3. Tras el Acuerdo de Paz, nos acomodamos al modelo
económico de las remesas; dictamos salarios mínimos
y hasta logramos en forma inédita un acuerdo en pen-
siones, pero mantenemos desprotegida y desempleada
a la gran mayoría de la población trabajadora; se pro-
mueven más impuestos, Defensorías y Superintenden-
cias, pero no políticas públicas e incentivos para eli-
minar trámites y atraer la inversión; proclamamos la
importancia de las nuevas generaciones, pero más de
400 mil jóvenes no tienen acceso a educación y a un
trabajo decente; acogimos para el sector público la re-
gulación de las licitaciones, rodeadas de formalismos
pero que esconden corrupción, negándonos a aceptar
otros mecanismos que han demostrado ser más eficien-
tes y transparentes; buscamos mejorar las condiciones
de vida y servicios para la población, pero descentrali-
zamos dosis de ineficiencia y corrupción.
Hoy, enfrentamos un nuevo tipo de guerra y ésta
es enteramente nuestra, en la que las tres principales
estrategiasdevidasonlamigración,lacalleotrabajaren
el sector informal de la economía. Si bien la migración
produce remesas fractura la familia y crea condiciones
más proclives para la pandilla y la delincuencia.
Necesitamos un nuevo pacto que pasa por un
diálogo constructivo de los partidos políticos para la
ciudadanización de la política y la despartidización
de las instituciones; en el que no se pretenda sustituir
la institucionalidad democrática por el griterío de la
multitud; en el que prevalezcan las nuevas generaciones
sin menosprecio de la garantía de la experiencia;
EL SALVADOR
TIENE SOLUCIÓN
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4. en el que el mal manejo de los recursos públicos quede por convicción
como capitulo triste de nuestra historia; un pacto que garantice que los
funcionarios tengan temor por no resolver en tiempo y acorde a la ley; en
el que rescatemos el Río Lempa y reforestemos al país; en el que la vida siga
siendo vida y no muerte sucesiva; en el que las ideologías dejen de pretender
ser las intérpretes de lo que los salvadoreños sentimos y pensamos, y en vez
de trabajar por la gente, se decidan a trabajar con la gente.
El Salvador tiene solución, administrando con honestidad y eficiencia
los recursos y liberando los trámites, fortaleciendo los programas sociales
necesarios para mejorar la calidad de vida de la gente y para que cada quien
se valga por sí mismo; y en general, favoreciendo las condiciones para
que todos los salvadoreños tengan acceso a una educación que sirva, a un
empleo con salario decente y a la protección y defensa del fruto legítimo del
esfuerzo humano.
Los partidos políticos tienen hoy un imperativo impostergable, no
puede El Salvador continuar siendo un país de “cosas no resueltas” y es esta
coyunturaprecisamentelaquecomprometeparticularmentealaDemocracia
Cristiana, en su visión humanista y solidaria, para dar sus mejores aportes,
para encontrar las respuestas a fin de que los salvadoreños recuperemos la
esperanza.
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5. JUNTOS
RECUPEREMOS LA ESPERANZA
Para los Demócratas Cristianos es impostergable mejorar la calidad de vida
de los salvadoreños, por lo que es urgente lograr un acuerdo interpartidario
a través del diálogo constructivo encaminado a resolver los problemas que
aquejan a la población y que impiden su desarrollo integral.
De ahí que para el período 2018-2021 proponemos priorizar nuestro trabajo
legislativo en los siguientes aspectos:
1. MÁS Y MEJORES EMPLEOS
El Trabajo Decente es la máxima aspiración de todos los trabajadores. Se
refiere a un empleo productivo, justamente remunerado, que se desarrolle
en condiciones de libertad, igualdad, seguridad social y respeto a la dignidad
humana. Para promoverlo, proponemos:
1.1. Suelos sin trámite y tasa cero. Para que en el país se generen más y
mejores empleos es importante fomentar la inversión nacional y extranjera,
por eso promoveremos la creación de espacios libres de trámites, en los
que los inversionistas podrán instalar sus empresas sin depender de la
discrecionalidad de los funcionarios; así como gozar de un período de gracia
en el pago de los impuestos de la renta e impuestos municipales, tanto para
la instalación como para la operación de sus empresas.
Para estos efectos hemos presentado un proyecto de Ley Especial de
Fomento a la Inversión y al Empleo como un instrumento de “orden
público”.
1.2. Sin utilidades no hay impuestos. Los salvadoreños somos emprende-
dores por naturaleza y siempre estamos en la búsqueda de la creación de
fuentes de empleos propias. Se propone la modificación del sistema de ins-
cripción de empresas, a fin de hacerlo más expedito; y asegurar que una vez
inscritas las nuevas empresas tengan responsabilidades fiscales hasta que su
desarrollo les permita obtener utilidades.
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6. 1.3. Reactivación del agro. Para lo cual impulsaremos la Ley de Arrenda-
miento de Tierras que le de seguridad jurídica tanto a los propietarios como
a los emprendedores. Además apoyaremos todas aquellas medidas orienta-
das al rescate del cultivo del café, así como los incentivos para los caficulto-
res a fin de que estos generen más y mejores empleos.
Hemos Presentado el proyecto de Ley de Arrendamiento de Tierras y la
Ley del Rescate de la Caficultura.
2. EDUCACIÓN QUE SIRVA PARA LA VIDA Y PARA LA PAZ SOCIAL
Cada persona es única y con gran potencial. La educación debe garantizar el
conocer, el saber hacer y sobre todo el ser, a fin de lograr una sociedad más
justa. Por eso nuestra propuesta se base en:
2.1. Aprender haciendo. Para garantizar que la educación sea un medio
de desarrollo personal y nacional, promoveremos una educación acorde a
las necesidades del mercado, mediante reformas al sistema educativo para
establecer la educación dual (aprender haciendo) con el objetivo de crear
vínculos entre la formación académica y su aplicación en el ámbito laboral.
Se pretende que los estudiantes reciban su formación teórica a la vez que
aplican el conocimiento y ejercen prácticas en las empresas; logrando
así contar con carreras técnicas y universitarias efectivas que les permita
insertarse en el sistema productivo.
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7. 2.2. Educación en valores. Es necesario que en la escuela, desde la edad
preescolar, se eduque al niño en los valores de la solidaridad, el respeto, la
tolerancia, el perdón y la paz a fin de que se recupere la armonía social, pilar
fundamental para construir una mejor sociedad que se base en el ejercicio
de una ciudadanía plena, en la que a todos por igual se les respeten sus
derechos y cumplan sus deberes.
3. LA FAMILIA, BASE DE LA SOCIEDAD DEMOCRÁTICA
Para los Demócratas Cristianos,
la familia es la base de la sociedad
y el espacio de convivencia
humana, donde se forjan valores
como la solidaridad, el respeto,
la responsabilidad y la tolerancia.
Por eso luchamos para que la
familia tenga las condiciones para
que se desarrolle integralmente.
3.1. Presupuesto para programas
de apoyo a la niñez que garanticen
su desarrollo integral en el marco
del interés superior del niño y
niña. Promoveremos iniciativas que prioricen los recursos para garantizar
la salud y la educación a los niños de 0 a 7 años, asegurando la cobertura
universal en el sistema nacional de salud y priorizando a aquellos con
discapacidad y enfermedades terminales o crónicas. Además impulsaremos
el establecimiento de centros de desarrollo integral en las instituciones del
Estado, para que los hijos/as de las personas trabajadoras reciban el cuido y
atención que se merecen.
3.2. Promoción de iniciativas para el desarrollo integral de la familia.
La Democracia Cristiana preside la Comisión de la Familia de la
Asamblea Legislativa, desde donde ha estado promoviendo e impulsando
permanentemente diversas iniciativas, particularmente en favor de la niñez
y la mujer en abandono; así como para el fortalecimiento de las instituciones
que velan por sus derechos. Nuestro objetivo es que todos los miembros
de la familia salvadoreña reciban atención integral, por ello continuaremos
impulsando leyes que aseguren a los adultos mayores una vejez saludable
y activa; y a las personas con discapacidad que vivan una vida plena sin
discriminación.
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8. 4. MEDIO AMBIENTE QUE ASEGURE EL BIENESTAR DE LAS FUTURAS
GENERACIONES
Un medioambiente sano impacta positivamente en la población, reduce
gastosestatalesensalud,incrementalaproductividadyfortalecelaeconomía
familiar y nacional. Para los Demócratas Cristianos, la conservación del
medio ambiente sano es un Derecho del que deben disfrutar las actuales y
las futuras generaciones. Por ello seguiremos insistiendo en la aprobación
de la Ley Especial para la Protección del Río Lema, propuesta por el PDC.
ElproyectodeLeyEspecialparaelRescateyPreservacióndelRíoLempa,que
entre otros alcances establece la creación de la Corporación de Municipios
Ribereños (32) y la reforestación de su cuenca a través de la aportación de
porcentaje de utilidades de CEL. Nuestra agenda de trabajo para el próximo
período legislativo será buscar y lograr los consensos para su aprobación.
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