impacto es mayor: uno
de estos aparatos
produce 130 db.
Obras de
construcción
La construcción de un
nuevo edificio, un
nuevo parking o el
reasfaltado de una
acera provoca ruido.
Por ejemplo, un
martillo neumático
suena a 110 dB.
Restauración y ocio
nocturno
Los bares, los
restaurantes y las
terrazas que se montan
en el exterior cuando
llega el buen tiempo
pueden llegar a
superar los 110 dB. En
este apartado también
entraría el ruido de
pubs y discotecas.
Animales
El ruido que generan
los animales puede
pasar desapercibido,
pero los ladridos y
aullidos de un perro,
por ejemplo, pueden
rondar los 60-80 db.
6. 6
Consecuencias
El ruido excesivo y constante, más allá de los lógicos efectos negativos sobre la audición —tinnitus o sordera—, puede
provocar otros problemas en la salud humana, especialmente entre los más jóvenes y los más mayores. A continuación,
repasamos los principales:
Psicopatológicos
Agitación respiratoria,
aceleración del pulso,
aumento de la presión
arterial, dolor de
cabeza y, ante sonidos
extremos y constantes,
gastritis, colitis o
incluso infartos.
Psicológicos
El ruido puede
provocar episodios de
estrés, fatiga,
depresión, ansiedad o
histeria tanto en seres
humanos como en
animales.
Sueño y conducta
Un ruido por encima de
los 45 dB impide
conciliar el sueño o
dormir correctamente
—recordemos que lo
ideal según la OMS es
no exceder los 30 dB—
. Esto puede influir, a
posteriori, en nuestra
conducta provocando
episodios de
agresividad o
irritabilidad.
Dato curioso: el oído
necesita algo más de
16 horas de reposo
para compensar dos
horas de exposición a
100 dB.
Memoria y atención
El ruido puede afectar a
nuestra capacidad de
concentración, lo que al
tiempo puede provocar
bajo rendimiento.
También a la memoria,
por ejemplo a la hora
de estudiar.
7. CONTAMINACIÓN LUMÍNICA
Otros impactos negativos recaen en la calidad
ambiental de las zonas habitadas, ya que
aumenta la intrusión lumínica en la propiedad
privada, provocando molestias tales como fatiga
visual, ansiedad y alteraciones del sueño.
Provoca el aumento artificial excesivo del brillo
durante la noche. Tiene consecuencias negativas
que incluyen la alteración de los ciclos vitales en
plantas y animales con hábitos de vida nocturnos
y la perturbación del descanso en los humanos,
además de aumentar considerablemente el
consumo energético.
8. FORMAS Y FUENTES DE LA CONTAMINACIÓN LUMÍNICA
FORMAS:
- Luz intrusa
- Difusión hacia el cielo
- Deslumbramiento
Fuentes
- Iluminación privada de
exteriores, la ornamental de
edificios, monumentos,
fuentes.
9. 9
fuentes de la contaminación lumínica
La contaminación lumínica es uno de los problemas medioambientales que pasan más
desapercibidos. Sin embargo, puede acarrear consecuencias muy negativas para la salud
como alteraciones del sueño, fatiga y estrés
FUENTES
- Al caer la noche, innumerables fuentes de luz artificial (alumbrado público, hogares, oficinas,
escaparates y letreros luminosos, campos deportivos…) se activan y toman el relevo al sol.
Luces que nos permiten ver en la oscuridad, realizar nuestras tareas, pero que también
comprometen nuestro bienestar y salud.
- Para referirse a esta presencia anómala de luz durante la noche, los científicos acuñaron un
término: contaminación lumínica. Se trata, más concretamente, de la alteración de la oscuridad
natural del ambiente nocturno producida por la luz artificial.
10. Efectos de la sobre iluminación en la salud humana y la vida silvestre
Como la atmosférica y la acústica, la contaminación lumínica tiene un impacto en la salud humana.
Muchos estudios destacan las consecuencias inmediatas sobre el descanso. La luz artificial trastoca
nuestro reloj biológico —nuestro circuito circadiano, lo que conlleva desajustes en la segregación de
melatonina, la hormona del sueño.
La elevada exposición nocturna a fuentes
luminosas genera cansancio, nerviosismo y
puede ocasionar trastornos del estado de ánimo
como depresión, al perturbar el ciclo luz-
oscuridad.. Parece existir, además, una relación
entre contaminación lumínica y mayor riesgo de
patologías como diabetes, obesidad o cáncer. La
luz artificial nos enferma.
La contaminación lumínica supone también una
amenaza creciente para la flora y la fauna. A
pesar de su buena fama, debida a su bajo
consumo, la luz más contaminante es la luz led
(light-emitting diode, o diodo emisor de luz).
Este tipo de iluminación puede duplicar la
contaminación del cielo nocturno y su uso
impacta negativamente en la biodiversidad.
11. CONTAMINACIÓN LUMÍNICA EN EL MUNDO
Europa o Estados Unidos brillan con fuerza en Light
Pollution Map, un mapa interactivo que nos recuerda
que más allá del resplandor hay un cielo estrellado que
la contaminación lumínica nos impide ver. De hecho, el
60 % de los europeos y casi el 80 % de los
norteamericanos no pueden contemplar ya la Vía
Láctea, según el atlas mundial de brillo artificial del
cielo nocturno.
12. CONTAMINACIÓN LUMÍNICA EN EL MUNDO
El continente africano, en cambio, carece
prácticamente de contaminación lumínica, y lo
mismo sucede en gran parte de Australia o Rusia, con
amplias zonas despobladas. Este marcado contraste
entre países se vio reducido debido a la pandemia,
que hizo que recuperásemos, en parte, nuestra
noche. En los días de confinamiento de marzo y abril,
la contaminación lumínica disminuyó hasta la mitad.
Pese a que las luces siguieron encendidas, el brillo
nocturno descendió en ciudades como Berlín o
Granada. El motivo fue la bajada notable de las
emisiones. El tráfico se redujo drásticamente y, sin
los óxidos de nitrógeno de los coches y las partículas
emitidas por los aviones, la luz escapa al espacio. Un
aire más limpio conlleva una menor dispersión y
rebote de la luz.
13. 13
¿Cómo evitar o reducir la contaminación lumínica en nuestro entorno?
Estas son algunas de las medidas que nos permitirían prevenir la contaminación
lumínica en nuestros hogares y vecindarios, sin por ello influir en la calidad de la
visión:
- Uso de luminarias apantalladas que dirijan la luz
hacia abajo, limitando su emisión por encima de la
horizontal o dirigida hacia el interior de las
viviendas.
- Prohibición de cañones y proyectores láser que
dirigen la luz al cielo.
- Limitar la iluminación excesivamente brillante, en
particular la luz azul y ultravioleta (longitudes de
onda cortas).
- Utilización de lámparas energéticamente eficientes
y de espectro poco contaminante, preferiblemente
de vapor de sodio.
- Emplear la mínima intensidad de iluminación
necesaria. Ajustar los niveles a los criterios científicos
y recomendaciones de organismos como la Comisión
Internacional de Iluminación.
- Atenuar o reducir de manera progresiva la cantidad de
luz del alumbrado público conforme avanza la noche,
del mismo modo que la luz solar a lo largo de la tarde.
- Extinción nocturna del alumbrado público e
iluminación exclusiva de aquellas áreas que lo
necesiten.
- En nuestros hogares, no usar el móvil u otros
dispositivos electrónicos emisores de luz azul antes de
irnos a la cama ni dormir con las luces encendidas o
con puntos de luz.
14. La contaminación auditiva es uno de los factores principales, de malestar y riesgos a la salud en las grandes
urbes. Desafortunadamente es un área olvidada en su seguimiento y evaluación así como en su prevención. En
las áreas urbanas el ruido se encuentra relacionado principalmente con el tráfico de automotores. Los disturbios
del sueño, el estrés y la pérdida auditiva no son los únicos efectos sobre la salud, incluyen a las
cardiovasculares, problemas cognitivos y tinitus se han incrementado en los últimos años
15. MATERIALES Y MÉTODOS
Se realizó un estudio comparativo durante los años 2010-11 de algunas de las vialidades más transitadas de la ciudad
de Puebla tales como el Boulevard 5 de Mayo, las avenidas 11, 9 y 24 Norte-Sur en sus intersecciones con otras
avenidas principales entre la 31 Ote-Pte y hasta la 14 Ote-Pte.
Se incluyó además la toma de mediciones en el año 2015 sobre las avenidas 7, 9, 11 y 15 Norte-Sur, ya que con la
introducción del transporte articulado el Gobierno Estatal eliminó varias rutas de transporte público que transitaban
en la 11 y la 9 Nte-Sur, desviando otras hacia la 7 y la 15 Nte-Sur. La toma de registros se realizó durante los meses de
Febrero a Septiembre de 2010, de Marzo a Diciembre de 2011 y en el mes de Septiembre de 2015.
Se empleó un medidor de presión de sonido (RadioShack 33-2055) y una grabadora (Steren REC-830). Las
mediciones se realizaron de acuerdo con los procedimientos estándares aceptados por la organización
internacional para la estandarización NOM-079-ECOL-1994 y NOM-080- ECOL-1994: La emisión de ruido que
producen los vehículos automotores se obtiene midiendo el nivel sonoro en ponderación "A", expresado en dB
(Standards Policy and Strategy British Committee, 2003).
Los datos capturados fueron procesados fuera de línea y digitalizados a 40 KHz (NI USB 6251, National Instruments)
para realizar el análisis del espectro de potencias se empleó el programa Labview 2013 (National Instruments). Las
mediciones realizadas corresponden a cinco muestras de cada punto, tomadas a intervalos de 3 minutos, entre las
13:00 y las 16:00 hrs.
16. Mapa en que se
muestran los sitios de
medición de sonido
medioambiental en los
años 2010-2011 y 2015.
Los puntos marcados ()
sitios evalúa en el
horario de 13:00 a
16:00 hrs.
17. Mapa donde se
muestran los puntos
tomados para medición
del ruido
ambiental en
septiembre de 2015.
Los puntos marcados ()
corresponden a los
sitios evaluados en el
horario de 13:00 a
16:00 hrs.
18. RESULTADOS
Se realizaron un total de 140 mediciones en 28 puntos diferentes (5 mediciones x 28 puntos) correspondientes a
vialidades de primer y segundo orden en el primer cuadro de la ciudad, para el periodo 2010-11 (Tabla 4). Los valores
puntuales mínimo y máximo encontrados en las vialidades estudiadas fueron respectivamente 74 dB y 109 dB. El
valor promedio del nivel de presión de sonido fue de 915 dB no encontrándose diferencia significativa entre la mayor
parte de las vialidades estudiadas (Tabla 4) con excepción de la calle 24 norte-sur que mostró en sus intersecciones
con otras calles niveles menores de presión de sonido (promedio total: 863 dB).
Magnitud promedio del ruido ambiental
registrado en vialidades de primer y
segundo orden en la ciudad de Puebla. Para
la obtención de los datos se realizaron
mediciones durante los meses de febrero a
septiembre de 2010 y de marzo a diciembre
de 2011, entre las 13:00 y las 16:00 hrs. *
Indica diferencias significativas (p<0.05).
19. Magnitud del ruido ambiental registrado en
vialidades de primer y segundo orden en la
ciudad de Puebla 2015. Para la obtención de
los datos se realizaron mediciones en 3 días
distintos sobre cada punto, durante el mes
de septiembre de 2015, entre las 13:00 y las
16:00 hrs. (*, p<0.05).
20. Amplitud de las frecuencias constituyentes
del ruido ambiental (Calle 11 sur y 31 pte).
Obsérvese que las frecuencias que
presentan una mayor amplitud se localizan
sobre la escala baja del espectro auditivo
centradas en 1 KHz. Estas frecuencias
correspondientes a sonidos graves que
alcanzan una magnitud cercana a los 95 dB.
Hacia frecuencias mayores se observa un
decaimiento de tipo exponencial que se
estabiliza en un límite cercano a los 60 dB.
21. Amplitud de las frecuencias constituyentes
del ruido ambiental (Calle 9 sur y 25 pte).
En esta gráfica puede observarse que las
frecuencias constituyentes alcanzaron una
mayor amplitud (≈100 dB) y muestran
oscilaciones marcadas en frecuencias
superiores a 1 KHz por lo que la amplitud
total es mucho mayor a los 60 dB mostrados
en la figura anterior, este comportamiento
se debe a que en esta figura se incluyó el
momento en el cual un automotor de
tamaño considerable paso por el punto de
registro.
22. 22
El uso de combustibles sólidos para cocinar representa el principal riesgo ambiental en América,
afectando a 90 millones de personas y causando el fallecimiento de 83.000 personas en el
continente en 2016, mientras que en el mundo esta última cifra alcanza más de 4 millones de
personas. Al quemar combustibles sólidos como madera, carbón en fogones o estufas se emite
monóxido de carbono y elevados niveles de material particulado que quedan suspendidas en el
aire. Por su parte, el monóxido de carbono es un reconocido contaminante atmosférico, con gran
capacidad para afectar el organismo humano, con propiedades inoloras, incoloras y no irritantes
que dificultan su detección. El grado de exposición al monóxido de carbono es evaluado mediante
la medición de la saturación de Carboxihemoglobina en sangre, que se determina con técnicas
como espectrofotometría de absorción en disolución.
23. 23
Porcentaje de muertes atribuibles a la
contaminación del aire en América
Las partículas sólidas son más conocidas como
Material Particulado (PM), y son producto de la
combustión ineficiente de elementos como la madera o
el carbón. El PM se refiere a partículas sólidas que se
encuentran dispersas en el aire, y se clasifican de
acuerdo a su diámetro aerodinámico en PM10, cuando
no sobrepasa los 10 μm, y en PM2.5 en las partículas
con diámetro igual o inferior a 2.5 μm, denominadas
en tal caso partículas ultrafinas, las cuales penetran
profundamente en los pulmones y son las causantes de
enfermedades del sistema respiratorio y del sistema
circulatorio (Junemann & Legarreta, 2007; Pinzón,
2016; Balmes, 2019). La OMS (2014b) establece
niveles máximos de emisión para las partículas
ultrafinas de 0,23 mg/min en espacios no ventilados y
de 0,80 mg/min en áreas con ventilación.
24. 24
Porcentaje de muertes atribuibles a la
contaminación del aire en América
Por su parte, el monóxido de carbono (CO) es un reconocido
contaminante atmosférico, con gran capacidad para afectar al organismo
humano, con propiedades inodoras, incoloras y no irritantes que dificultan
su detección. En interiores, este gas se libera durante la combustión
incompleta de materiales como la madera y el carbón. Los límites
permitidos de emisión son de 0,16 g/min para áreas no ventiladas y de
0.59 g/min en espacios sin ventilación (OMS 2014b). Al ser inspirado y
llegar a los pulmones, pasa a la circulación enlazándose con el átomo de
hierro del complejo protoheme de la hemoglobina. La sustancia resultante
es la carboxihemoglobina (COHb) la cual altera la disociación de
oxihemoglobina, resultando en la disminución de la capacidad en la
sangre de transportar oxígeno y por ende, en una menor provisión de
oxígeno a los tejidos. La afinidad de la hemoglobina con el monóxido de
carbono es superior a su afinidad con el oxígeno, en proporciones que
varían en la literatura entre un 200% y 300%
26. 26
METODOLOGÍA
1. La población consistió en 42 cocineros, quienes accedieron de forma voluntaria a participar en el estudio
dejando constancia escrita.
2. Se les realizó una entrevista dirigida, asegurando así la comprensión de las preguntas.
3. Previamente, una propuesta inicial de 16 ítems fue puesta a consideración de 10 profesionales, el análisis
de sus observaciones derivó en la ficha final consistente en 13 ítems: 2 de caracterización, 3 de determinación, 4
específicas y finalmente 4 de percepción, uno de ellos relacionado con las enfermedades respiratorias.
4. Luego de clasificar los resultados de la determinación se aplicaron los criterios de exclusión en: 3 personas
fumadoras, 1 en estado de gestación, 2 con antecedentes de hepatitis y 1 con diagnóstico previo de anemia, por lo cual
ni los individuos ni las anteriores variables fueron considerados en el análisis estadístico, ni tampoco se reflejan en la
Tabla 2. La muestra resultante fue de 35 individuos.
27. 27
METODOLOGÍA
5. Para la determinación de los niveles de exposición al monóxido de carbono de los 35 individuos,
fueron colectados 5 ml de sangre venosa de cada uno, de manera escalonada, al término de sus jornadas
de trabajo, usando heparina como anticoagulante y evitando la formación de burbujas o entrada de aire a la
jeringa, en consonancia a la metodología planteada por Nufio, (2005).
6. La toma de las muestras se realizó acorde a las normas de bioseguridad preestablecidas, con
materiales nuevos y desechables para cada paciente y en presencia de un médico que pudiese atender
cualquier eventualidad.
7. Las muestras fueron almacenadas en receptores herméticos individuales debidamente rotulados,
luego transportadas al laboratorio en condiciones de oscuridad, y posteriormente almacenadas a una
temperatura de 6 grados Celsius.
28. 28
RESULTADOS
La provincia de Santa Elena, en Ecuador, esta conformada por 401.178 habitantes de acuerdo a las últimas
proyecciones del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC, 2020); de ellos, 215.567 viven en áreas urbanas,
mientras que 185.521 lo hacen en zonas rurales. La provincia se distribuye en tres cantones, que a su vez están
divididos en parroquias. En 3.086 hogares de la provincia aún se emplea la leña y el carbón como combustible para
cocinar entre un total de 76.194 casas censadas en 2010, una proporción de 4 de cada 100
Combustible usado para cocinar en
hogares de la provincia Santa
Elena, Ecuador
30. 30
En las visitas a la comuna, los autores contabilizaron un total de 65 comedores, entre los trabajadores de estos
establecimientos, 35 cocineros formaron la muestra de la investigación. El 83% (n = 29) de los individuos eran mujeres,
mientras que los grupos etáreos de 40 a 49 y de 30 a 39 años fueron los más representados, con un 34 y 31%
respectivamente. En ninguno de los casos se halló significancia estadística con su nivel de COHb. Casi la mitad de los
participantes, un 49% (n = 17), tiene más de dos años en la labor de cocinero. La mediana de esta variable fue de 24
meses, con una desviación estándar de 15,71; por otra parte, el 60% labora entre 4 a 6 horas. Se halló una correlación
positiva moderada (r = 0,674) entre la cantidad de horas de la jornada diaria de trabajo y el valor promedio de COHb
31. 31
Ante la pregunta sobre el uso de leña o carbón para cocinar en el trabajo, en el 80% de los casos la respuesta fue
positiva, con una significancia estadística de r = 0,537. En este grupo, se encontraron niveles de COHb entre 3% y 35%,
Abril-Junio 2021, Vol. LXI (2): 328-336 333 con una mediana de 14,11% y una desviación estándar de 8,4. En el caso
de los participantes que usan otros tipos de combustión para cocinar, se halló un valor mínimo de 2% un valor máximo
de 8%, con una mediana de 3,92% y desviación estándar de 2,14 puntos porcentuales.
32. 32
Un total de 25 participantes manifestaron haber tenido algún síntoma relacionado con niveles alterados de
Carboxihemoglobina en su sistema, siendo el dolor de cabeza (n = 22; 63%), la dificultad para respirar (n = 13; 37%), el
cansancio o debilidad (n =9; 26%) y las náuseas (n = 11; 31%) los más prevalentes. Se encontró una correlación positiva
moderada entre el nivel de COHb y el dolor de cabeza (r = 0,616), y con la manifestación de náuseas (r = 0,524). Estas
alteraciones fisiológicas se presentan durante o inmediatamente después de la jornada de trabajo, según el 88% (n = 22)
de los sintomáticos. El 54% de los entrevistados (n = 19) no considera que su labor como cocineros afecte su salud,
mientras que sólo el 23% (n = 8) percibe como un riesgo el humo producto de la combustión de la leña al cocinar.
33. 33
Finalmente, la percepción de los encuestados sobre las afecciones respiratorias por exposición continua debido a la
actividad laboral, son coincidentes con los resultados cuantitativos (37%) de las dificultades respiratorias, siendo el
miedo a enfermar y morir por asfixia o insuficiencia respiratoria aguda el principal código sociocultural, sin embargo,
aun cuando reconocen con riesgo la actividad de cocinar en fogones, declaran que es su cultura ancestral, manifestando
su deseo de continuar los pasos de sus antepasados; perpetuando la cultura Ayunguera. A estos códigos se suman los
miedos de padecer irritación nasal y ocular, los problemas visuales y la fatiga.